NUNCA IMAGINE QUE ALGO ASI PODRIA LLEGAR A PASAR

El reclamo que pensaba hacerle al mensajero por su tardanza, se convirtió en deseo .
Tenía días esperando mi mensajería, y este día, ya desesperaba porque me habían dicho que mi paquete llegaría a las 6 de la tarde y ya iban a dar las nueve de la noche y nada.

Yo furioso, ya sabrán, había preparado todo un discurso para soltárselo en la cara al mensajero apenas llegara.

En cuanto sonó el timbre, salí volando a recibir mi paquete, pero con más ganas de soltarle una letanía de reclamo por la tardanza que otra cosa.

Pero al abrir la puerta me quede helado, todo mi discurso se fue volando, el chico mensajero estaba de lo más way, ufff.

Todo en mi mente se nublo, no atinaba que hacer ni que decir, solo quería quedarme ahí, contemplándolo, de repente me sentía de lo más nervioso.

Gracias al cielo se me ocurrió decirle que pasara y le ofrecí un vaso de limonada, el chico me agradeció y acepto pasar a tomar su limonada.

Platicamos pura bobada, hasta que yo. ya con la cola parada y el pene escurriendo de excitación, se me ocurrió la brillante idea de pedirle sí me ayudaba a grabar un video que necesitaba y no tenía a quien pedirle el favor.

Para mi asombro, el chico acepto de muy buena gana, así que, de inmediato, salí volando por mi celular para grabar.

Lo puse en modo video y se lo di al chico. Él lo tomo y se me quedo mirando extrañado sin saber qué hacer.

Le dije, se trata de un video erótico que me pidieron unos amigos, pero de momento no tengo a nadie a la mano y ya me urge, le trataba de explicar, poniéndome de lo más nervioso con cara de angustia.

El chico me pregunto de que se trataba. De inmediato le dije, me tienes que grabar haciéndote el oral, así que bájate el pantalón para no perder más tiempo, no quiero que se te haga tarde, trate de ser lo más convincente posible.

En verdad ya se me está haciendo tarde, me decía nervioso, yo loco de excitación, no me quería perder esta increíble oportunidad, así, que me acerque a él como gatita melosa y le tome el bulto, que la verdad estaba bastante grande, se notaba que el chico también ya estaba excitado.

Al poco, se le empezó a poner más dura y finalmente accedió a filmarme. Yo rápidamente le ayude a desabrocharse y a bajarse el pantalón. Me puse de rodillas frente a él y se la empecé a chupar.

Dio mío, que buena verga se cargaba el chico, agradecí en silencio por mi buena suerte, se sentía muy caliente dentro de mi boca. Se la empecé a chupar de lo más rico, acariciándole y lamiéndole las bolas y todo el tronco, que delicia, ufff.

Yo ya escurría de excitación, no pensaba dejarlo ir así tan fácilmente, su verga palpitaba y se estremecía dentro de mi boca. Sentí que ya se iba a terminar.

Discretamente me quité el pantalón y solo me hice a un lado, la tanguita sexi que llevaba. El chico se me quedo mirando asombrado, no se imaginaba que un hombre varonil y mayor como yo usara esa clase de prenda.

Aproveche ese momento de desconcierto, rápidamente me lubrique el culo y se lo ofrecí como toda una putita caliente, al tiempo que se la jalaba rico para que no se le fuera la excitación.

Para mi sorpresa, el chico accedió de muy buena gana, se echó saliva en la punta del pene y me la empezó a meter despacio, muy despacio, quizá demasiado para lo que yo deseaba.

Yo ya la quería todita dentro, así que me empecé a mover sensual, ofreciéndome como toda una buena puta.

De pronto, el chico sintió que ya estaba yo bien lubricada y me la dejo ir todita de un jalón y tomándome de las caderas me empezó a coger de lo más rico y cachondo, haciéndome venir tremendamente.

Yo estaba en el paraíso y no me quise zafar, así que me seguí moviendo para que mi chico disfrutara también.

Y si, vaya que él también lo estaba disfrutando, se movía rápidamente jalándome de las caderas, nomás gemía y suspiraba, a él también le estaba encantando, pero ya no se aguantaba más, así que me dio durísimo durante unos instantes y, luego de una tremenda metida de verga que claramente sentí como sus huevos topaban contra mis nalgas, abrazándome fuerte, sentí claramente cómo se vino tremendo dentro de mí.

Se ve que la traía atrasada porque me tiro como seis lechazos abundantes. Sentí como su enorme verga palpitaba dentro de mi culo y se estremecía a cada lechazo, que cosa, amigos, que maravilla.

Al poco quedo recostado sobre mi espalda, terminando de escurrir su leche y tratando de reponerse de la tremenda cogida que acababa de darme.

A mi poco a poco se me fueron doblando las piernas, yo ya no podía sostenerme y quedamos tumbados sobre la alfombra, descansando y el sobre mí, todavía teniéndome trabado con su verga dentro del culo.

En ese momento me sentía como una puta enamorada de su macho. Así que solo pude sonreír feliz y satisfecha uwu.

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