¿Sabia que podía estar con otra persona de mi mismo sexo?
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Para comenzar, soy orgullosamente Oriental y como muchas personas de mi País (Venezuela) saben que el ambiente acá es tropical pero más que eso, caliente.
Cuando tenia 14 años, hicimos un viaje a la playa en familia, viajamos al Parque Nacional Mochima.
Antes de seguir contando abriré paréntesis para contarles que tengo un primo al cual llamaré Gabriel desde pequeño veíamos porno juntos (Cosas de chamitos en etapa precoz) pero nunca había pasado un toqueteo ni nada al respecto.
Retomemos el viaje.
Carnavales 2011: Nos dispusimos a viajar en familia al Estado Sucre para disfrutar de nuestra temporada, en aquel tiempo se podía viajar y no había tanta inseguridad a la luz del día como ahora.
Gabriel y yo siempre hemos sido esos primos criado como hermanos y que nunca se nos había pasado por la mente llegar a tocarnos nuestros penes (Por así decirlo)
Nos agarramos Carnaval desde el comienzo de Viernes a Martes y como mi familia siempre ha sido "A todo terreno" pues nos quedamos a acampar, yo, como ya era costumbre usaba mi short y mi franela para bañarme en la playa pero, he tenido la costumbre de no usar boxer ni interior (La verdad es que me gusta andar rueda libre) para ese entonces, ya a mi me estaba creciendo mi pene y ciertamente, diría que por genética en mi familia como que son de "Guevos grandes" ese día, mis padres alistaron una carpa para que durmiera Gabriel y yo, ellos durmieron en otra y la mamá de Gabriel y su esposo en otra, pasaron las horas y nuestros padres empezaron a tomar licor y como bien se sabe el licor pone a la gente "revuelta" y al pasar la noche escuchamos al fondo uno que otro gemido, al momento nuestra impresión era el gemido (De donde venia) y como eramos chamos (Por cierto, Gabriel tenia 15 años ) nuestras mentes empezaron a volar.
Lo primero que intentamos hacer fue asomarnos a ver si lográbamos "Ver" algo, la curiosidad de ver sexo en vivo y de nuestros padres nos despertó un buen morbo, al final no logramos ver nada pero si podíamos escuchar y yo siempre he sido el volado en todo esto, me empece a tocar el pene y ya eso estaba más que parado con solo imaginar, el al verme se empezó a tocar y me dijo "Vamos a pajearnos y el que llegue primero se la chupa" y yo acepte, pues cada quien empezó a pajearse con gemidos de fondos y solo la imaginación era la que nos acompañaba, la verdad es que yo pajeandome siempre he durado y pues, me cansaba a pesar de estar chamo y con el morbo revuelto le propuse pajearnos "Darnos una mano" el no quería al principio, pero lo convencí y pues.
Su mano era perfecta en mi pene, lo agarraba de una manera tan delicada pero sabia apretarlo, iba de arriba a abajo, arriba y abajo y mi pene como una piedra y empezaba a lubricar (No lubricaba mucho) pero si lo suficiente como para que el pasara su dedo por mi glande y me excitara de tal manera que me obligaba a pajearlo de la misma forma pero rápido porque sentía placer por lo que hacia.
De repente, en ese momento de placer me dice que me acomode para el montarse encima de mi, en ese momento sentí miedo, pero pensé en lo que estaban haciendo en la otra carpa y no iban a interrumpir su acto para venir a la de nosotros; donde se suponía que dormíamos.
Hasta ese momento no sabia que iba hacer (No pregunté) solo accedí y cuando veo me pone su pene en mi boca y se acuesta encima de mi y se lleva mi pene a su boca (Nunca me había imaginado mamando pene) pero la verdad, pensé en que era una chupeta y hice el trabajo con mi lengua, lo chupaba de la misma manera que el lo hacia, el se dedicaba a chuparme más el trozo y yo el glande, el precum desde esa vez se convirtió en una de las cosas más sabrosas para saborear, no fue mucho lo que faltaba para que el empezará a "culearme" por la boca y pues, ni aviso ni presentí, pero me ahogo y varias lagrimas salieron de mis ojos por aquel liquido que no era mucho pero desconocido para mi garganta que me ahogaba.
Yo aun no acababa y seguíamos en la misma posición, y pues, el tenia que hacerme acabar como yo lo hice con el, el siguió mamando pero yo debía de hacer algo más que disfrutar y empece a chupar sus bolas dejando que su pene descansará, segui haciendo por varios minutos (Como sabia la negación que iba a tener lo que iba a hacer, no lo comenté, solo actué) agarre y abrace su cuerpo a través de su espalda mientras me mamaba el pene y de las bolas pase su lengua a su culo, lo primero que sucedió fue un ¡¿Que haces?! – Eso no José, suelta! Pero no hice caso, aprete mas fuerte y pasé lengua bruscamente porque jamás había mamado un culo pero de lo rápido que hice solo pude escuchar su voz callar y volver a chupar mi pene, en ese momento mi excitación era mucha que mientras le mamaba el culo estaba culeandole la boca y no tarde mucho para venirme sin avisarle y un ¡Tenias que avisarme! salió de su boca despues de todo, se giró y con su boca llena de mi semen me besó, su lengua se sumergió en mi garganta ¡fue rico! y desde ese día hasta unos años más tarde nuestro morbo se convirtió en mamadas de guevo, culo, y acabadas en la boca con buenos besos llenos de semen.
Espero que les haya gustado este primer relato, pronto les estaré compartiendo mucho más material.
Saludos, si les gustó comenten y si tienen alguna sugerencia pueden hacerla, será bienvenida.
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