Para relajar los músculos una buena follada en el baño con el chico del Gym
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Chrisxx.
Hace aproximadamente un año estaba entrenando en un gym que se encuentra ubicado dentro de un club, el lugar es muy tranquilo, sobre todo en horas de la mañana que no asisten muchas personas al gym. Siempre me ha gustado entrenar para mantenerme en forma pero ir siempre al mismo gym termina aburriendome por tanto cada cierto tiempo trato de rotar a otros gimnasios, así fue como llegué a este.
Todos los días en la mañana me preparaba para mi rutina de entrenamiento, unos short que debo reconocer, me quedan bastante bien, pues dejan ver mis piernas bien definidas y se nota bastante mi trasero y en la parte superior una camiseta de tirantes (la mayoría de las veces). Acostumbro a ir al gym entre las 7 am y las 8 am ya que es muy relajado y normalmente tardo 2 horas entrenando.
Mi rutina de gimnasio en ese tiempo siempre comenzaba trotando en la caminadora durante 20 o 30 minutos y luego me dedicaba a trabajar mis músculos, todo iba muy tranquilo siempre siguiendo mi rutina hasta que un día llegó un chico que me observó durante casi todo mi entrenamiento, por su mirada no me resultó difícil adivinar que el chico se sentía atraído por mi.
Al rededor 15 minutos antes de terminar mi entrenamiento el chico se fue del gym luego de mirarme un largo rato fijamente, yo termine mi rutina y recogí mis cosas pero mi sorpresa al salir es que el chico estaba sentado en las bancas frente al gym obviamente esperándome, apenas salí él se levantó y camino hacia mi, me saludo y me dijo que su nombre era Jorge, un chico bastante gupo como de mi estatura, piel blanca, cabello negro y unos hermosos ojos grises que le daban un toque muy interesante, seguimos caminando juntos hasta la salida del club y aprovechó a preguntarme que si entrenaba todo los días en la mañana porque nunca me había visto por allí, le respondí que tenía pocos días en ese gym y que siempre iba en las mañanas, a lo que él respondió que entonces cambiaría su hora de entrenar yo solo sonreí y nos despedimos.
Al día siguiente pensé que me encontraría de nuevo con Jorge pero no fue así, dos días después sin muchas esperanzas de verlo cuando estaba trotando llegó, paso cerca de mi y sonrió, yo le devolví la sonrisa y seguí trotando, antes de terminar mi entrenamiento noté que ya Jorge no estaba en el gym así que sólo termine la rutina y salí, y otra vez estaba allí sentado esperandome, en el camino hacia la salida Jorge me dice que me quiere mostrar algo y me invita a seguirlo, lo seguí hasta que llegamos a un baño que pertenece al club, no me extraño mucho ya me lo imaginaba, entramos y yo le pregunto que es lo que me quería mostrar, el se levanta su camiseta me muestra su tableta y me dice "esto es lo que quería mostrarte, crees que este bien así o debería hacer más abdominales" yo le respondo "pues luce bien, pero habría que tocar a ver que tan firmes estan" y sonreí de una forma juguetona.
Nos comenzamos a tocar los diferentes músculos y preguntándonos que tal estaba cada uno, y así fuimos calentandonos hasta terminar tocando cada uno la polla del otro, nos miramos fijamente por un rato y él comenzó a besar mi cuello, luego yo le bese sus finos labios, le manifesté que me daba miedo que fuese a entrar alguien pero el me calmo diciendo que a esa hora no era muy poco probable ya que ese baño es del club y esta ubicado en una zona alejada, finalmente decidimos cerrar con seguro.
Apenas cerramos la puerta Jorge se lanzó sobre mi y nos comenzamos a besar frenéticamente, recorrimos todos nuestros cuerpos con las manos. Jorge se arrodilló frente a mi y me bajo los shorts hasta la rodilla, mi pene moreno y delicioso salió gustosamente y se encontró con sus labios, me lo comenzó a chupar primero lentamente y luego más fuerte, lo levante y lo pegué contra la pared más cercana, esta vez era yo quien estaba de rodillas bajando su short para encontrarme con esa blaca y deliciosa polla de unos 19 cm, la comencé a besar y luego a chupar con vehemencia.
Después de un rato me pongo de pie para seguir besando sus labios, nuestras manos tocaban cada centímetro de nuestros cuerpos bien formados por el gym y Jorge me susurra al oído "quiero que me folles" yo le digo que no tengo condones y el toma su bolso de gimnasio y saca un paquete con tres condones. Lo lleve hasta el espejo y comencé a besar su culito rosa, pase la lengua y lubrique mientras me ponía el condon, rápidamente coloque mi polla en la trada de su culo y se la meti lentamente el gemia y con sus manos apretaba mis piernas.
Comencé a follarlo primero suave y luego subí el ritmo, ambos nos podíamos ver en el espejo lo que incrementaba nuestra lujuria, el se giraba para besarme mientras yo lo follaba ambos gemiamos de placer, luego de un rato le propuse a Jorge cambiar de roles lo cual acepto, el se subió a la encimera del baño con su espalda apoyada al espejo y yo me subí sobre él quedando frente a frente, sin pensarlo dos veces puso su polla dentro de mí y comenzó a follarme.
Luego de un rato Jorge me dice que ya tiene ganas de venirse, yo le dije que esperase un poco más, me la saqué nos pusimos de pie y lo comencé a besar por todo su cuerpo, y él me dice "quiero que te corras en mi boca" sin dudarlo lo hice arrodillar y meti mi polla en su boca, el la chupaba bastante bien y yo comencé a mover mis caderas para follar su boca, sentí el cosquilleo en mi polla, comencé a mover mis caderas más fuertes mientras el se masturbaba con vehemencia, en pocos segundos me corrí en su boca y pude ver que inmediatamente el se corrió.
Jorge se puso de pie y nos besamos, saboree el sabore de mi leche en sus labios, nos acariciamos un poco le dije que había estado genial y nos comenzamos a vestir para salir del baño, salimos y el lugar seguía solo así que recorrimos el lugar tranquilos mientras hablabamos sobre nuestras vidas, nos quedamos juntos 1 hora más, conociéndonos un poco mejor, ese mismo día y más adelante muchas cosas pasaron si quieres saberlo comenta y con gusto seguiré contando mi historia con Jorge.
Pido disculpas por los posibles errores otograficos, Soy Chris y es un placer para mí escribir mis historias para ustedes.
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