Por curioso termine siendo una putita.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Me llamo Roberto, soy de El Salvador, de cuerpo Normal, blanco, de 1.78 cm de altura y consideró que tengo un rico culo.
Desde hace varios años que tenía la curiosidad de sentir otro hombre dentro de mi, que me hiciera suya, yo a veces fantaseaba, me hacía mis lavados rectales y quedar totalmente limpio y me introducía uno o dos deditos y sentía súper rico.
Pues mi primera experiencia sucedió cuando aún vivía solo y estaba soltero, ya que actualmente estoy casado y tengo una linda hija.
Un día me armé de valor y me instale una app para chatear con otros hombres, la verdad que al principio tenía algo de miedo de que alguien me reconociera y también que nadie me llamaba la atención, hasta que un tipo que se llama Jorge me contactó y comenzamos a hablar y congeniamos enseguida y quedamos de vernos, le di mi dirección y en la noche llegó a mi casa.
Luego que el llego a mi casa, lo introduje a mi cuarto y comenzamos a platicar, cabe destacar que Jorge es de cuerpo más o menos algo rellenito y más pequeño que yo, pero eso no me importó, estaba decidido a todo.
A los minutos de estar platicando le coloque mi mano en su entrepierna y estaba duro como una piedra, eso me éxito muchísimo, comencé a bajarle el pantalón y me quedo enfrente su miembro que no estaba demasiado grande ni tan pequeño, pero a mí me encanto, comencé a chuparcelo, parecía que ya fuera una experta en hacer esto y algo que jamás había hecho, pero a mí me encantaba tener su miembro dentro de mi boca, luego de unos minutos el me puso en una posición de 69 y yo quede justo encima de él, yo seguía chupando su pene y el comenzaba con lo suyo a meterme su lengua en mi culito, se sentía tan rico que me daban a choques eléctricos cada vez que me metía su lengua, yo seguía con mi sube y baja chupandole el pene y el que comienza a meterme un dedo, luego dos y creo que hasta tres, al principio sentí un poco de dolor y me sentía incómodo, pero la verdad que era más mi exitacion que no me importó, luego de estar en esa posición un buen rato yo le dije aun con su pene en mi boca, que me la metiera, quiero sentirte dentro de mi.
Imagino que eso lo puso a mil a El, y para excitarlo más a él me coloqué en cuatro de tal manera que le quedará mi culito enfrente (cabe destacar que antes que Jorge llegara a mi casa yo me hice una limpieza total para no pasar malos momentos y sentir una gran experiencia).
Luego se colocó atrás de mí y Me dio el último chupeton a mi culito y segundos después sentí la punta justo en mi culo, me éxito tanto sentir la punta que inmediatamente puse mis manos en mi nalgas para ayudarle a la entrada.
Sentí como poco a poco iba entrando ese pedazo de carne hasta que sus bolas se quedaron pegadas en mis nalgas, se quedo quieto por un rato, imagino que para que yo no sintiera mucho dolor, algo que le agradecí, ya que era mi primera vez, luego comenzó con un mete y saca lento, al principio me sentía algo incómodo, una sensación extraña, pero eran más mis ganas que las ignore y seguí en mi posición para que mi macho me hiciera suya.
Así seguimos en esa posición varios minutos hasta que me coloco en la cama boca arriba y abrió mis piernas y volvió a metérmela, tengo que ser honesto que en esta posición ya no sentía ningún malestar, solo no quería que me la sacara, yo pujaba como una puta, porque la verdad que sentí bien rico ese mete y saca, sentía súper rica su pija, su sudor caía sobre mi pecho y no me importaba ya que mi hombre me estaba dando su miembro de una manera que nunca la voy a olvidar, así estuvimos dándonos besos y yo diciéndole metérmela más, dame más, que rica tu pija, me encatanta! Me había convertido en una putita que deseaba más y más ser penetrada, cuando solo sentí un pujido por parte de el que me dijo, me voy a venir y yo le dije, dámelo todo adentro, sentí como sus chorros se metían en mi culito, que cosa más rica sentir que hombre termine dentro de tu culo.
Luego de eso él comenzó a darme una mamada para que yo terminara y así fue, termine en su boca y él se lo tragó todo, la verdad que fue una experiencia inolvidable, ya que después de ese primer encuentro, yo me convertí en su puta, nos vemos cada dos semanas cuando podemos ya que el tiene mujer e igual yo.
Los encuentros han sido más intensos y más ricos cuando nos hemos visto en estos últimos encuentros.
Espero les guste mi primer relato, luego contare mas.
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