Paulo el negrito

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Soy Raúl vivía en un barrio a las afueras de la ciudad hace años, tenía 17 años y como todos los de mi edad estaba siempre muy caliente y pensando en lo mismo, un día estaba en una casa abandonada por fuera del barrio pues haciendo mis necesidades y de repente oí voces.

Eran 2 chavalillos Lalo de 12 años que era un cabrón de cuidado y Paulo de casi 10 años un negrito portugués de madre de Cabo Verde y su padre portugués marinero que casi nunca estaba en casa, bueno el Lalo estaba detrás de Paulo restregándose con el culo, le cogía la mano al negrito y le decía que se la acariciara a lo que le decía que no pero tampoco quitaba la mano de la polla, Lalo tras forcejear un poco le había bajado el pantalón a Paulo y dejo ante mis ojos un culito precioso respingón y por lo que se veía durito, Lalo paso enseguida a restregarle la polla por todo el culito y se lo pasaba por la raja, a estas Paulo ya estaba agachado a cuatro asomado a la ventana (seguramente para controlar que no viniese alguien), Lalo le decía que se la iba a meter y Paulo le decía que no pero no se quitaba solo sonreía como cuando se hacía alguna trastada, Lalo paso y se puso frente a Paulo y le acerco la polla a su boca y le dijo chúpamela y déjamela bien mojada para metértela mejor, el otro le decía que no pero nada más se la puso en los labios por arte de magia se la metió en la boca y casi se la trago entera, Lalo lo bombeo un poco y el otro se dejaba hacer, se la saco de la boca y Paulo agarrándolo de los huevos se la empezó a chupar como el mejor de los chupetes, la saboreaba desde los huevos hasta la punta se veía que le gustaba y mucho estuvo así un ratito hasta que Lalo le dijo que se la iba a meter.

Paulo le decía que no pero sin fuerza, Lalo se escupió en los dedos y se los metió en el culo, al otro se le formo una cara de placer inmensa y movía el culo como pidiendo guerra, Lalo no se esperó mucho y se la puso en el hoyito apretó y se la fue clavando toda, cuando se la metió toda Paulo le dijo que no quería pero con el culito bien en popa y entonces Lalo se lo empezó a serruchar como decimos nosotros por acá, Paulo no paraba de gemir y de decir de vez en cuando que no quería pero en plan mimoso y Lalo le daba bien fuerte, yo estaba en silencio y con la polla que podría partir un bloque de lo dura que la tenía viendo aquello, de repente oímos que la mama de Lalo lo llamo a gritos para que fuera, con cara de desilusión de los dos se la saco y le dijo no te pongas los pantalones que vuelvo enseguida para seguir, Paulo le dijo mimosamente que no que él no quería y Lalo le dijo que se callara que él sabía que le gustaba mucho y salió corriendo para su casa.

Paulo se quedó así a cuatro patas con el culo al aire mirando por la ventana como Lalo se iba corriendo, yo con la polla a reventar fuera me fui acercando sigilosamente hasta llegar junto a él, no le di tiempo a que se girara, lo agarre de la cintura y le arrime mi polla, el intento zafarse pero lo tenía bien cogido y le dije bajito, no te preocupes que yo solo voy a continuar lo que te estaba haciendo Lalo, él me decía que él no quería hacer nada que era que lo obligaba, yo le dije que me daba igual que se la iba a meter restregándosela bien por su raja, él me dijo que no podría pues la mía era muy grande, me eche para delante y se la puse en la cara y le dije chúpamela y así me la mojas bien y veras como te va a entrar toda muy bien, puso una cara de asombro cuando la vio, la cogió con una mano y me dijo pero es que es muy grande, le dije que se callara y que me la chupara y así hizo, joder con el negrito sí que sabía chupar una polla, le dije que si le gustaba y sacándosela de la boca me dijo que no y siguió chupándola con mucho entusiasmo, vaya pensé a este le gusta negarlo todo pero lo disfruta muchísimo, se la saque de la boca aunque por lo visto él no quería y me puse detrás le eche saliva en su hoyito que estaba bien dilatado y le puse la punta apreté con cuidado y note como su culito le daba cobijo a la punta, apreté otro poco y le metí un buen pedazo, Paulo me dijo que no quería pero mimosamente, le dije que se callara que sabía que le gustaba tener una polla en su culito, apreté más y casi se la metí toda notando que la punta tropezaba con el final de su hoyito pensé, se quejó un poco y me volvió a decir que se la sacara.

Me quede quieto un momento y luego comencé a moverme despacito sacándole un pedazo y volviéndoselo a meter, el no paraba de gemir y de ofrecerme el culito hacia mí, ya tenía un ritmo lento pero sabroso disfrutaba de su culito bastante y el de mi polla, ya éramos los dos los que nos movíamos dando un ritmo como decía lento pero placentero, le decía lo rico que tenía el culito y que me lo iba a follar siempre que iba a ser mi noviecita secreta (eso lo animaba y me arrimaba más el culito para que se la clavara bien), a todo él me decía que no mimosamente, ya estábamos follando bien entregados a todo, le dije que si le gustaba mi polla y me dijo que no entonces se me ocurrió parar un momento diciendo bueno pues si no te gusta te la saco echándome hacia atrás y sacándola casi toda, entonces Paulo vuelve a decir no pero echando el culito hacia mi tragándose otra vez mi rabo, sonreí y le dije vas a ser mi novia la mimosa el negaba con la cabecita, estuvimos así un buen rato hasta que ya yo note que me iba a correr y le dije que le iba a llenar su culito de mi leche y el seguía negando mientras yo me corría, lo apreté contra mí y por fin se la clave toda, el movía su culito buscando ordeñarme hasta la última gota de leche que tenía mi polla, me quede quieto y era el quien seguía moviéndose lentamente saboreando totalmente la follada que le había dado.

Cuando se la saque el corrió a un lado de la habitación y echo todo lo que le había metido en su culito, se echó un par de pedos incluso, se quedó mirando para mí con cierta desconfianza, le dije te gusto, él me dijo que no, yo riendo le dije que me daba igual que a partir de hoy vas a ser mi novia y te voy a follar todas las veces que quiera, me limpie la polla con una servilleta y le dije mírala bien pues la vas a tener que mimar mucho pues a ella le gustan los mimos y tú sabes darlos muy bien, el negaba con la cabeza, le dije que si el Lalo se lo había follado muchas veces, pensó un poco y me dijo que 5, solo el, agacho la cabeza y me dijo que no, quien más entonces y me dijo que el primero había sido un amigo suyo en Cabo Verde, él y Lalo eran los únicos, yo miraba por la ventana y no había rastro del Lalo, le dije Paulo ven aca y dale unos besitos a mi polla que tiene ganas, no me volvió a decir pero acercándose, agachate le dije y asi hizo quedando mi polla a la altura de su boquita me acerque y le dije chupamela como tu sabes que lo haces muy bien, la agarro y chupaba con un arte y ganas que se sabia que las había chupado antes y ya era un experto, la chupo un buen rato llevándome al mayor placer que se puede uno imaginar, hasta que ya me tenia a punto de correrme le tenia metida en su boca la mitad mas o menos y le dije que me iba a correr y que se comiera toda mi leche, el me negaba con su cabecita lo cual hizo que estallara en su boca, Paulo en vez de sacarla la dejo y chupaba como un becerrito toda la leche que eche la limpio completamente, cuando acabo le dije que si le había gustado y como era de esperar me dijo que no pero sin soltar en ningún momento mi polla.

Contare mas adelante como lo hice también con su hermana María de 10 y medio y como me acabe follando también al Lalo