Mi vida como maestro 12. Un largo camino a casa (parte 1)

Estando completamente desnudo en el colegio tengo que llegar hasta mi casa, sin embargo en ese camino tendré un encuentro inesperado.
En ese momento se me vino el mundo abajo, yo mire para todos los lados y no encontré mi ropa, probablemente fue por los nervios, y que escuchaba como se acercaba el conserje, por lo cual hice lo único que se me ocurrió, en ese momento de crisis y fue salirme corriendo  por la puerta trasera del teatro para que el conserje no me viera, cuando empecé a correr logre ver mi ropa tirada en un rincón, sin embargo era demasiado tarde tendría que volver por ella después, así que continúe corriendo, pero al yo estar saliendo alcance a ver que el conserje entraba a la parte trasera del escenario, no sé si me vio o me reconoció ya que yo estaba de espaldas a él, pero lo que sí estoy seguro que vio a un hombre salir desnudo del teatro y la puerta cerrarse tras de él, por lo cual tan pronto se cerró la puerta y yo quede afuera salí corriendo a otro lugar para ocultarme, el mejor lugar que se me ocurrió fueron los baños de estudiantes, llegue, trate de calmarme, por todo el temor de ser descubierto mi erección ya se había perdido y lo peor era que no había logrado eyacular, en ese momento pensé en que esperaría un tiempo prudente, luego iría nuevamente al teatro por mi ropa y ya está, espere unos 15 o 20 minutos y salí nuevamente del baño con mucho cuidado de que no hubiera nadie por los alrededores, cuando iba saliendo note que venía el conserje así que nuevamente me oculte, pero para mi suerte él ya iba de salida pues se dirigió hasta la puerta, yo lo espié y vi cómo se despedida del guardia de seguridad y se iba para su casa, eso me indicaba que ya todo con los estudiantes se había terminado y ambos se habían marchado a casa también, eso fue un gran alivio para mí, pues ya no tendría que preocuparme de que alguien me viera. Regresé al teatro y para mi sorpresa mi ropa no estaba, la intente buscar por todos lados, pero no la encontré, era evidente que el conserje la había tomado, trate de buscar algo más con lo que pudiera taparme pero no encontré nada, en ese momento el pánico se apoderó de mí, pues no podía estarme pasando esto, no me podía estar quedando desnudo en el colegio, ¿cómo haría para salir sin que el guardia me viera?, ¿cómo haría para llegar hasta mi carro completamente en pelotas? y lo peor, me tocaría irme en bola hasta mi casa ¿cómo iba a hacer para entrar?

En el momento en que me di cuenta que mi ropa no estaba por ningún lado el pánico se apoderó de mí, empecé a buscarla como desesperado entre todas las cosas de utilería que habían en ese lugar, pero por más que lo intente, no encontré nada, en ese momento pensé en que tal vez si el conserje era quien se había llevado mi ropa la tenía en su almacén, así que salí del teatro completamente desnudo a buscarla, era muy raro estar así por todo el colegio, a pesar de que tenía bastante miedo y pánico de poder ser atrapado por el guardia de seguridad o alguien más, también había una parte de mí que le gustaba esto y le causaba morbo. A hurtadillas me dirigí hacia el almacén del conserje, solo que, al llegar para mi mala suerte, la puerta estaba cerrada con llave, así que no tuve otra opción más que regresar me por donde vine. En ese momento se me ocurrió ir y ver si encontraba algo de ropa que usaban los actores en teatro, pero solo había elementos de utilería, ya que los elementos de vestuario los guardaba el profesor de artes en una bodega y efectivamente fui a revisar y estaba cerrada, y de nada serviría intentar entrar a mi bodega ya que allí no tengo nada que me sirva. Tras intentar varias cosas y darme cuenta que ninguna funcionaria, me dispuse a salir del colegio para llegar a mi auto, un problema entre comillas eran las llaves del auto ya que estaban en mi ropa, pero por suerte yo tenía una llave oculta bajo el carro, ya que una vez me deje las llaves adentro y me toco pagar mucho dinero para poder abrir el carro, así que desde ahí decidí dejar una llave oculta, aunque sacarla sería algo demorado ya que la escondí de tal manera que para recuperarla me tuviera que meter completamente debajo del carro, pero bueno eso lo podía hacer , pero había un problema y era el guardia del colegio, ya que no podía permitir que el me viera desnudo, y la única manera de salir del colegio era por esa puerta que él custodiaba, así que se me ocurrió esperar a que le diera por ir al baño, pero descarte esa idea ya que tal vez tardaría mucho en querer ir y no me podía quedar esperando todo el día, así que se me ocurrió hacer algún ruido o algo que llamara la atención del guardia, tome una caneca metálica y lance con fuerza por unas escaleras, haciendo que esta hiciera un gran ruido, al tiempo fui a observar y efectivamente el guardia salió de su puesto y se dirige hacia el edificio, al tiempo que yo me ocultaba tras un muro, luego de verlo pasar y dirigirse hacia donde estaba las escaleras con la caneca, salí a hurtadillas del edificio y corrí lo más rápido que pude hacia la salida, al llegar para mi mala suerte la puerta estaba cerrada con candado, en ese momento pensé en regresar, pero tal vez el tiempo no me daba así que empecé a buscar como desesperado las llaves del candado, tal vez las había dejado ahí, mi corazón empezó a latir mucho más rápido, incluso las piernas me temblaron, en ese momento encontré las llaves y mi alma volvió a mi cuerpo, así que rápidamente quite el candado, pero al hacerlo no me fije y una gran cadena que sostenía el candado, cayó al suelo haciendo bastante ruido, por lo cual abrí a puerta y salí corriendo en dirección a donde se encontraba el carro, no mire hacia atrás, pues no quería que si me giraba el guardia estuviera por ahí y me reconociera, tenía la adrenalina al cien por ciento, así que seguí corriendo pero vi que a lo lejos venía alguien caminando por la calle así que me tocó desviarme por otra calle, esta se veía sola sin embargo había varias casas, pero no tenía otra opción, camine lo más rápido que pude esperando que de ninguna de ellas me vieran, en ese momento yo sentía mi corazón a mil, mi nivel de angustia y excitación en ese momento era altísimo, estar caminando desnudo por los alrededores del colegio, en donde en cualquier momento alguien me podría ver así y reconocerme, eso sería el fin de mi carrera como docente y de mi vida probablemente. luego de caminar tapando mis genitales llegue al carro, en ese momento me sentí muy aliviado, pero no había tiempo que perder así que me agache acostándome en el piso boca arriba y empecé a deslizarme bajo el coche como cuando uno lo repara, así lo hice hasta que casi que la mitad de mi cuerpo quedó debajo del carro, empecé a sacar la llave, pero yo la había puesto de tal manera que para sacarla quien lo hiciera se llevara sus buenos minutos, en ese momento solo rezaba para que nadie pasara ya que vería la parte baja de mi cuerpo es decir de mi cintura para abajo por fuera del coche y claro vería mi pene y bolas, yo trate de ser lo más rápido que pude cuando ya faltaba poco para sacarla siento que alguien me toca el pene, lo cual hace que me sobresalte, pero no podía salir pues si lo hacía perdería todo el trabajo que tenía hecho y me tocaría empezar de cero, así que seguí, mientras quien quiera que fuera me seguía tocando el pene que seguía erecto por la excitación de lo que le hizo el conserje a Rodrigo y a Wilmito, tras unos minutos logre sacar la llave y salí de debajo del carro para ver quien era la persona que me andaba manoseando, no me preocupe mucho ya que de ser alguien indebido no me toca, sino que grita o algo por el estilo, cuando salí me lleve una gran sorpresa pues era un hombre algo mayor, era un vagabundo o persona sin hogar,  se lo veía sucio y bastante acabado, aunque en sus pantalones era claro que tenía una erección. Yo preferí no darle mucha importancia y me diafonía a irme cuando me toca nuevamente el pene, así que lo deje, mirando para todos los lados vi que no venía nadie, asi que deje que se divirtiera un poco, el siguió masturbándome hasta que en un momento veo a lo lejos un grupo de gente acercarse, así que no tengo de otra que zafarme de él e intentó abrir la puerta del auto rápidamente pues no quiero que un grupo de personas me vean así, de los nervios no logro introducir las llaves y estas se me caen al suelo, cayendo un poco por debajo del auto, me agacho rápido para recogerlas y en eso el hombre aprovecha y me trata de meter un dedo en el culo, yo alcanzo a tomar las llaves y por la sensación del dedo en mi culo me levanto rápidamente, viendo que el grupo viene más cerca mi corazón se acelera, ahora si logro abrir el auto y entro rápidamente cerrando la puerta, tomo la llave y enciendo el carro dejando atrás a aquel hombre y al grupo de gente que espero no me hayan visto, ya en el auto empiezo a revisar a ver si tengo algo que pueda usar pero no encuentro nada. En ese momento pienso que todo salió bien, o bueno pudo ser peor, pero finalmente la saque barata, pues casi nadie me vio y la cosa no paso a mayores, que tonto, no podía estar más equivocado, pues no sabía lo que estaba a punto de pasar.

Yo iba conduciendo por la carretera tratando de llegar rápido a casa, por suerte no había tránsito y la carretera estaba libre, así que yo pisaba el acelerador a fondo para llegar lo antes posible, mientras avanzaba solo pensaba en cómo haría para lograr entrar a mi casa, ya que no tenía llaves, pues estas también estaban en mis pantalones, rayos si tan solo no me hubiera ganado la calentura y no me los hubiera quitado, pero bueno eso no iba a solucionar nada, ya que tenía que enfocarme en cómo bajarme del carro desnudo y de alguna manera lograr entrar a casa, pero solo había una persona que tenía copia de mis llaves y era el administrador del edificio así que me tocaría ir a hablar con él, aunque antes probablemente buscaría en algún tendedero o algo así ropa que ponerme, estaba tan concentrado pensando en eso, cuando escucho una sirena de policía que me sacó de mis pensamientos, en ese momento mire el velocímetro y estaba bien, es decir según yo no había superado el límite, en eso la patrulla me sigue de cerca y me hace indicaciones que me detenga, en ese momento mi corazón se puso a mil, pues ahora un policía me vería desnudo, esto no podría ser peor, así que al no tener otra opción me detuve lentamente y me orille, por suerte por el lugar donde iba habían varios árboles y se veía como un campo, al menos no era en medio de la ciudad, me detuve y busque algo con que taparme, pero claro no había nada, así que solo use mis manos para taparme, en eso veo que se baja del coche de policía un hombre moreno, con barba y lentes oscuros y poco a poco se acerca a mi ventanilla, al llegar me pide bajarla y yo lo hago estando totalmente rojo por la vergüenza y tapándome, el me ve y se sorprende.

Oficial: Wow buena tarde, licencia y papeles por favor

Yo: Ehhh claro (Con la mano que tengo libre saco los papeles que guardo en la porta documentos del carro y se lo entregó al oficial)

Oficial: Bien espere un momento (él toma y los empieza a revisar, luego de unos minutos me los regresa y yo los pongo en su sitio) mmmmm si sabe que supero el límite de velocidad permitido y además esta sin ropa lo cual se considera como exhibicionismo, tendré que arrestarlo.

Yo: No, este emmmm yo iba en el límite permitido, siempre me aseguro de estar atento a ello y en cuanto a lo de mi ropa es que … me asaltaron y me quitaron todo (En ese momento agaché la cabeza)

Oficial: ¿Lo asaltaron? ¿Pero si le quitaron todo, como es que tiene las llaves de su carro?

Yo: Ehhh es porque tenía una copia oculta por si algún día se me perdían o las dejaba dentro

Oficial: mmmmmm que conveniente, sabía que recibimos una llamada anónima de una persona que dijo que vio a un hombre desnudo salir de un colegio y subirse en un auto

Yo:  ¿Qué? (En ese momento sentí pánico como nunca antes en mi vida, pues al parecer alguien me había visto y no solo eso había llamado a la policía para reportarlo, sería alguna persona que me vio desde su casa o tal vez alguien de la calle)

Oficial: Bien y entonces… puede explicarme cómo es que recibimos esa llamada y luego me lo encuentro a usted así

Yo:  Pues mire le voy a decir la verdad, lo que ocurre, es que yo trabajo en ese colegio y estaba con un compañero y nos pusimos a hacer retos y al final de estos termine perdiendo mi ropa y mi reto era regresar a casa desnudo (era verdad, al menos la parte de que trabajaba allí, pues no le podía decir el motivo real del porque andaba desnudo y menos a un policía)

Oficial: Ahora la historia cambió, ya no lo asaltaron si no que todo fue por un reto, es muy sospechoso, baje del vehículo y ponga las manos sobre la nuca.

Yo:  No, por favor no, mire estoy desnudo, por favor

Oficial:  Baje del vehículo y manos sobre la nuca, es una orden

El oficial lo dijo con tanta seriedad que me asuste aún más, por lo cual retire las llaves del coche y salí con ellas en la mano tapando mis genitales con la otra mano, que desde que el oficial me detuvo había estado cubriendo mis partes íntimas, las cuales estaba algo reducidas por el miedo y la vergüenza, al salir, mire hacia todos los lados pero por suerte no venían carros, así que me baje rápidamente y el oficial me indico que me dirigiera hacia el otro lado, es decir hacia donde estaba el andén y los árboles, que suerte así estaría más cubierto, antes de eso me quitó las llaves y cerró la puerta del carro, yo me dirigí ahí rápidamente caminando con ambas manos en mi entrepierna, de haberme visto a mí mismo caminar en esas condiciones me habría dado mucho morbo, llegue hasta donde me había dicho el oficial, por suerte ahora mi carro me tapaba, si algún otro carro pasaba solo vería una patrulla y otro carro, pero no me verían desnudo,  el oficial llegó hasta donde yo estaba, se paró delante mío abriendo las piernas como imponiendo su autoridad, mientras que yo miraba al suelo avergonzado.

Oficial: Póngase contra el vehículo y manos en la nuca, necesito revisar algo

Yo obedecí esa orden al instante, el miedo se apoderó de mí y seguía instrucciones sin protestar o decir nada, me gire y dude un segundo en si quitarme las manos de la entrepierna o no, pero pues como iba a estar mirando al carro nadie me vería, así que lo hice y puse mis manos en mi nuca, luego sentí como el oficial se acercó por detrás mío y puso sus manos sobre mis hombros, luego bajó sus manos como si me estuviera haciendo una requisa, pero pues estaba desnudo, así que no tenía nada que ocultar, sin embargo no dije nada y no opuse resistencia, así que el oficial bajó sus manos por mi espalda como palpándola, luego se saltó mi trasero y se fue a mis piernas recorriendo una por una hasta abajo, hasta que volvió a mis hombros ya hora recorrió mis brazos, luego me eso se apartó un poco de mí.

Oficial: Bien, voy a tener que hacerle una requisa más a fondo, quiero asegurarme que no traiga nada oculto bajo la piel

Yo: ¿Qué? Pero yo no traigo nada de verdad, estoy desnudo

Oficial: De eso me quiero asegurar, hágase para allá detrás de ese árbol (me señaló un árbol y nos arbustos que estaban algo ocultos)

Yo: ¿Allá?

Oficial: (respondió en tono bastante molesto) Si allá, o si quiere lo hago en medio de la carretera para que todos lo vean, si sabe me parece mejor

Yo: No, no ya voy para allá (en ese momento volví a bajar mis manos para tapar mi pene y me fui hasta detrás del árbol y los arbustos, ahora si estaba mucho más oculto, al menos nadie me vería)

Oficial: Quien le dijo que podía bajar las manos

Yo: Ehhh es que me da vergüenza

Oficial: Yo no le pregunte si le da vergüenza, manos en la nuca dije

Yo: Ehhhh está bien

En ese momento por miedo levanté las manos y las  puse sobre mi nuca dejando que el oficial me viera el pene y las bolas, lo cual hizo que me pusiera aún más rojo de lo que ya estaba, él empezó a caminar mientras me miraba de arriba abajo, en un momento me pareció que se lamio los labios, eso se me hizo algo raro pero lo deje pasar, pero eso me llevó a analizarlo mejor, el oficial no era muy alto, era moreno, con un cuerpo musculoso supongo que por la profesión, aunque parecía algo chacalon la verdad y eso me gustaba, tenía una barba negra azabache bastante poblada perfilada, que lo hacía lucir muy masculino, así como sus dos cejas negras pobladas que hacían que todo su rostro se viera más masculino aun, eso sumado con su uniforme de oficial que le quedaba algo ajustado, hacía que empezara a verlo con otros ojos, en ese momento se me empieza a acercar y en un momento se soba el bulto hasta que queda delante mío y con sus manos nuevamente empieza a palparme el cuerpo como requisándome, supuestamente. Inicia por mi pecho el cual no es musculoso, pero si algo marcado y con vello, él pone sus manos en mis pectorales y hace algo de presión como amasándolos, luego baja por mi abdomen que no es nada marcado, más bien plano y lo recorre con sus manos que para mi sorpresa estaban algo calientes, luego vuelve nuevamente a mis pectorales y ahora recorre mis brazos, haciendo presión en mis bíceps, como midiendo mis músculos, los cuales no eran nada prominentes.

Oficial: Se ve que hace ejercicio

Yo: Ehhh pues un poco

Oficial: Bien miremos si tus piernas están iguales

El oficial se agachó y puso sus manos en mis pies y los toco un poco luego empezó a subir con sus manos por mis tobillos, pantorrillas y muslos, cuando llegó a estos últimos los apretó un poco, luego hizo lo mismo con la otra pierna, pero en esta al llegar al final subió al máximo es decir su mano me rozó las pelotas y quedó metida entre mis bolas y mi muslo. luego sin ningún tipo de pudor me agarro las bolas y las empezó a acariciar

Yo:  oiga pero que hace

Oficial: Estoy revisando, además sé que le encanta exhibirse y sé que está disfrutando esto

En ese momento me di cuenta de las intenciones del oficial así que me alivie un poco y deje que siguiera toqueteándome, luego también me toco el pene, lo recorrió con sus dedos y bajo mi prepucio, poniendo uno de sus dedos en él y dando pequeños círculos, lo cual hizo que se me empezara a parar un poco, luego lo retiró y volvió a mis bolas apretándolas un poco, haciéndome emitir un pequeño sonido, finalmente se levantó y me giro, yo quede dándole la espalda, se me pegó más y empezó a acariciarme la espalda de manera sensual, cuando de repente siento una fuerte nalgada en mi trasero, lo que me hizo soltar un leve grito.

Yo: Ahhhhhhhhhh, oiga

Oficial: Jajajajaja, es que con ese culito que tienes era imposible resistirme, además no creas que no me di cuenta que esto te está gustando, o como explicas esto

En ese momento llevó su mano por delante mío hasta tocar mi pene el cual ya estaba erecto, el oficial tenía razón esto me estaba gustando así que no tuve más opción que guardar silencio, aceptando lo que él decía, el oficial entendió mi silencio como aceptación y soltó mi pene y me dio otra nalgada haciéndome soltar un gemido, luego de eso empezó a manosearme las nalgas amasándolas con fuerza, mientras se pegaba más a mí y me empezó a besar el cuello, sus manos apretaban con fuerza mis dos nalgas, era claro que la excitación del oficial estaba aumentando, el llevo su mano hacia mi rostro y puso uno de sus dedos cerca de mi boca, era un dedo grueso, se veía el que era de manos anchas como todo un verdadero macho, con manos gruesas y venudas, luego me ordenó que lo chupara, cosa que yo hice con algo de lujuria como si de un pene se tratara,  lo retiró y lo llevó hasta mi ano, en donde empezó a meter un dedo, lo que me hizo soltar un gemido, el siguió haciendo presión para que este dedo entrara, al tiempo que mis gemidos aumentaban, el hizo un esfuerzo y logro meter la mitad de su dedo, luego sigo haciendo círculos con este para dilatar, al tiempo que continuaba besándome el cuello y las orejas, cosa que me estaba gustando y me hacía poner más cachondo cada vez, luego él hace más presión y termina de meter todo su dedo en mi interior haciéndome soltar un pequeño grito de dolor.

Oficial:  Aguanta putito, que la diversión recién comienza

El Oficial empezó a mover ese dedo en mi interior y yo sentí mucho placer, por lo cual continuó gimiendo mientras este macho me dedeaba con bastante intensidad luego sacó nuevamente el dedo esta vez me acerco dos dedos a la cara, el que ya había metido y uno nuevo, no tuvo que darme órdenes porque tan pronto los tuve cerca empecé a chuparlos y a lamerlos hasta dejarlos completamente cubiertos de mi baba, él los retiró de mi boca y primero mete el dedo que ya había tenido adentro, luego de esto, inicio a meter el segundo dedo, lo que me ocasionó un poco de dolor mezclado con placer, pero en esta ocasión no fue nada gentil, al contrario, me lo metió de una y hasta el fondo haciéndome gritar de dolor, luego empezó nuevamente con los movimientos, pero esta vez también empezó a sacar y a meter los dedos en mí, mientras contaba besándome y acariciándome el pecho con la otra mano, esto me tenía completamente erecto, mi pene estaba a reventar, pues tenía toda la excitación acumulada de lo que había visto en el colegio y ahora esto, ufffff era demasiado, mis niveles de excitación andaban por la nubes mientras este oficial me seguía dedeando, el oficial aumento la velocidad con la que me metía sus dedos y cada vez lo hacía con más fuerza, como queriéndome meter más de los dos dedos, luego otra vez me los saco y me los puso en la cara.

Oficial: Chúpalos puta, chupa tu esencia de maricón, la esencia de tu culo ( sin darme tiempo a hacer nada la fuerza me los metió a la boca) eso putita así, comételos todos (siguió metiendo sus dedos en mi boca con fuerza y cada vez más adentro, hasta que en un momento ya tenía parte de su mano dentro de la boca) Ufffffffffffff eso putita que rico, se ve que eres un maricón que le encanta que le den por el culo, pues ahora te voy a partir en dos

No sabía porque, pero esa actitud ruda y dominante me estaba encantando, en ese momento pensé que me iba a meter su verga, solo de imaginarme cómo la tendría se me hacía agua la boca, pues ya había visto su cuerpo ancho y sus manos gruesas, además que parecía medio chacalon, así que, la verga la debería de tener bien gruesa y prieta, es decir riquísima, ya quería sentirla dentro de mi revolviéndome las tripas, en eso siento que suena algo de su pantalón, luego se escucha un fuerte escupitajo y ya no puedo esperar más quiero que me meta la verga ya, cuál fue mi sorpresa, que siento algo frio internado meterse en mi culito, me giro para ver qué es y al hacerlo me sorprendo bastante, pero al tiempo eso me causa más excitación, pues el oficial se había sacado su macana, si el arma en forma de ele que usan para golpear a los ladrones, pues esa misma él le había llenado de saliva y me la estaba empezando a meter por el culo. Primero puso la punta e hizo presión, está entro haciéndome soltar un gran gemido, luego el oficial la empezó a meter y a sacar lentamente.

Oficial: Uffffffffffffffffff mira que rico se la traga tu culito, se ve que está hambriento y quiere que le metan lo que sea, que maricón resultaste ser

Yo seguía gimiendo mientras la macana entraba cada vez más en mí, el oficial me seguía besando el cuello mientras con una mano me metía la macana con la otra me empezó a pellizcar las tetillas, el siguió metiendo este aparato cada vez más, haciendo que cada vez estuviera más adentro mío, empezando a aumentar el ritmo, en un momento sentí que me lo metió hasta el fondo pues me hizo soltar un grito que casi me hace orinar, claro esa solo fue mi sensación, ya que gire mi cabeza y no tenía ni un cuarto de ese aparato adentro, él siguió bombeándome, aumentando la intensidad y la velocidad con la que me lo metía, poco a poco fue entrando más y más, en un momento yo ya sentía que no daba más sentía que me iba a partir, pues el dolor empezó a ser más intenso que el placer

Yo: Ahhhhhh, espere, pare, pare, no puedo, me duele mucho

Oficial: Aguántate perra, sé que aun resistes más (el siguió follándome con ese aparato)

Yo: No, no de verdad no aguanto más, me voy a partir en dos pare (en ese momento cometí el error de tratar de zafarme por la fuerza)

Oficial: Que te cayes perra, a donde crees que vas

En ese momento el Oficial se emputo, como yo me había intentado escapar, la macana se había salido de mi culo, el Oficial me tomó del pelo con fuerza de un solo tiro me lanzo al suelo, yo no alcance a reaccionar y me desplome, luego me senté para intentar pararme, pero antes de hacerlo él se puso enfrente mío y me tomo nuevamente del cabello alzándome la cara, pude ver su cara de enojo y fue ahí cuando sentí un golpe en mi cara que me dejó temblando, yo quede en shock por el golpe

Oficial: Mira pedazo de perra aquí vas a hacer lo que yo diga está claro, si yo digo que te aguantas te aguantas, eres solo una zorra que le encanta andar desnudo y que le den por el culo así que te callas y obedeces, ¿está claro?

En ese momento yo aun seguía en shock, pero escuché todo lo que dijo, yo aún seguía con la cabeza agachada en ese momento decidí alzarla para poder verlo, pero al hacerlo sentí otro golpe en mi cara que me tiró al suelo

Oficial: ¿Quedó claro? (Lo dijo con voz aún más gruesa)

Yo:  Si (En ese momento ya estaba temblando de miedo y unas lágrimas empezaban a salir de mis ojos)

Oficial: (Me tomo nuevamente del pelo y me jalo haciéndome sentar y levantar la cabeza mirándolo a los ojos) Si que pedazo de basura, no te enseñaron a respetar a tus superiores, ¿si qué? (en ese momento alzó la mano como amenazándome con golpearme otra vez)

Yo: Sí señor (dije con la voz entrecortada y algo temblorosa)

Oficial: Eso así me gusta perra (aun me tenía del cabello, pero antes de soltarme preparó su boca y sacó un gran escupitajo mandándolo con fuerza hacia mi cara, este término en mi nariz y mejilla y se escurrió hasta pasar por mi boca) Eso es para que no se te olvide zorra, no eres más que un juguete para mi diversión (Sin soltarme del cabello me llevo a rastras hasta una gran roca que había cerca) Súbete perra

Yo me subí en la piedra como él dijo, luego el a la fuerza me acomodo acostándome boca arriba, me abrió las piernas haciendo que las sostuviera en el aire, tomó nuevamente la macana y me la metió con fuerza, lo cual me hizo gemir y gritar, pero a él poco parecía importarle, siguió con el mete y saca de este tubo, metiendo cada vez más en mi interior, a medida que el tiempo pasó, el dolor se fue y se convirtió en placer, por lo cual mi verga nuevamente se erecto, ya que cuando me golpeo, por el miedo había quedado flácida. El noto mi erección e inmediatamente con su mano me apretó las bolas con fuerza haciéndome gritar por el dolor

Oficial:  Viste maricón, si te encanta que te destrocen el culo,

Yo: Ammmmm Ahhhhhhhhhhhhhhhhh (Yo gemía cada vez más fuerte, ya que cada vez me metía más esa cosa dentro de mí, cuando vi ya tenía un cuarto adentro)

Oficial:  Calla perra, o es que quieres que todos vengan y vean el espectáculo que estás dando

Yo: AHHHHHHHH  Ammmmmm (Yo trataba de callar mis gemidos pero me era imposible)

Oficial:  Que te cayes perra

Al ver que yo Iba a seguir gimiendo cada vez más duro, el oficial me dejo la macana en el culo y empezó a quitarse las botas, tan pronto lo hizo se quitó una de sus calcetas y la hizo bola y me la metió en la boca para que me callara de una vez, Luego volvió a tomar la macana y siguió follandome el culo, mientras yo gemía de placer, solo que ahora esos gemidos eran ahogados por el calcetín de este macho. El oficial con su mano libre me empezó a masturbar al tiempo que me seguía penetrando

Oficial: Eso zorra, has que tu culo se la coma toda eso

Yo: Mmmmmm Mmmmm ammmmmmm

En ese momento ya no podía más de la excitación, pues la penetraciones eran cada vez más rápidas y más fuertes, al tiempo que la masturbación era más intensa, mi respiración empezó a aumentar y de mi verga salieron varios chorros de leche me llegaron hasta la cara, manchándome el pecho y la mano de oficial, este me vio y sonrió maliciosamente, luego tomo su mano y me la acerco a la cara para que la limpiara, cosa que hice gustoso, pasando mi lengua por todos sus dedos, dejándola sin un rastro de mi semen, a pesar de que ya me había hecho eyacular, aún tenía el tubo en el culo, así que aprovecho ese momento y me lo saco de un tirón haciendo que yo me retorciera del dolor, luego de esto se rio y tiro la herramienta al suelo. Yo trate de recomponerme de esta corrida y me levante, tan pronto lo hice el me detuvo.

Oficial: ¿No pensarás que eso es todo o sí?

Yo: ¿Qué?

Oficial: Aun falta que te me hagas disfrutar más, aunque me encanto romperte el culo, esto aun no termina, así que agáchate perra

Me tomo del cabello y me tiro nuevamente al suelo, en eso se desabrocho el pantalón y salió ante mí una gran verga morena, eso me volvió a excitar al instante, pues no solo era una verga riquísima, si no que no estaba usando calzoncillos, lo cual me puso al cien, así que tan pronto la vi, me lance y empecé a lamerla, recorría esa gruesa verga con mi lengua, sintiendo cada una de sus venas, luego el oficial se terminó de bajar los pantalones los cuales cayeron al piso, revelándome ese par de pelotas de macho que con solo verlas se me hizo agua la boca y me lance a comerlas, pasándole mi lengua por esas pelotas peludas, sintiendo su aroma y sabor, ese sabor a sudor que me encanta y es tan característico de los machos, me las metí a la boca una por una y luego las dos, succionándolas haciendo gemir al oficial

Oficial: Eso perrera así, Ufffff que bien me comes las pelotas Ahmmmm

Yo continúe como niño en dulcería, probando todo ese manjar, luego regrese nuevamente a su verga y me la metí a la boca, era la verga más gruesa que había probado en mi vida, tan pronto la tuve dentro el oficial tomo mi cabeza y empezó a marcar el ritmo, yo seguía chupándosela mientras su excitación crecía, al tiempo que el cada vez hundía más mi cabeza en su verga, pero llego un punto en que ya no cabía y me estaba faltando el aire, por lo cual quise sacarme la de la boca pero este no me lo permitió, hizo más presión y tuvo más fuerte mi cabeza, al tiempo que presionaba con su pelvis metiéndome más su verga en mi garganta, yo ya no podía más y mis ojos empezaron a llorosear, intente con más fuerza hasta que finalmente me logre zafar y empecé a toser en el piso, el me vio y parecía orgulloso

Oficial: así es que se trata a las putitas como tú, para que sepan cuál es su lugar

Acto seguido ni bien me había acabado de reponer cuando me agarra otra vez del pelo y tira de él haciéndome gritar, cosa que aprovecha para meterme otra vez su verga en mi boca, pero esta vez es el quien empieza a hacer los movimientos de adelante y atrás con sus caderas, así que básicamente empieza a follarme la boca, empieza despacio, pero va a un mentando la velocidad y la fuerza de sus embestidas poco a poco, nuevamente empiezo a sentir que me falta el aire, así que trato de zafarme pero no me deja, esta vez me tiene mejor agarrado y por más que trato no puedo zafarme, el me sigue follando la boca como un cerdo, cada vez más duro y sin compasión, de mis ojos empiezan a salir lágrimas y esto parece que lo éxito más pues aumento la velocidad de sus embestidas, haciéndome tener arcadas, al tiempo que yo siento que ya no me queda nada de aire y me tengo que salir ya, pero por más que intento no puedo hacerlo, trato con todas mis fuerzas, pero no puedo, él me tiene bien agarrado, además de ser más fuerte, en ese momento empiezo a ver borroso y me empiezo a sentir mal, como si me fuera a desmayar, en eso la respiración del oficial aumenta y me mete su verga hasta el fondo dejándomela ahí, en ese momento mi nariz queda pegada a su vello púbico y siento ese gran aroma a macho sudoroso, mientras de su verga empiezan a salir muchos chorros de leche, los cuales se salen de mi boca ya que es mucha leche y empiezan a escurrirse por mi cuerpo, luego de que se vacío en mí, saco su verga y me suelta del pelo, yo como estoy casi inconsciente me caigo hacia atrás quedando apoyado en la roca, lo alcanzo a ver y veo una sonrisa de malicia en su rostro

Oficial: Que bien la mamas putita, eso es para que no se ande inventando mentiras y tenga los pantalones de aceptar que es un maricón que le gusta empelotarse, tome le devuelvo esto (En ese momento me tira las llaves del carro, estas golpean contra mi pecho y caen al suelo, yo veo que él toma su ropa y se empieza a vestir) Ahí se queda zorra y no se demore en irse no se sea que pase la grúa y se le lleve el caro y ahí si se le hace el milagro y se tiene que ir empeloto y con el culo roto para su casa jjajajajajaa

Luego de eso vi como el oficial se alejaba poco a poco, mientras yo trataba de reponerme y levantarme, pero no podía, me dolía todo, sentía que de mi culo palpitaba además que me dolía mucho la boca y la mandíbula, sin mencionar que estaba ahí tirado en medio de un campo, lleno de mi propia baba y semen del oficial, sin fuerzas, con el culo roto y totalmente destrozado, pero esto aun no terminaba pues aún necesitaba llegar a casa y hablar con el administrador para  que me diera la llave y poder entrar a mi casa, definitivamente aun me quedaba camino para llegar a casa

 

Continuara