PAGANDO UNA APUESTA

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Alonso70.
A partir del lunes 2 de abril me encontraba técnicamente solo de nuevo, y creo que por nostalgia, volví a ir al deportivo a donde había conocido a mi Amo, ya era martes 10 de abril, ya tenía más de dos semanas sin coger, como no lo iba a extrañar, si me cogía cuando menos tres veces a la semana, y siempre me dejaba totalmente satisfecha, pues ahí estaba yo absorto en mis pensamientos hasta que una voz me saco de ellos con un singular saludo.
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-¿Alonso? ¡Vaya que milagro que te dejas ver por aquí!
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-Hola Don Jaime, pues aquí tirando la nostalgia
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-Si supe lo de Alberto, creo que quizás fue mejor que lo hayan descubierto con su compañero de la escuela a que lo hayan descubierto contigo, ¿No crees?
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-Si ni que lo diga, pero aun así lo extraño, quizás por eso vine, ¿Oiga sabe si además de Usted le dijo a alguien más de lo nuestro?
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-Pues hasta donde yo sé, no, ya ves que solo lo hicimos esa vez, que por cierto que rico la pase, ¿No te gustaría recordar esos momentos?, ¡Ándale para que se te quite la tristeza! ¿O no te gusto mi verga aquella vez? se veía que te estaba gustando mucho, anímate ya no hay nadie en el salón de artes.

La verdad no iba preparado para tener sexo, pero ya tenía casi tres semanas sin coger, así que me levante y acompañe a Don Jaime, entramos y de inmediato se bajo el pantalón y con una de sus manos me tomo de la cabeza para guiarla hacia su verga, me hinque frente a él, y comencé a meterme su pene flácido en la boca, poco a poco sentí como iba poniéndose duro, hasta que las mamadas que le daba se hicieron más intensas, provocándome ganas de vomitar y haciendo que los ojos me lagrimearan por el esfuerzo, Don Jaime sujetaba mi cabeza y me hacía que la levantara para ver su rostro lleno de lujuria preguntándome: ¿Te gusta mi verga Aly? esta rica como aquella vez?

Y sacándome ese enorme trozo de carne por unos segundos, le respondía: Hay Don Jaime esta riquísima, me encanta su verga sabe delicioso, y volvía a meterla a mi boca, y trataba de tragármela toda, luego me la sacaba y lamia sus bolas con poco vello, y olor a recién bañado, que rico, creo que al igual que yo la traía bastante atrasada, ya que mientras le lamia las bolas el tipo se tenso y empezó a chorrearse sobre mi cara, todo su orgasmos me cayó en el rostro que sin dudar me embarre, después metí su verga de nuevo a mi boca para limpiársela como en aquella ocasión, al terminar se sentó en el sofá del taller y me pidió sentarme junto a él, me abrazo y se disculpo por haber terminado tan rápido
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-Lo siento mucho Aly, me hubiera gustado mucho cogerte, tienes un culo riquisimo apretadito y carnoso, y de verdad es un placer darte una buena culeada, pero ya ves que a mi edad tardo mucho para reponerme después del primero, si quieres nos esperamos un ratito.

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– No Don Jaime, no venia preparado para eso, de hecho no pensaba tardarme por qué debo pasar por un encargo de mi tío, y descuide estuve rico si quiero le dejamos para otra día e incluso vengo preparada, me pongo tanguita y medias como le gusta.

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-Hablando de eso te quería proponer algo, sucede que hay un amigo, siempre presume de que está bien vergon y que ninguna vieja ni gay le aguanta la verga en el culo, yo le dije que conocía a alguien que si, por que vi como te tragaste las vergas que te dimos aquella vez Beto y yo, ¿Recuerdas? creo que le dicen hacer un dos romano, bueno yo jamás había visto que se pudiera, y cuando vi que tu podías soportar la verga del Beto y la mía al mismo tiempo en tu culo, sin dudar pensé que sin problema podrías soportar la verga de Genaro, ¿Qué te parece?
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-Pues no sé Don Jaime, igual fue porque esa vez andaba muy caliente y me supieron dilatar bien el ano, ¿Recuerda que antes de meterme su verga me lamio el culito? creo que si el tal Genaro me sabe calentar bien si podría comerme su verga por el culo, bueno y a todo esto, ¿Yo que ganaría si el que aposto fue usted?
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-Pues además de la súper cogida que te van a dar, con una de las mejores vergas que te hayan enculado, te ofrezco la mitad de lo que apostamos Genaro y yo, si aguantas su verga hasta deslecharlo, él está dispuesto a pagarme 3 mil pesos, pero si no se la aguantas, seré yo el que deba pagarle esos 3 y tu deberás darme también la mitad.

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-¿Como? además de que me van a romper el culo ¿Debo pagar por ello? No claro que no, yo siempre lo hago gratis, ni cobro ni pago por sexo, jamás lo he hecho, y aunque ya no tengo el cuerpo de hace 15 años, se que aun estoy muy bien, de no ser así, no me hubiera ligado al Beto que solo tiene 16 años, eso te demuestra que hasta a los jovencitos les gusto, acepto hacer el intento, si no aguanto, pues ni modo, Ud, paga, pero si aguanto me conformo con solo mil pesos, y la cogida que me va a dar, trato?
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-Órale pues te voy a financiar, pero échale ganas, cuando quieres que fije la cita
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– Cuando quiera al fin que me dejo bien caliente ahorita, ya ve que yo no me vine y Usted si, más vale ahorita, que ando así, dígale que hoy o mañana pero entre más pronto mejor, solo que ahorita voy a casa por qué debo hacer ese encargo, si se hace hoy me manda un mensaje para saber a qué hora o cuándo.

Termine de mi encargo y por ahí de las 10 de la noche ya estaba en mi casa, Don Jaime me mando un mensaje que decía: Todo arreglado, cita jueves 12 a las 9:00 pm, aquí en el taller de artes, ha y traes ropa de putita, hasta el jueves mami.

La noche del jueves por ahí de las 7:00 pm ya estaba casi listo, limpio de afuera y por dentro, había practicado con un dildo largo que tenía en casa y un champú de frutitas, y al mismo tiempo que me limpiaba el culo, practicaba para recibir ese enorme miembro que según Jaime estaba descomunal, llegue puntual a la cita toque la puerta del taller de artes y Jaime me abrió, me saludo y me invito a pasar, me sorprendió ver una cama tamaño matrimonial en medio del cuarto, y sentado sobre la cama, mi futuro cogedor en turno, un tipo como de unos 55 años, 1.
80 de estatura, robusto y de aspecto jovial, me pare frente a él y me presente.
– Hola me llamo Alonso, pero mis amigos me dicen Aly.

Quítate la ropa me ordeno, y sin dudar me quite el pantalón y el suéter que llevaba, dejándome solo un body de tirantes en la espalda y liguero abajo color negro y medias al muslo, cuando me vio así de inmediato me volteo y comenzó a masajear mis nalgas, las apretaba y luego las soltaba para después besarlas y chuparlas, eso me estaba poniendo cachonda, también metía la parte baja de mi body en mi rayita para hacer que se me vieran mas grandes las nalgas, y de repente plaaam una nalgada, y casi al instante un beso, después su palma completa en la otra nalga y de nuevo otro beso, luego se levanto, se quito el pantalón y por fin pude ver porque tenía la fama que tenia, se volvió a sentar en la cama, y me ordeno hincarme frente a él, vi su pene flácido frente a mí, que fácilmente tenía tres cuartas partes de mi cara y estaba flácido, aun no alcanzaba su completa erección, me recordó al novio que tuve y que le decía de cariño mi monstruo, por el monstruo que traía entre sus piernas, pero quizás este le podría ganar, metí tímidamente la punta en mi boca, sacando y metiendo despacio, luego lo recorría con mi lengua desde la base a la punta y luego sus enormes bolas peludas que no me atraían mucho, por lo mismo volvía a su verga, así estuve hasta que poco a poco empezó a crecer y a los muy pocos minutos me era imposible meterlo por completo, no obstante que aguantaba las ganas de vomitar y hacia esfuerzos desesperados por meterlo todo había 3 o 4 centímetros que se quedaban fuera de mi boca, pero el tipo estaba feliz, gruñía como animal en celo, y pellizcaba mis tetillas con sus enorme dedos, me agrado que no me forzó a tragarme su verga sujetando mi cabeza cosa que ya me han hecho otros tipo y hacen que casi me ahogue, no, Genaro dejo que me comiera su verga a placer, yo tenía pleno control de mis mamadas, de repente tomo mi cabeza entre gruñidos y quejidos diciéndome: Espera, espera no me quiero venir aun, quiero cogerte, haber si es cierto que la aguantas, me levanto, y me quito el body, desde los tirantes hasta abajo, me quito las medias, y solo me dejo una tanguita de dos triángulos pequeños uno adelante y una atrás, me acostó en la cama y comenzó a besarme el cuello, los hombros, bajo por mi vientre y luego mis piernas, sin querer deje escapar un largo gemido de placer, haaaa, que ricoooo, después, bajo hasta meterse en la boca los dedos de mis pies, ya para ese entonces me tiene lista, para hacer lo que el quisiera, pero no, aun faltaba, me puso boca abajo y repitió todo, me beso la nuca, la espalda, la cintura, mis nalgas, mis muslos, mis pantorrillas, y finalmente volvió a apoderarse mis pies, ya no pude mas, yo misma le suplique: Por favor cógeme, por favor hazme tuya yaaa, te necesito quiero ver si puedo recibir tu deliciosa verga en mi culo, él se acostó boca arriba en la cama, y me dijo: Ven matate solo mami, su verga se veía como un poste, grande gorda y llena de venas, con una cabeza sobresaliente y un poco roja, con cuidado y con dificultad le empecé a poner un condón no era de los que común mente usaba, este según era talla extra, así lo pedí en la farmacia, cuando lo hacía, me miro y me dijo: Entiendo que te cuides mami, pero puedes meterlo al natural, no he mojado ninguna panocha desde hace años, porque no hay una que me aguante y menos un culo, pero como tú quieras, no obstante sus recomendaciones termine de ponerle el condón, saque mi lubricante de sabor a frutas, y me puse una cantidad generosa en el culo, también empecé a untárselo en la verga con el condón puesto, se veía tan rica, que no me pude contener y lo volví a meter en mi boca, el sabor a frutas lo hacía más irresistible de mamar, y casi hago que se derramara, me tuvo que detener de muevo sujetándome de la cabeza, me incorpore sabiendo que estaba listo, volví a untarme lubricante, y puse la punta de su verga en la entrada de mi ano, me empecé a sentar poco a poco, la cabeza dolió, y mientras bajaba, sentía como abría mi culo, como si lo estuviera partiendo a la mitad, me mordí los labios, para no gritar del dolor y me preguntaba hasta cuando llegaría a la base, sentí un dolor agudo en mi ano, y me detuve, estuve a punto de salirme y renunciar, pero empecé a respirar rápido y seguí bajando hasta que por fin toque con mis nalgas su pubis, me volví a untar lubricante, y empecé a mover mis caderas en círculos sin sacar un milímetro de esa enorme tranca de carne, así estuve un par de minutos, después empecé a subir despacio sin ni siquiera llegar a la mitad, y después bajar hasta volver a topar con su vientre de macho, asiii, asiiii despacio, pensaba en mis adentros, hasta que mis pensamientos se hicieron frases fuertes que mi macho escucho, asiiii asiii haaayy despacio que vergotaaa papacito, que enorme estas, pareces burro, haaay haaay que cogida me estás dando me vas a dejar el culo bien abierto papi, haaaa haaa.
asiiiii asiiiii

Ya para ese entonces subía más de la mitad de su pene y me dejaba caer por completo, se empezaban a escuchar los clásicos sonidos como aplausos cuando chocaban mis nalgas con su vientre, mientras yo seguía dándome de sentones, él pellizcaba mis tetillas, y proyectaba las palmas de sus manos en mis nalgas hasta dejármelas enrojecidas, en eso instante me movía de manera frenética, y el también empezaba a empujar su pelvis hacia arriba y delante, ambos estábamos muy excitados ya, voltee a ver a Jaime y lo vi sobándose la verga por encima del pantalón, según él vigilando.

Genaro empezó a decirme cosas al tiempo que me nalgueaba, ¡Que rica puta eres!, La verdad no creí jamás que alguien gozara con mi verga, la única vez que la pude meter fue con una puta que me cobro doble porque me dijo que la lastime, pero como no duro mucho, no sentí así de rico, te mueves mejor que una puta ¿Te gusta mi verga? ¿Ya no te duele mami?
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– Siii si me duele, pero me gusta que me duela se siente ricoo, entre más me muevo más rico siento y menos dolor tengo, por favor muévete conmigo, asiiii asiii.
De repente paro, y sin sacarme su enorme caramelo se sentó en la cama sujetando mis nalgas, haciendo que quedara frente a él, enredando mis piernas en su cintura, me levanto y con sus manos y empezó a subir y bajar mis nalgas de su verga, yo seguía moviendo mi cintura, y besándolo en la boca de manera apasionada y sucia, enredando su lengua con la mía,, después me recostó, y sujeto mis tobillos con ambas manos, y sentí por primera vez todo su peso encima de mí, me sentí tan vulnerable y sumisa, que no opuse ninguna resistencia, me bombeaba durísimo, y mordía mi cuello, sabía que al día siguiente iba a tener una marca pero no me importaba, en ese instante podía hacer conmigo lo que se le pegara la gana, después paro de nuevo, me dio un beso muy apasionado y me dijo: Empínate te quiero coger de a perrito, con un poco de dudas lo obedecer, me puse en cuatro sobre la cama apuntando mi culo a uno de los bordes, él me volvió a untar una cantidad generosa de lubricante, y antes de volver a sentir su verga me dijo: Oye mami, si quieres le paramos porque creo que ya te rompí el culo, entonces con una de mis manos toque la entrada de mi ano y cuando acerque mi mano para verla pude apreciar una mezcla del lubricante y sangre de la entrada de mi culo, eso en vez de asustarme me excito más aun, empine mas mi culo y le suplique: .
– ¡Sigue papi, termina de romperme el culo, hazme tu puta, déjame bien abierta para recordar esta noche como una de las mas inolvidables de mi vida! .

Sentí de nuevo la punta de su pene, y al entrar ya no dolió tanto como la primera vez, y después de los primeros bombeos empecé a sentir un cosquilleo muy rico, y sin poder contenerme, empecé a gritar
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-Haaaa haaaa, No parees, por favor no pares, asiii parteme en dos HAAAA HAAAA,
Mis gritos eran cada vez mas y mas fuertes, tanto que Jaime se acerco y me dijo: Shhh Alonso no grites tan fuerte que alguien podría escucharnos y descubrirnos
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-Lo siento Jaime no puedo evitarlo esta verga esta divina, que delicia sentirla en el culooo haaa haaay que ricooo sigue amor sigue cógeme rico asiiii, asiii rómpeme el culo asiii
Entonces Genaro volteo a ver a Jaime, y le dijo ven a taparle la boca o nos van a descubrir, y ni tardo ni perezoso Jaime se acerco a mí con la verga de fuera, y poniéndola frente a mi cara no dude en meterla en mi boca, y empezar a succionarla,
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-Wooow esta puta parece una aspiradora, te está gustando la verga de mi amigo Genaro mami? ni siquiera aquella vez cuando te cogí con Beto estabas así de poseída, goza puta, goza las vergas que tienes, sácanos toda la leche

Y por segunda vez en esa semana, sentí el néctar caliente de Jaime en mi boca que sin dudar me bebí, succione todo hasta volver a ponerle los ojos en blanco, mientras un dolor más agudo aun que el primero se manifestaba en mi culo y es que Genaro por fin se estaba viniendo, sentí como me sujetaba fuerte de la cintura, y sentí las palpitaciones de su enorme verga dentro de mi no obstante que traía el condón puesto, me deje caer sobre la cama y sentí como mi macho se dejaba caer sobre mi hasta que termine de exprimirle hasta la última gota con mi esfínter, poco a poco se fue saliendo de mi, se quito el condón y pude ver esa belleza salvaje, mansa y sumisa, yo la había domado, me dio ternura y me acerque a él empecé a lamer despacio mientras él se retorcía diciéndome:.
– No mami ya me exprimiste todo ya no tengo leche, entonces Jaime le dijo: Si, es solo que le gusta limpiarte la verga cuando acabas, ¿No es una puta deliciosa? Ho sí que lo es respondió Genaro.

Termine con ambos, y me vestí, me hice como el que no sabía nada de la apuesta, y me despedí de ellos, antes de irme Genaro mi pidió mi número de móvil, y gustoso se lo di, Jaime solo me guiño el ojo, antes de llegar a casa mi teléfono sonó, era Genaro, invitándome a cenar en su casa, el sábado siguiente, acepte encantada, sabía que además de la cena me daría una enorme ración de verga pero eso ya era parte de otro relato, y yo que pensé que ya lo había conocido todo, que mi culo ya había experimentado tener entre sus entrañas la verga más grande de cuando menos este país, y no, es obvio que cada día se aprende algo y que hay que vivir y gozar a plenitud cada minuto de tu vida porque cada minuto te trae experiencias nuevas, de ti depende hacerlas maravillosas y únicas

Mañana paso a cobrar mis mil pesitos con Jaime, esta experiencia quizás no demuestre mucha intensidad como otros relatos que he posteado aquí, aunque mi culo siente algo totalmente diferente,
Aly