Relatos de un desastre – Probar una segunda vez
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por ojosdevidrio.
Hola.
Mi nombre es Christian Duarte, escribo desde Caracas, Venezuela.
Tengo 19 años de edad,estatura media, piel blanca, cabello negro, hijo ùnico.
Les contare un poco de mi historia, éste es mi primer relato,espero sea de su agrado.
Desde pequeño he sido una persona que realmente valora los sentimientos, llego a querer mucho a las personas, recuerdo que hasta cierta edad lloraba por casi cualquier cosa, esto no siempre es bueno, algunas veces las personas no valoran estas cosas y logran lastimarte con mucha facilidad, a veces sin querer, pero al final te lastiman.
Y habia pasado por una experiencia en la que resulte lastimado, asi que no queria que se repitiera, siempre he esperado más de lo que las otras personas estan dispuesta a dar, creo que eso es un error, pienso así porque yo si daria todo por alguien a quien quiero y me quiere sinceramente, pero cada quien tiene una manera de pensar, eso nos hace únicos, seria muy aburrido si todos fueramos iguales.
Comenzó todo hace aproximadamente tres años, para entonces tenia casi 17 años.
Comenzaría un nuevo año escolar, estaba en 4to año ( en algunos paises, preparatoria), seria mi segundo año en este colegio, está seria la primera semana de clases, por lo general no asistía los primeros días, porque me parecía un poco tedioso, siempre se tomaban para presentar nuevos profesores o alumnos, lo veía un poco estupido , prefería no asistir, pero este año fue diferente, estaba aburrido en mi casa, pues toda la temporada de vacaciones las pase allí, no pudimos viajar debido a que mis padres estaban trabajando, siempre se han esforzado por mi y por trartar de darme lo mejor, a fin de cuentas fui la primera semana de clases.
El primer día de clases, como ya estaba acostumbrado a levantarme tarde, apenas acababan de terminar las vacaciones, cuando desperté eran las 6:30, ya estaría retrasado, el horario de clases comenzaba a las 7:00, por un momento pense en no ir, al final me levante, me bañe de prisa, me vesti, y algo que siempre me lleva un poco de tiempo es arreglar mi cabello, ya que siempre lo he dejado un poco largo, ese día no quedo como me gusta, pero estaba aceptable, salí de casa, tomé un autobús y llege al colegio a las 7:42, por alguna razón recuerdo muchos detalles de ese día, no se porque, siempre he tenido mala memoria, pero de ese día recuerdo mucho.
Cuando estaba llegando al salón, como venía apresurado, estaba sudando, me pare cerca de la puerta, seque mi frente, arregle un poco mi uniforme y cabello, luego entre al salón, iba a decir buenos días, pero solo pude decir buenos, porque la voz del profesor me corto diciendo buenas noches, la típica broma que se le hace a alguien que llega tarde.
Al profesor ya lo conocía, se llamaba Hernan, tendria como 38 años, era una persona bastante agradable, y siempre estaba bromeando, a veces, despues de clases me quedaba a hablar con él, era entretenido.
En fin como llegue tarde, solo habia puestos al final del salón, busque uno y me sente, estaba abriendo mi bolso, el profesor siguió hablando, una introducción a clases como era lo acostumbrado el primer día, saque un cuaderno de mi bolso, no se para que, no hariamos nada,y empece a ver al rededor, buscando a mis amigos, Alan y Daniel, y a una amiga, muy cercana , Anna ,que cuando me fije estaba viendome con una cara de querer matarme, debe ser porque no le escribí ni la llame en vacaciones, pero mi celular se habia dañado y no hice el intendo en mandarlo a reparar,cuando lo repare, no tenia contactos, solo le sonrei, me respondio con una mueca en la cara y se volteo.
Alan y Daniel estaban en los primeros asientos, me llamo la atención que estaban hablando con un chico, debía ser nuevo en el colegio porque nunca lo habia visto, era un chico bastante apuesto, de esos que te roban un tiempo para detallarlos, era blanco, más claro de piel que yo, cabello castaño bastante acuerpado, la cara no la detalle mucho porque solo podia ver un poco de su perfil, se notaba que era alto, no lo sabia muy bien que tan alto porque el estaba sentado, me quede realmente impactado, por un momento estaba en otro mundo, cuando reaccione Alan y Daniel, me estaban haciendo señas para que me acercara, cuando intente levantarme de mi asiento, el profesor me lanzo una mirada de sentencia, por lo cual me quede sentado hasta la hora del receso.
Fuí a comer con mis dos amigos, Anna y el chico nuevo, cuando me lo presentaron, pude detallarlo bien, era muy apuesto de cara, ojos claros, piel muy delicada y unos labios rosados,parecia que usara labial pero no era asi.
Trate de disimular un poco, porque el chico me llamo la atención, aún así me puse nervioso, cuando estoy nervioso me pongo frío, a veces me sudan las manos, esta vez no ocurrio, estaba distraido, volví en si cuando Alan le dice al chico, él es Christian, el chico me tendió su mano y me dice- mucho gusto, soy Leonardo- solo conteste- Christian- y le di la mano, cuando tomo mi mano, imagino que sintió que estaba frío, me miro a los ojos y sonrió de una manera delicada, no quise sostener la mirada así que solo baje la cara y solté su mano.
Nos fuimos a comer, y nos pusimos a hablar, les explique porque llegue tarde, y hablamos de las vacaciones,como no tenia mucho que contar solo escuchaba y pensaba, que Leonardo era apuesto, pero que era de esas personas que te llaman la atención un momento, pero que luego los ves como a alguien normal.
Las siguientes dos semanas transcurrieron sin mayor novedad, solo que ahora teniamos una buena amistad con Leonardo, tenia 19 años,dos años mayor que nosotros, perdio dos años escolares porque tuvo que viajar por una emergencia familiar, era una buena persona,muy ocurrente, siempre nos hacia reír con sus chistes, vivía con sus padres.
Aveces, hablabamos por mensajes, es muy bromista, le encantaba bromear con temas de sexo.
El segundo fin de semana, luego de que comenzaron las clases, estaba en mi cuarto recostado escuchando musica, cuando recibo un mensaje de Leonardo, que decía- ¿Que haces amorcito? ¿esperando mis mensajes?- me causo mucha risa y le respondi- Claro, risitos de oro, tanto como espero un día de nieve en el desierto, cariño.
– respondió -Hasta eso es posible, pero igual, un día esperaras mis mensajes.
– me parecio curiosa su respuesta, leí su mensaje varias veces, al final respodi- Claro, claro, ese día seré un egocéntrico zurdo- Le respodi así, porque el era el único zurdo de todo el salón de clases.
Todo esto yo lo tomaba como una simple broma.
Pasaron las semanas, un día el profesor nos manda a Leonardo y a mí, a buscar unos libros a la biblioteca para la clase, porque era los dos estudiantes que tenía más cerca.
Cuando regresamos al salón todos estaban en parejas, ya que el profesor mandó a realizar un trabajo para el martes de la siguiente semana, y trabajaríamos en pareja con los libros, como todos ya estaban en parejas me coloque con Leonardo, la clase era de historia, la cual para mi es muy aburrida, porque no me gusta, aunque ese día nos reímos toda la clase, varías veces nos llamaron la atención, fuimos los últimos en terminar, todos habían salido, solo quedaba el profesor, que a cada rato nos decía que terminaríamos rápido, cuando terminamos, Leonardo me dice al oido.
– Conmigo, te ríes, terminas tus tareas, ves la historia divertida, y te enamoras- No respondí, no quería seguir ese juego porque al final yo saldría perdiendo.
Tomaba todo esto en broma, porque el se nota completamente heterosexual, y con todos tenia este tipo de juegos, aunque conmigo los tenia más a menudo.
Pero cada vez que estabamos solos y me hacia ese tipo de comentarios no podía evitar sentirme nervioso, él me intimidaba mucho.
Esa semana termino normal, el lunes era la hora del recreo, estábamos desayunando, y Alan le pregunta a Anna por el trabajo, ella lo haría con una chica con la que no he tenido mucho trato, Alan con Daniel.
Anna, respondía, que ya casi terminaban, que era muy largo, Alan respondió que él y Daniel habian comenzado el fin de semana, cuando escuchamos Leonardo y yo esto nos vimos automáticamente las caras, pues se nos había olvidado el trabajo, y comenzamos a reír, el arqueo sus cejas y sonrió tratando de parecer seductor, me dijo- Vamos, a hacerlo todo, en mi casa, hoy, en la tarde- obviamente con doble sentido, cosa que nos dio mucha risa a todos, yo respodi- El trabajo, no esperes nada más- .
Ninguno de mis compañeros sabe que soy bisexual, para ellos soy heterosexual.
Al salir de clases, fuí a casa de Leonardo, el vivía más cerca que yo del colegio, por eso fuimos allí, al llegar la casa estaba sola, su hermana estaría hasta tarde en la universidad, es mayor que él, y sus padres trabajando, me quede parado en la sala a esperar que terminara de cerrar la puerta, no perdió tiempo en comenzar a bromear, se paro detrás de mi muy pegado, y me dijo detrás de la oreja -solos los dos, completamente solos-Me puse nervioso, solo le golpeé en el estomago y me aparte.
Entramos en su habitacion , entre primero, el continuo jugando, apenas me descuide, me empujo hacia la pared, me tomo de las muñecas, se pego de mi lentamente, comenzó a hacer como si me penetrara con ropa, me tomo de sorpresa, no sabia que hacer, me gustaba lo que hacia, él sabia llevar el ritmo, era muy excitante sentía como respiraba en mi oreja y me dijo- ¿Que te asustaste?- luego me solto.
Nunca le seguía el juego, pero esta vez si lo hice, él estaba cerca de la cama así que lo empuje, me subíen sus piernas, le tome las muñecas, su cara era un poema, estaba notablemente sorprendido, me acerque mucho a su cara, casi tocando sus labios con los mios, no puedo negar que las ganas por besarle no me faltaban, pero no debía.
Le dije- ¿ Qué te asustaste?- el solo soltó una risa nerviosa yo me levante, el se sentó, luego comenzamos con el trabajo.
Como de costumbre todo el tiempo estuvo bromeando, nos reímos muchísimo, las horas pasaron volando, no habíamos comido, ni siquiera nos dio hambre, hasta que escuchamos la puerta, era su mamá que estaba entrando, le pregunte ¿ Tu mamá no llega en la noche? El vio la hora y me dice- ya son las 8:20.
De verdad no nos percatamos de la hora, el me dijo que me quedara en su casa, me quede porque ya era tarde para ir a mi casa, vivía un poco lejos.
Cuando le respondí que me quedaria, lo primero que me dijo fue- Te me salvaste en la tarde, pero esta noche no te salvas.
Le avise a mi padres que me quedaría en casa de un amigo, y luego fuimos a la sala para conocer a su mamá, se llamaba Elsa, una señora muy agradable, nos pregunto si teniamos hambre, respondimos que si, ella dijo que en un momento nos daba de comer y se fue a la cocina.
Leonardo, o Leo, como yo le decia, me dijo que nos bañaramos, mientras su mama cocinaba, que el me prestaba ropa, que tenia ropa interior nueva que no la habia usado porque le quedaba pequeña, que a mi se me vería mejor que a él, ya que era mas bajito y me dio una nalgada, me bañe primero, cuando salí, me quito el paño, por suerte estaba en boxer, y me dijo- te lo dije, a ti te quedarian mejor,a mi se me ven muy graciosos, y se metió a bañar,salio del baño, se vistió, luego llego su padre y cenamos.
Nos quedamos hasta tarde viendo television, hasta la una de la madrugada,fuimos a dormir, no tenia sueño, el se acostó y yo me quede sentado en la cama, la noche era perfecta se veia la luz de la luna por la ventana, y la habitación estaba muy fría, a mi me gusta mucho el frío, por eso era perfecta, ya tenia un rato sentado, cuando siento un brazo sobre mi hombro, era Leo, y me pregunta- ¿ En que piensas?-respondi con nostalgia y sin verle a la cara- pienso en la vida a veces hay tanta gente cerca, pero te sientes tan solo, que hace falta a quien querer no como un amigo, si no alguien que este cerca, alguien que te complete como persona, que te vea y sonría contigo, alguien que siempre este para ti, alguien que.
No pude terminar, se me hizo un nudo en la garganta y comenzaron a salir lagrimas , esas que estaban guardadas y que en algún momento tenían que salir, soy una persona, muy sentimental, aunque trato de ocultar esa parte de mi, él se acerco a mi seco mis lágrimas, y me dijo- yo puedo ser esa persona, no te puedo querer, pero te puedo amar, siempre estaré contigo, para compartir sonrisas y lágrimas, te completare, porque tu me completas a mi, eres especial para mi, desde que sentí tu mano fría cuando nos presentaron, te querré como nadie- luego se acerco a mi, tomo mi cara con sus manos, eran muy sueves, acarició mis mejillas, luego podía ver como sus ojos claros se cerraban y comenzaba a acercarse más, hasta que sus labios tocaban los mios, me beso, fue un beso especial, largo, cada parte de mi estaba en éxtasis, besaba muy bien, era perfecto cerré mis ojos y me deje llevar, sus labios eran tan cálidos, que no me quería separar, nos separamos muy lentamente,nos vimos a los ojos y nos abrazamos, en ese momento, me percate que aunque desde el principio trate de decirme a mí mismo que el no me gustaba, no era así, me gustaba y mucho, o mejor dicho en ese momento me percate que poco a poco me había enamorado de Leonardo.
En el fondo sabia que no debía seguir, ya había vivido esto y no termino bien, por eso no podía estar con él, ya alguien había llegado, me había hecho las mismas promesas y se había marchado sin importarle absolutamente nada, no quería, ni podía permitir que la historia se repitiera, pero necesitaba a alguien por lo menos por esa noche, me sentía muy mal.
Le dije a Leo- No te negare que siento algo especial por ti, me gustas mucho, pero no puede pasar nada- trato de interrumpirme , aún así continúe- ya he pasado por esto, alguien viene, te pinta un mundo donde todo es realmente hermoso, crees todo como un estúpido y en el momento menos esperado te dejan, como a un juguete viejo e inútil, esta noche, puedo dormir contigo, solo dormir, pero mañana todo seguirá normal.
– Solo respondio, con un tono comprensivo- Chris, no puedes juzgar a alguíen, por lo que otros te hicieron en el pasado- me beso en la frente, fue muy tierno, me sentí como un niño pequeño, o un hermano menor, desde pequeño quise tener un hermano, ese espacio quedo vacío en mí, Leo lo llenaba a la perfección, con él me sentía protegido y tranquilo.
Se acosto, lo abrace, cerré los ojos, al poco tiempo el se durmio, yo aún seguía despierto, pensaba en todo lo que me había dicho, estaba tan serio,cosa rara en él, se notaba sincero, siempre esta bromeando, esta vez no.
Cuando desperté, él aún dormía, me tome un tiempo para detallarle, era muy guapo y dormido aún más, sentía ganas de besarlo y despertarlo así pero no, no era lo mejor para mí, tal vez era egoísta solo pensar en lo que yo podría sentir, pero sentía mucho miedo.
Pasaron al rededor de 10 minutos, aún observaba dormir a Leonardo, mi tiempo se iba en eso, por mi tardaria una vida viéndole allí y no me cansaría, pero despertó, me miro a los ojos trato de acercarse pero me levante de la cama, solo sonrio para continuar un día normal, nos bañamos y vestimos, su mamá por suerte lavo mi uniforme, desayunamos y luego fuimos al colegio.
Todo fue muy mecánico, casi ni hablamos, llegamos al colegio y tratamos de disimular todo.
Ya habían pasado dos meses, todo seguía normal, Anna, Alan y Daniel, se quejaban porque ahora Leo y yo siempre estabamos juntos, con Leo todo iba como antes, ya hablamos igual que antes, pensaba que el había olvidado todo ó lo había dejado pasar como si nada, seguía con sus bromas, recuerdo un día, como cosa rara fuimos los últimos en terminar la evaluación, era en pareja, ya no había nadie en el salón, solo el profesor, me levante a entregar el examen, lo recibió y nos dijo que cerraramos al salir, yo me fuí al asiento a recoger mis cosas, Leo ya había recogido las de él, estaba parado guardando mis cuadernos, cuando siento a Leonardo pegándose a mi, no me moví, me sentía petrificado, sentía una cosquilla recorrer mi cuerpo, coloco sus manos en mi abdomen bajo, se pegó más a mi y me dijo- Algún día, estarás conmigo, lo sé, solo hay que esperar, quiero ser especial- luego se separo.
Le dije- Soñar no cuesta nada, cierras cuando salgas-salí del salón, estaba muy nervioso, lo espere en el pasillo, luego nos fuimos a nuestras casas.
Ese día nos habían mandado un trabajo de biología, a mi me va bien en esa materia, era para la siguiente clase que era en una semana, pero preferí adelantar, cuando estaba apenas comenzando el trabajo recibí un mensaje de Leo, preguntándome que hacia, le respodi- El trabajo de biologia- su respuesta fue casi inmediata- Yo quiero comenzarlo, pero no se me da mucho lo de analizar.
¿Puedes venir a mi cas para hacerlo juntos? Si vienes trae ropa para que te quedes, pues el trabajo es largo.
Como no tenía nada que hacer, le dije que si, que llegaba en una hora.
Me extraño que quisiera hacer el trabajo, siempre deja todo para última hora.
Llegue a su casa, eran casi las cuatro de la tarde, comenzamos el trabajo, terminamos casi a las 11:00PM, nos bañamos, ibamos a dormir, cuando noto que Leo se va a la puerta, coloca seguro y me dice- creías que solo te hice venir por el trabajo¿ cierto?.
– Me sorprendió al decirme eso, sabia a donde quería llegar, respondí con tono de confusión- claro eso me dijiste- Se acerco a mi tomo mis manos y me dice.
– No me interrumpas por favor, solo escucha- continuó- No quiero resignarme a no estar contigo solo por algo que te paso antes y aún no me has contado, no se si te amo o tú me amas a mi, solo quiero estar contigo, saber que estaremos juntos todos los días, que seas mi novio- no pude responder, Leo me comenzó a besar lentamente, sus labios eran muy suaves, tiernos, era tan diferente cuando hablaba serio y me decía que me quería, que no pude rechazarlo, además yo lo amababa.
Coloco sus manos en mis cintura las subía lentamente, yo tenia mis manos en su cuello, solo me dejaba llevar, quería que durara por siempre, este era un momento especial, hacia tiempo que no me sentía así, tan enamorado, con esa corriente que sube por tu cuerpo y te eriza completamente.
Pensé en separarme, pero luego decidí confiar en él, parecía muy sincero, él me quería y yo a él ¿ Qué podía salir mal?.
Separe un momento mis labios de los suyos, le dije – confiare en ti, no me falles.
– Solo respondió- te amo,el amor no falla.
– Ibamos a dormir, asi que estábamos en ropa ligera, shorts y franelas, me cargo, era más alto y mayor que yo, me sentó en la cama, me deje caer, se coloco sobre mi y me continuo besando mientras me despojaba de mi franela, mis pies aun tocaban el piso,eso me hacia saber que no era un sueño, porque Leo me hacia sentir en otro mundo.
Termino de quitarme mi franela y comenzó a besar mi cuello, la luz era escasa, solo entraba por la ventana la luz de los faroles de la calle, podía ver sus ojos cuando subía su cara para verme, era realmente hermoso, bajaba lentamente, ahora lamia mis pezones, me hacia sentir un choque eléctrico en todo mi cuerpo, llego hasta mi abdomen bajo, ahora subía dando besos, entre beso y beso decía una palabra, hasta llegar a mi boca, al final la frase completa fue: ¡Sabia que viviríamos este momento! Si alguien me hubiese contado esto habría dicho que era cursi, pero vivirlo, fue especial.
Me beso en los labios, seguimos besándonos, pero ahora el estaba abajo y yo arriba, baje a su cuello, lo devore, le quite la franela, nunca me había fijado en el sin camisa, cuando se cambiaba yo veía a otro sitio, pero tenia, un cuerpo bastante marcado, sus brazos eran gruesos, eso si lo sabia, pero me sorprendió su cuerpo,sus pectorales estaban en forma, y su abdomen marcado, supongo que iba al gimnasio, pero yo ignoraba eso, de igual forma seguí en lo mio, besé sus pezones, los lamia y veía su cara, se notaba que le gustaba, baje un poco más hasta su abdomen respire hondo, para comenzar a bajar su short, por encima se notaba que su pene estaba erecto, al tocarlo note que era grande, lo acaricie por encima del bóxer,lo saque, y comencé a pasar mi lengua por su glande, tenia liquido preseminal, el tenia los ojos cerrados,exitado imagino, bajaba y subia , hasta que comencé a introducirlo en mi boca, me esforce en hacerlo lo mejor posible, llegaba hasta mi garganta, coloco sus manos en mi cabello, pensé que quería llevar el ritmo, no fue asi, solo me acariciaba, sentía como su pene se comenzaba a contraer, no quería que acabara tan pronto, así que me separe y subí a besarlo, le pregunte si le gusto, me responio-¿lo dudas?- reía tiernamente – ahora es mi turno.
Me coloco en la cama me quito el short,el boxer , subió mis piernas para comenzar a lamer mi ano, pasaba su lengua en forma circular y luego paraba, me tenia torturado, solo el sabia lamer de esa manera, a cada momento me hacia arquear mi espalda y sentir una cosquilla por toda mi columna.
Luego comento a introducirle un dedo lentamente, lo dejaba dentro un momento lo sacaba y esperaba un momento y lo volvía a introducir, eso me mataba poco a poco.
Seguía con los dedos pero ahora ya eran tres, yo ya no era dueño de mi cuerpo, solo me dejaba llevar por todas las sensaciones que estaba teniendo, aveces sentía que iba a acabar, Leonardo creo que lo notaba, porque cuando pasaba esperaba un rato para seguir.
Termino de dilarme con sus dedos, busco un condón en una gaveta, se lo coloco volvió a subir mis piernas, podía sentir su pene en la entrada de mi ano, pero aun no me penetraba, solo sentir la punta de su pene me excitaba más y más, su cara estaba frente a la mia, nuestras narices chocaban, me pregunto si estaba listo,le indique que si moviendo la cabeza, me dijo-sere cuidadoso.
– Comenzó a besarme y a penetrante poco a poco, me sentía en las nubes, él me seguía besando pero sentía que estaba sonriendo al sentir que yo estaba arqueando mi espalda.
Dejo su pene adentro un momento lo saco, luego lo volvió a meter, continuo haciendo eso cada vez mas rápido, comenzó a embestirme con fuerza, separo sus labios de los mios, tomó mis muñecas, me dijo- sabia que algún día estarías aqui.
– Su voz se notaba agitada, por las embestida.
Ahora lo hacia mas lento, pero más profundo,introducia su pene completamente, esperaba un momento, lo sacaba y lo repetía duró unos tres minutos en eso.
Soltó mis muñecas, tome su cara lo acerque a mi y le dije que ahora era mi turno lo volteé me coloque encima, coloque mis manos en su pecho y lo veia directamente a los ojos,comencé a cabalgar, lo hacia lentamente, subia y bajaba al mismo ritmo, poco a poco iba acelerando, lo estaba haciendo bien, porque su cara se deformaba a cada momento, me dijo me vas a hacer acabar, y aun no quiero.
En un ágil movimiento , sin dejar que saliera su pene, estaba encima de mi, siguió penetrandome poco a poco y lamía mi cuello mientras me decía que lo volvería loco, lo acerque a mi cara para besarnos, paso un momento, hasta que sentí que sus envestidas aumentaban de velocidad, iba a acabar, sentía como su pene se ensanchaba, comenzó a masturbarme con una mano y con la otra sostenía mi cuello, se notaba su experiencia, yo estaba demasiado exitado, sabia que me vendría muy rápido, hubo tres ultimas embestidas muy fuerte eyaculó y me hizo eyacular a mi.
Gemiamos como locos mientras teníamos el orgasmo, pensaba que alguien podía escuchar, pero no me importaba.
Nos quedamos así por un rato mientras nos besamos, me repitió que me amaba y me pregunto si me había gustado, respondí-no pudo ser mejor.
– Saco su pene ya flácido se quito el condón y se fue a limpiar, cuando regreso, yo estaba aún en la cama, me beso en la frente y me dijo- vete a limpiar.
Me levante me iba a limpiar, pero decidí bañarme, salí de el baño y tuve que tomar un bóxer de él, pues yo solo lleve uno, Leo estaba acostado, pero aún despierdo, me acosté con el y coloque mi cabeza en su brazo, abrace su torso, beso mis labios, le dije- Si.
– Él coloco una cara de desconcertado, y me dijo- ¿si que?- respodi- me dijiste que querias saber que estaremos juntos todos los días, que yo también te amaba y que seria tu novio- me dijo- Me haces muy feliz- nos besamos, y luego nos dormimos, estábamos agotados.
Espero les guste.
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