Rene parte 3 (Miércoles)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Sexy.man4561.
Hola, por fin me animé a escribir la parte 3 del relato, espero que les guste.
Aquí la parte 2 del relato: http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-42822.html
Ya era miércoles y después de dos cogidas excelentes con Rene no había cosa que me lo sacara de la cabeza.
En la escuela no hacía otra cosa más que hablar con él por mensaje y estoy seguro que él también se moría por mí.
Todo el día ansiaba en que llegara la hora de vernos y a veces solo de pensar en la cojida que le iba a dar se me ponía dura.
El día pasó y dió la hora de vernos de nuevo en la unidad deportiva como solíamos hacerlo, así que en vez de esperarlo en la banca lo espere directo al estacionamiento donde vi llegar en su carro.
Al subirme él estaba con su camisa y pantalón de vestir y se le marcaba el bulto de que la tenía parada.
Cuando lo vi mi primera reacción fue darle un beso pero rápidamente me quito y dijo que quería que habláramos de lo de ayer, respecto a que le dije que gustaba.
La conversación no fue muy larga sin embargo llegamos a la conclusión que el también sentía algo por mí, y que por más que se lo negara por la diferencia de edad el desde la primera cogida había sentido la misma conexión que teníamos.
Rápidamente nos fuimos del estacionamiento y llegamos a su departamento donde empezó lo bueno.
Cuando empezamos a besarnos Rene me empezó a decir cosas al oído, como "Das los mejores besos que he tenido", "Estás bien bueno", "Me encanta tu verga" y cosas que no me había dicho dentro del faje, lo cual me prendió mucho y yo le decía cosas también como que estaba bien guapo, y buen bueno, que su culo era el mejor que había tenido.
Lo que prendió al otro como nunca.
Rápido nos movimos a la cama, Rene me tiró a la cama mientras se desabotonaba su camisa y yo me quitaba mi camiseta, me bajo el short que traía y me la empezó a chupar por encima de mi bóxer y antes de que me lo bajara regreso a mi boca y nos besamos dándonos un buen faje, besándonos el cuello, lamiéndonos toda la parte de arriba del cuerpo, el cuello, los pezones, el pecho, las axilas y nos besamos como nunca, agasajándonos el uno del otro.
De repente el para y me dice, quiero que esta vez sea especial, y cómo harás le contesté, y me dijo cómeme a pelo.
Con eso nos seguimos besando, era la primera vez que cojía a pelo con alguien, y después me enteraría que era la primera vez de que a Rene se la metían a pelo.
El solo comenzó a bajar de mi boca chupando todo a su paso, mi abdomen quedo recubierto de su saliva, y bajo hasta mi bóxer, donde porfín lo bajo y mi verga salío disparada de lo dura que la tenía, con precio en la cabeza, Rene procedió a mamar, pero esta vez lo hacía con muchas más ganas y se sentía mucho mejor.
Estaba acostado boca abajo mientras el me chupaba la verga, de repente se la sacaba y me decía, tu verga esta deliciosa o también, odio que no me la pueda meter toda a la boca.
En eso mi instinto de dominar salió a la luz y le dije, quiero que te acuerdes quien manda, me levante de rodillas, lo agarre del pelo y le empeze a penetrar la boca, se la sacaba de la boca y con mi otra mano agarraba mi verga y le pegaba en la cara, pero el solo trataba de volvérsela a meter a la boca.
Rene era macho, pero en la cama era todo mío.
Después de un rato de una muy buena chupada le dije a Rene que se acostara boca abajo en la cama, para empezarle a chupar su delicioso ano.
Solo gemía de placer, cuando pude dilatarle bien el año lo deje así boca bajo, agarre mi verga le puse mucho lubricante y la puse en la entrada de su año, le dije: listo?, Rene gritó que ya se la metiera, y lo hice de un jalón.
Solo soltó un grito mientras yo empezaba con mi mete saca, rápidamente pasé a cojer lo muy rápidamente, el gemía y gritaba, mordía la almohada.
Como estaba muy caliente y nunca lo había hecho sin condón no pasó mucho tiempo para que me viniera.
Cuando me vine deje mi verga adentro un rato, pero cuando la saque Rene su primer instinto fue volteársele y mamarme la verga limpiando los restos de mecos.
Después nos besamos y me dijo te gusto?, y yo le dije que esto apenas comenzaba, nos quedamos ganado en lo que me recuperaba de la corrida.
No pasó mucho tiempo antes de que se me volviera a parar, por lo que yo estando arriba de él comencé a bajar lamiendo todo a mi paso, hasta llegar a su verga y darle una buena mamada.
Baje a sus huevos que también lamí con gusto y después le levante las piernas cuando veo su ano que se le estaba corriendo los mecos, yo se lo chupe y limpie dejando todo en mi boca y lo bese para que se lo tragara, no soy mucho de lamer mecos, pero estaba tan caliente que lo hice.
Después le empecé a meter la verga de nuevo, esta vez de misioneros, viéndole la cara, esta vez se tornó más romántico el asunto, porque la manera en que me veía y como yo lo veía era especial.
Se lo metía lento y profundo, con cada metida soltaba un gemido.
Me acerqué a su boca y lo bese mientras se la metía siguiendo el mismo ritmo, impresionantemente así seguimos mucho rato.
Creo que era porque no había cosa favorita para nosotros que besarnos.
En una de esas metidas, entre un gemido, se acercó a mi oído y me dijo: Me gustas mucho, no dije nada por un segundo, hasta que le meto la verga hasta adentro rápido y le contesto: Tú a mí más.
Seguimos besándonos y cojiendo en esa posición, hasta que se la saqué y le dije: Vamos de perrito.
Teme rápidamente se puso en cuatro y comenzamos el mete saca.
En esta posición se puso muy caliente el asunto, y se la comencé a meter lo más fuerte que podía.
A estas alturas del sexo su año ya estaba completamente dilatado, de vez en cuando le escupía saliva pero mi verga entraba muy fácilmente.
Me excitaba mucho pensar que con mi verga podía someter a Rene en la cama, el era un macho alto de 1.
85, pesaba alrededor de 95 kilos por su musculatura, pero sucumbía ante mi verga, porque además de que yo lo sometía por mi actitud dominante en la cama, la realidad era que por más macho que es, le gustaba que yo lo sometiera.
Seguimos cogiendo de perrito bien duro, lo agarraba de los hombros para tener más impulso y darle más fuerte, en el aire había una mezcla de gritos con gemidos pero todos eran de placer.
Lo agarre tan fuerte de os hombros que mis manos quedaron marcadas en ellos.
Lo agarre de la cintura y procedí a seguirla metiéndosela, dandole nalgadas muy fuertes hasta que sus nalgas se pusieron todas rojas.
Ya sentía que me iba a venir así que comencé a darle más rápido y más rápido hasta que cuando me vine se la metí hasta adentro mientras sentia como mis mecos se escurrían dentro de él.
Ambos nos tiramos a la cama, sudados y cansados, respirando rápido.
Rene no se había venido así que se la chupe y se la jalé hasta que se vino, sus mecos llegaron hasta su cuello, y después nos besamos.
Le dije que si queria otra, me dijo que tenía que llegar a su trabajo que porque ya lo había regalado por llegar tarde.
Nos bañamos y nos alistamos para irnos.
Nos subimos al carro y de camino a la unidad deportiva veníamos hablando de que podríamos cojer más tiempo, y que si lo aguantaba, pero que solo teníamos ese tiempo de su comida.
Cuando llegamos a la unidad deportiva nos despedimos, pero fue con un beso de piquito, algo romántico y me dijo que nos veíamos mañana.
En la noche como de costumbre hablamos de todo, pero planeamos algo que no me imaginé que pasaría.
Me dijo que al día siguiente el iba a decir que estaba enfermo para faltar al trabajo y que yo hiciera lo mismo para pasar toda la mañana juntos.
Esperen la parte 4 del relato que ahora es cuando se pone todo más interesante.
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