Mis experiencias, con mi vecino en la casa deshabitada.

Me agarro los pies y los puso en una silla y en unos tabiques, apoye los pies, pero sus manos siguieron tocándome cada que yo bajaba hasta agarrarme de las nalgas, ahí se me empezó a quitar el miedo y a sentirme excitado, seguí bajando me agarro del pecho y se me pego completamente y sentí su bulto,.
Después de que Enrique me cogío en la pirámide, decidí coger cuando él quisiera, aún que anduviera con Claudia, todavía sentía celos de ella, pero no me quedaba otra opción, quería seguir  experimentando las sensaciones que me provocaba, toda la adrenalina de estar haciendo algo prohibido, como me tocaba, como me penetraba, que me comiera las tetas, ya teníamos casi 2 años haciéndolo, al principio muy espaciado, los últimos meses más seguido.

Ya mucho más adelante comprendí, que cogía con mi vecino, por falta de atención de mis padres, como era en ese tiempo, un padre ausente, él creía que con llevar dinero, era más que suficiente, trabajaba de lunes a sábado, entre semana llegaba como a las 7 de la tarde, estaba solo un rato en casa y se iba con su mamá, media hora, llegaba cenábamos y se iba a despedir de la abuela y ya no lo veíamos, los sábados trabajaba solo medio día, pero él era alcohólico de fin de semana, desde siempre fue así, ya lo veíamos hasta el domingo en la tarde noche, a veces los sábados cuando llegaba, haciendo su relajo, nunca nos golpeo físicamente, pero lo hacía emocionalmente, le teníamos miedo.

Mi mamá era otro caso, ellos se casaron por que salió embarazada, casi analfabeta, solo fue unos meses a la primaria, en realidad aprendio con nosotros a escribir y a leer, mi padre dejo el primer año de universidad, por lo tanto la familia de mi padre, no quería a nuestra madre, ni a nosotros jajaja, solo cuando necesitaban algo, nos soportaban, al pasar esto mi mamá, tenía la necesidad de tener muchas amistades, lo lograba por que al tener tantos niños en la escuela, estaba en contacto con mucha gente, esto hacía, que a veces tuviéramos mucho tiempo solos en casa, además la mamá de Enrique, era muy celosa y su papá era muy infiel, seguido lo andaba siguiendo para ver con quien la engañaba y mi madre con ella, eso provocaría algunas cosas que pasaron más adelante.

Esa semana se acabaron las clases, ese fin de semana los del otro lado armaron un equipo de fútbol soccer, pero no nos invitaron a jugar, aún que nosotros éramos más pequeños, jugábamos mejor, nos conocíamos más, jugábamos todos los días, deje de ver a Enrique por varias semanas, ya ni lo llegaba a ver con Claudia, era raro pero no podía hacer nada, el segundo sábado de vacaciones, mi papá estaba también de vacaciones, me mando temprano a comprar el periódico, al salir a la avenida vi mucha gente reunida, como buen niño fui a ver que pasaba.

Para mi sorpresa, lo que ví me impresiono, veían a dos perros abotonados, a la gente le parecía divertido verlos como se jalaban de un lado a otro, los pateaban o les echaban agua, los perros solo intentaban separarse, pero cada uno jalaba para un lado y les dolía, por que chillaban, cuando se pasaron la avenida fue peligroso, por que casi atropellan a uno, pero por suerte lograron pasar, ya poca gente los siguió, entre ellos yo, llegaron a un local de comida, la dueña salio y les echo una cubetada de agua, por fin se desabotonaron, fue impresionante ver como salía la verga del perro, era enorme, la perra se fue corriendo, el perro se echo para lamerse su enorme verga, me excite al ver esa enorme verga, mire a mi alrededor y ya solo estaba yo.

Me dio mucha pena y salí corriendo al puesto de periódicos, ya en el camino fuí pensando como se sentiría, tener una verga de ese tamaño en el culo, desde ese día empecé a tener mucha ansiedad y excitación, quería experimentar de inmediato eso, obvio no pensaba en que me podía lastimar, solo quería sentir algo en mi ano, ya que mi vecino no me estaba cogiendo, nosotros teníamos 3 perros, pero eran de raza pequeña, pero en mi mente ellos tendrían una verga enorme, esa semana solo me dedique a ver lo que hacía la familia, cuando la casa estaba un poco vacía, como podría hacerlo, pero todos los día estaba excitado, me le quedaba viendo a mis perros, saboreando el momento de que me montaran.

En la cocina había una pequeña ventana, que daba al patio trasero, en el cual estaban los perros, nunca se abría, ya que casi siempre estaba abierta la puerta, trate de abrirla y con trabajo lo logre, me salí al patio, cerré la puerta, metí mi mano por la ventana y logre abrir la puerta desde afuera, ese fue un gran paso, los vecinos me podían ver, si llegaban a salir, no era muy alto el muro que separaba las casas, tenía que hacerlo con la puerta cerrada, por si alguien se asomaba en la cocina, además mi papá seguía de vacaciones, era un poco frustrante, por que ya quería que me cogiera uno de mis perros ya, pensé que iba a ser muy facíl, pero o fue así.

Ya eran 3 semanas sin ver a Enrique, cuando salía a jugar, que eran todos los días, lo trataba de buscar, pero no lo veía, estuve tentado a ir a preguntarle a Claudia por él, pero me imaginaba, que ella pensaría que lo buscaba para que me cogiera, note que como a las 5 de la tarde, casi todos estábamos jugando en la calle, solo mi mamá a veces estaba  o salía a platicar un rato con la mamá de Enrique, cuando mi papá regreso a trabajar, de inmediato trate de coger con los perros, los primeros días por los nervios no logre nada, casi siempre salía al patio todo excitado, pero oía ruidos y me metía, claro no era nadie jajaja.

Ya el miércoles logre tranquilizarme, salí al patio, pero el estar afuera no supe que hacer, miraba seguido al frente, para ver que no estuviera alguno de mis vecinos, llamé a mis perros pero ningúno se acerco, me saque la verga, la cual estaba erecta, por lo excitado que estaba,  me puse en cunclillas y solo el más pequeño se acerco, solo me olia, yo lo agarre para acariciarlo, el se dejo, le acariciaba la cabeza y poco a poco fui bajando mi mano rumbo a su verga, cuando acerque la mano me gruño y se fue a donde estaban los otros perros, yo lo llamaba por su nombre, pero en voz baja, pensaba que me oiría alguien, no aguante la presión y me metí a la casa, justo cuando salía de la cocina, mi madre pasaba por ahí, me dio un poco de miedo.

¿Qué haces?.

Nada.

Solo se me quedo viendo, al siguiente día, todos estábamos en la calle jugando, vi que salía mi madre y se cruzaba la calle para ir a ver a la madre de Enrique, deje de jugar y tratando de que mi madre no me viera, me metí a la casa, corrí a la cocina, iba todo nervioso y excitado, salí al patio, cheque que no estuviera uno de los vecinos y cerré la puerta, me agache y llame a mis perros, igual que el día anterior solo el más pequeño se acerco, lo empecé acariciar, primero la cabeza y su lomo, el se dejaba hacer, trate de no ir tan rápido para que no se fuera con los otros perros, con una mano lo acariciaba y con la otra me sacaba la verga.

En algún momento mi perro se dio cuenta y se quedo quieto, acerco el hocico para olerla, ya tenía liquido preseminal, cuando dio el primer lengüetazo en mi verga fue increible, me le quede viendo, para ver su reacción, el se me quedo viendo y comenzó a lamer más seguido, poco a poco, fuí bajando mi mano para agarrarle su verga, todavía estaba dentro del forro, pero estaba todo duro, no era tan grande como la del perro de la calle, cuando lo toque le salio un poco la punta, empezó a salir liquido, pensé que era orina, yo solo apretaba la verga del perro.

Fue tanta la excitación que se me olvido donde estaba, me levante, me desabroche el pantalón y me los baje, me gire hacía la puerta, para que mi perro me cogiera, al no sentir nada, gire a verlo, pero el no hacía nada, se alejo de mí, gracias a Dios, no se veía nadie con los vecino, lo llame en voz muy baja, el solo iba de un lado a otro, me ganaron los nervios y me subí los pantalones, en mi mano había gotas de lo que pensaba que era orina y lo lamí, era un sabor como de metal, me lave las manos y abrí la puerta para meterme, oí que se abría la puerta principal de la casa, aún nervioso, agarre un pedazo de carne de la cacerola que estaba en la estufa, me lo eche a la boca, en eso mi mamá se asomaba a la cocina, claro me vio y me regaño, pero no paso de eso.

Me salí a jugar otra vez, fue cuando vi que mi pantalón estaba lleno de pelos de los perros, me sacudí, estaba temblando por la situación con mi perro, ya el viernes, paso casí lo mismo que el otro día, solo que la comadre fue a buscar a mi madre, espere un momento y se fueron rumbo a la avenida, cuando dieron vuelta en la esquina, les dije a los cuates que al rato regresaba, me metí corriendo a la casa, estaba solo.

Me salí al patio, llame a mi perro, el se acerco de inmediato, me fije que no estuviera algún vecino, me baje los pantalones, me puse en 4 patas, y gire a ver a mi perro, el se acerco, olía mi culo, lamió mi ano fue fantástico, sentir su pequeña lengua toda rasposa, en ese momento perdí noción de donde estaba y que estaba haciendo, me excite más, solo quería sentir la verga de mi perro dentro de mí, empecé a jalar mi verga, mi perro seguía pasando su lengua en mi ano, lloriqueaba un poco dejaba de lamer, se subía en mí, pero por mi inexperiencia, no estaba muy agachado, sus patas quedaban arriba de mis nalgas, estaba muy alto para que me pudiera coger, se bajaba lloriqueaba un rato, lamia otra vez, se ponía encima de mi, pero yo seguía sin entender que quería, sentí como me caían gotas de orina en mis nalgas, lo agarre de una de sus patas y lo levante, obviamente lo lastime y chillo más fuerte, en ese momento me di cuenta de la situación, mire al muro, me parecio ver algo, pero no estaba seguro, me levante rápido, me acomode los pantalones, me sacudí para quitar los pelos de los perros, me lave las manos y me metí a la casa.

Me asuste mucho, creía que el vecino me había visto, pero no sabía, decidí no experimentar más con mi perro, ya el sábado estábamos jugando en la calle, cuando Don Luis se acerco a nosotros.

Oigan chavos, no les gustaría ir a jugar en mi equipo, es que a veces no nos a completamos, jugamos mañana a las 9:00 am. en los campos del tianguis, por si quieren ir a ver, si quieren jugar, se van todos de blanco, adios.

Y se fue, nos quedamos platicando de la oferta, mi hermano y otro amigo que eran los más grandes dijieron que ellos no irían, pero que si nosotros queríamos í,r que fueramos, al final decidimos ir mi primo, otros 2 amigos y yo, era mi oportunida de ver a Enrique, al otro día me pare a ir a jugar, ese primer partido perdimos por 3 goles, quedamos de entrenar los martes y jueves. Todos eramos buenos, pero en la calle, en pequeñas distancias, rebotando el balón en la banqueta, pero ya en un campo nos perdiamos, llego el martes y fuimos a entrenar, yo trataba de estar pegado con mi vecino, pero él solo se iba con Ramón (que tenía 14 años) y Pedro (que ya tenía 18 años y era el que nos había encontrado cogiendo en la camioneta).

En todo el entrenamiento no me pelo y logro que me enojara, lo mismo paso el jueves, él solo tenía ojos para Ramón, llegó el siguiente partido y volvimos a perder por muchos goles. don Luis que era quien llevaba el equipo, nos empezó a regañar por el resultado, después de 10 min. acabo y nos empezamos a despedir todos, mis amigos ya se habían ido, yo me hacía el tonto para reclamarle a mi vecino por que no pelaba, ya solo quedábamos el güero (que tenía 18 años, hijo de don Luis), Pedro, Ramón, mi vecino y yo.

Por qué no vamos a los baños públicos a bañarnos, todos gritamos.

¡Si!.

Yo estaba feliz, tenía esa sensación de mariposas en la panza, estaba ansioso de estar con él, hasta se me olvido que iba Pedro  y podría decir algo, de que nos había cachado en la camioneta cogiendo, pensé que por fin, mi vecino me cogería otra vez, nos fuimos todos a la calle y cada quien entro a su casa por ropa, dinero y las cosas del baño, por suerte mi papá no había llegado desde un día antes y mi mamá no estaba, llegamos a los baños, yo estaba seguro que mi vecino me escogería a mí, para entrar con él a las regaderas, pero para mi sorpresa él se metio con Pedro y Ramón; y a mi me mandaron con el güero, por dentro hice mi berrinche, sin pensar decidí provocar al güero, para que me cogiera, entramos al cubiculo que nos asignaron, nos desvestimos, agarramos las cosas para bañarnos.

La verga del güero no se veía tan grande pero si muy ancha, claro nunca había visto una verga en reposo, nos empezamos a bañar, yo me ponía adelante de él para que me viera las nalgas, hasta las sacaba más, trataba que no fuera muy obvio, pero a él no perecía importarle, me agache como 2 veces para enseñarle mi anito, pero su verga nunca se puso dura, todo decepcionado, decidi dejarlo por la paz y acabarme de bañar, nos secamos, vestimos y recogimos todo y salimos rumbo al cubículo donde estaban los otros.

Cuánto que los otros, todavía no se acaban de bañar.

Pero, si ya llevan como media hora adentro.

Si, pero se han de estar cogiendo cariño, jajaja.

Yo no entendía lo que me había dicho, llegamos a la puerta y toco, se tardaron un poco y nos abrio Pedro, que traía una toalla en la cintura, pude ver como Ramón y mi vecino, todavía estaban adentro de la regadera y mi vecino tenía la verga parada, en eso grito mi vecino.

No mames wey, para que abres.

Para que se tardan en bañar y andan de putos jajaja.

Nos metimos a esperarlos, Pedro empezó a cambiarse y a platicar con el güero, no le di importancia a lo que decían, estaba muy celoso, de saber que mi vecino también se cogía a Ramón, cuando salieron de la regadera mi vecino se me quedo viendo y empezó a sonreir, yo estaba muy enojado, se secaron, se vistieron y nos fuimos rumbo a nuestras casas.

Llego el martes, mis cuate y yo, ya no fuimos a entrenar, el miercoles salimos a jugar y también estaban los del otro lado de la calle y nos echaron la reta, les ganamos casi todos los partidos ya eran como las 4:30 de la tarde, se empezaron a meter algunos para ir a comer, ya eramos pocos los de mi lado, ya se habían metido casi  todos, de repente Ramón dijo.

A que no se atreven a meterse a la casa deshabitada.

Casi todos dijieron que no, que si fuera más temprano que si, que mejor lo dejaramos para mañana, pero él se empezó a burlar de todos nosotros, Enrique dijo.

Orale, pero primero entra tú, Ramón se dejo de reir.

Bueno, si entras tu con otro va, luego entro yo.

Chava vamos a demostrarles que no, nos da miedo.

Bueno vamos.

Pero la verdad, yo si me moria del miedo, nos ayudaron a subirnos por el techo, y de un salto nos pasamos al patio, que estaba lleno de tierra y basura, vimos una ventana que estaba medio abierta, mi vecino se arrastro por la tierra para entrar por la ventana, y me grito.

Ya arrastrate, pero primero los pies para que te pueda ayudar.

Yo todavía no estaba seguro de querer entrar.

Ahí voy.

Me tire de panza y me empece arrastrar, senti sus manos en mis pies.

Pon tus pies aquí para que te apoyes.

Me agarro los pies y los puso en una silla y en unos tabiques, apoye los pies, pero sus manos siguieron tocandome cada que yo bajaba hasta agarrarme de las nalgas, ahí se me empezó a quitar el miedo y a sentirme excitado, segui bajando me agarro del pecho y se me pego completamente y senti su bulto, yo por instinto me pegue lo más que pude a él. empecé a temblar, por el deseo de estar con él.

Esperate, deja que los otros nos vean por la ventana y luego seguimos.

Hicimos a un lados las cortinas que estaban gruesas y todas llenas de tierra, nos vieron y nos gritaron.

Que hay.

Vamos a ver, que encontrabamos.

Vente, vamos a ver que hay.

Los cuartos estaban casi todos vacios, eso si llenos de polvo, encontramos platos, tazas casi todas rotas, cazuelas, en un cuarto un colchon medio limpio, en otro una mesita de madera, fuimos al patio de atrás y estaba casi limpio no había basura ni tierra, la puerta estaba completa con todo y vidrios; nos metimos al baño y ahí me empezó a tocar, me besaba el cuello, me agarraba de las nalgas y me las apretaba muy fuerte, yo me quede quieto.

¿Qué tienes?, no quieres esto.

Si pero, pero también te estas cogiendo a Ramón.

Se empezó a reír.

Estas celoso.

Estas loco, si tu y yo no somos nada y además somos hombres.

Aún que me había prometido seguir experimentando con Enrique y aprovechar cualquier momento para coger con él, seguía enojado por que también cogía con Ramón.

No te preocupes ya corte con Ramón y por eso te elegí a ti para entrar aquí.

Y como siempre le creía, lo abrace y él empezó otra vez con el faje, pero más descarado, me levanto la playera y empezó a chuparme los pezones, se empezó a bajar los pantálones.

Hazme una mamada.

Rápidamente me agache y le baje su calzón y me empecé a meterme su verga en la boca, él empezó a gemir, pero en eso nos tocaron, para que nos apuraramos a salir, para platicarles que había adentro.

Te espero como a las 8:00 pm. en la parte de afuera.

Como yo estaba tan caliente.

Sale, nos vemos a esa hora.

Nos apuramos a salir.

Orale, ya entramos nosotro, van ustedes.

Ramón se echo para atrás.

No, ya se hizo tarde, mejor mañana.

Enrique se empezó a burlar de él.

Pinche maricon.

Y pensé entre mí, no los maricones somos nosotros y me empecé a reír.

Ramón se fue corriendo a su casa y cada quien se metio a su casa, yo entre a mi casa pensando, ahora como le hago para pedir permiso y desaparecerme un rato, despues de mucho pensar.

Oye má, Ramón me invito a cenar, con su familia a las 8:00 pm..

¿Puedo ir?.

Si, no hay problema.

Gracias.

Me excite mucho, rápido me metí a bañar, salí y me acorde que a mi vecino le había gustado mucho, como me veía con  el short, que me quedaba todo pegado, así que pensé en usar la panty, que le había robado a la vecina, claro el short no, por que me rasparía todas la rodillas, al entrar a la casa deshabitada, espero que esto le guste a mi vecino, acabe de vestirme, me puse un pants y una playera, y me sente a esperar que diera la hora para irme, estaba ansioso o excitado de volver a coger con Enrique, se me hizo eterno, pero por fin dieron las 8:00; me despedi y le dije a mi mamá.

Regreso como a las 9:30.

No, mijito te quiero aquí a las 9:00, si no, ya no te doy permiso en otra ocasión.

Pero mamá, solo es una hora.

Lo tomas o lo dejas.

Esta bien, llego a las 9:00.

Mando a tu hermano por tí, a esa hora.

No te preocupes, Sergio su hermano mayor quedo de traerme y sali corriendo.

Casi al llegar a la casa deshabitada me pare, mi vecino ya estaba pegado a la pared, checo que no viniera nadie de un lado o del otro de la calle.

Apurate.

Junto sus dos manos, para que me apoyara en ellas y me subiera al techo, me subi, luego subio él.

Trata de no hacer ruido, fijate donde pisas, ya cuando entremos traigo una linterna para que veamos y no nos vayamos a caer o cortarnos con algo.

Ok, quien entra primero.

Primero yo, luego tú como en la tarde.

Orale.

Se empezó a meter y luego yo, aún que traía pants me raspe un poco las rodillas, pero para esa hora ya no me importaba nada, solo pensaba en lo que iba a ocurrir, me agarro de los tobillos y me puso los pies en donde apoyarme para seguirme bajando, me detuvo a medio camino y me empezó a morder las nalga sobre el pants, no era muy duro pero me puso muy caliente, solo fue un rato, acabe de bajar, nos quedamos viendo de frente yo con mi cara de enamorado y el con ojos de lujuría, me empezó a besar el cuello y a morderme las orejas, me quizó besar la boca pero no me deje, no le importo me alzo la playera y me empezó a mordisquear los pezones, y yo baje mis manos para agarrarle su bulto, el cual ya estaba muy grande,me tenía impresionado desde la tarde, me agarro de la mano.

Vente, vamos a unos de los cuartos, para prender la linterna y no se vea por afuera que esta alguien.

Llegamos al cuarto donde estaba el colchon, cerro la puerta y prendio la linterna, él ya había sacudido un poco, había llevado la mesita que estaba en el otro cuarto,  le había puesto una sabana al colchon, nos subimos arriba, dejo la linterna parada y empezamos otra vez con el faje, yo empecé a frotar su verga  sobre el pantalón con frenesí y empezó a gemir de inmediato, me quito la playera.

Hazme una mamada.

Me agache y le desabroche el pantálon y se lo baje y su verga salio disparada, no traía calzones, me la empecé a meter en la boca, le baje el prepucio, el gimio estaba muy sensible, primero solo me metí el glande, se lo apretaba con mis labios, lo hacía de forma rápida, ya estaba llena de liquidos preseminales.

Él solo gemía aghh, aghh, siiii, siii, que rico, humm, mejooor que Ramón.

Me dieron otra vez celos y me pare un momento, él se empezó a reir un poco.

Mejor acuéstate.

Se tiro boca arriba y se quito los pantalones, me acosté entre sus piernas y empecé otra vez con la mamada, me la metia hasta la mitad, lo hacía de forma rápida, él me agarro de la cabeza y me la metía como si me estuviera cojiendo, y gemía.

Si, asi si, que rico me la mamas, humm, humm.

Pare la mamada, para escupir su presemen y la saliva que se había acumulado en mi boca y para tratar de metérmela toda, me arrodille a un lado de él, le di unas mamadas a su glande y empecé poco a poco a metérmela, metía un poco y me paraba para que no me dieran ganas de vomitar y hacía como si pasara saliva para que él sintiera la sensación de que le estaba apretando, él agarro la linterna para ver como, poco a poco, me metía toda su verga me faltaron solo como dos cm. pero ya me estaban dando muchas arcadas y él ya casí se venía, saque toda su verga de mi boca.

Guauu fue genial ver, lo que hiciste.

Dejo la linterna en el suelo y se arrodillo conmigo y me empezó a mordisquear los pezones, bajo sus manos para bajarme el pants, al sentir la textura de la panty, solo bajo el pants, agarro de nuevo la linterna para ver que era, lo que traía puesto.

No mames, te ves muy bien.

Y me acostó boca abajo, me quito los zapatos y los avento, luego me quito el pants, lo avento a la mesita, me empezó agarrar las nalgas sobre la panty en forma casi salvaje, me lengüeteaba el cuello, metió su mano para agarrarme la verga, pero la verdad no la tenía muy grande, pero si estaba todo mojado.

Me abrió las piernas y se acosto entre ellas, hizo a un lado la panty y me empezó a mamar el culo, me lastimaba con el resorte de la panty, por que me lo jalaba muy duro, pero la verdad no me importaba, lo estaba disfrutando mucho, yo estaba muy excitado y muy sensible, sentía como se colaba el aire por la casa pero como era verano se sentía muy rico, él seguia mamándome el culo y trataba de meterme dos dedos, lo cual logro muy rápido, yo solo gemía.

Humm, humm, humm, si metemelos más duro, más duroo, sii, sii.

Esto lo prendio más.

Parate, me pare y él se acosto boca arriba, subete encima de mi, puse mis rodillas una a cada lado de él, poniendo mi culito sobre su verga, me acosto sobre él, agarro su verga, me hizo a un lado la panty

.
Esperate un rato.

Para que, ya te quiero coger.

Le agarre las manos con mis manos y se las puse arriba en la cabeza, me levante un poco y con unas de mis manos, meti la panty entre mis nalgas y acomode su verga en ese lugar, solos nos separaba un pequeño trozo de tela, me eche saliva en los dedos y se la unte en su verga, y empecé a hacerme para adelante y para atrás de forma rápida, yo empecé a sudar y a él le salia mucho  liquido preseminal, eso ayudo para que resbalara más y él sintiera como se abrían mis nalgas cuando me hacía para atrás y apretar su verga cuando me hacía para adelante.

Acomode mis manos debajo de sus axilas, para que me pudiera apoyar mejor, él alzo sus manos y me agarro de las caderas para ayudarme a frotarme su verga entre mis nalgas, me empece a mover más rápido y luego más lento, el solo gemía.

Humm, humm, más duro, ya no aguanto, ya no aguanto.

Se levanto sin avisarme y casi me tira, pero me acosto boca abajo otra vez, gire la cabeza para mirar que hacía, agarro la panty y la jalo muy fuerte, hasta que se rompio, hasta me saque de onda, agarro la linterna y se la puso en la boca, me abrio de piernas se puso en medio de ellas, se echo saliva en los dedos y se la embarro en su verga, puso la punta en mi anito y se dejo ir todo, yo solo sentí un poco de dolor, pero después de un rato me calente otra vez y le pregunte.

¿A quién prefieres a Ramón o a mí?.

No mames a ti wey, es que estas muy rico, humm, además a Ramón, no le entra toda mi verga y tú te la tragas hasta los huevos, es fantastico ver como te entra.

Puso sus manos a la altura de mi pecho y empezó con el movimiento de sacar y meter pero de forma lenta, yo estaba que ardía quería que me diera más duro, acomode mis pies en la pared y levante las nalgas, agarre el ritmo que tenía él, solo se escuchaban nuestro gemidos y los resortes del colchón.
Depués de un rato, yo quería que me cogiera más rápido, me desesperaba que no me podía mover a mi gusto, así que me apoye en mis manos y me eche para atrás, para quedar de perrito, pense ahora si a disfrutar de lo lindo, pero él seguía con un ritmo lento, disfrutando como entraba su verga en mi ano, me la sacaba toda y me ponía de nuevo la cabeza y me la clavaba de forma lenta, la siguiente vez que me la saco, al sentir la punta de su glande en mi ano, yo mismo me eche rápido para atrás, pero me agarro de las caderas con sus manos y otra vez me la sacaba toda, y me decia.

Pideme que te coja más rápido.

No seas malo ya cogeme bien, andale por favor.

El solo se empezó a reir, y si me empezó a dar con todo, solo se oían el ruido de nuestros cuerpos chocando, estuvimos como 10 min. así, él llevaba el ritmo de la penetración, yo me podía mover con toda libertad en esa posición, deje caer mi torso y con mi mano me agarre mi verguita y empecé a frotarmela, cuando sentí que él ya se iba a venir, por que me empezó a dar más duro y empezó a gemir más, yo también logre venirme un poco después, nos dejamos caer en el colchon el todavía largándome sus chorros de semen dentro de mí, yo contrayendo mi esfínter por que me estaba viniendo también, quede todo embarrado de la mano, pero fue grandioso.

Fue la primera vez que teníamos tiempo de disfrutar de ese momento, después de varias veces que lo habíamos hecho, todo era a las carreras y si era muy caliente y cachondo, pero este momento si lo estaba disfrutando más, sentía su verga todavía palpitando en mi culo, me sentía lleno de él, sentía mariposas en la panza, se bajo de mí y fue al baño para orinar.

En ese momento de paz, me asuste de mis reacciones, no se que me había pasado, lo había disfrutado mucho, además no quería aceptar que me gustaba la verga, sentí ganas de ir al baño, para sacar todo el semen que tenía adentro, él regreso y me pare y me fui para el baño, como pude me quite lo que quedaba de la panty y lo tire a un lado la regadera, la cual no servía, pero el lavabo si, agarre un traste tirado, deje correr el agua un poco para que saliera toda la agua sucia, limpie el traste lo mejor que pude y lo llene de agua, me fui ala regadera y me puse como si fuera a defecar y me empezó a salir semen y un poco de excremento, me lave con el agua y regrese con mi vecino, el se había acostado otra vez.

Vente acuéstate un rato.

Me acosté de frente a él, y me empezó acariciar otra vez, pero esta vez de forma tranquila, pasaba sus manos por mis piernas, por mis nalgas, me apretaba los pezones, yo me empecé a calentar otra vez y él también, ya que se le empezó a parar la verga otra vez, se la agarre y lo empecé a masturbar otra vez pero tranquilo.

Te quiero coger otra vez.

Pero ya es tarde, quede de regresar a mi casa, a las 9:00 pm..

No te preocupes todavía falta media hora.

Bueno, pero la verdad ya me duelen las rodillas.

Solo date la vuelta.

Quedamos de cucharita, me puso su verga entre mis nalgas y mis piernas y se empezó a mover como si me la estuviera metiendo, y me empezó a besar el cuello y apretar mis pezones, yo le agarraba una nalga y lo apretaba más a mí, luego de un rato me separo un poco de él, se ensalivo la verga, se acomodo y me la empezó a meter poco a poco, yo sentía que estaba en el paraíso, sentía como entraba y apretaba mi esfínter para que lo sintiera más, me penetro completamente y se empezó a mover pero lento, puso su mano en mi cadera para llevar el ritmo, la posición no nos permitía más o todavía no nos acomodábamos, empezamos a gemir los dos.

Después de un rato trate de moverme más, así que me separe un poco y apoye mi pierna en la pared y él se separo un poco más y se acomodo mejor y me empezó a dar más duro, estuvimos como 2 min. así me la saco y se vino en mis nalgas, me esparcía su semen con su verga, agarre un poco y me lo lleve a la boca y ya no me era tan desagradable y me lo comí, nos paramos los dos y nos fuimos al baño para lavarnos lo mejor posible, todavía jugueteamos con el agua un rato, nos vestimos y nos salimos de la casa con cuidado el bajo primero y me ayudo a bajar; como quedaba un lugar que no le daba la luz entre casa y casa, me llevo para allá.

Lo volvemos a repetir mañana.

No puedo, que le digo a mis papas.

Pues, que te invite yo a cenar.

No, por que mis papas, pueden empezar a sospechar otra vez,  que tu y yo tenemos algo.

Es que, quiero estar otra vez así contigo.

Me acorde en ese momento, que mis padres tenían el sábado una fiesta y como a mí casi no me gustaban a veces me encerraban y me dejaban solo.

Bueno, te espero el sabado a las 9 pm. en mi casa.

Nos fuimos cada quien a su casa, llegue y mi mamá me empezó a preguntar.

¿Comó estuvo la cena?.

Muy ric mamá y sabrosa.

Claro lo deje en doble sentido jajaja.

Que bueno, que la pasaste bien.

Bueno ya me voy a dormir, por que estoy muy cansado, hasta mañana.

Se me hizo eterno que llegara el sábado.