Primera vez con mi mejor amigo. 3

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Bialex.
Ya acababa de tener un orgasmo increíble, Carlos me había pajeado con tal intensidad mientras lamía mi culo y me metía su lengua, que aquel orgasmo había sido el más increíble.
hasta ese momento! Carlos dejó que me recuperara después de haberme venido.

sin embargo él seguía muy exitado y quería terminar, nos besamos intensamente, el rozaba contra mi miembro su verga erecta, dura, grande y a reventar.
Poco a poco fue buscando mi ano nuevamente con su lengua y su saliva fue fue inundando mi culo.
sentí como Carlos fue buscando con sus dedos mi ano.

Empezó a masajearme con tal ternura que no fui conciente en qué momento su dedo ya estaba dentro de mi.
creo que era el dedo de la mitad, entraba hasta los más profundo y yo movía mi cadera al mismo ritmo en que Carlos me masajeaba por dentro.
el siguió, introdujo otro dedo.

me estaba dilatando y combinaba los masajes con el dedo y con su lengua, me lamía el culo abierto por su mano yo estaba en el cielo, nunca me habían penetrado, pero lo anciaba en ese momento, se lo dije: "te quiero adentro, quiero que lo metas, que me lo des todo.
".
Yo levanté mis piernas y el puso una sobre su hombro y puso su verga en la entrada de mi culo.
se lúbrico con muchas saliva y empezó a penentratme lentamente, muy suave – "te duele?" Preguntó preocupado.
"sigué" le contesté -.

El continuo tan suave pero siempre metiendomelo más y más, poco a poco, yo no sentía ningún dolor, Carlos lo hacía con tanta sensibilidad que en un momento paró y le dije que qué pasaba, pensé que no quería seguir.
yo hervía por dentro, tenía sensaciones que jamás había tenido y quería seguir hasta el final.
" la tienes toda adentro!" Me dijo.
no lo podía creer.
la verga nada pequeña de Carlos me había perforado el culo sin sentir nada de dolor.
Yo empecé a moverme.

Quería cada vez más sentirlo adentro y el empezó a moverse a mi ritmo.
empezó a sacarla y meterla poco a poco.
Yo ponía el ritmo y el bailaba junto a mi una danza erotica cada vez más profunda y más fuerte.
Los papeles fueron cambiando, Carlos empezó a tomar el control.
Era acá vez más fuerte, Más salvaje, menos tierno y cuidadoso.
Era cada vez más rudo y me gustaba.
Me gustaba sus gemidos de animal, el choque de sus huevos con mi culo.
lo sacó.
"Voltéate" me ordenó.
Yo sabía lo que quería y yo también lo deseaba.
en un segundo me puse en cuatro para él.
Clave mi cara y levante mi culo hacia el dándole vía libre a sus deseos de sexo, a su bestia que quería darme todo.

Esta vez no hubo suavidad, Carlos me clavo con toda su fuera y empezó a culiarme sin parar.
Me daba duro, me estaba enterrando todo su ser y yo gozaba con cada metida.
Me tenía sujeto por la cadera y me daba embestidas sin cesar.
Poco a poco fue aumentando el ritmo, yo sabía que estaba por venirse, cada ve más.
"ahhh siii" cada vez gritaba más y más fuerte.

de repente paro y empezó a darme embestidas muy cortas pero muy profundas, no las conté, no tenía cabeza para eso, no estábamos en este mundo, pero ahí estaba Carlos derramando su leche dentro de mi, muriéndose en un orgasmo que tardó no se cuanto, inundando mi ser con su hombría, con su rudez y su ternura.
yo sentía un placer increíble, había descubierto el placer anal.

Carlos fue regresando de su viaje.
Su miembro, al mismo tiempo vencedor de aquella batalla, había sido derrotado por mi culo, que había recibido sus últimos alientos de semen caliente.
Carlos sacó lo que quedaba de su pene dentro de mi.
que sensación, junto a su miembro salían los flujos de esa batalla.
me había dejada por dentro lleno de él, lleno de su hombría.

Volvimos poco a poco a ser nosotros y en el tapete de su casa donde todo pasó, nos fundimos en un beso lleno de tantos sentimientos.
no lo podía ceer, Carlos, me besó, me miró profundamente a los ojos y me dijo: "te amo Alex".
Nos fundimos en un beso eterno, como el de aquella primera noche.