Ramoncito el nene adicto a la Verga 4
La boda de la colonia primera parte: arreglándome con papa..
Por la tarde después de comer, nos bañamos todos en mi casa preparándonos para la boda, menos mi papá que aún no llegaba del trabajo. Cuando llegó mi mamá ya estaba ansiosa, regaño a mi papá por la hora y salió corriendo junto con mi hermana para ir a la peluquería que estaba a dos cuadras. Era un local pequeño dónde atendían dos señoras malhumoradas.
Mama: te quedas con tu papá Ramoncito, acaba de vestirte. Y tú – señalando a mi papa – deje la comida en la cocina, después báñate y arréglate que venimos al rato para salir corriendo a la iglesia.
Al cerrarse la puerta mi papá con cara de fastidio fue a la cocina, luego de un rato regreso a la mesa con un plato y un vaso y se puso a comer.
Papá: prende la televisión hijo.
Yo lo hice, el veía atento un resumen de un partido de fútbol, se quitó los zapatos, quedando el calcetines. Yo camine hacia el y lo ví comer, después me metí bajo la mesa metiéndome entre sus piernas y bajándole el cierre del pantalón le saque la verga metiéndomela a la boca.
El parecía no inmutarse, me dejó hacer, su verga estaba flácida, aunque aún así estaba gruesa, me gustaba poder manipularla con la boca, le daba chupones suaves y la movía entre mi boca. Escuchaba a mi papá masticar, y el movimiento de los cubiertos arriba de mi. Chupe sus huevos, los cuales estaban caídos por el calor, su bolsa escrotal se sentía hinchada, pase mi lengua por todos lados llenándolos bien de saliva.
Luego me metí su ahora erecto glande, succione un buen rato, sintiendo como soltaba lubricante el cuál me tomaba con gusto.
Sentí una mano en mi nuca inmovilizándome y de la uretra salió un chorro el cuál trague, mi papá me estaba orinando la boca, a su hijo de 4 años.
Yo tomaba rápido esos miados, el paraba y cuando yo me los pasaba por la garganta seguía, ya no me sostenía la nuca, el había continuado comiendo, pues podía escuchar el ruido de los cubiertos. Yo lo atendía solo, tragando todo tratando de que no se me cayera nada. Cuando terminó continúe chupando para luego mover mi cabeza de arriba a abajo, cogiéndome yo solo la boca con la verga de papá.
Rato después el se paró de la mesa haciendo que mi boca sonara como corcho al quedar sola. Camino hacia la cocina dejando su plato y vaso en el fregadero, su verga mojada con mi saliva salía del cierre de su pantalón de vestir negro, el llevaba además una camisa celeste y zapatos negros. Camino hacia el baño quitándose la camisa y luego de desnudarse por completo se metió a la regadera.
Yo salí debajo de la mesa, no sabía si debía seguirlo, yo ya estaba bañado y vestido y temía por el regaño de mamá si mojaba mi ropa o por no estar listo, así que me quedé en el comedor parado viendo hacia el baño, escuchando la regadera. Aproveche para terminar de vestirme, llevaba una camisa blanca, zapatos negros, un short negro y moño negro, arregle mi cabello con gel para cabello como me había enseñado mi mama, estaba listo, yo era un niño moreno, delgado, con ojos grandes, cabezo negro quebrado y ahora nalgas gordas.
Después de rato salió papá desnudo secándose la cabeza, camino hacia su cuarto con la verga aún erecta, moviéndose a los lados mientras caminaba, yo lo seguí.
En su cuarto el empezó a ponerse la ropa que había puesto mama en la cama, una camisa blanca, con una corbata y un saco negro, un cinto y zapatos negros, camisa blanca. Yo me acosté boca abajo viéndolo, se veía muy guapo, el era moreno, alto, de cara alargada con bigote y barba ya definidos, hombros anchos, me parecía el hombre mas atractivo del mundo y era mi papa!.
Mi papá me vio adivinando mi mirada de amor, y me guiño un ojo. Luego su mirada fue a mis nalgas.
Papá: te están creciendo las nalgas hijo, a lo mejor por las cogidas que te da tu papi.
Yo me sonroje, el sonrió y acaricio el trasero, yo usaba mi short elegante con el que iría a la boda, era color negro, llevaba una playera interior blanca y zapatos negros, solo me faltaba la camisa blanca y el moño negro que aun no me ponía.
Mi papá me bajo el short con todo y calzoncito hasta los tobillos y me acaricio pasando sus dedos por mi culito, lo cuál me hizo estremecer. Me tomo de la cintura y me movió al borde de la cama, y luego de analizarlo me metió la lengua en mi hoyito.
Yo gemí, su lengua se sentía muy bien, lamía suavemente pero presionándome, estaba en extasis, entonces el metió su lengua hasta el fondo , y la dejo así, penetrándome con ella, yo gemí fuerte, parecía que su lengua tocaba mi estomago. Sentia como la anchaba y movía en circulos, luego de un rato la saco, soltando yo un quejido.
Papa: te gusta bebe? te gusta que papi te coja con la lengua?
Yo asentí y el me dejo ir de nuevo su lengua, yo me retorcí de placer, aferrando mis manitas en las sabanas de la cama. El tomo mis rodillas y las subió a la cama, dejándome de perrito, entonces empezó a taladrarme con su lengua. Movía su cabeza con rapidez sin dejarme tiempo de reponerme, mientras su lengua entraba y salía bestialmente de mi culito.
Yo: ay ay papi.
Papa: que bebe? te gusta? tienes el culito muy rico, a papi le gusta, le encanta.
El empezó a pasarme la lengua por las nalgas, por el culito y por parte de mi espalda, me estaba volviendo loco. Entonces sentí que metía un dedo, el cual dolió, pero lo hizo con mas cuidado, provocándome placer también.
Papa: este culito ya quiere verga otra vez, ya esta mas abierto, y yo le voy a dar lo que pide, papi lo va a atender bien.
Luego de darme dedo y lengua un rato mas se paro, trayendo un bote el cual se unto en la verga y puso en mi culito. El se había solo sacado la verga por el cierre del pantalón, iba con todo y zapatos y corbata, yo mientras tanto también iba vestido, solo tenia el short y ropa interior en los tobillos. Vi como papa dirigió su verga en mi culito y la metió despacio.
Papa: relájate bebe, siente la verga que te creo, es para ti. – y me dio un beso en la nuca.
Sentí como me invadía, tenia un ardor pero también placer, me queje pero mi papa seguía diciéndome cosas al oído.
Papa: ya ya, se que te gusta, que eres mi hijo adicto a la verga. Ya paso, disfrútala bebe.
Y mi papa empujo de golpe, haciéndome ver estrellas, el empezó a besarme y morderme la oreja derecha, sonaba agitado en mi oído.
Papa: ya la tienes toda adentro Ramon hijo, tu culito se siente muy bien, es la mejor sensación que he sentido ahhh ahhh
Entonces el empezó a bombearme suavemente, sentia una corriente eléctrica por todo mi cuerpo, sentia mi cuerpo ardiendo, mi culo se sentia lleno, invadido. Empecé a gemir fuerte, mi papa me tomo de la cintura y empezó a llevar un ritmo, suave pero continuo.
Yo sentí mucho placer para este punto, se había esfumado el dolor, su verga gorda se sentia deliciosa en mi culito de nene, su cuerpo grande sobre mi me daba sensación de protección y su boca gimiendo en mi oído me ponían los pelos de punta. El empezó a aumentar el ritmo, mi culito abrazaban esa hombría de papi.
Mi papa me empezó a penetrar ferozmente, su verga se empezó a hinchar, mientras yo sentia que perdía la visión, se aproximaban nuestros orgasmos, puso sus manos en mi cuello apretándolo un poco. En la calle se escucho la voz de mi mama, la cual se acercaba, iba platicando con mi hermana. Mi papa empezó a bombearme sin piedad para después empujar su cadera contra mi vaciándose en mi culito.
Papa: ahhhh (ya con un volumen ahogado) ahhh bebe ahh ahh. – mordiéndome la nuca y apretándome el cuello.
Sentí su leche salir depositándose en mi, su verga palpitaba con cada eyaculación, yo me estremecí, teniendo un orgasmo seco, apretando mas su verga, exprimiéndola.
Papa: ahhhhhhhh que ricoooo.
El barandal de la casa se abría y cerraba mientras tanto. Yo estaba ido, sentí como mi papa seguía preñando mi culo, parecía que nunca acabaría. La puerta de la casa se abrió y mama empezó a llamarnos, mi papa se recostó de lado llevándome con el, estábamos de cucharita, tomo una cobija cubriéndonos al tiempo que la puerta se abría.
Mama: Ramon! porque no están listos, ya es bien tarde, rápido que ya va a empezar la misa.
Mi papa estaba agitado, agotado, no podía ni hablar, sentí que otra carga de leche en mi culito.
Mama: nos vamos en dos minutos, rápido!
Y mama se giro dejando la puerta abierta, llamando a mi hermana, yo sentí una ultima descarga de papi y luego me saco su verga de golpe, agitado, cerro la puerta del cuarto y limpiándose con la sabana se subió el cierre, y subiendo mi shorts y ropa interior.
Papa: arréglate el cabello hijo, y aprieta el culo, que no se salga la leche de papi.
Y dándome una nalgada, me saco de la habitación. Mama y mi hermana venían hacia la salida terminando de arreglarse, mi papa salió de rato con la mirada perdida y tomándome de la mano salimos todos rumbo a la boda, yo con el culito de leche paterna.
Telegram: Rojito03
Felicidades, me gustan tus relatos caliente cómo siempre…. Termine haciéndome una paja….
Uff, q rica saga.
En la boda definitivamente alguien o varios encontraran esa leche paterna almacenada en su culito
No sabes como estaba deseando que subieras otra parte, tus relatos siempre me hacen correrme como loco..
Cómo siempre encantado con tus relatos.
Gracias por escribirlod
Me pones muy caliente con esta historia.
Gracias a tus relatos, puedo disfrutar de una buena paja mientras los leo… espero con muchas ganas la próxima parte.
Me encanta que el padre ya disfrute al 100 % de su hijo… y que ramoncito pueda tener siempre una verga a su disposición