NOS PILLÓ PAPÁ TONY I
Primera vez de mi amigo Roberto con su padre.
Esta es la primera parte de dos, es una historia completamente real.
En una oportunidad, en mis años de secundaria, me quedé en casa de un compañero de clases, él y yo conversábamos de cualquier cosa, incluso, él sabía bien mi gusto por los hombres, y aunque él no había tenido experiencias homosexuales, siempre había mantenido la posición de que si se daba, estaba dispuesto a disfrutar todo lo que se pudiera hacer.
Ese día nos reunimos a estudiar inglés y dibujo técnico, yo lo ayudaba con inglés y él me explicaba cómo hacer unos dibujos que para mí eran imposibles.
Resulta que después de estudiar, comimos, nos pusimos a ver películas, como era viernes y tanto él como yo teníamos uno ropa en casa del otro, no había problema.
Pero cuando llegó su papá como a las 20h00, nos fuimos a su habitación, porque era la hora en la que pasaban una novela que veían el papá y la mamá en la sala, como Roberto tenía televisión en su cuarto y un VHS, no nos complicamos.
Después de la novela, los viejos se quedaron viendo el noticiero estelar y después de terminar se fueron a dormir. Nosotros seguíamos viendo películas en el VHS, Roberto había hecho una adaptación para conectar dos audífonos y así no tener problemas con el volumen.
Después de ver una de las de la saga de Hellriser, Roberto sacó una película porno que había conseguido por medio de un vecino suyo. Ese vecino siempre nos conseguía películas de adultos y nosotros las disfrutábamos juntos, a Roberto siempre le gustaron las pornos donde salían las mujeres tetonas, eso lo volvía loco, pero el vecino siempre nos daba las películas como si de algo clandestino se tratara, por supuesto, no es correcto darle eso a menores de edad. Lo que no sabíamos, era que la película era orientada al público gay…
No se imaginan la cara de Roberto cuando en la primera escena ve a dos hombres besándose, acariciándose y que uno le estaba metiendo los dedos en el culo al otro… Jajajajaja… Me acuerdo y me da risa, aunque en ese momento él estaba rojo de la vergüenza, le daba pena conmigo porque una cosa era que supiera lo mío, y otra, muy distinta, que viéramos esa película.
Yo estaba de lo mas tranquilo, a diferencia suya. Que lo veía incómodo y hasta inquieto.
Puse pausa al VHS y me quité los audífonos, le quité uno y le pregunté:
¿Qué coños te pasa?
Marico, tengo pena…
¿Por qué pues?
Ay… Ven, vamos a salir con cuidado al jardín, y mientras nos fumamos un cigarro te cuento. ¿Tienes? ¿O saco de los míos?
Saca de los tuyos.
Si va…
Salimos al jardín y nos pusimos a fumar. Sus padres sabían que fumábamos y no decían nada, siempre que no fuera dentro de la casa.
Verga Alfonso, vas a pensar que estoy loco pana.
¿Por qué? ¿Por la película? Normal marico, no te compliques la vida por eo, cero rollo, cero estrés.
Es que… Dijo bajando la cara…
¿Qué pasa? Habla conmigo loco…
Pues… Es que… Me puse a ver eso y… Me imaginé cosas… Contigo…
Jajajaja… ¿Quieres probar?
Ahorita, ahorita, ya se me bajó la calentura, pero sí…
Ajá… ¿Y cuál es el peo?
Que eres mi mejor amigo, te quiero mucho y te veo como un hermano…
Ya va… Eso no es impedimento para tener sexo.
Para mí sí, porque no quiero dejar de ser tu amigo.
Tranquilo, eso no va a pasar, además, tú me dijiste que tuviste sexo con Natalia, tu prima, ¿dejaron de ser primos?
Ehhh… Eso no pasó…
¿Cómo así?
Así, no pasó, porque no he tenido sexo con nadie, sólo lo dije porque me sentía que estaba «fuera de onda», todos han tenido sexo menos yo, pero sé que tarde o temprano lo tendré, lo que sí quiero es que sea algo especial, que luego recuerde como algo bonito, no sé sí me explico.
Claro que sí. Y tranquilo, no te compliques ni te enrolles, podemos tener sexo, incluso con tu papá, si quieres, lo que hay es que hacer que él crea que se le ocurre la idea.
¿Qué? Eso es muy loco, hasta para tí, ¿en qué cabeza cabe eso de un padre con un hijo? No, eso no es correcto. ¿Mi papá? Te volviste loco, de pana.
Uno no sabe las oportunidades que se presentan, pero por ahora, vamos, sigamos viendo la película, que le queda un buen rato todavía, y después, bueno, lo hacemos… Sin rollo. Tú y yo, mientras, yo me imagino que tu papá está con nosotros, jajajaja…
Eres un enfermo de mierda, pero te quiero como no te imaginas. Es más te amo, y me dio un beso breve en la boca.
Yo lo que le dije fue:
Aaaaaay mariquita… Jajajaja… Así no se besa, ven acá y te enseño…
No, cochino, jajajaja… Vamos a ver la película, a lo mejor me animo y me dan ganas de practicar lo que veamos, total, sería como si estuviera teniendo sexo con un hermano mío. ¿No?
Jajajaja… Sí, pero hagamos silencio para que no se despierten tus papás.
Cuando entramos, la puerta del cuarto estaba entreabierta, nosotros la habíamos dejado cerrada, entramos y nos encontramos con Antonio, el papá de Roberto.
A nosotros nos iba dando una vaina, nos había descubierto que estábamos viendo una película porno y para colmos de males, una película para público homosexual.
La que se armó! Pensé yo…
El señor Antonio se levantó, nos miró, nos abrazó y nos dijo al oído: Mañana hablamos, cuando Marta no esté. Si van a terminar de ver eso, véanlo, no hay problema, pero recuerden que tenemos una conversación pendiente. Nos dio un beso a cada uno en la frente, nos soltó y se fue a su cuarto.
Se nos cortó el morbo de la película, apagamos todo y nos dormimos. A la mañana siguiente, nos despertamos y la señora Marta estaba haciendo el desayuno.
Buenos días niños, ¿descansaron? Estoy haciendo el desayuno rápido porque tengo que ir donde mi mamá, y son dos horas de carretera.
Buenos días mamá… Bueno, le das saludos a la abuela.
Por cierto Roberto, ¿hiciste la maqueta que mi mamá te pidió?
¿Maqueta?
Ay… No… Contigo no se puede… Mamá te pidió una maqueta de la casa, tipo casa de muñecas.
Ah… E…sa… Ya me acordé. No está terminada, porque me falta lo que es de tela y con eso no me doy. La tengo en el garage en una caja.
Bueno, yo vuelvo el lunes temprano, déjala fuera antes de irte al colegio. Y yo hago lo de tela.
OK.
Vayan a cepillarse los dientes y quitarse las lagañas que ya esto está. Antonio… ANTONIO…
VOOOOY… ¿Qué fue?
Ya el desayuno está, ayuda a poner en Los platos que voy tarde y aún no me he puesto la ropa para irme. Dios, lo tarde que es y yo aun estoy en pijamas… No, no, no…
Ok.
El Sr. Antonio (Tony) o papá Tony como le decíamos los amigos de Roberto salió del cuarto usando unos boxers holgados de algodón donde era imposible esconder una tienda de campaña bastante prominente.
Anda a ponerte algo, por Dios, una cosa es que salgas así cuando estamos solos, otra cuando hay visita. Le dijo la señora Marta.
Jajajaja no creo que Iñaki se avergüence de que yo ande cómodo en mi casa. Además, él no es visita, practicamente vive aquí, y es como un hermano para Roberto, incluso, yo soy Papá Tony, ¿Verdad Inazio?
Jejeje… Exactamente.
Bueno, ya yo comí, me visto y voy saliendo, Dios, lo tarde que es… cuídense mucho y nos vemos luego. Por favor Roberto,..
Sí mamá… LA MAQUEEEETA…
Eso mismo. Tenla aquí el lunes para que yo le haga los detalles que le faltan.
Oooook ma…
Besos, los quiero mucho…
Cuando la señora Marta terminó de arreglarse y se fue, terminamos de comer, Papá Tony nos ayudó a lavar los platos y colocarlos en su lugar. Luego nos dijo:
Tenemos una conversación pendiente, me voy a dar un baño y vengo a conversar, esas cosas hay que hablarlas, y hoy es el día.
Papá, lo de ano…
Shhhh… Nada, ya hablé. Vayan acomodando el cuarto que seguro lo tienen vuelto un desastre, y pensando en lo que me van a decir. Sentenció Papá Tony con un tono y un semblante que nos puso a temblar.
Se metió a su cuarto, nosotros al de Roberto, comenzamos a acomodar la cama y recoger el reguero, unos cinco minutos después oímos la ducha.
¿Y ahora? ¿Qué le vamos a decir a mi papá? Preguntó Roberto casi susurrando.
¿De qué hablas? La verdad. ¿Qué otra cosa podemos decirle? Que esa película te la prestaron, pero como es una copia, no tiene carátula y no teníamos idea de qué iba. Fue lo que se me ocurrió decirle.
Ajá, pero ya iba más de la mitad. ¿Cómo hacemos ahí? Porque si vimos desde el inicio que era una película gay, teníamos que haberla quitado. Aclaró Roberto.
Bueno, pero sentimos curiosidad. Total, somos adolescentes. No creo que se haga un problema más grande de lo que te estás imaginando Roberto, además, a nuestra edad, a lo mejor él también tenía acceso a esas cosas, digo yo…
¿Curiosidad? Iñaki, se vé que no conoces a mi padre. ¿Sabes que puede darme una paliza? Esos temas no se hablan, menos algo como: «Mira papá, voy a ver una peli porno, ah… y es una peli gay».
Ay ya… Deja el drama, además, tu papá no es EL OGRO que tú crees, porque me habría metido en el carro, me llevaba a la casa y les hubiera armado un escándalo a mis padres.
Bueno, sí…
En eso salió Papá Tony de la ducha. O por lo menos lo oímos cerrarla. Ya nosotros habíamos acomodado el cuarto, rebobinado la película y estábamos en la sala.
Unos minutos después salió completamente desnudo de su habitación, secándose el cabello todavía.
¡PAPÁ! Gritó Roberto.
¿QUÉ?
Estás desnudo…
¿Y? ¿O sólo los de las porno pueden estarlo? ¿Acaso no me veo bien como para andar en cueros?
En aquel tiempo Papá Tony tendría unos 43 años, blanco, casi que como un papel, rubio, cabello largo hasta los hombros, rizado y echado siempre hacia atrás, ojos verdes botella, 1,80 de estatura, siempre fue de entrenar en el gimnasio, pero no competía porque se rehusaba a depilarse, tenía mucho vello rubio, muy tupido, por todos lados, brazos, espalda, pecho, abdomen, piernas, verga, la cual a esa edad ya yo podía comparar y en reposo se veía como de unos 20 de largo y unos 10 de circunferencia, circuncisa, cabezona y un montón de venas que se le notaban a leguas por la tonalidad tan blanca de su piel, las bolas parecían dos mandarinas metidas en un saco de piel lisa y sin vellos y las nalgas eran muy peludas. Podría ser un hombre lobo rubio, porque hasta barba tenía. De verdad estaba increíblemente bueno el condenado. Lo peor es que estaba consciente de eso y se movía de manera provocadora delante de nosotros, sin reparo alguno.
Roberto, en ese entonces era de mi estatura, los dos medíamos 1,50, y teníamos 14 años. Cuando nos «estiramos» el más alto resultó siendo él, llegó a la estatura de su papá y yo apenas mido 1,62. Yo, siempre fui «el mono» de mis amigos, porque me comencé a desarrollar a los 8 y ya a los 14 tenía vellos por todos lados. Pero no nos desviemos…
Roberto tenía el cabello castaño claro, podía decirse casi rojizo, el tenía vellos sólo en las axilas y en la verga. las bolas, igual de lampiñas que las de su padre, ya se veía que tenía la genética muy marcada, si no fuera por el tono de cabello parecería un clon perfecto de Papá Tony, ellos siempre entrenaban, Papá Tony se levantaba a las 4h00 a hacer flexiones y abdominales y levantaba a Roberto para que los hiciera con él, luego se iban al gimnasio, a las 5h00, de ahí iban a desayunar en alguna panadería, ya bañados y vestidos, pasaba dejando a Roberto por el colegio y se iba a su trabajo. Luego del trabajo, Papá Tony volvía al gimnasio y de ahí era que iba a la casa, por eso mantenía ese cuerpazo y Roberto también, tenía un cuerpo bien trabajado, pero acorde a su edad, lo cual le hacía muy llamativo.
¿Y entonces? ¿Van a responder o van a estar ahí viéndome nada más? Preguntó Papá Tony.
¿Qué cosa? Preguntó Roberto como si lo acabaran de aterrizar.
¿Acaso no me veo bien como para andar en cueros? Repitió mientras daba una vuelta con los brazos extendidos hacia los lados.
Roberto dijo: ¡WOW! ¡QUE BUENO ESTÁS!
Jajajaja… ¿En serio? Y tú no estás nada mal nene Has sacado mi genética, y los entrenos se notan a leguas ¿Qué dices tú Iñaki querido? ¿Te gusta mi cuerpo? ¿Te gusta el cuerpo de tu hermano Roberto también? ¿Prefieres uno más que al otro?
Yo estoy de acuerdo con los dos, los dos están como pedidos por catálogo. Y con los dos me quedo.
Jajajaja… ¿Hablas en serio? Dijo Papà Tony.
Totalmente, ahora veo de dónde sacó Roberto lo que guarda entre las piernas.
Jajajaja… ¿Cómo es so? ¿Está bien dotado mi cachorro? ¡Que alegría! ¿Ya la tienes como la mía hijo? A ver…
Pe… Pero… Pa…
Jajaja… Tranquilo que estamos en familia hijo. Y quiero decirles algo,¡Gracias! En verdad gracias muñecos, me alegra saber que aún despierto pasiones. Ahora, se me ocurre algo, ya que estamos solos, ¿por qué no se dan un baño ustedes y nos quedamos los tres desnudos? Porque el día está como caluroso, es más, podemos darnos un baño en la piscina desnudos, sin rollo, pero más tarde.
Yo sin pensarlo dos veces me quité el polo que cargaba puesto y el short, conjuntamente con el slip, quedando completamente desnudo, de no ser por los zapatos que aún estaban atados. Roberto me miraba atónito y me dijo:
¿Qué haces?
Haciendo caso a lo que dice tu papá pues…
¿Te da pena que tu viejo te vea desnudo hijo? Preguntó papá Tony. Mira, ya Inazio se encueró… Pero… Si te incomoda, pues… No hay mal rollo, yo me voy a la habitación, y me visto, además de retirar lo que propuse de pasar el día en cueros, sé que no es fácil de entender, y puedo esperar a que estés listo, aún eres muy crio para estas cosas, por lo que veo. Dijo Papá Tony en un tono muy convincente.
No, no te vayas papá, tapoco te vistas… No es eso… Es que… Dijo Roberto enmudeciendo de pronto con el rostro rojo como un tomate de la vergûenza.
¿Qué? ¿Te incomoda la desnudez? Ayer estaban viendo una porno gay, y no la detuvieron precisamente cuando comenzó, ya estaba bien adelantada cuando entré al cuarto. Es más, anoche escuché lo que hablaban cuando salieron a fumar. Y de verdad, no me parece ni escandaloso, ni reprochable, ni mucho menos. ¿Te gustan los hombres? ¡Bien! ¿Te gustan las mujeres? ¡Bien también! ¿Te gustan ambos? ¡Saliste a mí! Es más, el sexo no se practica vestido. Y no hay nada de malo en que la primera vez, sea como tú quieres, como algo bonito, especial, sentirte querido y amado. ¿Y quién mejor que nosotros para poder darte esa hermosa experiencia hijo? Dijo Papá Tony al tiempo que se aproximaba a Roberto, quien temblaba ante la desnudez de ese portento de macho que tenía en frente, su propio padre, y así, desnudo y todo, ya lo estaba abrazando al finalizar de hablar, impregnando no sólo su piel, sino tambien su alma con su esencia de hombre.
¡PAPÁ! Exclamó Roberto intentando soltarse de ese abrazo del licántropo dorado que le había dado la vida.
¿Qué pasa? Es mejor que te lo diga yo, de frente, SOY BISEXUAL, no me avergüenzo, no tengo por qué ocultarte eso y no quiero que después te enteres por alguien más sin saber las intenciones que tengan al contarte. Ojo, esas cosas no las sabe tu madre, yo siempre he mantenido esas aguas muy aparte. Ni los hombres con quienes he estado han conocido nada de mi vida familiar, ni tampoco pienso hablar eso con Marta. Sería un golpe muy fuerte. Por eso, si ustedes desean estar juntos, compartir sexualmente, no me opongo, es parte de la vida misma, y sí, yo he hablado con el papá de Iñaki, él me habló de cuando fue su iniciación sexual, me contó algunos detalles, y creo que es bueno que yo funja ese rol también contigo.
Yo levanté una ceja, pensando en que de pronto Papá y Papá Tony eran amantes y por eso le había contado, pero me cayó como una sorpresa desagradable que él, quien siempre me había reforzado no hablar con nadie fuera de la familia al respecto, anduviera revelando esos detalles. Que cagada, pensé.
Bueno, vayan a ducharse, que el día avanza.
Nos fuimos a bañar y Roberto me dijo:
Estoy apenado…
¿Por qué?
Por el espectáculo de mi papá, desnudo completamente.
En mi casa eso es lo normal, siempre andamos desnudos.
¿En serio?
Si, es algo natural y es más cómodo.
Pero… ¿Si llega visita?
Nos vestimos, y listo.
Hummm… ¿Crees que escuchó algo de lo que hablamos de verdad? ¿O será que está pescando a ver qué le decimos?
Mira Roberto, no sé, ya veremos.
Ok.
Terminamos de bañarnos, nos secamos bien y salimos completamente desnudos, Roberto iba con las manos delante, cubriéndose.
¿Listos?
Sí. Respondimos al unísino, yo con naturalidad, y Roberto con la mirada al suelo.
Ok, vengan al sofá, quiero hablar con ustedes de cosas importantes.
¿Qué cosas? Preguntó Roberto sin moverse de donde estaba a unos dos metros del sofá.
Vente, no tengas miedo, dijo Papá Tony dando palmadas en el asiento del lado derecho del sofá. Ya yo estaba a la izquierda, con las piernas recogidas esperando a ver…
Roberto, a regañadientes, se acercó. ¿Qué quieres hablar?
Quiero que me respondan algo:
¿Por qué mentir sobre haber tenido relaciones sexuales cuando aún no se ha dado el momento especial que se espera para luego recordarlo como algo bonito?
Nuestros ojos se abrieron como las puertas de una iglesia llamando a misa, sí había escuchado.
Ehhh… Bueno… Yo… Titubeó Roberto.
No es necesario, dí que no has hecho nada y punto. No hay por qué apenarse al respecto hijo.
No es pena, sino ganas de encajar, y como todos hablan de sexo, sus experiencias, yo no quería quedar fuera de contexto, no sé si me explico. Dijo Roberto mientras avanzaba tímidamente con paso lento hasta el lugar que le había indicado su padre junto a él.
Jajajaja… Entiendo perfectamente, así mismo empieza la «fama» entre amigos, pero ya sabes, si no haces nada, no tienes por qué avergonzarte, ¿Te matas a pajas? ¡ES NORMAL! Ahora, muchos de los que presumen de lo que hacen, jamás han hecho nada, porque lo que haces, no lo publicas, salvo que no seas lo suficientemente hombre como para disfrutar y callar. Ahora bien, continuó Papá Tony, agarrando sus cojones con una mano y con la otra sobando su verga casí completamente eracta y que empezaba a emanar precum ¿Qué les causó más morbo de lo que vieron en la película hasta donde corrió?
Jajajaja… Todo, le dije.
Excelente, ¿y a ti Roberto?
Muchas cosas, pero, no sé…
¿Qué es lo que no sabes?
Si lo disfrutaré.
¿Quieres intentarlo?
¿Qué cosa?
Tener sexo
¿Con quién?
Con nosotros, no va a ser con el perro del vecino. Jajajaja… ¿Tienes en mente otra posibilidad inmediata?
Pero… Pe… Papá…
Iñaki aprendió con su papá, y con su abuelo, cuando tenía 9. Así que… Tranquilo y relajado hijo. En tu caso, estarías conmigo, que soy tu papá, e Iñaki, que es como un hermano para ti, de nosotros, no va a salir. Por cierto Iñaki, el motivo por el que sé esas cosas tan íntimas es porque Maren me contó porque yo le dije que quería iniciar a Roberto pero no tenía el valor para hacerlo, él me abrió los ojos a otras cosas, y le estoy agradecido.
Es que… Me da pena hacerlo mal.
No hay bien ni mal, eso es mental, vamos a disfrutar, mira, ya se me está terminando de parar la verga de imaginar tu boca comiéndosela.
¡ES ENORME!
Jajajaja… Deja de taparte y deja que te vea, le dijo. Iñaki no tiene nada de pena al respecto, mira lo duro que está. Y no es ENOOOOORME… Apenas son 23 cm, sí es bastante gruesa, pero es caliente… y va a entrar cuidadosamente en tu culito mi amor. Cuando crezcas, capaz y vas a tenerla igual o más grande que yo.
Sí, ese se pone duro nada más de oír la palabra sexo… Jejeje. Bromeó Roberto
Así dicen, dije sonriendo.
Ven, deja la pena, destapa, que papi quiere ver la verga de su cachorro. Hace años que no la veo.
Roberto retiró tímidamente las manos, y dejó ver una buena verga de unos 17 cm, completamente erecta, ligeramente curvada hacia delante, a diferencia de su progenitor que era recta completamente hacia arriba.
¡DIOS! Pero que hermosura de verga tienes hijo mío. Exactamente igual a la mía cuando tenía tu edad. ¿Cómo decías Iñaki? ¿Ya sabes de dónde salíó la astilla? Pues de este palo, dijo menenando su verga, haciendo que impactara contra su abdómen plano y marcado. ¿Que te parece Iñaki? Me tenía bien guardado el secreto… Jjajaja… Me preguntó Papá Tony.
Con ambos se me hace agua la boca y el culo me hace pucheros. Dije sin reparo, y me acerqué a su pecho para comenzar a mamar el pezón de su tetilla.
Uffff… Que rico, hace tiempo no me comen las tetillas así.
¿Ni mamá? Preguntó Roberto extrañado.
Tu madre no chupa tetillas, no mama verga, no da culo, ni tampoco lo lame. Parece una monja.
¿En serio?
No necesito mentirte… Aaaaaahhh que ricoooo…
¿Estás disfrutando lo que te hace Iñaki? Preguntó Roberto visiblemente exitado y despojado de inhibiciones.
Mucho, ven amor, pégate de esta…
Roberto obedeció, y se pegó a mamar la tetilla de su padre.
Chupa con fuerza cariño, muerde si quieres, hala con los dientes, eso me encaaaaaaantaaaa aaaaaaaahhhh uuuuuufff Diosssssss pervertidossss que rico chupan mis tetiiiiiiillaaaaas…
Yo seguía mamando su tetilla, con los ojos cerrados, y de pronto escucho:
Diosssss hijo, que Dios bendiga to booooocaaaa… Uffff…
Abrí los ojos y ví a Roberto mamando la verga de su padre como todo un experto, no le cabía toda, pero de esos 23 centímetros, por lo menos 16 estaban desaparecidos dentro de la boca de mi mejor amigo.
Así mi niño, mama la vergota de tu papi mi príncipe. Dale, sigue asíiiii… Uffff. ¿Te gusta amor?
Humjum, respondía Roberto con la boca llena.
Uffff… Que ricoooo… Pero me vas a hacer acabar, y no quiero todavía… Quiero darte por el culito mi niño hermoso… Vamos al cuarto mis amores.
Nos levantamos del sofá y nos fuimos al cuarto principal, nos metimos en la cama y Papá Tony nos dijo que nos acostáramos pegando nuestras nalgas, así nos pusimos y él comenzó a mamar nuestras vergas al mismo tiempo, uuuuufff… ¡Que boca! Se notaba la experiencia.
Roberto fue el primero en correrse diciendo:
Papá… Papi… Creo queeeee…. Aaaaaahhhh… Aaaaaaahhh… Uffffff… Hummmm…
Su padre bebió hasta la última gota de su hijo y cuando la verga de Roberto perdió dureza, siguió con la mía hasta hacerme explotar. Yo le tomé la cabeza con mis manos y lo empujé hasta el fondo.
Uffff… Ahí vooooooy… Aaaaaahhh… AAAAAAAAHHHH… QUE RICO…
Él volvió a tragar y dejar bien limpia mi verga, igual que a su hijo, después nos dijo que nos pusiéramos en posición de perrito. Roberto dijo que primero él, y así fue, yo los veía mientras y me masturbaba mientras Papá Tony le comía el culito a Roberto, sacándole gemidos de placer a la vez que le hacía cosquillas con la barba. De pronto Roberto soltó un quejido. Su padre le había metido un dedo, se lo dejó dentro, y siguió lamiendo, comenzó a mover lentamente, hasta que el dolor le fue pasando para después meter otro, volvió a quejarse, pero no decía que no quería más, entró un tercero, ya Roberto se había imaginado eso y no se quejó.
Hijo, que rico dilatas… Me vuelve loco tu culo. Te voy a coger, aguanta como el macho que eres mi amor.
Si papi.
Cuando introdujo la cabezota Roberto suspiró y se tensó.
Calma amor, calma, respira, vamos, aún falta carne para ese culito hambriento, vamos, tú puedes amor mío.
Roberto relajó un poco más y su papá aprovechó metiendo la mitad.
Papi… Duele…
Si mi vida, papi tiene un monstruo de verga, pero tu no te quedas atrás, ya vas a ver que te cabe completo, afloja mi cielo, para terminar de clavarme en tí, anda, hazlo por mi, por tu papi amado.
Roberto respiró varias veces y cuando relajó, de un solo empujón entró la verga de su papá, ambos pares de bolas hicieron contacto, vi que la verga se le puso durísima y babeante, aproveché que Roberto se irguió, y me coloqué delante de él para empalarme en esa verga. Cuando sintió que estaba toda dentro no lo podía creer, me fui moviendo y Roberto gemía de gusto, llegó a un punto donde él marcaba el ritmo de la cogida, 30 minutos después, lo oí decir:
Mierda, voy a acabar otra vez…
Préñame, le dije.
Yo también voy a acabar nene, ¿te preño a tí?
Si papi…
Te amo nenéeeee… AAAAAAAHHHHHH…. Uuuuuufffff… AAAAAAhhhh…
Yo los amo a los dooooooosss… AAAAAAAAhhhhh… AAAAAAHHHH…
Así padre e hijo acabaron, Papá Tony en el culo de su hijo, y Roberto en el mío…
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