PLACER EN EL RANCHO DE DAVID PART 4

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por angelblack.
Los hijos de David también se apuntaron para ir con ellos, entonces Alex llamo a Manuelito para que él también los acompañara, ya que sería un viaje rápido y regresarían pronto al rancho.

Al llegar a la ciudad, lo primero que hicieron fue comprar el material para construir la casa donde Alex, después de hacerlos pagos preguntaron por algunos albañiles para que realizaran dicha obra; luego de haber hablado con varios de ellos, contrataron al que mejor opción les dio y así cerraron el trato.

Después todos partieron al centro comercial, donde David tenía que comprar algunas cosas de despensa que su esposa le había encargado, los pequeños corrieron a buscar algunas golosinas y frituras mientras los 2 hombres adultos buscaban lo encargado.

Cuando pasaron por el área de farmacia, Alex pidió a David que lo acompañe para comprar unos condones, ya que aun no quería embarazar a su esposa, los dos hombres se dirigieron al farmacéutico donde Alex pregunto sobre los condones, el los quedo viendo por un segundo para después empezar a mostrar la variedad de marcas que había; El farmacéutico dio precio de alguno de los condones y tomándose el atrevimiento enseño un par de frascos de diferentes tamaños.

El farmacéutico viendo a los dos hombre agrego diciendo: “talvez les interese estos lubricantes para una mejor penetración”, ambos se quedaron viendo por instante y rieron de inmediato a carcajadas.

David: “no joven, los condones no los vamos a usar nosotros” jajajajajaja

Alex: “son para usarlo con mi esposa” jajajajaja

Farmacéutico: “mil disculpas, Lo siento señor” (todo rojo y apenado agacho la cabeza)

David: ¡no te preocupe hijo! “mejor ayuda a mi muchacho para que su esposa no quede embarazada” jajajaja

El farmacéutico todo sonrojado, empezó a mostrarles diferentes pastillas, inyecciones además de los condones, explicando cómo usarse así también como el tiempo de su efectividad, mientras Alex quedaba atento recibiendo dicha información, David tomo los frascos leyendo la información de su contenido; Por fin Alex se convenio por unas inyecciones dejando a un lado los condones y justo cuando el pagaría por dicho medicamento, David agrego uno de los frascos a la compra.

Alex: ¿y para que quiero yo esto?

David: “cómpralo”, ¡ya verás cómo te va a servir!

David, Guiñando el ojo se empezó a reír, al mismo momento que volteaba a ver al pequeño Manuelito, Alex entendió de inmediato lo que David le había dado a entender, por lo que pago por ambos productos; así pues, después de conseguir todo lo encargado, salieron del centro comercial rumbo al rancho.

Cuando llegaron al rancho todos llevaron las cosas a la cocina, en un descuido sin que nadie se diera cuenta, David tomo de la mano a Manuelito llevándolo al cuarto donde dormía, al entrar David se sentó en la cama, hizo que el pequeño se bajara el pantalón dejando sus nalguitas expuestas, llamo a Manuelito embrocándolo sobre sus piernas, destapo el frasco y coloco en sus dedos de aquel líquido.

David Separo las nalguitas del niño con la mano que estaba libre, puso sus dedos directo en el culito del niño introduciéndolos poco a poco, el pequeño se dejaba hacer por los dedos de aquel hombre, cuando de repente este paro, indicándole que subiera su pantalón.

David mostro al pequeño el frasco que tenía en las manos diciendo: “esto es para que te entre mi verga fácilmente en tu culito y no te duela”, Después ambos salieron cautelosamente del cuarto, pues el escucho el grito de uno de sus hijo que lo llamaban para ir a comer.

Justo Cuando todos terminaban de comer, escucharon el ruido de una camioneta que apagaba su motor a la entrada de la casa, David se puso de pie para ir a ver de quien se trataba, efectivamente era una camioneta 4×4, de ella bajo un hombre alto de 1,85 metros, vestía botas, pantalón mezclilla y camisa a cuadros.

Aquel hombre se dirigió a David, estirando la mano se presentó como John, David de inmediato se dio cuenta que aquel hombre no era de estos rumbos, ya que su acento lo delataba, David invito lo invito a pasar a su casa, la esposa de Alex de inmediato preparo agua de naranja para recibir aquel extraño.

Después de estar platicando por un rato, John se presentó como catador de café, también comento que en su visita a otros ranchos, escucho mencionar el rancho de David y estando cerca quiso aprovechar para visitarlo de una vez.
David al escuchar esto, ordeno a Alex ensillar unos caballos para dar un recorrido con John.

Así pues partieron al cafetal, al llegar John se quedó maravillado con aquella vista que le proporcionaba la naturaleza, mientras aquel hombre hacia su recorrido, David le comento que en un par de meses “empezarían con la cosecha del café”.

Después de un rato de observar las plantas de café, David se mostró muy hospitalario con aquel hombre invitándolo a pasar la noche en su casa, él sabía que si era recomendado por su café, tendría buenas ganancias con su cosecha; a John le pareció buena idea en quedarse una noche en aquel bonito lugar.

Cuando los 3 regresaban, se toparon en el camino con los 4 niños, Alex pregunto a donde iban, ellos respondieron que a bañarse en el arroyo, como John ya había aceptado quedarse por esa noche, David lo invito a conocer el lugar donde todos los días se bañaban; John un poco extrañado acepto la oferta que le proponía David.

Cuando llegaron a aquel lugar, John quedo sorprendido al ver el agua cristalina que estaba represada por unas bolsas llenas de arena para tener más profundidad, los niños de inmediato se lanzaron al agua, mientras John tomaba unas fotos con su cámara; dejando a un lado los caballos, David junto con Alex se desvistieron y entraron al agua acompañando a los niños.

David invito a John a entrar al agua, este se negó un poco pero pronto acepto dicha invitación, casi de inmediato empezó a desvestirse lanzando toda su ropa al suelo quedándose en bóxer; todos se quedaron hipnotizados viendo el cuerpo de John, aquella piel blanca, abdomen plano marcado por el ejercicio, brazos y piernas fuertes.

John se sumergió en el agua, platicando con los 2 adultos disfrutaba de la frescura del agua cristalina, poniéndose de pie fue por su cámara donde empezó a tomar varias a fotos a su alrededor, todos atento a los movimientos que el hacía, pero el que más atento estaba era Manuelito; quien no apartaba la mirada de aquel gran bulto que se marcaba con el agua atreves de la tela del bóxer.

Las horas fueron pasando, pronto empezaría a oscurecer, por lo que todos se vistieron regresando a la casa de David, entre platicas las horas fueron pasado rápido, por lo que John fue acomodado en el cuarto que dormía David, luego fue Alex quien se despidió de ahí, ahora David se había quedado solo con el pequeño Manuelito gracias a la autorización de su tío, no había nadie quien los interrumpiera.

David apago las luces dejando la tv prendida, desabrochando su pantalón, llamo al pequeño Manuelito para que se acostara en su regazo, en unos segundo aquella verga ya estaba dentro de la boca del niño, David suspiro profundamente, llevando su mano a las nalguitas del niño, bajo su short junto con su trusita, dejando expuesto toda su colita.

Sin perder más el tiempo, escupió buena cantidad de saliva en sus dedos, los cuales fueron a parar justo en el culito del niño, poco a poco uno de los dedos fue entrando para después seguir con el siguiente; por un buen rato, David estuvo lubricando con su saliva aquel culito metiendo profundamente sus grandes dedos, el culito del niño ya estaba totalmente abierto, listo para recibir la verga de David.

David repentinamente aparto a Manuelito de su verga tapándole la boca, pues escucho a su esposa llamarlo, haciendo callar al pequeño se puso de pie de inmediato mientras intentaba abrochar su pantalón, la esposa de David vio lo que su esposa estaba haciendo, así que de inmediato, metió su mano dentro de los pantalones de David, ella sintió aquella verga semi erecta y húmeda por la saliva del pequeño Manuelito.
Ella le dio un rico beso en los labios a su esposo, tomándolo de la mano lo llevo a su dormitorio cerrando la puerta con seguro.

El pequeño se quedó en la oscuridad por un instante asimilando lo que había sucedido, luego acomodándose su ropa y al ver que David no venía, empezó a subir las escaleras lentamente hasta llegar al cuarto donde David dormía, abrió la puerta cuidadosamente observando una silueta en la cama; cerró la puerta sin hacer ruido y muy despacio se acercó a la cama.

El cuarto era iluminado por la tenue luz de la luna que entraba por la venta, el pequeño Manuelito escucho los ronquidos que provenían de aquel hombre que estaba profundamente dormido, sin pensarlo mucho, se quitó toda la ropa tirándola al piso, totalmente desnudo levanto la sabana y se metió a la cama.

El pequeño Manuelito dando la espalda, se fue pegando cada vez más hacia el otro cuerpo, pasó su manita por atrás hasta colocarla suavemente encima de aquel pene totalmente flácido, para luego empezar a acariciarlo suavemente; el niño sintió un miembro totalmente diferente, más grande, más suave y sin pelos.

De inmediato se giró quedando frente a frente, su pequeña mano empezó a tocar el pecho, bajando un poco más, toco aquel abdomen marcado sin pelos, en ese momento se dio cuenta quien era la persona que tenía enfrente totalmente desnudo.

John estaba durmiendo profundamente en aquella cama, quien tal vez por la calor o por costumbre dormía totalmente sin ropa, el pequeño un poco atemorizado intento irse de ahí, pero por instinto su mano siguió bajando hasta tocar nuevamente aquel gran pene aun flácido.

Poco a poco el cuerpo de Manuelito empezó a descender hacia abajo, hasta que su cara quedo justo a la altura de aquel gran miembro, se acercó la cabeza un poco más, luego abrió la boca metiéndose aquella gruesa verga, no pudo meterse más que la mitad pues aun fluida, no le cabía en su pequeña boca.

Aquella verga sintió el calor húmedo que le estaban proporcionando, por lo que empezó a reaccionar poco a poco, en unos minutos y ante los estímulos provocados por la pequeña boca del niño, aquella verga despertó completamente mostrando así su verdadero tamaño.

John aun dormido profundamente, demostró por completo su hombría, aquella verga alcanzo los 23 centímetros de longitud con un grosor de 14 centímetros, pero el pequeño Manuelito siguió con su afán de devorar con la boca aquella gran verga.

Abriendo cada vez más su pequeña boca, Manuelito atrapaba completamente buena parte de aquella gruesa verga, ante aquel gran estímulo, John fue saliendo de su profundo sueño poco a poco, hasta despertar completamente; de inmediato reconoció aquella rica sensación empleada en su dura verga, intento quitarse pero su cintura reacciono diferente, empujando un poco hacia adelante suspiro y aquella verga entro un poco más en la boca de aquel niño.

El placer que sentía John era tan rico que cerró los ojos, dejo que aquella boca continuara mamándole la verga sin importarle de quien fuera en ese momento, Manuelito continuo mamando aquella verga por unos minutos más, luego de inmediato paro de hacerlo, John se sorprendió y abrió los ojos, pero de inmediato los cerro cuando sintió como aquella persona retro la sabana por completo, para después acomodarse de cucharita hacia él.

John Abriendo nuevamente los ojos, se quedó inmóvil fingiendo estar dormido, aquel hombre se estremeció al sentir una pequeña mano, Manuelito intentando empuñar aquella verga, la guio rápidamente hasta colocarla entre sus pequeñas nalguitas; luego empezó a moverse meneando la cintura lentamente, hasta que logro colocar la punta de aquella verga en la mera entrada de su culito.

Manuelito empezó a moverse suavemente ejerciendo algo de presión sobre aquella verga, haciendo que John se quede quieto disfrutando del momento, John ya estaba muy excitado, aquella verga lo demostraba expulsando gran cantidad de líquido pre seminal mojando cada vez más la entrada de aquel caliente culito.

Manuelito empezó a moverse con más ritmo, ejerciendo cada vez más presión sobre aquella verga, grave error para él, pues apenas hace pocos Minutos, los dedos de David habían dilatado lo suficiente aquel culito, dejándolo lubricado con su saliva y en uno de sus movimientos su culito se abrió, entrando la punta de aquella verga gracias a su lubricación por precum.

John se sorprendió al sentir como la punta de su verga atravesaba aquel culito, sintiendo lo apretado y calientito de su interior al ser atrapado por aquel pequeño esfínter; ero el gusto le duro muy poco, pues Manuelito se tensó por completo dando un salto hacia adelante, hundió su cabeza en la almohada quejándose del dolor mientras se sobaba su colita.

Cuando el dolor cedió, el pequeño Manuelito se bajó de la cama, el corazón de John se aceleró, sorprendido no podía creer que se trataba de un niño, sabía que eso estaba mal, pero se quedó quieto y tranquilo pues sabía que su gran verga nunca podría entrar en ese infantil culito; cruzando los dedos rogo porque el niño no regresara a la cama y que se diera por satisfecho ante aquel dolor provocado hace un instante.

Pero no fue así, el pequeño recordó aquel frasco que guardo David en el buro, destapo el frasco, aplicando una buena cantidad en sus dedos, los fue metiendo por completo en su culito, tomo un poco más e hizo lo mismo, John tenía los ojos abiertos observando lo que aquel niño Asia, cuando el pequeño se giró cerro los ojos, entonces sintió un gran escalofrió cuando aquella pequeña mano embarraba toda su gran verga con aquel líquido, principalmente la punta.

El pequeño subió nuevamente a la cama, poniéndose de cucharita fue acercándose lentamente al cuerpo de John, el corazón de aquel hombre le latía a mil sintiendo nervios ante el acoso de aquel niño, pero se tranquilizó, respirando profundamente dejo que el pequeño hiciera lo que quisiera, pues no había probabilidad de que su gruesa verga entrara en aquel culito del niño.

John quedándose quieto, sintió como la mano del niño guiaba nuevamente su dura verga entre sus nalguitas, acomodando la punta en la entrada de su culito empezó nuevamente hacer un poco de presión jugando con la entrada de su hoyito; Manuelito daba pequeños empujoncitos hacia atrás y poquito a poquito aquel culito empezó abrirse nuevamente.

Poco a poco la punta de aquella verga entro por completo, Manuelito gimió al sentir que parte de aquella verga había entrado, John sintió una fuerte punzada en sus bolas al sentir como su verga abría aquel apretado culito y por impulso abrazo fuertemente al niño empujando unos centímetros más de su gruesa verga.

El pequeño intento apartarse nuevamente al sentir aquella gruesa verga abrir su culito, pero fue inútil, pues John lo tenía sujetado fuertemente al estar fingiendo dormir, el pequeño se tapó la boca para no gritar, al mismo tiempo apretó las nalguitas para evitar que aquella gruesa entrara más en su culito.

John se quedó inmóvil abrazando al pequeño, controlando su respiración para no delatarse en que estaba despierto, ambos se quedaron quietos sin moverse por un tiempo, John sentía como el pequeño apretaba fuertemente su culito, sintiendo claramente como palpitaba tratando de amoldarse a aquel grosor de aquella enorme verga y él lo disfrutaba en cada uno de sus apretones.

Después de un tiempo de estar así pegados, sintió como el pequeño empezaba a aflojar su cuerpo, para después empezar a empujar lentamente contra aquella gruesa verga, el pequeño gemía despacito al sentir como le iba entrando un poco más aquella enorme verga.

Por un buen rato, el pequeño siguió empujando su culito hacia tras, gemía, se Detenía por un momento, se retorcía, pero no dejaba de empujar; con movimientos lentos fue logrando que cada vez le entrara en su culito un poco más de aquella gruesa verga.

John tenía los ojos totalmente abiertos, se mordía los labios para no dejar escapar sus gemidos de placer, él estaba sufriendo demasiado, quería abrazar fuerte al niño para empujar toda su verga dentro de él, pero por temor a lastimarlo dejo que el pequeño lo guiara y de vez en cuando el también daba pequeños empujoncitos con su cintura.

De repente el pequeño se detuvo, se quedó quieto por un segundo, luego llevo su mano hacia atrás, tocando su culito pudo darse cuenta lo estirado que estaba, luego con su pequeña manita toco aquella gruesa verga, el pequeño no dejaba de tocarla pues estaba sorprendido, creyó que aquella enorme verga ya estaba totalmente dentro de él y en realidad solo había logrado meter la 3ra parte.

El pequeño se dio por vencido al sentir su culito bien abierto, luego empezó a legarse del enorme cuerpo de John, aquella verga empezó a salir de aquel apretado culito, John sentía como su gruesa verga se iba deslizando hacia afuera centímetro a centímetro.

John sintió como la cabeza de su verga se empezaba a asomar, pensó que si salía del culito del niño, difícilmente lo volvería a meter, así que actuó rápidamente, sujetando fuertemente al niño por la cintura, aquel hombre respiro profundamente, al mismo tiempo que se estiraba, empujo su cintura hacia delante enterrando un poco de su verga en el culito del niño.

El pequeño se quedó quieto al escuchar aquel hombre pronunciar algunas palabras y al mismo tiempo sentir que lo sujetaba fuerte por la cintura.

John: “que rica estas mami, ya te quería meter mi verga” (gggggrrrrrrrrrrrrr) (fingiendo estar soñando)

Aquel hombre fingía estar dormido, lentamente fue bajando su mano por el vientre del niño pasando por su penecito el cual estaba duro, siguió bajando la mano hasta sujetar la pierna derecha del niño, levantándola un poco la hizo hacia atrás colocándola sobre su dura pierna.

El culito del niño había quedado expuesto, John aprovecho esto para volver a empujar la cintura hacia adelante, enterrando aún más de su gruesa verga en el culito del niño, John supuestamente dormido sacaba un pedazo de su verga y después la volvía a meter.

John: “mmmmmmm, ya te extrañaba chiquita….
Que rica estas” (GGGRRRRRRRRR) (fingiendo estar soñando)

La lubricación con aquel líquido permitió que aquella verga entrara más fácilmente, John siguió penetrando aquel rico culito apretado mientras el pequeño se retorcía gimiendo muy quedito, aquel hombre sentía como esta vez su verga había entrado más que la primera vez.

El pequeño que se estaba cogiendo había logrado aguantar la mitad de su gruesa verga, ambos sentían un rico placer pero John no pudo contenerse por mucho tiempo, pues su gruesa verga era apretada fuertemente por aquel culito.

En realidad no pudo aguantar más, varios minutos después, se aferró a aquel pequeño cuerpo empezando a vaciar varios chorros de leche, disfrutando de una de las mejores venidas de su vida, el pequeño gemía tratando de no hacer ruido disfrutando de aquel pedazo de verga que tenía dentro y John empujaba cada vez más su verga tratando de meterla un poco más mientras se corría.

Fue una gran cantidad de leche que aquel hombre había vaciado en el interior del niño, quedando sin fuerzas se quedó inmóvil dentro del culito del pequeño, sintiendo los pequeños apretones que aquel pequeño esfínter le daba a su verga.

Ambos se quedaron en esa posición sin moverse, la verga de John aún seguía dura por lo que el pequeño le daba pequeños apretones con su culito; Los ojos de John poco a poco empezaron a cerrarse en contra de su voluntad hasta quedarse completamente dormido, ya que estaba exhausto…….

Al día siguiente John despertó, estirándose un poco recordó lo ocurrido en la noche, volteo a ver al otro extremo de la cama sin ver a nadie, lanzando la sabana a un lado observando su verga totalmente dura y limpia….
Entonces se quedó con aquella duda si fue cierto o no.

Así que después de vestirse bajo a la cocina, donde los cuatro niños se encontraban desayunando….

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