Primera vez en cabinas
Nunca me había atrevido a ir a un local de cabinas gay pero hace unos meses se me dió la oportunidad a lo que sin dudar mucho accedí y fue una experiencia mucho más gratificante de lo que esperaba .
Durante estos últimos años no había siquiera definido mi orientación sexual hasta hace unos pocos meses pues aparte de decir que me gustan tanto chicas como chicos, el atreverme a entrenar a aquel lugar con poca iluminación música fuerte, largos pasillos y pantallas con porno gay en cada cubículo… Fue realmente excitante, recuerdo que llegue nervioso a la caja para pagar la hora en el local, mis manos temblaban pero el chico que atendía me pareció bastante agradable y me explico lo más básico. Pagué, deje mis cosas en un casillero y entre al lugar, mi pantalón estaba tensado pues llevaba mi verga erecta desde antes de pagar, empecé a mirar cada cubículo encontrando varias escenas excitantes de tríos y orgías en las pantallas, entre a una para mirar cómo eran pero no pasó nada, luego salí y me adentre aún más en el local, llegando a unos cubículos más pequeños y más oscuros dónde excitado entre y cerre, me di cuenta por el rabillo del ojo que un señor se había pasado a la puerta del lado antes de que acabará de cerrar, al estar tan oscuro me agache y me puse a buscar el agujero donde Ya había una verga!! Lentamente la toqué y la masturbe mientras acercaba mi boca para empezar a meterla en mi boca, nunca había mamado antes por lo que cometí varios errores pero… Una carga me dijo que le gustó. Aprendí que succionar excita bastante y que el semen de los demás tiene un sabor muy distinto. Luego el señor salió y se fue, espere a ver si venía alguien pero no tenía mucho tiempo entonces salí nuevamente a las cabinas del inicio dónde en una esquina se escuchaban sonidos morbosos de saliva, lentamente entre a la cabina del lado y al ver una mano en el borde del agujero saque mi verga y la metí al agujero.
La sensación era muy extraña sentía como me succionaba con fuerza la verga, me apretaba y masajeaba los huevos. Duramos demasiado tiempo, yo pegado a la pared mientras el succionaba excitado para luego invitarme a pasar a su cabina a lo que excitado accedí.
Dentro hacía mucho calor, de inmediato el chico se quitó la camisa y me recomendó quitarme un zapato para acomodarme y forzar la mamada con la pierna apoyada en una silla, le hice caso, me percate que me había puesto un condón antes pero no lo había visto bien hasta ese momento. Luego volvió a chupar, restregando mi verga en toda su cara como un animal mientras yo solo podía azotarle sutilmente la cara con mi verga, al momento de chuparla me pedía que lo agarrara de la cabeza y accedí forzando bastante y sintiendo como mi verga golpeaba en su garganta. Duramos bastante tiempo, en un segundo me quito el condón y empezó a pedirme leche a lo que accedí masturbándome con bastante fuerza para finalmente correrme en su boca. (Luego escupió el semen en una caneca (No sabía que era para eso jajajajaja))
Me despedí y salí con la camiseta mal puesta y un zapato en la mano el cual me acomode antes de salir por mi mochila.
Quedé con un gran alivio y bastante excitado por la experiencia por lo que anhelo volver a ir.
Si viven en Bogotá y quieren pasarla bien vallan a las cabinas de la 63 (no me pagaron lo juro pero si me gustó el lugar)
Buena experiencia rico eso, hace tiempo quiero visitar las cabinas pero no me animo, soy muy desconfiado por las enfermedades