Perversas Pasiones Parte 4

Abraham siente estar en la luna, aunque no por mucho.

Perversas Pasiones

Capitulo 4

Tiempo sin verte

 

Hace algunos años, en un dia lluvioso, un niño de tan solo 10 años lloraba en una esquina de su habitación sentado con los brazos sobre sus piernas y la cara oculta sobre ellos, el nunca se imagino como era estar solo, hasta ese momento, deseando que él volviera, lo abrazara y le digiera que lo quería mucho, que lo llenara de besos y que siempre estuviera con el. Y de los deseos mas profundos surge aveces el odio mas destructivo. Eso aquel niño lo supo años después siempre soñó en que si aquella situación que lo marco hubiera sucedido de manera diferente, el seria completamente feliz, pero con el pasar de los años el anhelo se convirtió en rencor, por una persona que creyó que lo amaba y luego lo olvido y por otra que le quito absolutamente todo sin compasión y en toda situación hay una balanza que un cuarto llego para remover todo aquello, pero… ¿a que costo?

Narra Baltazar

Al fin lo tenia, tenia a Abraham solo para mi, y aunque me costo, igual lo conseguí, a el, mi alma gemela, mi redención. Llegamos a mi casa y veo como los ojitos verdes de mi amado se abren enormemente al ver la estructura de la casa, algo colonial.

-¿te gusta por que todo esto sera tuyo?

-para mi -pregunta el ilusionado.

-lo mejor para ti bebe.

bajamos de la camioneta, saco su maleta de la cajuela, lo tomo de la mano y caminamos hasta la entrada, toco un par de veces y mi madre nos abre la puerta y al ver a Abraham, lo abraza y le besa la mejilla.

-Mi hijo me dijo que eras hermoso, pero mírate eres todo un angel, ven cuéntame de ti, que me muero por conocerte -dice mi madre eufórica tomando a Abraham de la mano y llevándolo a la gran sala de estar.

-yo llevare tu maleta a mi habitación, en un momento me uno a ustedes -digo subiendo las escaleras.

Después de llevarla me uno a Abraham que habla muy animadamente con mi madre de no se que cosa.
Me siento junto a mi amado y comenzamos a hablar de nuestra relación.

-Te adoro Abraham, eres hermoso por dentro y por fuera, que bueno que mi hijo se topo contigo, no lo veia sonreír así desde hace años y el brillo en su mirada demuestra lo mucho que te ama -dice mi madre tomando la mano de Abraham -y tu Baltazar cuida al diamante que tienes enfrente -me reclama.

Yo rio por su comentario y Abraham agradece sonrojado por los alagos de mi madre, pero eso es lo sue tiene Abraham, que a donde quiera que vaya todos lo aman. Pasamos la tarde entera charlando hasta que cae la tarde y mi mama mira su reloj y se espanta al ver la hora.

-Dios mío que tarde es, Bueno chicos me tengo que ir, Baltazar, le dije a la muchacha que prepara la cena por si tienen hambre, las sirvientas ya se fueron así que tiene la casa sola y tu padrastro y tus hermanos ya te extrañan en casa, así que te espero para comer mañana, ya quiero que todos conozcan a Abraham y tu cariño estas en tu casa pásatela bien -dice despidiéndose de nosotros.

La acompañamos hasta su auto y arranca.

-creí que tu mama vivía contigo -pregunta Abraham mientras caminamos abrazados a la casa.

-no, ella vive con su esposo y mis medios hermanos en otra casa al otro lado de la ciudad yo preferí quedarme aquí ya sabes para no estorbar -le contesto.

-¿entonces de quien es la casa?

-Ahora es tuya -lo cargo en brazos y lo beso en los labios.

Entramos a la casa aun besándonos , cierro la puerta con el pie, lo bajo y quedamos frente a frente en medio del pasillo.

-Al fin solos tu y yo -le digo seductoramente.

El se sonroja y se muerde el labio, Dios me esta matando.

-¿Quieres darte un baño? -le digo aunque mas que una pregunta era una orden.

El solo se deja llevar, llegamos al cuarto del baño, abro el grifo y dejo que la tina se llene, mientras me acerco a Abraham.

-Si quieres tu puedes empezar a cenar, yo me baño rápido y te acompaño -dice tímidamente con mucha inocencia.

-Quien dijo que quería cenar, Yo quiero ayudarte, eres como un muñeco de porcelana al que quiero cuidar siempre -me acerco a sus labios y paso mi lengua por ellos suavemente.

El trata de decir algo pero evito que diga algo poniendo mi dedo en sus labios

-no digas nada, yo me encargare de todo -susurro cerca de sus labios.

El obedece y se queda inerte frente a mi, bajo mis manos a sus caderas, levanto las orillas de si camiseta y se la quito lentamente deleitándome de su abdomen y sus 2 rosados pezones, desabrocho el botón de pantalón, bajo el cierre y luego me inclino a la altura de sus pies para quitarle los zapatos y calcetines, alzo la vista y lo veo ardiendo de las mejillas sonrió ante la situación, tomo de su pantalón y lo bajo hasta sus tobillos y queda frente a mi su boxer de color blanco con un leve bulto marcado, paso mi mano por su miembro flácido varias veces haciendo que se ponga duro y sacandole varios gemidos a Abraham, me pongo de pie, bajo sus calzoncillos y ahi puedo ver su pene rosado y brillante de la punta, quiero meterlo en mi boca, pero tengo que esperar, el se tapa con sus manos su entrepierna mirándome avergonzado.

-Amor, no tienes por que avergonzarte, si por mi fuera te vería desnudo todo el día, todos los días, eres hermoso y es un privilegio tenerte -lo beso.

Tomo su mano y hago que entre a la tina, y la vista que me ofrece es perfecta, a el delicado y hermoso mojado y sonrojado, tomo el gel de baño y lo derramo en la tina para que haga espuma, luego comienzo a desnudarme bajo la atenta mirada de Abraham que al ver saltar mi verga completamente dura abre su boca impactado.

-¿Que? -pregunto.

-Nada, solo es que, es muy grande -dice tartamudeando.

Rio y entro a la tina quedando frente a el, coloco mis piernas encima de las suyas con las rodillas flexionadas, le abro las piernas con lo pies y quedamos unos momentos en silencio luego tomo la botella de gel, vierto un poco en mi mano y lo paso por su cuerpo y su cuello, mojo su pelo, me pongo encima de el y nos hundimos en el agua para quedar empapados, nos miramos fijamente, no puedo soportorlo mas y me lanzo a besarlo apasionadamente metiendo mi lengua hasta su garganta me meto entre sus piernas y nuestros miembros erectos se tocan, muevo mis caderas de adelante hacia atrás, rozando nuestros penes, que por lo caliente del agua hacia que se sintiera magnifico el, escapándosele algunos gemidos a Abraham, acelero la fricción y siento como su cuerpo se tensa y su pene se contrae arqueando su espalda.

-Mmm ahhhh -gime Abraham.

-¿te gusto nene? -beso su cuello.

-S-si -dice con la voz entrecortada.

-haremos el amor Abraham.

Bajo hasta su pecho y ahi me encuentro 2 pequeños botones rosas completamente duros, pase mi lengua sobre ellos y los chupo provocando el mas hermoso de los sonidos, los gemidos de Abraham, sigo rozando mi verga en su pene que ya esta erecto de nuevo mientras me turneo para chupar sus dos pezones. Subo mi lengua hasta su cuello y lo muerdo dejándole una marca roja en su pálida piel, vuelvo a besarlo en la boca y con mis manos recorro su tersa piel hasta llegar a sus caderas, levanto su pierna y busco con mis dedos su entrada, meto un dedo, pero Abraham se asusta y frunce el culo, dejo mi dedo ahí esperando que se relaje.

-¿nadie te ha tocado aqui? -pregunto moviendo mi dedo dentro de su recto.

El hace muecas de dolor y niega.

-por supuesto que no -río y empujo mas mi dedo.

Siento que su culo se dilata por el agua caliente y los movimientos de mi dedo, se lo saco y me pongo de pie frente a el apuntando mi verga hacia su cara, veo su boca entre abierta y me da deseos de hacer muchas cosas con su linda boquita, le tiendo mi mano para que me de la suya y estando los dos de pie, nos miramos y sabemos lo que queremos, salgo de la bañera y cargo en brazos a Abraham hasta mi habitación, lo acuesto delicadamente en la cama y me quedo viéndolo unos momentos, desnudo, tan hermoso con esa verguita que muero por deborar, me subo a la cama, abro sus piernas y meto entre ellas a la altura de su pene lo tomo con mis manos y comienzo a chuparselo, el comienza a gemir por las sensaciones que le provoco, se retuerze tomando de mis cabellos empujando mi cabeza mas a su entrepierna hasta que siento el tibio semen de Abraham explota en mi garganta, me reincorporó y lo veo a los ojos.

-eso tampoco te lo habían hecho -me lamo los labios saboreando el néctar de mi amado.

-todo esto nunca lo había sentido -dice Abraham agitado y con los ojos cerrados.

-entonces preparate que viene lo mejor -vuelvo a ponerme a la altura de sus caderas, levanto sus piernas y veo su anito rosadito, dilatado acerco mi cara y con la lengua recorro todo su interior estoy asi durante unos minutos, me acomodo entre sus piernas y apunto mi verga ya chorreante a su culo, le doy algunos topes y lentamente comienzo a entrar dentro de el, me dice que le duele, pero no quiere que me detenga, y yo estoy en el mejor de los paraísos, se siente tan bien, tan caliente, tan húmedo, que estoy a punto de venirme, cuando ya esta toda dentro la dejo unos momentos para que se acostumbre, luego comienzo a meterla y sacarla lentamente, los dos comenzamos a gemir, el me toma de las nalgas deseando que se la meta mas profundo, me las acaricia y eso hace que el placer incremente.

-Te amo tanto, Abraham

Y el mas increible de los orgasmos llega, chorros, y chorros en su interior y el llega a su 3er orgasmo los dos gritamos de placer, dejo caer mi todo mi peso sobre el, Abraham me abraza y cansados nos dormimos al instante.

Narra Abraham

Despierto, los rayos del sol nos iluminan a Baltazar y a mi, estamos desnudos y abrazados, anoche fue la mejor de mi vida, Balto me hizo sentir cosas que no sabia que se podían sentir.

-Buenos días Amor -dice Baltazar viéndome somnoliento.

-Bueno dias amor mio -contesto sonriendole.

Me da un pequeño beso en los labios.

-Tenemos que levantarnos ayer no comimos nada y debes tener mucha hambre, luego iremos con mi madre y después vamos a ir con mi prima a ver algunos asuntos de su boda, y aprovecharemos para comprarte un lindo traje -me sonríe y se levanta de la cama.

Baltazar se para frente a la ventana y mira hacia fuera, trato de levantarme pero la cadera me duele un poco quitó las sabanas que durante la noche nos pusimos y veo que entre mis piernas hay sangre mezclada con semen, Baltazar lo nota y se acerca.

-me regalaste tu virginidad, el mejor de los regalos -me abraza. -ven vamos a limpiarte

Me toma de la mano y lleva nuevamente al baño, enciende la regadera y entramos en ella, me voltea y toma algo de jabón liquido y lo esparce por todo mi culo y en medio de mis piernas, el agua caliente cae sobre nosotros cuando siento que su erección me roza las nalgas, giro un poco la cabeza y el me gira rápidamente quedando frente a el, me mira fijamente y hace presión en mis hombros agachandome, quedando frente a su grueso y palpitante miembro, Baltazar mete un dedo en mi boca abriendola ligeramente, pone su glande en mis labios, yo saco la lengua para saborear y el comienza a meter todo su pene en mi boca, apoyo mis manos en sus caderas y comienza hacer un vaivén metiendo toda su hombría en mi boca, me da arcadas, pero el no se detiene continuamos asi durante varios minutos hasta que lo saca y se viene en mi cara, me levanta y me besa, luego nos lavamos y salimos de la ducha
Y nos vestimos rápidamente, yo con unos jeans vaqueros y una camisa de manga corta blanca y el con con un pantalón de vestir negro y una camisa polo verde militar y zapatos negros, nos dirigimos a la cocina y las sirvientas ya tienen el desayuno listo, Cafe, fruta picada, jugo de naranja y pan francés, wow nunca había visto tanta comida solo para el desayuno, en mi casa siempre desayunabamos huevos fritos y con tocino algunas veces. Me ruge el estomago solo de ver la comida, quiero lanzarme y devorar todo, pero eso me haría ver como un muerto de hambre, Baltazar mueve la silla para que yo me siente, lo hago y comienzo a comer un poco de todo, todo me sabe a gloria, Balto solo me mira con una sonrisa bebiendo de su café, y comiendo un poco de fruta, cuando terminamos me ofrece ir a lavarnos los dientes, después de que lo hacemos vamos a la cochera donde hay varios autos de todos colores y tamaños incluso veo aquel auto donde me llevo al hotel aquella vez que vine a Tijuana, esta vez escoge un deportivo rojo, me abre la puerta y entro, nos damos caminos por las calles mas transitadas de Tijuana, me siento como una celebridad en este bonito auto, con el sol y el aire fresco de la mañana dandome en la cara, llegamos a casa de su madre en una villa de gente acomodada, es una casa mas sencilla que la de Balto, pero aun así es bonita, parquea el auto y bajamos tomados de la mano, nos abre una señora morena vestida de sirvienta, nos hace pasar y Marta la madre de Balto llega felizmente a saludar besándome las 2 mejillas en eso llega un hombre de la edad de Marta con un vaso con liquido ámbar en la mano.

-Baltazar que bueno que viniste -dice saludando y luego abrazando a Balto -y mira nada mas que belleza traes a un lado, creí que tu madre exageraba, mucho gusto soy Luis -me toma la mano y besa mis nudillos.

-el gusto es mio señor, yo soy Abraham -digo sonriendo.

Baltazar me ve orgullosamente y toma mi mano.

-Gracias Luis, por cierto quería hablarte de algo, crees que podamos tener un día libre -pregunta Balto.

-Claro Campeón, sabes que aqui estoy para lo que necesites. -dice Luis sonriendole.

-Bueno, me voy a robar a Abraham unos momentos, ponte cómodo Baltazar la comida estará lista en unos minutos, -Marta me toma del brazo y caminamos a la cocina.

En eso 2 niños como de 8 años pasan corriendo a un lado de nosotros.

-no corran y vayan a saludar a su hermano -grita Marta.

Los niños van rápidamente a donde Baltazar y Marta y yo llegamos a la cocina y comenzó a hablarme de planes a futuro.

-Sabes deberíamos reunirnos cada martes y tomar el te, pero ya nos pondremos de acuerdo otro dia, lo que si te digo es que debo llevarte al Brunch el sabado con las chicas del club, ya quiero presentarte con las víboras de mis amigas, créeme que tu siendo hombre eres 1000 veces mas hermoso que las nueras de ellas. -dice mientras observa a las sirvientas terminar con la comida.

-claro, me encantaría pero aun no se cuanto tiempo me quede -confieso.

-de eso ni te preocupes el bobo de mi hijo seguro y te pide matrimonio pronto, lo conozco y es muy aventado.

Bueno ya lo hizo, pienso en mis adentros, solo que no termino de la manera que el esperaba.
La tarde paso, comimos y salimos corriendo hacia el lugar donde se celebraría la boda, la prima de Baltazar ya nos espera con su prometido así que vamos lo mas rápido que podemos, cuando llegamos entramos a una finca muy rustica perfecta para celebrar una boda, nos encontramos todos y comenzamos a saludarnos.

-Baltazar, te sacaste la lotería -dice el prometido de la prima de Balto mirándome.

-si, es una verdadera belleza  -Baltazar me sostiene por la cintura poseyéndome.

yo sonrió ruborizándome, en ese momento llega la novia, que no se parece nada a Baltazar, ella es mas sencilla, se llama Karen y se ve que es buena persona, me abraza y vuelve a decirme lo lindo que soy, estoy acostumbrado a este tipo de comentarios ya que en mi pueblo cada vez domingo que iba a misa con mis padres, las personas siempre detenían a mi mama para comentarle que era afortunada al tenerme, después vemos con mas detenimiento el lugar, ayudo a Karen con los pendientes que faltan y 2 horas después terminamos, la boda será en 2 días así que Karen esta un poco nerviosa, quiero calmarla, pero la verdad es que yo no se nada de esto, así que le digo, que es el día mas feliz de su vida, y debe disfrutarlo, luego salimos del lugar y vamos a un bar cercano para beber algo, empezamos a platicar muy amenamente hasta que Karen menciono algo que dejo Helado a Baltazar.

-estamos muy agradecidos con tu papa, acepto ser nuestro padrino de bodas, y pago la mitad de los gastos, -dice ella sonriendo.

-¿Mi padre? ¿Es tu padrino? -dice el tratando de disimular su incomodidad.

-si, tu mama nos paso su contacto, y dijo que vendrá.

-Me alegro, creo que será una boda genial, -carraspeo Balto -Abraham tenemos que irnos, es tarde.

Lo obedezco, el se levanta primero y no me espera, ¿Qué le pasa?, que dijeron que le molesto tanto, me despido de los futuros esposos y salgo detrás de el, subo al auto y arranca hacia la casa, durante el camino, no nos dijimos nada, no tomo mi mano, ni beso mis mejillas, tan rápido se canso de mi, eso era a lo que mi mama se refería. llegamos a la  casa y Baltazar baja sin decir nada entra  y va a encerrarse al baño, quiero entrar, pero no se que le pasa, para poder solucionarlo, tuvo esa actitud de la nada, y no que que voy a hacer. después de mucho pensarlo decido entrar al baño y encuentro a Baltazar en la tina con la cabeza escondida entre las piernas y sollozando, me acerco lentamente a el, alza la mirada y me ve.

-perdóname Abraham, no soy bueno para ti, soy malo estoy destrozado, no puedo hacerte esto a ti -dice con los ojos rojos de tanto llorar.

me rompe el corazón verlo así, con los ojos rojos, y totalmente quebrado y se en ese momento que su tristeza tiene una solución, nomás te falto yo.

-déjame estar a tu lado te juro que puedo sanar tu alma rota -me inclino para quedar frente a frente.

lo abrazo y el suelta a llorar en mi hombro, despues de todo eso es lo que un buen novio hace, estar siempre para tu hombre.

Abraham no lo sabia en ese momento, pero acababa de entrar en un juego perverso del que nunca podría salir, ahora solo queda dar lo mejor de el para salir victorioso de, aunque será muy complicado.

y por otro lado lejos de ahí, se encontraban 2 viejos amantes entregados a las mas perversas pasiones haciendo el amor o coger como ellos lo llaman, gimiendo, sudando bajo el calor de la noche, también volverían a reanudar aquella partida que creyeron finalizar , dejando un corazón roto en el camino. 

• hay chicos que les digo me encanta escribir esta historia, lamento no actualizar seguido pero la pagina anda muy mañosa en publicar los relatos, pero bueno solo queda decirles que lo bueno comienza en el siguiente capitulo, que llevara por titulo -Algo extraño pasa con Baltazar- abra encuentro inesperados que desencadenaran locura.