Pachi
Mi primer novio.
Un verano cuando tenia 11 años fui invitado por mis tíos a pasar el verano en camping en Las Toninas. Ellos no pudieron tener hijos y yo era su sobrino preferido.
El cámping estaba ubicado en una zona de bosque a unos 100 metros de la playa en un terreno ubicado en una zona deshabitada donde solo habia un ranchito cercano.
Junto con nosotros acampaba tambien un matrimonio amigo de mis tios con sus dos hijos: Mariano de 10 años y Julián de 13, con los que pronto hice amistad.
Jugábamos juntos todo el dia en la playa y en el bosque tambien por la noche.
En el rancho cercano vivia una señora sola con su hijo Pachi, tambien de 11 años como yo. Primero timidamente se acercó a nuestro grupo, pero enseguida lo aceptamos y lo incorporamos a nuestro grupo y todos jugábamos juntos todo el día.
A unos 500 metros de nuestra playa habia una construcción abandonada y semi enterrada en la arena que pronto pasó a ser nuestra guarida y búnker preferido. Entrábamos al lugar por una ventana gateando porque la arena habia cubierto casi todo. En el interior solo podiamos pararnos en el segundo ambiente y en un espacio muy pequeño. El resto era en cuclillas o agachados.
Al caer la tarde y el anochecer siempre nos encontraba dentro de nuestro lugar preferido, el búnker.
Pachi era un chico muy delgadito, con el pelo muy largo y un rostro de una belleza exótica en donde se destacaba su boca, con labios muy carnosos y rosados.
Comencé a sentir una atracción muy fuerte y sexual por él en cuanto lo ví, cosa que me extrañó y confundió mucho en principio porque nunca habia sentido algo así por un chico, siempre por niñas o mujeres en quienes pensaba al masturbarme. Con Pachi comencé a masturbarme pensando en el. En su cara, en su boca y en esa mallita de streecht tan chiquita que marcaba mucho su bulto que me atraía demasiado.
Un dia Julián y Mariano se fueron con sus padres de visita a otra ciudad de la costa. Pachi y yo nos quedamos solos por primera vez para jugar todo el dia juntos.
Fuimos muy temprano al búnquer y nos quedamos charlando mucho. Me preguntó si lo habia hecho con alguna chica. Yo le conté mi poca experiencia hasta entonces, solo unos besos y unas tímidas tocaditas con compañeras de mi edad.
Entonces el me confesó su experiencia con una mujer grande. Me pidió que no se lo contara a nadie incluyendo a nuestros amigos y me hizo prometerlo.
Me preguntó si no me atraía mi tía, que estaba muy buena y le dije que sí. Ahí me contó que tuvo un encuentro con ella y que se la tocó, se la chupó y lo pajeó pero no pudieron llegar a cojer.
Yo no lo podia creer pero la verdad me calentó mucho la historia y me puse al palo. Como me dio verguenza q se notara mi erección me di vuelta y me fui para el otro ambiente donde podia pararme para acomodar mi pija y que no se notara.
Pachi me siguió y se me acercó por atrás. Yo estaba contra la pared. Me tomó y me apoyó todo en mi cola mientras me decía al oído si no me gustaba su pija igual que a mi tia. Sentila mirá como la tengo y me la refregaba por el culo.
Yo le decia que no por favor que no me gustaba que parara pero no hacia nada para soltarme de la situación.
Nadie lo va a saber, me dijo. Me lo prometés, le pregunté. Sí. Te lo prometo.
Se acostó y se bajó la malla y me agarró del brazo llevándo mi mano a su pija. Acariciala, tocala, te gusta…
La tenía muy larga para nuestra edad, de piel muy blanca y rosada, sin nada de pelitos, solo algunas pecas en su pubis. Era hermosa. Me calentó como nunca.
Se la acaricié, la toqué toda y lo pajeaba. El me decia así así como me la toca tu tia. Te gusta, no? Sí, me encanta.
Besámela un poquito. Nunca lo hice, le digo y tímidamente me fui acercando con mi boca a su pija hermosa totalmente parada.
Se la besé tímidamente primero con besitos cortitos hasta que me ordenó chupámela toda agarrandome de la cabeza.
Comencé a chupársela toda frenéticamente. Me la metía toda en la boca y lo pajeaba. Sus gemidos de placer me calentaban aún mas y se la chupaba toda enloquecido. Me empece a poner en cuatro sacando el orto bien para afuera y abriendo mis piernas. PACHI me lo empezó a tocar, me bajó el short y me empezó a pajear el ano con sus dedos. Se los chupé también y me los empezó a meter mientras me decia que me queria cojer.
Queres que te coja todo?
Sí, mi amor, cojéme todo, yo le suplicaba.
Estábamos llegando casi al clímax total, re calientes, cuando escuchamos la voz de mi tia llamándonos a los gritos y acercándose.
Me asusté mucho, me subí la malla y salí corriendo.
Y Pachi no está con vos? Preguntó mi tia. No, le dije, se fue para la casa temprano, mentí y la tomé de la mano y diciéndole corramos una carrera hasta la carpa.
Continuará…
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