Pase de ser un chico tímido a ser la puta de todos por una noche a los 16
Lo que comenzo como un ataque de morbo, termino siendo la noche más caliente de mi vida.
Yo tenía 16 años en ese momento, era muy tímido y casi no salía, aunque en casa me masturbaba como loco con todo tipo de fantasías que no me atrevería a hacer en la vida real. También sabía arreglarme para parecer un poco mayor de lo que era.
Había una zona del lugar donde vivía, más enfocado en la vida nocturna y cosas para adultos (desde cosas más simples como antros, bares, etc., hasta sexshops, tiendas de pornografia, lugares de estrippers, etc.)
Siempre iba a esta zona, principalmente para entrar a la tienda de pornografia, ya que era muy explícito, había varias televisiones reproduciendo porno, y posters grandes de mujeres y hombres desnudos. Mi zona favorita era la de porno gay, iba tan seguido que el hombre de la tienda ya me conocía.
Después de comprar una de las películas, sali del lugar, eran como las 2 pm, y aún tenía tiempo antes de la hora que me indicó mi papá para llegar, así que decidí caminar por la zona, cerca de la tienda, había un local, era de sauna y regaderas públicas, que la gente conocía por ser un lugar donde ocurría mucho sexo, principalmente sexo gay, este estaba en una calle pequeña, no era tan fácil de ver, pero decidi caminar por esa calle, recuerdo pasar cerca de la puerta que se encontraba abierta y quedarme viendo, ya que por unos segundos pude ver un hombre en toalla.
En la entrada, había un señor algo grande de edad, sentado en una silla, tenía en sus manos papeles pequeños que parecían ser los boletos de entrada, al ver mi interés, me pregunto si quería entrar, a lo que dije que no, por mi edad. Pero me dijo que mientras no le diga mi edad a nadie, todo estaría bien y me dejaría una entrada grátis.
Yo estaba indeciso si seguir con el camino o entrar, la segunda opción me llenaba de nervios, voltee a ver a todos lados buscando si alguien estaba en esa calle, y así fue, había un hombre que caminando, de alguna manera me dio morbo que alguien me viera entrar (por como era conocido ese lugar). Así que con todos los nervios del mundo y casi temblando y tartamudeando, le dije que si.
El hombre me sonrió, y me invito a pasar. Al entrar, de frente había unas escalera, la izquierda una puerta que decía «baños» y a la derecha una que decía «vestidores». Me pidió que pasara a esta última y que las toallas estaban en el cuarto de al lado.
Dentro habían varias filas de casilleros, yo por pena, me fui a la fila del fondo, la luz no era muy fuerte, ya que sólo había una lámpara en el centro, por lo que las orillas de cuarto quedaban más obscuras, las paredes, las bancas y los casilleros estaban rayados con números telefónicos, dibujos de penes, grafitis etc., a la ezquierda del todo había una puerta que supuse era donde las toallas estaban.
La llave ya estaba puesta en el casillero, solo debía quitar el seguro. Voltee a todos lados para ver que nadie me viera, todo parecía estar vacío, una idea que me exito, pasó por mi mente, era la de caminar desnudo hasta el cuarto donde estan las toallas, comencé a desvestirme hasta quedar desnudo y guarde todo en el casillero, me levante y camine con algo de precaución, mi pene se había puesto duro solo de eso, nunca había estado desnudo en un lugar público, pero para mi mala suerte, no me di cuenta de que si había una persona, esta sentada y desnuda, me quedé congelado, el solo me sonrió y siguió con lo que estuviera haciendo, me exito que alguien me hubiera visto desnudo, ya estaba agarrando confianza, yo me dirigí rápidamente hasta el cuarto, tome una toalla y la acomode sobre mi cintura.
Salí del los casilleros rápidamente y subí las escaleras, mientras subía, me sorprendí al ver varios hombres bajando completamente desnudos, ellos actuaban muy natural. También el vapor ya se comenzaba a hacer visible, el ambiente se volvió húmedo y cálido.
Al llegar al piso de arriba, era un cuarto algo espacioso, a la derecha había una especie de asientos y a la derecha había 4 regaderas, en la pared del fondo vi una puerta, al abrirla, me di cuenta de que era otro cuarto igual al anterior y también, había otra puerta al fondo con letras pintadas «sauna/vapor»
Decidí quedarme en el segundo cuarto, había solo 2 hombres, uno bañándose completamente desnudo, su cuerpo era de piel clara, y otro sentado igualmente desnudo de piel morena, eran mayores de unos 50 años, tenían mucho vello púbico, y estaban algo gordos, me vieron, pero no prestaron mucho interés, también, había mucho vapor del agua caliente y hacia bastante calor. Yo me senté y el de piel morena se sentó cerca mío y me hizo platica, mientras hablábamos el otro hombre se fue, yo ya tenía más confianza y decidí quitarme la toalla revelando mi erección, el hombre solo se quedó observando mientras acariciaba mi pierna, yo veía que también su pene se estaba parando. Reuní valor y me puse rápidamente de rodillas frente a él, y comencé a chuparselo, su pene no era muy grande, por lo que entraba fácilmente a mi boca, sentía su vello púbico en mi cara cuando chupaba el pene hasta la base, no podía creer lo que estaba haciendo, pero no me sentía tan nervioso, estaba muy exitado, seguí chupando un rato más hasta que el hombre tomó mi cabeza y la empujó contra su pene mientras gemia y hechaba chorros en mi garganta, por un momento pensé que me ahogaria, pero logré controlarme. Me puse de pie y me quedé con el semen en la boca, no sabía que hacer. El hombre solo me sonrió y me agradeció, y salió cuarto.
Rápidamente decidí tragarlo, sabía diferente a mi semen. Me fui a las regaderas, el agua estaba caliente, se sentía bien, mi ereccion aún estaba como roca, derrepente escuché la puerta abrirse y vi a otro hombre entrar, para este momento ya tenía más confianza y morbo, por lo que me voltee de frente a el, mientras me bañaba, dejando a la vista mi pene, el simplemente miraba y se puso en la regadera de al lado, note que me seguía mirando, así que comencé a masturbarme lentamente, el hombre salió de la regadera y fue asentarse, el apuntaba a su pene mientras me miraba, por lo que fui, me puse de rodillas como la vez anterior y comencé a chupar, este hombre era más agresivo que el anterior, ya que constantemente empujaba mi cabeza para que su pene entrara completo, llevaba unos minutos cuando escuché la puerta abrirse de nuevo, habían entrado dos hombres, ellos solo miraban atentamente mientras caminaban, pero pasaron directamente al cuarto del sauna.
Al igual que el anterior, se vino en mi boca, y lo trague casi inmediatamente. Después nos quedamos platicando unos minutos, antes de que el se retirara, yo entré a la puerta que del sauna, ahí había una pasillo con 6 puertas, dentro de uno de esos cuartos se escuchaban gemidos, pero muy suaves y al fondo había un vapor más grande para todos, quise ir al del fondo, ahí había muchos asientos e incluso mesas, casi todos estaban desnudos, y varios estaban teniendo sexo, yo recordé que dejé mi toalla el otro cuarto, me puse nervioso y no sabía si regresar o quedarme, pero preferí regresar, aunque mi toalla ya no estaba, me asuste un poco pero intente tranquilizarme.
Volví al vapor grande y me senté al fondo del todo, al lado de mi había un hombre acostado al lado mío, el tenía su toalla puesta, pero flexiono sus piernas dejando ver su pene, el volteaba a verme, yo me acerque y directamente lo puse en mi boca, varios hombres a mi al rededor se masturbaban mientras veían, yo seguía en lo mío, hasta que el hombre terminó en mi boca, era la tercera vez que tragaba semen, ya no sentía pena, sino mucho morbo, me gustó que me vieran mientras hacía algo así.
Después de ello decidí ir a uno de los cuartos que estaban, dentro era un sauna más privado, me quedé a descansar ahí, pero no fue tan tranquilo como pensaba, ya que a los minutos entro a hombre, el fue muy directo y dominante conmigo, mientras yo le chupaba, el estaba metiendo dedos en mi culo, era algo doloroso, pero me gustaba, después, me ordeno que me sentara en su pene, me asuste un poco y dude en hacerlo, pero estaba tan caliente que lentamente me senté en su verga, salían muchos quejidos de mi boca, pero el me tomó de los hombros y me empujó hasta el fondo de su pene, sentí un dolor muy fuerte, así que no me moví por mucho tiempo, hasta que ese dolor pasó.
Comencé a moverme lentamente, aun dolía, por eso lo hacía lento, estaba temblando, no creía lo que estaba pasando, el día anterior estaba masturbandome imaginando un hombre dentro mío, y ahora se había hecho realidad.
Con el tiempo deje de sentir dolor y aumente la fuerza y la velocidad, mientras pequeños jemidos y suspiros salían de mi boca. El sonido de aplauso también comenzo a escucharse, estaba tan sumergido en la situación que dejó de importarme si hacía ruido o no, solo quería seguir, pasaron los minutos y el hombre tomo firmemente mi cadera mientras me decía que ya me había preñado, me sentí tan exitado, quería más, pero me fije en la hora, y ya era algo tarde, me quedé unos minutos procesando lo que paso, y salí salí sauna, había mucha menos gente. Regrese a las regaderas y baje las escaleras, teniendo cuidado de que nadie me viera por la entrada, pero el hombre ya había cerrado la puerta, me vio y sonrió.
Me dijo que si me había gustado, y yo solo sonreí, tambien me pregunto por mi toalla, pero le dije que no la encontré, aunque no me importaba estar desnudo, me ofreció una silla para sentarme, acepte unos minutos, para aclimatarme al ambiente fresco, pero le dije que tenía que irme por mi papá. Entre a los casilleros a sacar mis cosas, note que estaba vacío y lo primero que hice fue revisar mi teléfono, vi que mi papá había mandado mensajes, donde decía que había tenido que salir y que llegaría al siguiente día en la noche, sentí algún tipo de emoción rara.
Tome mis cosas pero no me vestí, sabía que había un lugar de cruising en esa misma calle, además era muy solitaria, así que nadie me vería. Salí con mis cosas en la mano, el hombre se sorprendió y pregunto si saldría así, a lo que yo respondí que si.
Al salir una mezcla de emoción y miedo estaban dentro de mi, camine por la calle solitaria y obscura, con el miedo de que alguien me viera, pero afortunadamente no fue así. Llegué a la zona de cruising, tuve que adentrarme en una zona con muchos, solo había algunas luces que alumbraban suavemente.
Espere unos minutos hasta que vi a un hombre acercarse, sacó su pene frente a mí y yo comencé a mamar casi automaticamente, luego de unos minutos, me pidio voltearme, obedecí y me puse en 4 encima de una piedra permitiendole estar de pie mientras me cogia, puso su pene dentro mío, gracias al hombre anterior, ya estaba lubricado y algo dilatado. El me cogia muy duro, mis nalgas chocaban contra su cadera y suspiros salían de nuestras bocas. Después de unos 10 minutos, escuché sus gemidos entrecortados y como su pene palpitaba dentro de mi, indicando que se había venido, después de eso, el simplemente se retiro, apenas estaba por incorporarme, cuando sentí a otro hombre tomarme por la cadera y empujar su pene en mi ano, ya no dolía tanto y decidí dejarme, después de unos minutos me preño, quise quedarme en esa posición.
Y unos momentos después, un nuevo hombre estaba dentro mío, e igual que los otros, se vino rápidamente, pero ese fue el último, ya que decidí levantarme, sentía las gotas de semen escurrir por mis piernas.
Mire el reloj y ya eran las 2 am, pero el morbo de estar desnudo aun seguía, así que salí de la zona de árboles camine unos metros hasta llegar a una zona más alumbrada, donde me finalmente me vestí, llegué a casa, me sentía muy cansado, me senté en el sillón, y recordé que aún no había terminado, así que me baje el pantalón y me masturbe, me vine más rapido de lo que pensé, y nunca había tenido un orgasmo tan fuerte, el semen salía a chorros, llegando incluso a mi cara, sin darme cuenta me quedé dormido
Divino relato, en los saunas hay que desinhibirse y la pasas rico, hasta bukake te salen
coomosigue
Ay, eso es lo que estoy necesitando, yo me quedaría toda la noche poniendo el culito a entera disposición de los machos que quisieran preñarlo.