René capítulo 5
Llegando al Rancho.
Lo primero que hago al despertar es ir al baño y ponerme ropa interior. René está desayunando
-Buenos días, amor – revuelvo su cabeza – y ¿tu tío?
-Buenos días, fue a comprar cosas, dijo que no tarda – no despega sus ojos de mi verga enfundada en mi nuevo calzoncillo
-¿Te gusta?
-Sí, se ve enorme – la toca – todavía no está despierta. El tío dejó esto para ti – es una hamburguesa
Tome asiento y lo cargo – ¿te cogió, tu tío? – niega – vamos a revisar, mientras come mis papás- efectivamente, su culo no tiene mucha leche y está irritado por ayer – bueno. Vamos a desayunar
A los pocos minutos llega Marcos – no has terminado de comer, apúrate porque falta camino
-Vamos a tomar un baño
-Um – René se queja
-No mames, ya le estás dando verga – sonrío- conmigo dijiste que no porque te dolía el culo
-Um… ah… papá… más…
-Yo soy su papá- René no para de gemir mientras lo embisto a medida que entró al baño
-Ah, no. Yo fui por las cosas y no voy a quedarme con las bolas llenas
-No que se hace tarde
-Por eso – se pone detrás de René- vamos a darle rápido. AH, sigues estrecho
Mi niño no responde, nada más gime contra mi pecho a medida que vamos enterrando nuestras vergotas con fuerza. Los minutos, se volvieron media hora hasta descargar en las entrañas de mi niño
-Aprieta
La mayor parte de la leche queda dentro de René, pero una parte se sale
-Papá, se salió
-No te preocupes, te vamos a ir llenando tu culito en el camino
Marcos entrega la llave para que maneje. El trayecto es más de lo mismo, René come verga de forma indiscriminada
-Papá hueles mucho
-¿Enserio? – levanto mi brazo y René acerca su rostro para aspirar
-Sí
Me excite muchísimo al ver a René acercar su rostro a mis axilas peludas y aspirar con fuerza. Viene con su short oficial para caminos largos
-Cógelo porque ya vamos a llegar
-Me duele mi culito
-Después de está vas a descansar- pone un pico que beso- mira la verga de papá quiere volver a tu culito- estoy erecto – te lo voy a hacer rico
-¿Rico? – sonríe
Acto seguido se sienta de espaldas a mí, levanta su cintura y abre su culito blanco, rosa y lleno de leche de macho. Mi glande nada más tocar manda una corriente eléctrica que es aumentada a medida que voy perforando esta cuevita
-Agárrate
Lo levanto y ensarto de golpe, a esto llama rico, con fuerza. Mi hembra sabe que disfruto darle verga de manera fuerte y él disfruta también
-AY… PAPI… MÁS… MI CULITO… MI CULITO
Marcos sonríe al escuchar a Rene gemir de forma desesperada mientras su culo es reventado con fuerza. Antes de llegar al rancho estacionamos para que Marcos de su última ración de leche a René por la boca y yo termino de rellenar el culo de mi hembra
-Hijo aprieta duro porque vamos a caminar algo
Mi niño viene agotado, lo hemos estado cogiendo durante casi dos días. Sus fuerzas están completamente acabadas
Marcos habla con el dueño del rancho y me presenta. Nos pide seguirlo para mostrar las piletas qué quiere hacer e ir platicando de otros trabajos – está muy cansado – René se viene cayendo del sueño – ahí viene Chema – un hombre a caballo frena enfrente de nosotros, piel tostada por el sol como yo, brazos fuertes, pecho grande y con vellos, barba de candado – Chema, él será nuestro nuevo trabajador – veo que mira a René con curiosidad por verlo tan dormitado – lleva a Diego contigo y yo volveré para que él niño duerma en su nuevo cuarto
Chema argumenta que tiene unos pendientes y David decide dejar a Chema volver llevando a René, yo quise negar, pero se vería mal y necesito afianzar el trabajo
-Pórtate bien campeón
-Yo se lo cuido – de frente veo que Chema es más grueso de cuerpo que yo – quieres montar – sube a René y lo acomoda – patrón recuerde mostrar el pastizal para su nueva palapa. Yo me encargo de todo por acá
René
Don Cheme ayuda a subir al caballo – oh, no
-¿Qué pasa?
Por estar abierto parte de la leche de papá salió de mí. Trato de apretar lo mejor que puedo para no perder la leche de papá
-Estás mojado – Don Chema me empuja y creo toca mi culito – dónde te mojaste
No sé qué decir, papá dijo que es secreto lo que hacemos. Me quedo callado y miro al señor qué está oliendo sus dedos, de repente sonríe
-Tranquilo. No hay problema
Me alivia escuchar eso, pone su mano en mi pierna e inicia a trotar. Se mete a una casa enorme y sale rápido para ir a una cabaña lejos de esa casa, dice que papá y yo viviremos aquí
-La cabaña de allá es mía- está cerca – pedí está para ustedes, creo que quieren estar solos – acaricia mi pierna
Entramos pone las cosas en el suelo y yo voy al baño para limpiar la leche de papá. Al volver don Chema está sentado con sus brazos extendidos, se ve tan grande y fuerte, más grande que papá, en su pecho tiene vellos, ¿tendrá tantos como papá?
-Ven siéntate. Tu papá no va a venir ahorita, el patrón y él tardarán revisando – me siento a su lado – y dime ¿te limpiaste? – asiento – con quién dormiste ayer
Sigo mirando su pecho porque los vellos me atraen, además su color moreno parece brillar por el sudor en él y su olor, es diferente al de papá, pero es fuerte y me gusta. Ese olor me atrae y cierro los ojos para disfrutar, luego recuerdo que no es papá y los abro me alejo de su axila con miedo de que se enoje
-Tranquilo- sujeta mi hombro- ¿te gusta como huele? – no respondo- hay calor
-Sí, mucho – se desabotona la camisa – tienes vellos, no tantos como papá
-Tu papá es alguien con muchos
-Sí. Todo su pecho y abdomen- acerco mi mano y le miro, su sonrisa es grande así que toco – aquí tiene muchos más- toque su axila
-¿Y yo?- sé quita su camisa y pone su brazo detrás de su cabeza
-Tienes bastante – arriba y abajo – no están largos – juego con ellos – te falta un poquito más- tengo mi cara cerca
-Lame – sus ojos se pusieron serios- lame
Lo dice con fuerza y prefiero obedecer, paso mi lengua por sus vellos, me gusta el sabor de su axila es salado y amargo. Le acomodo los vellos con mi lengua y hago lo mismo con su otra axila
Me sentó en sus piernas con las mías a abiertas a cada lado para que yo pueda lamer mejor
Toma mi mano y la pasa por su pecho, me pide que lo lama y lo hago. Poco a poco va bajando, entonces
-Y dime aquí tengo tanto como tu papá
Se desabotona el pantalón y muestra bastante vellos. Me pongo de rodillas enfrente de él y juego con sus pelos, son bastantes como los de papá. Siento su pilinga, verga, papá dice que los machos tienen verga y Don Chema es un macho, es grande, fuerte, peludo y huele como macho
Me detengo y recuerdo que no debo hacer esto, papá dice que nadie debe tocarme más que él y si me da permiso, con el tío
-Sigue – le digo que no – por qué
-Mi papá se va a enojar
-No, será nuestro secreto. Además, esto va a evitar que se enoje contigo por lo otro
-¿Qué otro?
-Porque se te salió la leche- abro los ojos- la leche es para tenerla dentro y se te salió
-Es cierto, papá dijo que era para que estuviera conmigo. Ahora qué hago
-No te asustes – mete su mano y saca una pilin… verga grande y gruesa, es más gruesa que la del tío y casi tan larga como la de papá- aquí hay bastante leche nada más tienes que sacarla
Sin dudar la tome entre mis manos, no puedo cerrar mis manitos como con papá y está caliente, suave. Inicio a lamer su cabeza que es grandota
-Ah, chamaco… tienes una boca buena… ah… sigue… cuánta verga te mete tu papá
-No entiendo
-¿Te metes la cabeza o más?
-Ah, me la mete toda
-¡TODA! Ese culito ya debe estar todo roto
Pone su mano en mi cabeza y obliga a tragar más de su verga. Después de un rato me pone sobre el sofá y baja mi ropa, me deja mi playera
-¿Estás seguro de que la mete toda?- está punzando mi culito con su dedo – Estás muy cerrado y pareces tener quinto
-Sí, porque toco sus pelitos, además siento cuando choca conmigo – Don Chema sonríe más- usted nada más la cabeza porque me duele mucho ahora y nada más va a llenarme de leche
-Hasta vas a rebosar
-Umm – está abriendo mi culito con sus dedos
-Uf, vienes cargado – algo escurre por mis piernas- se ve que tu papá te cogió con ganas, tienes leche embarrada
Siento como pone su cabeza y presiona -ay, no, duele mucho – me arde – ay… don Chema ya no – le miro y tiene una mirada como la que pone papá cuando me coge duro – AH – sentí donde entro
-Ya la tienes adentro
-Mi culito… ah… duele
-Ya, es normal está hinchado de tanta verga que te dieron
-Ah… Ya no – está tratando de meter más – meta la leche rápido
-Espera, no es tan rápido
Me pega a su pecho, está más sudado, su olor es más fuerte y me levanta dejando mi espalda descansar en su pecho, me gusta como se siente sus vellos y su verga dentro de mí. Ya no duele tanto, es como dijo el tío siempre duele al inicio, pero luego se siente bien
-Eso es relájate
-Ya no, nada más la cabeza – me quiere meter más
-Yo no estoy haciendo nada. Es tu culito que se está comiendo mi verga
Como estamos parados, bueno, yo estoy pegado a su pecho y él sostiene mis piernas abiertas con su verga dentro de mí que se va enterrando más conforme ya no puedo sostenerme
-Vamos al cuarto para que te deje ahí cuando te llene
-Um -Con cada paso que da me mueve y más verga entra – don Chema… ah… ya… Ya – siento sus vellos en mi culito
-Enserio, te la tragaste toda, chamaco y aprietas riquísimo, mejor que cualquier culo qué haya cogido antes. No entiendo- sigue metiendo con fuerza- cómo es que tienes quinto si ya te reventó tu papá- no entiendo de qué habla
-Ah… um… ah – me sube y baja con rapidez
-Mira
Enfrente de nosotros hay un espejo. Don Chema sonríe mucho y señala abajo, en el reflejo veo su verga toda dentro de mí, él inicia a levantarme y su verga sale casi toda, luego – um – me deja caer de golpe
-Tienes el mejor culo, apretado, caliente y me succiona. Vas a ser mi putita
-No
-Jaja, no ves cómo te tengo – veo su verga entrar y salir de forma fuerte y no puedo evitar gemir – eres mía- niego
-Soy de papá
-Entonces serás de ambos – niego- vas a aceptar, aunque sea a vergazos
Pone mis piernas a cada lado de su cintura y me toma de mis muñecas, creí que me iba a dejar caer. En el espejo ve como me tiene sujeto de mis manos y mis piernas a su lado con su gran verga dentro de mí
-AH… UM… AH…
Inicia a meter de forma fuerte, el empuja y tira de mí, se siente muy rico, llega muy profundo. Me siento muy lleno
-Dilo… di que vas a ser mi puta, mi mujer…
No puedo ni responder, solo salen AH de mi boca. Me pone en cuatro en la cama y mete muy duro, me siento tan lleno y raro
-Dilo
-Sí… tuyo
-HAA
Siento como su verga late dentro de mí y el calor junto a lo viscoso llenan mi culito. Se está viniendo mucho
-Chamaco me estás ordeñando toda la leche – siento su cuerpo caliente, sudado, oloroso y peludo sobre mí- eres de lo mejor, tu culito sigue succionando siento que acabo de romperte
Me deja acostado boca abajo con su verga adentro y pulsando dentro de mí, después de un largo rato sale
-Cómo estás
-Cansado
-Bien – escucho el sonido de un celular- quedaste llenito hasta se desborda – toma un poco con su mano y lo pone en mi boca – eso traga la leche. Hablaré con tu papá
-Para qué
-Vas a ser la mujer de ambos. Eres el mejor culo que me he comido y no pienso renunciar a ti. Duerme
Se va, siento mucho sueño y cansancio. Papá, el tío y ahora don Chema me han cogido mucho. Me gusta mucho, el sabor de sus vergas me encanta, beber su leche de macho, en especial oler sus axilas y sentir sus vellos contra mí cuerpo, pero lo que más amo es sentir su rica leche dentro de mí, el calor, como se mueve y estar lleno de leche es increíble
Uuff… me encanta esta historia… no sabes como la disfruto.
Excelente relato… Cómo sigue??
Como sigue?