Primera vez por la cola con dulce camionero.
Soy casado pero sin pensar termine entregando la cola a un dulce camionero que terminó convirtiéndose en mi macho fuera de casa..
Eate relato es absolutamente real y sucedió hace tres meses. Soy Luciano, tengo 35 años, mido 1.78, tengo cuerpo atletico de salir a correr los domingos y gym dos veces a la semana, nada exagerado, solo para cuidar la salud, soy de tes blanca y pelo castaño. Vivo en pareja con una bella y gran mujer, con la que el sexo es muy satisfactorio, variado, completo y nunca menos de dos veces a la semana, ambos nos buscamos, jugamos, lo disfrutamos. Realmente no se me había ocurrido estar con otras mujeres, menos aun con un hombre. Mi mujer suele jugar con su lengua en mi cola y algun dedo, pero no más que eso.
Trabajo en recursos humanos, en una empresa que administra camiones, por lo que estoy en contacto con cientos de camioneros y aunque hay respeto con todos, con algunos hay más confianza, por el tiempo de conocernos y por afinidad.
Asi es que conocí a Federico, quien tiene 40 años, mide 1.82, tiene esposa e hijos, tiene un cuerpo muy bien formado, tirando a morocho y lo que más me llama la atención es su higiene y cuidado, por lo que siempre esta aseado, afeitado, perfumado, bien vestido, y no aparenta la edad que tiene.
Siempre que pasa hablamos de nuestras familias, de salidas, de la vida en si. Lo veo cada dos semanas que es cuando llega él a nuestra nuestra oficina. Un día de charla le comenté que mi esposa se iba dos semanas como acompañante en el viaje de estudio de nuestro hijo, y que yo iba a aprovechar para hacer algún viaje, alguna excursión. Como la fecha coincidía con su arribo a la empresa, me invitó a viajar con el por un par de provincias, y estaríamos de regreso justo a las dos semanas. Si te bancás viajar en el camión, vamos, hay lugar de sobra para dormir, tv, y de paso voy con compañía. No lo dudé, «vamos!!!!» Le respondí.
Así que a su proximo paso lo estaba esperando y partimos. Como imaginé, el camión por dentro, además de ser último modelo estaba impecable, perfumado, la parte para descansar estaba atrás pero casi sin separador, era casi un monoambiente, una cama casi de una plaza y tv frente a la cama, alfombrado, cortinas para tapar todos los vidrios. Salimos a la ruta pasado el mediodía, fue una tarde de mucha risa, de contarnos cosas personales, intimidades, nuestras historias, había tiempo para todo mientras compartimos alguna bebida y algo para comer. Entre los temas de charla no faltó el de la vida de casados, de pareja y la vida de camionero, y ahí se puso interesante. Yo le conté que había tenido mujeres pero antes, que nunca había engañado a mi mujer. El, en cambio, me contó que quería a su mujer, pero que en la ruta había vivido alguna que otra historia. Ahí hablamos de sexo, y claro, ambos eramos abiertos al tema, y me confesó que unas pocas veces tuvo sexo con travestis y que le había gustado, por lo que deduje que le gustaban los varones. Me comentó que no, solo los travestis y que él con ellos solo era activo, que le gustaba porque hacían muchas cosas mejor que las mujeres, sus expresiones, su forma de pedir y la libertad con la que disfrutan el sexo, y que el culo de los travestis, de esos hombres, era mejor que el de las mujeres. Me sorprendió y le comenté que nunca había probado y en joda me preguntó: «que es lo que no probaste, cogerte a un travesti o entregar el culo?».
Me puse colorado, me dio pudor y le dije que ninguna de las dos!!! Y dudó e insitio: «estás seguro?»
Y le conté que mi señora me lamia el culo y jugaba con los dedos, que me gustaba pero nunca se me ocurrió que me metiera algo y menos sexo con un tipo.
Y me dice: «no se, pero mírate, el tema te calentó!!!» Con una sonrisa burlona. Y si, tenia razón, la conversación me había exitado sin darme cuenta.
Se rió nuevamente y me dijo «no te preocupes, mirá, a mí me pasó lo mismo. No pasa nada», mientras señalaba su entrepierna. Mire su bulto y tenía razón. Pero en el momento me dijo: «ah, me miraste, te gusta!!!»yo solo reí con vergüenzaporque si, lo había mirado pero sin pensar.
Ya de noche paramos en un restaurante de ruta, me comentó que en ese lugar podíamos bañarnos, cambiarnos, cenar y unos kilómetros más adelante parariamos junto a la ruta asi descansaba un par de horas. Asi hicimos, primero cenamos, nos bañamos y luego pedimos café y algo dulce antes de arrancar. Estábamos por salir del resto cuando aparecieron un par de travestis, por lo que le comenté «llegaron tus nenas». El sonrió y me preguntó sin queria probar?, a lo que respondí que no, que pasaba.
Entonces me empezó a relatar: «imagínate, garganta profunda, culito bien abierto, la pija bien dura hasta el fondo…»
Yo un poco exitado le dije «y la verdad que tienen buen culo está para hacerles todo eso!!!
Y riendo me dijo «no, hablo de que te imagines que vos se las chupas, que te la metes hasta la garganta, que te abren el culo, y te la meten hasta el fondo», me guiñó un ojo y largó la carcajada.
Yo estaba exitado con todo lo que decía, pero me levante y le dije sonriendo: «vamos, no me vas a convencer».
Cuando íbamos hacia el camión pasamos entre varios otros que estaban estacionados en la oscuridad, en un momento perdí el nuestro y paré de repente y el haciéndose el distraido siguió y mientras me abrazaba de atrás y me apoyaba el bulto bien duro en el culo dijo: «uuuyyyy». Reaccioné rápido y me despegué mientras se reía y me decía «te asustaste ehhhh». Riendo le respondí que si!!! Pero con ese toqueteo algo me pasó, me sentí raro, vulnerable, sentí que me quedo impregnado su perfume y me hizo click, su abrazo y roce de su bulto en mi cola no sentí rechazo, lo sentí bien y me asusté.
Al subir al camión, yo iba callado y me tocaba la nariz, entonces me preguntó si me pasaba algo y le dije: «si boludo, me quedó impregnado tu perfume».
Se rió a carcajadas y me dijo «te gusta? Estas en shock?».
No sabia que responder, y le dije «si el perfume me gusta, pero…. y me quedé en silencio, momento en el que él, que iba manejando, aun lento, saliendo del estacionamiento, se estiró hasta mi y me dio un beso suave en los labios. No respondí el beso, pero el insistió, y su perfume, su aliento, sus labios calientes me pudieron, llevé mi mano a su rostro y respondí el beso. El se retiró para seguir manejando y yo con vergüenza le pedí perdón. Me respondió que él me besó a mi, y que también le gustaba mi perfume, y que quería sentir el perfume de todo mi cuerpo. Yo estaba muy exitado pero no sabia que decir o hacer. Me preguntó si tenia miedo por algo, y le respondí que no, pero que no entendía que me estaba pasando. Estaba diciendo eso cuando llegamos al lugar donde íbamos a descansar, lo que me puso nervioso y le dije: «mirá que no quiero hacer esto». El sonrió y me dijo que estaba bien, que no iba a hacer nada, solo descansar, que no me preocupe, que me relaje, pues yo estaba apoyado contra la puerta, parecía que me quería escapar. Me comentó que iba a cerrar las cortinas del camión y que iba a quedarse solo en ropa interior para dormir, que podía hacer lo mismo si quería, o dormir vestido, que habían sabanas y abrigo. Asi que quedó en bóxer, y se notaba que tenia la pija bien dura y grande. Mientras yo seguía medio perdido y sentado en el asiento de acompañante. Pero cuando fue a cruzar hacia la cama, hacia atrás y lo hizo pegado a mi, y no se que me pasó, fue un instante donde sentí que era ese momento y que algo tenía que hacer, por lo que estiré mi mano, lo tome del brazo, lo tironee hacia mí y besé sus labios. El respondió el beso y me preguntó si estaba seguro, y le respondí que no, pero que su perfume, sus besos, sus manos, lo que me decía y ver que tenia la pija super dura, hacían que dude.
Arrodillado en el piso mientras yo seguía en el asiento, empezó a besarme lento, la boca, los ojos, el cuello, las orejas mientras me acariciaba, y entre besos me decía al oido: «no dudes, esto te va a gustar, vas a ser mía, yo te voy a hacer mujer, me dejas?»
Y yo solo decía que si, me trataba como mujer y yo decía que si!!! Entre besos me fue desnudando, solo me dejó la ropa interior. Me mordía suave por todos lados, me apretaba las nalgas. Yo tocaba su pecho, abrazaba su cuello y despacio fui bajando la mano hasta tocar su miembro sobre la ropa, era más grande de lo que imaginaba y era una piedra. Él apagó las luces interiores del camión, solo quedó una lamparita azul o negra encendida que apenas daba luz. Entonces se bajó el bóxer y quedé petrificado, era recta, gruesa, brillosa, era una pija hermosa. Me dijo que esté tranquilo, que disfrutemos». Entonces se fue incorporando y mi cara fue quedando a la altura de su pija, me tomó del pelo suave y fue llevando mi boca a su miembro. Yo abrí la boca sin saber como hacer, pero primero lo acercó a mi nariz, hizo que sintiera su olor, el cual me hipnotizaba, era exquisito, después lo pasó por todo mi rostro, mis ojos, me volvió a besar los labios y me dijo «bonita, quiero estar en tu boquita, quiero sentir tu lengua y garganta».
Le respondí metiendo mi lengua en su boca, un beso largo, chupando su lengua y bajando muy lento mi boca hasta su verga mientras lo miraba a los ojos, aun con pudor, como pidiendo permiso y esperando que me diga que hacer, pero le sentí el olor a limpio, a hombre y me encantó, la tomé con mi mano y le di unos besos en la puntita luego en la cabeza que era enorme, suave y brillosa, y empece a pasarle la lengua al tronco que era grueso, venoso, disfrutando su calor, su largo, su dureza, era perfecta la acariciaba, la apretaba; la fui lamiendo muy suave, todo hasta que llegué de nuevo a la cabecita y con los labios y lengua la fui mojando toda, una vez que estuvo bien lubricada me la metí muy lento en la boca apretando los labios y llevándola lo más profundo que pude mientras revolvía mi lengua. Eso le provocó un gemido que me encantó, me hizo sentir un experto, o bueno, experta. Me decía «hay mi amor, que calentita tenes la boquita, que suave, que mojadita. Asi, despacito, ahhhhhh, que rica lengüita…. si así, bien profundo….»
Sus palabras me ponían a mil, quería tragarlo todo, pero muy despacio saboreaba su olor, su sabor y muy lento me lo metia todo lo que podía, aunque era muy larga. Estuve chupandola un largo rato, me exitaba tener esa verga en mi boca y su mirada, como me manejaba con sus manos y a medida que se la chupaba la podía meter más profundo, hasta que en un momento pude meter esos 22 cm completos en mi boca, hasta pasar mi garganta. El apretó mi cabeza unos segundos, me la metió hasta el fondo, la sacó rápido y me dijo: «perdón, te la saco porque me vas a hacer acabar… tenes una boquita increíble mi nenita hermosa…». Y me beso los labios y empezó a besarme todo el cuerpo. Estábamos muy calientes, todo era calor, gemidos, lengua, saliva, olores que exitaban. Cuando llegó a mi bóxer me lo sacó lentamente, pero nunca toco mi miembro que estaba super duro y mojado y necesitaba atención. Me besó en la boca y me dijo «quiero que te toques, que te pajees mientras te chupo toda, mi vida, pero sin acabar, no termines».
Solo pude responder «si mi amor…». Me beso la boca, las orejas, el cuello, el pecho, los pezones, los cuales mordió suave, me volvía loco; bajó por mi vientre, las piernas hasta los pies. Ahí me hizo girar, me dio vuelta sobre el asiento, quedé arrodillado en el piso, con el cuerpo sobre el asiento, casi en cuatro y me tomó de las caderas y levantó mi culo, me dejó en pompa, mientras lamia y mis pies, subia por mis piernas y nalgas me prepare para sentir su lengua, pero no, besó y me mordió las nalgas mientras yo me seguía tocando, pasó a mi espalda con su boca y lengua, fue subiendo a mi cuello y cuando llego a mis orejas sentí su pija bien dura entre mis nalgas, mientras se movia, apoyaba la cabecita justo en mi ano, y con lo mojada que estaba parecía que se iba a meter en cada empujón, pero se hacia para atrás y la volvía a pasar toda mi raya, y al oído me decía «mirá como me tenes mi reina, mira como me calentas».
Yo no podía más y mientras él me mordía las orejas yo le pedía «mi vida, te deseo, te necesito adentro… solo te pido que lo hagas despacio mi amor, te voy a dar mi cola, mi cola virgen va a ser toda tuya». Eso lo volvía loco «la quiero toda para mi, ser el primero, pero antes te voy a hacer desear tanto, que vas a suplicar que te rompa el culito»…
Y fue bajando muy despacio por mi columna, hasta llegar con su lengua a mi ano…. ese contacto no lo pude soportar, entre mi mano que tocaba mi miembro y su lengua húmeda y caliente que hacia círculos en mi culo y la puntita que se abria camino penetrando la entrada de mi cola, me hicieron perder el control y acabar entre gemidos, casi gritos y contracciones de mi culo, mi verga y todo mi cuerpo, mi mano quedó llena de mi leche, una cantidad increíble. Federico me dijo «no!!!!, te portaste mal… no tenias que acabar». Y le respondi: «perdón papi, pero quiero más, estoy más caliente que antes, me siento una puta, no se que me pasa…» Fede me metió la lengua todo lo que pudo en el culo, casi muero de placer al sentir como me abria el culo. Entonces me dijo: «mi chiquita linda, te iba a dilatar la colita con mis dedos, pero como te portaste mal vas a sufrir, te voy a romper el culo de una con mi pija, me vas a sentir completamente, lo duro que me tenes, lo caliente y lo mojado que me pusiste, así que prepárate porque vas a ser mujer, mi mujer».
Entregada le pedi: «Fede, mi amor, solo hacelo despacio, pero por favor, metémela, te necesito adentro mio, cogeme mi vida, por favor, necesito sentirte…»
Llevó su boca a mi culo de nuevo, lo mojó bien, me metió la lengua, me abrió mucho las nalgas con sus manos y agarró mi mano, la que tenia llena de mi semen y la paso por mi culo, dejo todo mi semen en mi culo, lo dejó muy lubricado y después mi mano tomó su verga y también le quedó lubricacion de sobra. Entonces apoyó la cabeza de esa pija hermosa en mi ano y antes de empezar a empujar hizo que me apoye en los brazos, y mi espalda quedó con una curva, con mi cabeza y culo hacia arriba, y ahí me dijo: «Lucianita, mi vida, desde el primer día que te vi te desee, desde el día que te conocí me imagine haciéndote la cola, desde el primer día quería romperte el culito» y mientras lo decía iba empujando y penetrandome muy despacito pero sin detenerse. Era tanto el deseo, que el dolor que me provocaba me hacía empujar mi culo hacia atrás, querer penetrante casi solo, pero el hacia que sea lento y me decia: «lento mi reina, despacito mi putita hermosa…»
Y yo, perdida le suplicaba «metemela toda por favor, hasta el fondo… me duele!!!! me estas partiendo al medio amor…. no pares, rompeme toda por favor, te deseo, te necesito adentro…..».
En ese momento me tomo de los hombros y el pelo y me la clavó hasta los huevos. Pegue un grito entre dolor y placer…. y Fede se quedó quieto. Levanto mi cuerpo desde atrás quedando mi espalda pegada a su pecho y me besaba el cuello, las orejas, nos comiamos la boca y me decía «que apretadita estas, se siente tan caliente tu cola…»
Yo moría de placer, me sentía abierta, cogida, me sentía mujer, me sentía rota, me sentía llena de pija, de pija dura, llena de macho, estaba a punto de acabar sin tocarme, mientras seguía con la verga ensartada hasta el fondo. Y ahí se empezó a mover muy lento primero, mientras me decía que lo volvía loco hacerme el amor. Era increíble. No sé cuánto me estuvo bombeando, lento, más rápido, más profundo, pero cada vez que estaba por acabar, parábamos. Mi cola ya estaba adaptada, y aunque lo apretaba y sentía cada centímetro de verga que entraba y salia, era placer puro, esa fricción, ese roce, abrirme al limite de mi culo me hacia ver las estrellas en el buen y mal sentido. En un momento me la saco muy despacio y me llevó hasta la cama entre besos y caricias, y me acostó boca arriba. Aproveché a agarrarle la verga que estaba como piedra y asustaba su grosor, movia mi mano pero Fede me dijo, Lucy, mi amor, quiero hacerte el amor toda la noche. Asi que me beso la boca y me fue acomodando en la posición del misionero, yo fui abriendo mis piernas y me preguntó, «vida, puedo penetrante, puedo hacerte el amor?»
Solo pude decir «Fede, mi amor, haceme tuya, quiero sentirte hasta el fondo», y abri bien las piernas, el acomodó la verga en mi entrada, así que lleve mis manos a su culo y lo fui empujando mientras nuestras bocas, aliento y saliva se mezclaban. Sentirlo todo adentro, duro, caliente, sintiendo la cabeza, el tronco y sus venas dentro mio, mientras acariciaba sus nalgas, su espalda, su cuello, su pelo, era lo más erótico del mundo, nunca había hecho el amor hasta ese momento, tan sensual, tan dulce, tan amor. Estuvimos asi un rato largo, el tenia la pija cada vez más grande, la sentía casi en mi estómago, Cuando ya no nos podíamos mover porque íbamos a acabar, paramos y me dijo: «mi amor, ahora quiero que vengas arriba mio, que te metas mi pija hasta el fondo y que me cabalgues, que me cojas, que te cojas hasta llenarte de mi leche la colita. Pero quiero que acabemos juntos». Se acostó boca arriba y fui besando desde su vientre hacia arriba mientras me abria toda, de piernas y de cola para recibirlo dentro, me acomodé, le agarre la pija, la acomode en la entrada y le dije: «sabes que ahora son mi hombre, mi macho, mi vida y voy a hacer lo que me pedis» y despacito me fui sentando hasta tenerlo en el fondo de mi culo. Y ahí me empece a mover, primero despacio, adelante y atrás, en círculos, subiendo y bajando, casi sacándolo todo y sentándome hasta clavarla toda en mí. Y le pedí, «Fede, ya estoy lista para que me llenes toda de tu semen, por favor, quiero sentir tu pija acabandome, ⁴quiero sentir tus contracciones, quiero verte la cara, sentir tu cuerpo, sentir tu orgasmo» Mis palabras hicieron que Fede empezara a gemir y casi gritar mientras yo me apretaba contra su verga y la apretaba con mi anillo, con mi culo, el empujaba sus caderas, yo estaba tan caliente, tan lista que cuando sentí su grito, su orgasmo, apenas me toque mi semen explotó, salieron muchos chorros de tan caliente que estaba y tanto aguantar.. pero lo más hermoso era sentir las contracciones de la pija de Fede en mi culo, sentía cada chorro de semen, su aliento en mi boca mientras acabábamos juntos era increíble, ser su mujer, sentirme cogida, acabada adentro y gozada, era estar en el cielo. Y así quedamos, abrazados, besándonos hasta volver a respirar. Le dije, «siento que me hiciste el amor por primera vez en mi vida, me hiciste mujer, nunca sentí tanto placer, mi hombre, mi macho».
El me dijo: «nunca había sentido esto… es increíble mi amor, quiero quedarme a vivir dentro tuyo Lucy».
Casi me dormí sobre el. Nos llenamos de besos y ya a punto de dormirnos, al sacarme la pija de adentro me pidió que apriete, que no quería que su semen se salga de mi, quería que su leche quede en mi intestino, en mi «pancita» según dijo. Y así lo hice. Y mientras salia sentía nuestros vientres llenos de mi leche, fui bajando de a poco y cuando vio lo que quería hacer me ayudó, empujó mi cabeza suave hacia abajo y lamí y limpie todo mi semen de su cuerpo con mi lengua. Por primera vez probé semen, era el mio, en una cantidad increíble. Y me gustó. Por lo que era lo que quería para la próxima, probar su leche.
Fede me beso, me abrazo y nos dormimos.
Al despertarse me empezó a besar toda. Luego me toco a mi, saborearlo todo y chuparle la pija hasta casi hacerlo acabar en mi garganta. Pero no, me subí sobre el, agarré fuerte su verga, la sostuve en la entrada de mi ano, apenas metia la cabecita y apretaba el culo, Fede suspiraba y gemia, «me volvés loco mi putita hermosa», entonces me senté hasta sentir sus huevos, hasta quedar ensartada en él.
Lo mire a los ojos y le dije: «te tragué todo hermoso» y empecé a cabalgar suave, lento pero firme, mientras nos decíamos cosas dulces, obscenidades, de todo. Casi a punto de acabar me salí, y me puso en cuatro. Esta vez me cogió fuerte, esta vez me rompió bien el culo, me dio sin pena alguna, me dolia pero me calentaba de manera increíble en la que me penetraba. Le pedí que no acabe, mientras me seguía dando, me la sacaba toda y la enterraba con toda su fuerza hasta los huevos mientras y yo le decía «si así, rompeme toda, partime toda, abrime como una puta!!!!»
Y el no paraba «tomá mi putita hermosa, que lindo es cogerte toda, abrirte bien el culo, romperte toda». Y a punto de acabar me la saco de golpe. Y me puso boca arriba, me abrió bien las piernas y como la más mujer de todas lo deje entrar en mi. Cogimos lento pero profundo un rato largo, entre besos, palabras de amor, el haciendome sentir la mujer más femenina y yo haciéndolo sentir e hombre más macho. Y cuando ya no podíamos más le dije que quería su orgasmo en mi boca, que me diera su semen en la garganta, que me llenara e hiciera tragar toda la leche…. y así fue, seguimos bombeando hasta que no pudimos más, entonces salió de mi, y arrodillado con sus piernas abierta en mis hombros, me metió la pija en la boca, mientras yo con una mano me pajeaba y empezaba a derramar mi semen, con la otra empujaba su culo para meterme la pija lo más profundo posible… y ahí acabó… me largó tres chorros de semen en la garganta, se retiró un poco para atrás y muchos chorros más me llenaron la boca de leche. Era espesa, tan rica, tan sabrosa que la revolvía con mi lengua para saborearla, sentirla y disfrutarla hasta tragarla toda. Increible!!!!! Fede se acostó sobre mi, me beso la boca y apoyó su cabeza en mi pecho y yo abri de nuevo mis piernas para que esté cómodo. Me miro a los ojos y me dijo «te amo bombón » y mientras subia a besarme los labios, su pija se abrió camino en mi ano y otra vez lo tenia adentro. No podíamos parar…. seguimos así, entre mimos y palabras hasta que sentí que me iba a llenar de nuevo y me toque y acabamos juntos. Lo tuve adentro hasta que se achicó y se salió. Así dormimos un rato, abrazados.
Ese viaje de ida terminó unas horas después, no sin antes una hermosa y dulce cogida con todas las cortinas del camion cerradas en el centro de la ciudad. El resto de la dos semanas cogimos sin parar, era tocarnos y tener sexo.
Nunca había vivido nada parecido. Y la verdad es que por nuestros trabajos nos vemos pero cuesta poder estar juntos. En estos tres meses solo pudimos hacer el amor una vez más, y fue tan dulce, romántico, sexual y sensual como la primera vez. Fueron horas en las que nos dimos amor y cogimos de todas formas, en todas las posiciones en el camión, en una plaza a 3 cuadras de casa. Me hizo acabar 4 veces, mientras yo primero lo hice acabar en mi boca, no se si estaba muy caliente Fede pero me llenó la boca de su semen dulce, sabroso. Trague la mayor parte y otra la dejé salir por mis labios porque se que lo calienta eso. La segunda vez me acabo en la cola estando es cuatro, los primeros chorros fueron bien al fondo, con la verga ensartada hasta losnhuevosnen mi culo y el aprtando mis caderas contra las suyas, pero los últimos chorros fueron apenas en la entrada de mi cola, porque el quería que me quedara chorreando su leche y a mi me encanta sentir eso. Y la última lo cabalgué un rato, después me cogio en posición misionero y cuando iba a acabar salio y me largó la semen en el rostro, cuello, orejas, en el pecho e hizo que me lo frote como si fuera una crema. Yo le decía Fede, tengo que volver a casa y el me decía esto es para que estés impregnada de mi leche, para que te acuerdes que sos mio, que en tu casa sos el hombre pero acá sos mi mujer, mi puta. Eso me calentaba tanto que lo abrazaba y nos besábamos como adolescentes. Y así volví a casa con la cola, el la boca, la cara y todo el cuerpo lleno del semen de Fede. Nos comunicamos todos los días. Es mi hombre y yo su mujer.
En casa con mi sra las cosas siguen bien, aunque ya no me dejo tocar la cola, le digo que me inhibe, pero la realidad es que Fede me dejó la cola tan abierta que es imposible disimular que mi cola esta rota, que está hecha; además la marcó, es de él. No me considero gay, solo soy su putito, en realidad la putita de mi dulce camionero.
Que rico relato espero encontrar alguien asi para que me inicié
Excelente relato.
Me excitó mucho. Gracias.
Qué relato tan más rico y tan más caliente.
El mejor relato entre adultos que hasta el día de hoy he leído.
El sexo, el coger con maduros y entre maduros (de 30 años para arriba cómo a mí me gustan) es el mejor, el más rico, el qué es más caliente y el qué mejor y qué más se disfruta y qué más se goza.
Qué relato tan más rico y tan más caliente.
El mejor relato entre adultos que hasta el día de hoy he leído.
El sexo, el coger con maduros y entre maduros (de 30 años para arriba cómo a mí me gustan) es el mejor, el más rico, el qué es más caliente y el qué mejor y qué más se disfruta y qué más se goza.
Coges con cabrones, con machos que ya tienen el cuerpo desarrollado y ya formada su complexión según su genética. Y muchos con músculos; unos más desarrollados que otros por hacer ejercicio de forma profesional por deporte o por pasatiempo porque les gusta mantenerse en forma, y otros por el tipo de trabajo que hacen.
Hermoso relato, ojala yo encontrara un macho que me inicie así.
Muy bueno, me dejo muy caliente. Quiero que me rompan el culo así.
me encantaría me coja un camionero! es mi fantasia!
Que buen relato, al terminar de leer senti el culo muy caliente con ganas de que me metan toda le verga y me llenen de mecos como a ti.
ojala cuentes otra cojida pero en motel
Uffff como me calentó el relato finamente contado, estoy para q me hagan la cola ya por primera vez