Mientras dormía conmigo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Como teníamos un vecinito nos lo encargaban, para que sus papás pudieran trabajar más tranquilos.
Sus padres de David, llegaban ya muy de noche, como a las 10:30, y se lo llevaban, yo no jugaba con él, el jugaba muy en su “pedo” y siempre estaba con mi mamá.

Un día mi mamá me dijo que fuera a la tienda, a comprar algo para comer, en eso mi mamá le dijo a David que si quería ir conmigo y que le compre algo, el aceptó.

En el camino empezamos a hablar y se reía mucho, luego nos salió un perro que nos quería corretear pero yo corretee al perro jajaja, a él le dio mucho miedo pero cuando me le tiraba cascajo al perro y la iba a corretear él se reía mucho.
Al llegar a casa él empezó a seguirme, prendí la tele y se sentó en mi cama a ver Los Simpson le pregunté qué cuantos años tenía y me respondió que 7, era tan tierno estar con él, su forma de tomar las cosas, y de comerlas, me empezaba a atraer, y luego más en la forma en que bailaba, si lo vieran, él se subía en mi cama y saltaba se acostaba y se ponía triste cuando llegaba su mamá a recogerlo.

Un día llegó en un short de la selección de futbol de México, no me podía contener, sus piernitas tan lindas, güeritas y muy chulas, sus muslitos tan ricos y con el fin de tocárselos le empecé a hacer cosquillas, se reía muchísimo, le gustaba mucho.

En la noche se tuvo que ir, apagué la luz de mi cuarto y lo comencé a desear, fue tan lindo desearlo, solo que no sabía cómo era su interior, solo me imaginaba y me orgasmeaba muchísimo.
Así se pasaba las tardes conmigo, un día en mi cuarto me dijo que quería que le hiciera cosquillas, así lo hice, pero como tenía pantalón se lo empecé a desabrochar, y él solito se lo quitó por completo, al verlo en calzones, me excitó mucho, le quité sus calcetines, le mordía sus piecitos, a él le encantaba, en eso le dije:- nene, voltéate y te hago cosquillas en tu pompi ¿sí?.
Él respondió:-mmm espera
Al voltearse, le comencé a tocarle sus nalguitas, se dejaba y la curiosidad me llevó más lejos, y comencé a bajárselo para ver con más claridad, OMG, eran divinas, mi pene estaba que estallaba y pues ver unas nalguitas que están a tu alcance te hace sentir mil cosas a la vez, se las toqué por unos segundos pues esta vez vino su papá por él. Vi que su papá le decía de campeón, te extrañé chaparro etc.

En una noche, su mamá nos avisó que tuvieron un contratiempo y que no llegarán a su casa, que si hacíamos el favor de David se duerma con nosotros. Al decirle a David rápido se acostó en mi cama, ya como a las 11:30 ya era hora de dormir, me acosté, y lo empecé a cosquillar, después empecé a acariciarle sus piernitas y muslitos suavemente, al desabrocharle su pantalón se lo quitó por completo y se me encimó al parecer ya sabía lo que venía o fue como algo instantáneo que comenzó a besarme el cuello y no quería zafarse de mí, yo empecé a quitarme mi ropa, me empezó a tocar todo, al tocar mi pene lo empezó a jalar, lo acosté y me puse encima de él, lo comencé a besar sus tiernos y lindos labios que cuando yo los retiraba él solito ponía su boquita para besarlo más.
Tanta fue la pasión que su penecito se llegó a levantar era tan pequeñito, que se veían los latidos de su corazón.
Comencé a chupárselo, sabía de maravilla, y a lo mejor es la intuición que empezó a moverse las caderas, se lo mamía. Me corrí a su cuerpecito comiéndome sus piernitas y muslitos, hasta su ombliguito.
Me quedé pasmado por un tiempo, luego le abrí sus piernitas y miré su asterisco más de cerca, comencé a dilatarlo con mi lengua.

Él prefirió voltearse arrimé mi pene a su rajadita y claro no hubo nada, solo se lo arrimaba eso me conformaba, besaba sus nalguitas y espalda, cuando siento que ya me venía, lo voltee y eyaculé en su pancita, me acosté rendido y comenzó a besarme y a abrazarme, yo le tocaba su culito y lo ponía más cerca.
Al otro día al despertarme alcé las cobijas y miré hacia abajo, sus piernitas tan lindas y hermosas, y se despertó abrazándome, le dije que me iba a bañar y se metió conmigo a la regadera. Nos cambiamos y lo dejé mirando televisión y yo me fui a trabajar.
En la tarde cuando regresé, ya me esperaba con un short, me llevó de la mano a mi cuarto, y se me empezó a encimar y a besar mucho, le dije que esperara en la noche para hacerlo más rico, tuvo que aceptar. Pero pues llegó su mamá y se lo llevó.

Hasta que un día le pidió permiso a su mamá, y al dárselo empecé a reaccionar, ya sabía lo que iba a pasar, y sí, dieron las 8 de la noche comenzó a modelar con pasos sexis, luego me tiraba a la cama, solito me besaba, yo le empezaba a tocar sus nalguitas y a aflojarle su pantaloncito, él quería desabrochar el mío y al ver mi pene lo empezó a jalarlo y le dije:-nene, chupa mi pene ¿sí?.- él respondió:- mmm ¿no sabe feo?-. Yo le respondí:-no nene, sabe rico.
Y lo comenzó a metérselo en su boquita, lo hacía de maravilla, y cuando volteaba a verme sonreía.
Lo acosté en la cama y a quitarle lo que le quedaba de ropa, yo también me la quité, lo empecé a besar y contemplar toso su cuerpecito, besaba, lamía y chupaba su penecito; se me encimaba y le tocaba sus nalguitas cuando le digo:- nene, ¡te quiero coger!-. Si, cógeme, hazme el amor como Patricio y Silvana (personajes en un melodrama mexicano llamado hasta el fin del mundo)- respondió muy feliz.

Lo puse boca abajo y comencé a dilatarle su anito y arrimaba mi pene, pero no entraba entonces lo volteé boca arriba y lo puse en la orilla de la cama, le dije que se abriera de piernas, oh si, se las tocaba y se dejaba, y comencé a trabajar su culito, solo lo arrimé y comencé a arrimarle mi pene, pero como no entraba, empecé a jugar mi pene en su mera entrada. Le daban un chingo de cosquillas, y cuando hacía fuerza para meterlo hacía una carita hermosa, cuando siento las cosquillas de la eyaculación no me contuve y expulsé mucho semen en su pelvis, él lo comenzó a jugar y se lo ponía en su pancita, me acosté rendido cuando me dice que él me lo quería meter, acepté y su penecito hermoso entro en mi culito, además se movía tan divino, y me daba tanta curiosidad que cuando se le salía, rápido lo volvía a meter me excitó mucho que volví a eyacular.

Nos dormimos y al otro día amanecimos abrazaditos. y cada noche que duerme conmigo son interminables
Espero que les guste. Espero sus comentarios