Obediencia y Sumision…

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por cojefer61.
Sebastián vivía con su madre, su hermana un poco menor que él y su padrastro con él que no se llevaba bien y no respetaba en absoluto, era un muchacho muy bonito, de buen cuerpo, pelo largo y rubio, ojos color verde, hacía tiempo que tenía inclinaciones homosexual, pero hasta el momento solo había experimentado a medias, simplemente sexo oral con uno que otro desconocido de su edad, un día estando solo en su casa, sabiendo que nadie vendría por largo rato, decidió entrar al dormitorio de su hermana, tomo una tanga tipo cola less y unas medias transparentes, se las puso y se paro frente al espejo observándose comenzó acariciarse todo su cuerpo de un forma bastante sensual, justo en ese momento se abrió la puerta y apareció su padrastro, que volvió antes del trabajo, al verlo semidesnudo, en bombacha y medias le dijo – ¿ qué haces así, vestido como una puta, que diría tu madre si te viera, maricon ?.
– ¡ pero vos no se lo vas a decir, por favor prometo que hare lo que quieras, seré bueno !.

contesto el muchacho asustado y lleno de vergüenza _ ¡ puede ser, pero todo tiene su precio y es hora de que empieces a respetarme !.
dijo Roberto, así se llamaba su padrastro mientras se desabrochaba el cinturón S: – ¡ si, si, te obedeceré en todo, pero por favor no me pegues !.
R:- ¿ no voy a pegarte, te voy a enseñar quien manda !.

dijo mientras se quitaba el pantalón y se acercaba hacia el, una vez al lado Sebastián comprendió lo que pretendía y respondiendo a sus insinuaciones, se arrodillo y comenzó a bajarle lentamente el slip, dejando frente a su rostro una tremenda verga oscura con dos enormes huevos rodeados de una selva de pelos negros, suavemente introdujo la pija en su boca y comenzó a mamársela, cosa que hizo con mucha facilidad ya que no era la primera vez, estuvo así un largo rato entre gemidos y exhalaciones de placer de Roberto, que lo estaba disfrutando al máximo R:- ¡ quién iba a decir que el brabucón, qe siempre se me retobaba, sería tan putito y un día estaría chupándome la pija como un experto !.
decía sonriendo mientras introducía su verga hasta el fondo de la garganta del muchacho y acababa en ella, luego de haber desparramado hasta la última gota, haciendo que Sebastián tragara totalmente su semen la saco, levanto a su hijastro y arrojándolo sobre la cama de su hermana exclamo – ¡ponte en cuatro y abrí bien esas nalgas, que me voy a comer ese culito tan rico que tienes, putito !.

S:- ¡no, por favor Roberto, nunca nadie me penetro, tienes una pija muy grande, me va a doler!.
R:- ¡cállate y hace lo que te digo!.

contesto enérgicamente pegándole fuertemente en las nalgas, Sebastián no tuvo más opción que obedecer, se coloco en la posición que él le dijo, Roberto se agacho y comenzar a lamer totalmente su trasero con su lengua ardiente hasta llegar al orificio de su ano, allí introdujo su lengua y sus dedos alternadamente por largo rato para ir dilatándolo con la idea de luego cogérselo, mientras con otra mano masturbaba su verga para lograr volver a tener una buena erección, una vez que lo consiguió dijo – ¡ ahora te voy a romper ese culito, para que aprendas a ser mas sumiso, pendejo maleducado !.

Sebastián asustado le pidió con los ojos lleno de lagrimas – ¡por favor Roberto me vas a lastimar, no lo hagas!.
este haciendo caso omiso a sus suplicas lo tomo de la cintura acomodándolo, escupió varias veces sobre el trasero y sobre su pene para lubricarlo y apoyando la caliente cabeza de su pija comenzó a empujar intentando abrirse paso por su esfínter, mientras le pegaba en las nalgas diciéndole que se aflojara, una vez que logro que entrara totalmente hasta su glande, Sebastián pego un grito de dolor – ¡ Ayayay.
me duele, por favor no sigas !.
no haciendo caso siguió introduciendo su tranco hasta la mitad, entre llantos y suplicas del muchacho – ¡ basta, no la aguanto, me estas rompiendo el culo !.

Roberto continuo hasta llegar al fondo, sus bolas pegaban en las nalgas de su hijastro – ¡ ya te entro toda comilón ahora que te lo rompí sos un putito de verdad, papito te lo hizo, que ironía, no maricon !.
le dijo triunfante su padrastro, que había dominado al muchacho que tantas veces se le enfrento, mientras comenzaba a meterla y sacarla lentamente, acelerando el ritmo poco a poco, en forma lujuriosa a medida que pasaba el tiempo, luego de un rato largo Sebastián empezó a disfrutarlo pese al dolor y la impotencia de que el hombre a quien tanto odiaba fuera quien lo desvirgara, exhalando suspiros de placer con la respiración mas pausada comenzó a moverse al mismo ritmo que él, su padrastro al darse cuenta acelero el ritmo cogiéndolo con más fuerza, siempre con algún comentario sarcástico, tratándolo de puto, maricon, demostrando su hombría y superioridad, así hasta que pegando un enorme grito de placer, acabo en el culo de su hijastro, luego de dos o tres topetazos en los que largo largos chorros de su semen, cayo exhausto sobre el muchacho, quedándose así un rato hasta soltar la última gota de su leche en él, ambos estaban cansados y bañados en sudor, oliendo totalmente a sexo y respirando esforzadamente, pasado un reto su padrastro se levanto para dirigirse al baño y ducharse, pero antes de salir se detuvo en la puerta y mirando al muchacho le dijo – ¡ a partir de ahora vas a ser obediente y me vas a respetar , entendiste !,, S: – ¡ si señor entendí !.
R: – ¡ y vas a ser mi putita cuando yo lo desee !.
S: – ¿ siii papito, cuando tu quieras !.

le contesto sonriendo en demostración que le había gustado y estaba muy satisfecho con lo sucedido, a partir de ese día Sebastián fue un hijo educado y obediente, todos se extrañaban de semejante cambio aunque nadie nunca supo el por qué, él y su padrastro tuvieron ocultamente una relación de amantes inclusive tiempo después de que su madre decidiera separarse por las infinitas infidelidades de este, lo hacían cada vez que podían, por supuesto Sebastián también tenía otras aventuras, ya que a partir del momento en que perdió su virginidad en manos de su padrastro, se dedico por completo a los hombres y el buen sexo….