Mis inicios con Papá
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por max4_5.
Hoy tengo 28 años, soy gay y llevo una vida medianamente normal por así decirlo. Desde siempre me atrajeron los hombres, recuerdo que desde el segundo jardín ya miraba a los profesores con cierto gusto. Imagínense que desde los 5 años ya cargaba con alguna gana (por decirlo de alguna manera) de hacer algo con un hombre.
Al llegar a los once años, mientras dormía sentí que llegó mi viejo, eran como las 6 a.m, borracho. Entró a la casa, fue al baño, se bañó y salió desnudo. Así como estaba, desnudo, entró a mi cuarto, me pidió que apagara la luz y se fue al suyo. Me quedé un buen rato con la imagen desnuda de mi viejo en la cabeza, jamás lo había visto completamente desnudo. No era un tipo marcado, cuidado ni nada que se le parezca, era (y hoy en día es) un tipo robusto más no gordo, 1.70 cabello corto tipo militar, lampiño como yo, con cara de macho com me encanta.
En ese instante empecé a imaginar situaciones y me decidí a ir hasta su cuarto. Dormían completamente mis viejos, tapado él sólo con la sábana. Roncaban a más no poder y eso me dió confianza para acercarme sin hacer ruido. Prendí la tv para ver si despertaban y me serviría de excusa para lo que quería hacer.
Ninguno de los dos se enteró de la tv, mucho menos de mi. Me paré a la par de mi viejo, hice como por despertarlo pero seguí roncando. Entonces me arrodillé y muy lentamente fui corriendo la sábana. Estaba en bolas!, el corazón me latía a mil. Corrí bien la sábana y empecé a masajear su bulto que estaba dormido. Admiré sus bolas colgando, sus piernas. Estuve un buen rato masturbandolo hasta que empezó a endurecercele la pija. Ahí la admiré mucho más ya que era inmensa, gruesa, venosa, cabezona (hoy en día me di cuenta que aunque está bien dotado mi viejo, la impresión de inmensa fue porque mi manita todavía era pequeña).
No aguanté más y muy despacio fui inclinando mi cabeza hasta tocar mis labios la pija. Le di unos besitos y al ver que no pasaba nada la meti en mi boca. Después de unos minutos tomé más confianza y ya se la chupaba descaradamente. Le lamía las bolas mientras su pija palpitaba. Me desquité chupando esa pija por todos esos años de deseo que tenía desde niño.
No aguantaba más y se la chupé de despedida. Lo tapé nuevamente con la sábana, apagué la tv y me fui de una al baño a masturbarme. No lo podía creer!, chupé una pija y que pija!, la de mi viejo!!!.
Después de esta situación seguí aprovechando del cansancio y algunas borracheras de mi papá. Siempre que veía que estaba extremadamente cansado o borracho yo hacía lo mío!. Creo nunca se dió cuenta o al menos nunca me miró diferente ni me dijo nada al respecto. De todos modos hoy me parece raro que nunca se haya despertado aún teniendo la pija a mil!. Pero bueno mejor!.
Esto marcó mi vida completamente, ya que ahora me gustan los hombres mayores, robustos o gorditos más no flaquitos. Me encantan bien maduros!.
Espero no haberlos aburrido con este mi primer relato, ya que es un poco extenso y no hay penetración, pero es lo que me pasó. Espero comentarios, buenos o malos con respecto al menos a la redacción ya que las situaciones no fueron inventadas, totalmente reales.
Gracias por leer!.
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