RENACIMIENTO II
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
me quede cuando despues de hacerle placer oral a mi primo el termino en mi boca, y me decia que era una reyna, yo me sentia totalmente llena, de su elixir, amada, deseada y sobre todo vestida y maquillada de niña pues era maravilloso a esa edad, y ser toda una niña y gustarle a ese primo mio quien tanto me gustaba.
Asi paso alrededor de un año y cuando cumpli mis 9 años, el de regalo me dio un vestido blanco porque queria que fuera su mujer, peero que primero le tenia que dar una prueba de amor, a lo cual accedi,sin saber que era lo que planeaba, salimos a un parque cercano a casa y ahi me vesti y maquille luego me dijo que llegarian unos amigos para presentarme con ellos yo me asuste pero el me abrazo y me dijo que estaria todo bien.
Llegaron dos de sus amigos y me dijeron que estaba muy hermosa y luego de platicar un rato martin que asi se llama mi primo me pidio que les diera placer a ellos como se lo daba a el que esa seria la prueba que lo amaba, y pues encantada con la prueba procedi a realizarla, el primero era moreno alto bien formado, me llevo a un cuarto ahi en el parque donde guardan cosas, se notaba que su pene era grande y cuando lo saco goteaba ya y pues me lo merende, el gemia de placer cuando ya en mi boca le frotaba su glande con mi lengua no tardo mucho cuando me pregunto si me los comia asi que me dijo que queria ver asi la saco de mi boca y se frotaba con la mano fuerte y rapido, saque mi lengua y puso su instrumento cerca de mi boca y ahi termino, cuatro chorros de leche salieron de ahi a mi garganta deseosa de elixir, luego la limpie con mi lengua hasta que se quedo flacida, luego me dio un beso en la boca y me dijo que era unica, esperando al segundo amigo de martin quien era blanco de cabello rojizo y no muy atletico mas bien delgado el ya venia casi listo puesto que escuchaba tras de la puerta y saco su pene pequeño en comparacion a los otros 2 que habia probado, contrario a el primero el solo aceptaba que la mamara tomo mi nuca y me bombeo primero lento luego con fuerza, y casi en seguida tambien termino dentro de mi boca, me dio un beso en la mejilla y me dijo que habia sido genial que seria su reynita por siempre, al terminar mi boca me dolia ya por el esfuerzo, martin me abrazo me puse el traje deportivo y nos regresamos a la casa.
Ya en casa el estaba ya muy excitado dado que habia visto lo anterior, un dia antes me preparo con un lavado estomacal y sin probar alimento mas que la leche de aquellos amigos esa tarde me puso el vestido blanco y luego me dijo Dianita ahora seras mi mujer, me beso en la boca, y acariciaba mi anito, luego con vaselina lo acariciaba y frotaba, lentamente y sin prisas, metio un dedo lentamente me pregunto si dolia yo le dije que no, lo fue metiento poco a poco yo senti un poco de dolor pero estaba casi derretida por sus besos que no me importo, al rato ya eran dos, tres dedos y yo gemia de una mezcla de dolor y placer, mas vaselina y seguia con sus dedos penetrando mi; hasta se dia virgen culo, despues su dosis de lamidas en su hermoso instrumento, mientras el besaba mi ya dilatada entradita, y me recosto en la cama y puso su bello amigo en mi entrada caliente y desosa, y empujo, despacio, despacio el me decia en todo momento que le informara cuando doliera a mi me dolio solo cuando la cabeza entro ya despues todo era algo nuevo y maravilloso, tiempo despues solo senti que topaba con mis nalgas asi que le pregunte: esta toda dentro? a lo que me respondio que si, ahora que no me preocupara que ya era su mujer y que disfrutara de todo lo que me hiciera, empezo a sacarla y meterla mi primer grito fue apagado con sus labios, ritmo lento y luego cada vez mas rapido, hasta que casi me desmaye de lo que sentia, o lo hice no puedo recordarlo, y entonces llego, un orgasmo que no se como definir jadeaba, sudaba gritaba y sentir como su leche caliente me inundaba era y es en este momento indescriptible, cayo de bruces sobre mi y me beso incansablemente con un cariño y con un amor nunca antes demostrado hacia mi, cuando perdio su dureza se recosto y se quedo dormido en la cama yo me dedique a acariciar su pecho y me recoste en el, la leche deliciosa se me seco en la nalga y muslos, fue una experiencia mas alla de lo que podia esperar de ser una mujer.
en proximos relatos les contare despues de mi pimo mis otras experiencias con un taxista y en un cine porno de mi ciudad. besos: Diana G.
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