Parte 1: Fin de semana de placer

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Un fin de semana de verano, en vacaciones, donde Yo (15 años), Mario (14) y Dani (15) y otros personajes que también participan en los relatos vivimos unos días cargados de amor y pasión y sobre todo mucho sexo.

Aquí comienza el viernes, en una tarde en la que Dani, Mario y Yo quedamos con Jesús, otro amigo de nuestra edad para jugar al fútbol. Se estaba poniendo el sol, era ya algo tarde y cansados de jugar a la pelota nos sentamos los cuatro a hablar en un banco del parque. Hablábamos de otros amigos, de chicas y de fútbol hasta que salió el tema del porno. Entonces yo sigo hablando con ellos:

– Yo: El otro día me descargué una película porno jaja. Aunque también tenía algo de comedia, jugaban a juegos graciosos y eróticos.
– Jesús: ¿Cómo qué juegos?
– Dani: Sí, di uno a ver si está bien, y jugamos en vez de estar aquí sentados.
– Yo: Pues uno en el que cuatro niños de 15 o 16 años cogían una galleta y se pajeaban todos, y el último que soltara el semen sobre ella, se tenía que comer la galleta con el semen de todos.
– Dani: Venga, vamos a jugar (en un tono irónico) jajaja
– Yo: Podemos jugar pero individual, con un cronómetro en el cuarto de baño de alguien jajaja
– Mario: Venga, ¿apuesto a qué no sois valientes de hacerlo?
– Jesús: Mi casa está solo hasta media noche…
– Yo: Pues vamos para allá ¿no?
Y todos fuimos a su casa, no estaba muy lejos, a 5 minutos a pie desde la pista donde estábamos jugando.

Llegamos a su casa muy limpia y amplia, se notaba que provenía de una familia adinerada. Entonces nos sentamos en su sofá para debatir como lo haríamos.
– Yo: Yo tengo un reloj con cronómetro.
– Mario: Pues utilizamos ese. ¿Quién entra primero?
– Dani: Pues yo mismo. ¿Jesús, dónde está el baño?
– Jesús: Mejor en el cuarto de baño de la habitación de mis papas. En el cuarto de la derecha.
Dani entra al cuarto de baño y cierra la puerta con cerrojo. Y yo le empiezo a contar con el reloj. Mientras nosotros hablábamos en la sala de estar.
Después Dani sale del cuarto y mi reloj marca que ha tardado 5 minutos y 15 segundos.
Entonces entro yo y le doy mi reloj a Mario para que él llevase el tiempo.

Al entrar al cuarto de baño me doy cuenta de que es muy amplio. Una bañera muy amplia e incluso un jacuzzi.
Pero no tenía tiempo que perder y me arrodillé en el suelo donde estaba la galleta con muy poco semen de Dani, la mayoría había caído fuera. Me bajo los shorts y los bóxers y comienzo con el sube y baja muy rápido mientras que con la otra mano me agarraba una de mis nalgas para intentar sentir más placer. Durante ese tiempo hice algo que no creí que fuese a hacer nunca. Cogí con uno de mis dedos algo de semen de Dani que estaba por el suelo de color azul, por lo que el semen se podía distinguir bastante bien. Y me lo llevé a la boca, no me gustó mucho pero noté que me ponía muy caliente con ello, así que volví a masturbar mi verga mientras que con la otra mano iba cogiendo semen y lo iba colocando sobre mi glande y en mi lengua. No me podía creer que estuviese poniendo el semen de Dani en mi glande. Y así hasta que me corrí y deje caer, con más puntería que Dani, mi semen sobre la galleta.

Al salir el cronómetro marcaba 4 minutos. Me sentí aliviado porque sabía que ya no me comería esa galleta.
Después lo hizo Mario, con 5 minutos y 10 segundos, y por último Jesús, con 4 minutos y medio.
Estábamos allí en la sala de estar de la casa de Jesús. Y Dani fue al cuarto de baño, unos segundos después salió.

Entonces decidimos que ya era tarde y que debíamos irnos a casa. Ese fin de semana Mario y yo dormíamos en casa de Dani. Así que allí fuimos.
Al llegar le pregunté a Dani si podía darme una ducha y así lo hice. Salí de la bañera y me coloqué mis bóxers y una camiseta y a la salida me esperaba Mario que decía que también iba a bañarse. Fui a ver la tele con Dani.
– Yo: Dani, no te comiste la galleta, ¿verdad? jajaja
– Dani: Sí me la comí. ¿Sabes por qué?
– Yo: ¿Por qué?
– Dani: Porque sabía que había semen tuyo…
– Yo: Yo entré después de ti y lamí algo de tu semen que había en el suelo y también puse sobre mi glande.
Nos miramos y sonreímos.
– Yo: Esta noche hacemos el amor… grrr
– Dani: Vale, te esperaré desnudo en mi cama…
Mario salió del baño también en bóxers y Dani se metió en la ducha.

Después Mario cuando iba andando por el pasillo noté que se puso unos bóxers muy apretados, quizá no eran de su talla, y le hacían un culito muy lindo a la vez que se le metían por la rajita del culito.
Entonces sentí un pequeño pellizco en mi trasero. Vi que era Mario quién me lo hizo y se rió.
– Yo: Si es que tengo un culazo ehh jajajajaja
– Mario: Pues la verdad es que sí jajaja.
Después Dani salió de la ducha y estuvimos tumbados los tres en el sofá viendo una película. Hasta que quedamos dormidos.

No se pierdan los siguientes capítulos, con la noche apasionante con Dani, el trío y sexo en la montaña.
Además del amor a tres bandas que se vive en la casa de Dani.
Espero que les haya gustado. Pronto publicaré el siguiente capítulo. ¡Un saludo a todos!