MI VECINO ME HACE SU AMANTE A LOS 14 AñOS
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Cuando yo tenía siete años mis padres se separaron, mi madre y mi hermana nos mudamos de la provincia hacia la ciudad, ahí vivían mis tíos, y gracias a que ellos estaba bien económicamente nos apoyaron para que pudieramos salir adelante, mi madre se esmeró para que nada nos hiciera falta, logrando que tuvieramos una buena educasión.
Gracias a todo esto uno de mis tíos se dió la oportunidad de aprovecharse de hacer de las suyas conmigo, cuando mi tío y yo nos quedadmos solos en casa me obligaba acostarme a su lado y con su pene en mis pequeñas manos hacía que lo mastarbura, hasta venirse.
Un día que no fui a clases, mi madre me dejo a cargo de mi tío, en cuanto se percato que no había nadie en casa, me llevó a su cuarto, se quitó la ropa quedando desnudo, me dijo que hiciera lo mismo, no quise hacerle caso pero el me amenaoó con contarle a los demas que yo siempre estaba detras de el para agarrarle la verga, tuve miedo de su amenaza y accedí a que el mismo me quitara la ropa.
Así que estando los dos en la cama mi tío con su verga parada me decía que se la pajeara, después me dijo que se la chupara, tío no se como se hace eso le dije, pero él se puso de pie y me dijo que me pusiera de rodillas en al borde de la cama, así estaría a la altura de su verga.
Empieza por pasar tu lengua en la cabeza de mi verga me decía, así lo hice como si estuviera lamiendo mi paleta favorita, ahora habre bien la boca, habrí mi boca y mi tío empezó a meter su verga en mi pequeña boca. Mi tío me decía no vallas a cerrar la boca, mientras el se masturbaba, de pronto sentí algo en mi lengua, algo que sentía como a baba, y sabor a salado y dulce, mi tío retiró su verga y cerro mi boca oblingandome a tragar lo que le había salido de su verga. que es eso tío le pregunte, es mi leche, todos los hombres adultos tenemos leche guardada en estas dos bolas que se llaman desticulos, cuando tu seas grande vas a tener tambien lo tuyo.
Te gustó me pregunto; pues casí no tío le dije, me supo a ligoso y no save a leche como tu dices le dije inocentemente, mi tío solo sonrío y me dijo vistete y ya saves que no debes decirle a nadie lo que tu y yo hacemos.
Cuando pasó eso yo contaba con ocho años, y fue cuando empecé a tener gusto por la verga gracias a mi tío, así que siempre que había oportunidad cuando estabamos solos corría a buscar a mi tío para que me diera de su leche, cuando cumplí los nueve años mi tío me dijo que me daría un ragalo de cumpleaños, pues como estabamos solos. esta vez las cosas fueron diferentes a las demas ocasiones, ya sabía chuparle la verga a mi tío y su semen era mi adicción, pero mi tío quería enseñárme otras cosas, así que esta me dijo que me acostara a su lado, mi tío me puso de lado y juntandome a su cuerpo, si antes aver sacado un bote de lubricante, puso en su verga y también en mi culo.
Estaba listo para meterme su verga, pero algo interrumpió era mi madre que había llegado, mi tío me dijo que me hiciera el dormido, se pusó su shorto y su camiseta rapidamente y salió a decirle a mi madre que me había quedado dormido en su cama, mi madre creyendolo todo solo pregunto si antes de haberme quedado dormido me había desayunado a lo que mi tío le dijo que sí.
Mientras tanto mi tío me dijo que mas adelante continuaríamos con nuestras travesuras, pero por cosas del destino a mi tío lo trasladaron a otro país de parte de la empresa donde trabajaba donde ganaría mas dinero, y era una oportunidad que no iba a perder.
Me puse triste por unos días ya que me había acostumbrado a la verga de mi querido tío, describiendo la verga de mi tío pues era de un tamaño regular quiza como de unos 17 centimentros no muy gruesa, color prieta y medio circuncidada, bajo de estatura y delgado promedio, y muy simpático. Eso si con su lado oscuro que solo solo yo sabía de ser gay.
Me quedé con unas ganas de sentir la verga de mi tío, quería que el me desquintara, pero no se me hizo realidad mis sueños
Cuando cumplí los catorce años mis padres se reconciliaron y se volvieron a juntar, y ver la familia unida nos dió mucho gusto y alegría, así que tuvimos que regresar de nuevo a la vida del campo.
Empezar una nueva etapa de mi vida yo ya siendo un adolecente no fué nada facil ya que que tuve que acostumbrarme a la vida del campo, aunque no voy a negarlo me gustaba mucho la naturaleza.
Ya estando instalados empecé hacer nuevos amigos ya todos los que un día fueron niños como yo ya eran todos unos adolocentes y lo que estaban solteros ya se habían casado; entre ellos estaba Hector que como le dije al principio estaba separdo de su mujer y vivía con su padres.
Cierto día fui a saludar a mi tía, y pasando por la casa de Hector, lo ví parado sin camisa, lo saludé pero el me ignoró, Hector tenía cara de pocos amigos, era serío y su mirada intimidaba a cualquiera, siendo yo uno de ellos.
Hector mide 1.75 pesa 160 libras, usa corte de cabello tipo militar, su piel es bronceada ya que cuando trabaja en el campo lo hace sin usar camisa.
Conforme pasaron los días Hector empezó a molestarme, aprovechandose de mi timidez, siempre que me veía pasar por su casa me decía, cosas como hola nena, para donde va la niña, y siempre me andaba tirando besos, solo hacía eso cuando no había nadie que nos estuviera viendo.
Quise ponerle queja a mi papá pero para evitar problemas mejor me quedé callado y oír eso casí todos los día se fue volviendo costumbre.
Una tarde que fuí a casa de mi tía, Hector y sus amigos estaban tomando licor en el patio de su casa, antes que me viera apresure mis pasos para evitar las molestias.
Cuando estuve de regreso ví caminar a mi vecino Hector hacia unos arbustos, y deteniendose bajo un poco su short y se puso a orinar, tomé un poco de valor y apresure mis pasos para ver si podía verle la verga, en efecto podía verle la verga, prieta y gorda, cubierta de un prepusio, Hector saco un cigarro y se lo llevó a la boca dejando libre su jugosa verga, en un habrir y cerrar de ojos voltío su mirada logrando verme, me asute y quise caminar pero mis nervios me traicioanaban y me quedé quieto, Hector agarró su verga y se la sacudío, dandole unos giros y a la vez pelandala como si estuviera ordeñandola.
Subiendo su short me dijo , epa que haces, nada le respondí con voz entrecortada, con que viendome la verga estabas verdad maricon me dijo, si te gusta la verga yo te aré ese favor de darte, me decía con su mirada penetrante hacia mi.
Hector dió unos pasos hacia adelante y viendo para todos lados se metío entre los arbustos, yo caminé detras el pero cuando pasé por donde el estaba paradao tenía la verga afuera y me la mostraba, me puse muy nervioso, y pensativo a la vez, no quería dejar escapar esta oportunidad ya que hacía ya un buen tiempo que me había vuelto adicto a la verga, desde que mi tío me daba su verga.
Asi que mi vecino Hector sujetaba sus huevos con su mano izquierda con la otra se estiraba la verga y con su cabeza me llamaba para que me acercara, así que me expuse al peligro, dispuesto a lo que pasara, me aserqué mas a mi vecino, logrando agrarrar su verga semi dura, se la empece a pajear y haciendo su prepusio hacia atras y hacia adelante dejando libre el glande, con mis dedos la hacía masajes suaves alrededor de la cabeza la cual estaba humeda por los orines,.
Hector me dijo, asi que te gusta la verga,no me aquivoque contigo, me decía, y que ya te la metieron por el culo me preguntó, le dije que no, mmmm que rico así que estás virgen de tu culito, me decía mientras su verga ya estaba totalmente dura, la verga de Hector es ancha de los lados medio encurbada hacia abajo, le mide 20 centimentros, y su huevos cuelgan como las de un toro, con un pubis totalmente peludo.
Así que le dije si gustas te chupo la verga, habrí mi boca para meter su verga en mi boca pero en ese preciso momento salió uno de sus amigos a llamarlo, Hector subío su short y diciendome mas adelante lo haremos.
El se metío a su casa y yo segui hacia la mía llevando mis dedos a mi nariz los cuales tenían olor a verga sucia, me puse muy caliente y me fui para mi cuarto a masturbarme oliendo mis dedos y chupandolos a la vez imaginadome la verga de Hector.
Asi que Hector me tenía en su manos y tenía el temor a que me fuera a delatar, pues mi padre le tenía cierto odio a los homoxuales y siempre se la pasaba diciendo que si se llegaba a enterar que uno de sus hijos era maricon le daríá tremenda golpiza.
A todo esto Hector dejó de molestarme ahora era todo lo contrario siempre andaba muy amable conmigo y con mi familia,.
Teníamos una casa abandonada lejos de donde vivíamos y mis padres se propusieron a arreglarla, así que contranto a Hector mi vecino para que fuera el quien se ecargaría de hacer los trabajos.
Un día sabado como no tenía clases le dije a mi papá si me dejaba ir con ellos para ayudarles con la casa, mi papá estuvo de acuerdo así que nos fuimos.
Como al medio día mi papá me dijo que nos regresarías y que dejaríamos solo a Hector trabajando, pero yo le incistí y le dije que yo me regresaba con mi vecino así que mi papa se regreso solo.
Cuando estuvios solos en el lugar, Hector me preguntó que si le había comentado algo a alguien de lo que había pasado el otro día, le dije que no que eso había quedado nada mas en mí, yo le pregunte lo mismo, el me dijo que tambien se había quedado callado.
Asi que me pregunto como es que me gustaba la verga y empecé a contarle lo que mi tío me hacía.
Hector me contó que algo similar le había pasado, que el papá de su amigo le daba dinero para que Hector le metiera la verga.
Asi de esa forma el se habia acostumbrado a cojer a cambio de dinero, fue entonces que yo le dije que yo tenía para pagarle pero el sonrió y me dijo tontito como creés yo contigo lo haría de gratis porque tu me gustas mucho y eres un nene que se ve que tiene un culo riquisimo.
Estabamos bajo un fuerte sol y hambos sudabamos, Hector me dijo que me quitara la camisa que así sentíria menos calor, cuando me huve quitado la camisa Hector me dijo que mi piel parecía de niña, ya que la tenía blaquita y muy delicada,totalmente lampiña, solo unos cuantos pelos tenía en mis axilas, sin embargo el cuerpo de Hector estaba morena, su espalda ancha y dura en sus axilas se veía espeso de pelos negros y la parte de su ombligo muy peluda, así que le dije si así tienes de pelos ahí como has de estar ahi mas abajo.
Hector sonrió diciendo picarón con quieres ver como esta todo por aquí abajo, si gustas enceñame le pregunte.
Las demas casas estaban muy alejadas así que no había peligro que alguien nos viera, como el calor era insoportable nos fuimos bajo unos arboles de mangos, ahí Hector se bajo los pantalones quedandose solo en trusa, su verga y sus huevos se hacían notar por encima de su trusa, así que me dijo que si yo quería explorar que había ahí guardado que yo mismo lo hiciera, así que baje su calzoncillo dejando libre su verga que ya estaba muy tiesa, empecé a sobarsela cariñosamente, yo sentado sobre un troco y Hector de pie, Hector me dijo que se la chupara, me llevé su verga a mi boca pero esta olía a sucia, como toda verga que esta sudada y que no se ha lavado pero ese olor me exitaba mucho, así que me la meti a la boca pero cuando le pase lengua esta me supo a salado y agrio, no se pero eso me puso a mil y sin importarme nada me metí esa verga a lo mas profundo de mi graganta donde mas podía y así empece a chuparsela, Hector gemía de placer por la mamada de verga le estaba dando y me decía que nadie se la había mamado tan rico como yo lo hacía, y he de decir que cada vez que me acordaba de mi tío, buscaba un plátano y la chupaba para imaginarse que se trataba la verga de mi tío.
Estuve chupando la verga de Hector hasta que mis mandíbulas me dolían, por ratos se la pajeaba y luego a chuparsela.
hambos estambamos bañados en sudor, Hector empezó a pajearse muy fuerte sosteniendo mi boca a manera que no pudiera cerrarla, sus heuevos saltaban por la agitación de la masturbación, con mi lengua hacia afuera Hector frotaba su verga, yo le le pasaba la punta de mi lengua por su frenillo, por su uretra salían liquidos preseinales los cuales las saboreaba con mi lengua para luego tragarmelos, Hector se pajeaba muy rapido hasta que empezó a hechar liquidos blancos en mi boca, era todo su semen que expulsaba en mi boca, trague hasta la ultima gota sin dejar nada en la uretra de su verga, así que deje la verga de Hector bien ordeñada la que enseguida se puso flacida, cuando Hector huvo recuperado fuerzas me dijo que nos fueramos a bañar a un riachuelo que pasaba por el lugar.
Asi que nos bañamos y Hector ya no dijo ni una palabra, solo me dijo que era hora de regresar.
Aún no podía creer lo que me había pasado, me había comido la verga de un hombre, con cara de macho de pocos amigos al que muchos le temían.
Cierto día mi madre me mando a casa de Hector para dejarle unas medecinas a su papá.
Hector me dijo que me esperaba en la noche que dejaría la puerta de su habitación habierta, me puse muy emocionado no podía esperar mas a que se hiciera noche para que todo mundo se fuera a dormir expeto yo.
Entró la noche, mis padres y mis hermanos se fueron a dormir, asegurandome que nadie me viera salí en la oscuridad hacia la casa de mi vecino, al llegar a su cuarto empuje la puerta, esta se habrió y ahí estaba Hector acostado en la cama solo en trusa, en cuanto estuve adentro Hector se levantó y cerro la puerta con llave, así que me dijo que había llegado el momento que me daría de probar su verga y que me la metería en mi culo, así que Hector bajo su trusa a mitad de las piernas y me dijo que le chupara la verga como lo habíá hecho el día anterior.
Yo muy obediente empecé a mamerla la verga esta vez olía a jabon, pues mi vecino se acababa de bañar, así que chupaba su verga como todo un experto, estando Hector acostado en su cama con la piernas habiertas, mi manos acariciaba sus gruesas piernas mientras mi lengua lamía sus dos huevos, dandole uno que otro chupetón a cada huevo, pasaba mi lengua desde el troco de su verga hasta terminar en la cabeza de la verga para luego metermela en la boca y continuar mamando, cada vez que hacía esto mi lengua saboreaba sus liquidos preseminales, mientras tanto Hector me acosotó con las piernas hacía harriba y poniendo saliba en su dedo medio empezó a meterlo en mi culo, Hector me dijo que rico culito, esta muy apretadito, así que metiendo su dedo mas y mas hasta que huvo logrado meterlo por completo, Hectot sacó su dedo de mi culo y empezó a lamer mi culo, sentía muy rico lo que me estaba haciendo empecé a pajearme pero el me lo impidío diciendo no lo hagas porque te vas a venir y no quiero que te vengas porque se te van a ir la ganas de seguir cojiendo.
Así que solo me dijo que sustuviera mis piernas hacia arriba mientras el me comía el culo, Hector me comía el culo con pasión me daba mordiscos por mis suaves nalgas, mordía suavemente el centro de mi culo jalando las suaves piel del rededor de mi culo, podía sentír su barbilla rasurada que me hacía cosquillas en medio de mis nalgas, yo sujetaba su cabeza no quería que se alejara de mi culo, me gustaba como me comía el culo.
Despúes que Hector huvo comido mi culo, Hector sacó un frasco de lubricante y empezó a lubricar mi culito, con su dedo, seguidamente buscoó un condón y se lo puso en la verga, ya con su verga lubricada empezó a penetrarme suvemente, el dolor se hizo presente, pero Hector no hizo caso a mis suplicas de dolor, y sin detenerse empezó a meter su verga en mi culo, agarré la trusa de Hectro y me la metí a la boca para moderlo, para no gritar del dolor, Hector no dejaba de moverse, metiendo y sancando su verga de mi culo, que ya estaba siendo perforado por su verga.
Hector sacaba su verga y se la limpiaba se descansaba por unos segundos, para luego seguirme penetrando, esta vez ya no me dolía tanto, así que mientras me cojía me daba de mordiscos y chupetones en mi cuello y en mi pezones, mis manos acariciaban su hancha espalda, me cojía sin piedad, con lujuria yo no aguantaba asi que le pedí ir al baño porque me dieron ganas de defecar, tenía dolor y ardor pero la calentura me ganaba y ahi estaba yo de nuevo listo para que Hector me siguiera dando verga.
Hector ya había durado mucho metiendo y sacando su verga, se puso de pie y metiedno una almohada bajo mis nalgas para levantarlas, hacia la orilla de la cama, así que Hector me penetraba de esa forma, de pronto saco su vega y retirando el condón de su verga me la metío de un solo empujón y se quedó sin moverse, solo su verga hacía palpitaciones en mi culo, Hector se había venido dentro de mi, segundos despúes saco su verga dandome un beso en mis labios se tumbo en la cama, me acosté a su lado y nos quedamos dormidos; eran como la una de la mañana cuando me desperte, me sente en la cama asustado, no daba donde me encontraba, cuando hube despertado bien, sentía algo de ardor y dolor en mi culo, Hector roncaba, lo desperté para decirle que ya me iba para mi casa pero el me acosto de nuevo, y empezó a calentarme de nuevo, esta vez como mi culo ya estaba roto no tuve problemas para sentarme sobre Hector y meterme su verga, Hector me ayudaba a subir y a bajar como si estuviera haciendo sentadillas, su verga estaba metida hasta al fondo su huevos estaban muy pegados a mis nalgas.
Hector me puso en posición de cuatro me penetraba una y otra vez, sus huevos chocaban en mis nalgas , su bello púbico se hacían sentir en mis nalgas, Hector le daba mas duro y me pregunta donde quería que me hechar su semen yo le dije que los quería en mi boca que me gustaba su sabor, así que después de darme una buena penetrada saco su verga y empezó a pajearse en mi boca hasta expulsar de nuevo su rico semen en mi boca, así tuvimos sexo una vez mas, esa noche cojimos como locos, Hector me dijo que dejaría la puerta de su cuarto habierta para cuando cojeríamos solo me daba un señal y el ya estaría listo esperandome.
Asi que me converti en el amante de Hector, porque su mujer decidío regresar con el, pero eso no nos impedía que cojieramos, esta vez yo lo hacía pasar a mi cuarto, sin que nadie se diera cuenta.
Habían noche que Hector se iba de mi cuarto casí amanenciendo, yo me mequeda bien cojido pues me hechaba de dos a tres cojidas cada vez que no veíamos.
Fue pasando el tiempo y Hector y yo eramos amantes inseparables, por mucho tiempo fui el dueño de su rica verga.
Cogíamos en cualquier parte del campo entre los sembrados entre los arboles, hasta que un día llegó mi tío el cual me habia iniciado, y como yo era el único que dormía solo en mi cuarto, mi madre le dijo que se quedara a dormir conmigo, pues el llegó a visitarnos después de varios años.
Hector se puso celoso cuando se enteró que compartía mi cuarto con mi tío y las cosas entre el y yo fueron cambiando ahora yo ya contaba con 17 años y aun estaban por venir mas cosas pero esta ves mi tío se encargaría de mi.
Espero contarle que paso después con mi querido tío.
saludos y hasta pronto.
como continua