Saúl, el chamo de los mango (Venezuela)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por xxxchicoxxx.
Hola amigos de esta maravillosa página, es grato saludarles, no voy a decir como muchos dicen que me perdones si no se echar el cuento, ya que el relato lo voy a contar tal cual como me vaya acordando, salga como salga espero les guste.
Cabe destacar que el mismo es 100 % real, no tengo porque mentir ni exagerar, ya que no me gustan aquellos relatos fantasiosos, los que les contare a continuación me paso, y de hecho me está pasando.
Quizás el relato sea un poco largo, pues no lo sé, ya que cuando he tenido que contárselo verbalmente a alguien, hemos durado hablando por muchos minutos.
Se los contare porque fue para mí una de las experiencias más extraordinarias que he vivido, espero sus comentarios a cerca de mi historia.
Todo comenzó el año pasado, entre los meses de junio y julio, yo vivo en Venezuela en uno de los estados llaneros y centrales del país, no soy llanero de fincas pero sí, mi estado no es tan desarrollado como lo puede ser caracas o valencia o el mismo Barquisimeto.
Yo soy un tipo de 29 años, blanco delgado, para muchas personas bien parecido, para otras no tanto, en fin un muchacho estándar, no tengo el mega cuerpo pero si tengo lo mío.
Para ese tiempo estaba yo desempleado, hacía poco tiempo que había salido de una empresa del estado, me desempeño como analista de laboratorio en control de calidad.
Como no tenía trabajo recuerdo que mi hermano mayor me dijo que trabajara con él en su empresa, él tiene una distribuidora de frutas que despacha frutas a nivel nacional, y para ese tiempo estaba la temporada de los mangos, y el por sus ocupaciones no tenía a nadie de confianza que le manejara todo lo relacionado con la zafra de ese año, yo como estaba sin hacer nada acepte.
El trabajo consistiría en ir hasta los centros de acopio a revisar la mercancía, verificar el buen estado de la misma, ordenar que la subieran a los camiones de mi hermano, y pagar a todos los receptores o personas que individualmente vendían sus cestas de mango.
Mi hermano me asigno un chofer y tres empleados que son los que subirían la mercancía a los camiones.
Cabe destacar que el chofer es el esposo de mi prima, el cual tenemos un poco de complicidad, él sabe que soy gay, pero es heterosexual.
Hablamos normalmente de sus cosas de la mía y ya, o sea jodemos bastante como se dice aquí.
La cosa comienza un día creo que era martes, cuando vamos a un centro de acopio a buscar muchas cestas de mango para llevarlas a la empresa, al llegar vemos que es una casa con un patio muy grande donde había como especie de pasillo con techo donde arrumaban las cestas de mango.
Al yo bajarme me recibe un chamo de 23 años, el chamo que se convertiría en el protagonista de una de mis historias más extraordinarias que he vivido hasta ahora, él era el encargado del centro y la persona que arreglaría cuentas conmigo.
Él es un chamo delgado pero con el cuerpo más sexy que he visto en vivo (cuando lo conocí cargaba solo un jeans ajustadísimo sucio del trabajo sin franela) tenía el abdomen que se le podían contar todos los cuadritos.
Los brazos bien desarrollados por el esfuerzo físico, de cara delgada con una nariz muy fina, cabello un poco rubio, en fi un tipo que estaba muy bueno.
Y lo mejor de todo su sonrisa que creo que él se dio cuenta al momento que me había embobado.
Soy muy serio, hasta el punto que dicen que soy muy amargado que no me rio ni echo broma pero ese día toda la dureza que suelo tener había desaparecido con la sonrisa blanca de ese muchacho.
Cuando se acerca me dice: ¿Cómo esta patrón? Mucho gusto Saúl, yo soy el encargado (lo de patrón me hizo sentir como un señor).
Tu hermano me dijo que de ahora en adelante me arreglara contigo
Yo le dije: si vale chamo, mucho gusto mi nombre es Elvis.
Recuerdo que no le quitaba la mirada de encima y el parecía notarlo.
El esposo de mi prima también lo nota y hace una seña como diciendo (ya te vi perra).
Todo trascurrió normal se hizo lo que se tenía q hacer, cargar, llenar los formatos pagar e irnos, cuando de repente sale una muchacha morenita, bien simpática con un niño en sus brazos y él le dice a julio el chofer: Mira esta es mi esposa y mi hijo.
Ellos ya se conocían.
Y pensé: el tipo es casado, no tienes ni el más mínimo chance.
Yo cambie mi cara y no sé porque pero me sentí como molesto, de hecho julio me pregunto que que me había pasado porque desde q había salido la mujer del chamo yo cambie mi cara, de hecho fui muy cortante a la hora de despedirme de Saúl.
Todo trascurrió normal esa semana, el mismo proceso, llegar, cargar y pagar, pero yo trataba de durar más en esa casa que en los demás centros, es que realmente me gustaba ese muchacho.
Llego el día viernes y cuando terminaron de cargar la mercancía en la casa de Saúl, me llama mi hermano y me dice que no había podido conseguir el efectivo para pagar la cuota diaria.
Para ese tiempo ya se estaba empezando a agudizar el problema del efectivo (los que son de Venezuela SABEN y no es necesario explicárselos) a nosotros nos lo conseguía un gerente de un banco Bicentenario, pero ese día fue imposible porque estaban pagando las pensiones de los abuelos.
Cuando corto la llamada llamo a Saúl y le digo: mira chamo mí hermano no consigue efectivo hoy, no vamos a poder pagarte hoy, eso seguro es para el lunes.
– Recuerdo que eran 100 mil bolívares que para la fecha era más o menos, no como ahora que con eso compro dos empanadas.
En fin era más o menos plata y tuve que decir que me disculpara.
Naguara chamo yo necesito esa plata porque tengo al chamito enfermo y necesito llevarlo al médico- me dijo- .
Yo me quede pensativo como dos minutos y le dije: dame unos minutos voy a ver qué puedo hacer.
En eso le dije a Julio que me llevara a la casa de mi mama, que era donde vivía en ese tiempo.
Al llegar busque en mi cuarto y tenía como 200 y tome los 100 mil que el necesitaba.
Al llegar le dije: mira pana yo te conseguí esta plata que es mía para que resuelva lo del chamito, el lunes yo la descuento de la remesa del día ok.
En ese momento el me abraza, pero de una manera eufórica, así como de niño infantil, yo con mis brazos hacia abajo, tratando de asimilar lo q ese tipo estaba haciendo, y me dijo: gracias chamo, me has salvado la vida, te debo esa.
Yo le dije: de nada, estamos a la orden.
Nosotros nos fuimos, entregamos informe semanal y me voy a casa de mama.
En la noche cuanto estoy acostado viendo televisión, me suena un mensaje de texto: “jamás sabré como agradecerte lo q hiciste por mi hoy.
Att Saúl.
Yo respondí el mensaje: quien te dio mi numero?
Me dijo q fue julio el chofer, que él lo había pedido para agradecerme.
S: Espero no incomodar
Y: no vale para nada, cuéntame cómo está el carajito?
S: bien gracias a Dios y a ti.
De allí comenzamos hablar de cosas varias, y lo que comenzó como un simple mensaje de agradecimiento se convirtió en un chat que duro como hasta las 1:30 am, hablamos de todo, él me decía cosas como con picardía, y allí comencé yo a dudar de las verdaderas razones por las cuales él me estaba escribiendo.
Porque no sé qué me dicen ustedes, pero un tipo que es heterosexual y que no le guste las maricuras, no va a estar chateando con otro tipo hasta la 1 de la mañana.
Algo raro pasaba y yo debía averiguarlo.
Para este tiempo del relato no ha pasado nada sexual, lo mejor viene más adelante.
Así estuvimos hablando como por 15 días, era rutinario, yo pensaba: como hace este tipo para apartar tanto tiempo para escribirme, si nos vemos todos los días, y aun así me escribe en las noches, y la mujer será que no se da cuenta?.
Aquí a las mujeres celosas les decimos cuaimas, pero yo no sé si esa era cuaima o no.
Un día necesitábamos buscar unos mangos a una localidad muy remota, y nos faltaba un trabajador, a lo que Saúl al saberlo se ofreció a ir a ayudarnos sin tener que cobrar nada, lo haría por gentileza o según él, por agradecimiento.
Al llegar al pueblito me percato que es una zona muy rural donde había casitas cada cierto lugar.
Y estando en una casa, el señor nos dice que detrás de su casa pasa una quebrada, a lo cual a mí me dio curiosidad ir a ver, y el chofer no quería ir, a lo que Saúl sin pensarlo dijo: si quiere va conmigo.
– yo dije: mmmmm bueno está bien vamos.
Caminamos por especie de un pasillo natural, un caminito pues, cuando llegamos al pequeño rio me siento en una piedra, y al estar callados un rato me dice:
S: este sitio está bueno como para portarse mal verdad
Y: mal? como mal?
S: bueno pa traerse una carajita y pegársela pues, y se rio a carcajadas
Y: mmmmm si puede ser
En eso él se me acerca bastante, mucho diría yo.
Y dice: o vas a decir que no se te pasan cosas por la cabeza?
A lo que yo volteo y lo tengo a centímetros de mí y le dijo: por la cabeza y por otros sitios.
En eso él se sonroja y como que cae en sí, y se siente como cortado, o apenado.
Yo por dentro con satisfacción de haber hecho sonrojar a un hetero.
En eso nos llama el chofer y salimos del monte.
Desde ese pequeño acercamiento no pasó nada, la cosa seguía igual, nos seguíamos escribiendo pero nuestras vidas estaban relacionándose cada dia mas, nos escribíamos mas, el deseo de verlo todos los das crecia cada da mas, yo no veia la hora de llegar a su casa o al centro de acopio para verlo,en fi estaba pasando algo pero ninguno decía nada.
Hasta que un día me llamo como a las 9 de la noche, y me dijo: Elvis dónde estás? Necesito verte.
Yo lo escuchaba diferente como que si estaba tomando.
Al llegar al sitio, (mi papa me presto su carro) efectivamente estaba tomando, no estaba borracho pero estaba como entonado.
Al llegar me abraza y me dice: necesitaba verte.
Y yo le dije: y eso?
S: es que necesito contarte algo grave que me está pasando (yo asustado) le digo: aja cuéntame que te paso?
S: no vale pana aquí no puedo, tiene que ser en un sitio solo.
Y: entonces dime donde
S: vamos a llevar la moto a mi casa, y de allí nos vamos en el carro a una casa que estoy cuidando.
Efectivamente al llegar a su casa, se baja, mete la moto rápidamente y yo lo espero en el carro.
Al llegar me dice la dirección a donde iríamos y me dice que es una casa de una tía que estaba en Perú y que él estaba cuidando y daba vueltas de vez en cuando.
Al llegar cuando entro no me gusto esa casa, tenía solamente un sofá y había arrumados sacos de cemento en el suelo, era una casa como en construcción muy descuidada.
Él me dice que me siente y de una nevera saca una botella de guarapita (bebida popular venezolana) y cuando comienzo a hablar él me dice: cállate chamo voy hablar yo, si no hablo ahora no hablare nunca.
Me dice: mira Elvis lo que debo decirte es algo que me está pasando desde mucho tiempo, es desde que te conocí, mi apego a ti ha sido una cosa extraña, algo que nunca me había pasado, yo no sé qué me está pasando contigo, es como una dependencia a ti, es una necesidad de escribirte, es una necesidad de hablar contigo, es una necesidad de saber cómo estas, eso no me había pasado nunca con un tipo, y últimamente he bebido mucho porque eso que me está pasando no es normal en un hombre, yo soy un hombre, tengo a mi esposa a mi hijo.
(Y en lo que nombra al hijo comienza a llorar)
Yo me sentí nervioso, incomodo, pero por dentro me moría de la emoción al saber mis alcances de conquista y sin hacer nada prácticamente.
En eso yo le subo la cara por la barbilla y hago que me mire a los ojos, y cuando yo intento decir una palabra para consolarlo él me toma mi cara con sus dos manos y se acerca a mi boca y comienza a besarme, yo recuerdo que mi expresión fue de sorpresa y creo haber abierto los ojos como si fueran a salir de su órbita, tuve que dejarme llevar y correspondí a su beso, nos besamos desenfrenadamente, su lengua recorría cada espacio interno de mi boca, recuerdo que el pasaba su lengua hasta por mis dientes por el paladar, no sé, era un beso extraño, morboso.
En eso me besa mis orejas y me hace retorcer, y me dice: quiero que seas mío hoy, me dejas??
Yo no dije nada solo alce mis brazos para que el me quitara mi sweter, y yo le quito su franelilla, y pude ver todo el abdomen que parecía hecho con un cincel.
Él me toma de la mano y me para y nos seguimos besando solamente con pantalones, en eso acerca su bulto al mío y siento algo durísimo, como si fuera a explotar, toma mi mano y hace que lo toque, y al palparlo, no me van a creer eso se sentía muy caliente de verdad ardiente se sentía con vapor, yo le manoseo el guevo y el me toca mis nalgas, en eso me da la vuelta y me recuesta sobre una pared, y me besa el cuello por detrás y me pega el guevo en mis nalgas, yo ya estaba al tope, recuerdo que yo le tocaba con mis manos sus brazos bien desarrollados y sentía cada vena y cada musculo de sus brazos.
Nos seguimos besando así tal cual como estaba yo de espalda volteando hacia atrás y el haciendo como si me cogía por encima de la ropa.
En eso mete sus manos por delante y desabrocha el botón de mi pantalón y los baja has mis rodillas, luego mete su mano dentro de mi bóxer por mis nalgas y me las pellizcaba como haciendo maldad a un niño, siento que los baja hasta las rodillas a la altura de los pantalones, y siento que con su lengua comienza a bajar por mi espalda me besa toda la espalda, más bien la chupaba durísimo que hasta moretones me dejo, al llegar a mis nalgas me decía, que culito tan rico, como deseo meter mi guevo allí y echarle toda mi leche, yo no decía nada, más bien lo oía porque lo sentía como sacado de onda, como que no era el muchacho dulce y cariñoso que había conocido.
En eso le daba piquitos a mis nalgas, cuando se cansó de besarlas y chuparlas, las abrió y comenzó a soplar el culito, yo lo contraía porque para mí era la sensación más arrecha que había sentido, casi acabo solo con los soplidos que Saúl me daba en el culo.
En eso siento un corrientazo de placer, y es que se había atrevido a pasar su lengua por el mero culo, en eso doy un salto y doblo mi espalda, hago un “ahhhhh” que debió oírse a metros de distancias si alguien pasaba por la calle.
Empieza a meter su lengua en mi culo de una manera majestuosa, le daba círculos, lo chupaba, lo lamia, y metía su nariz como si quisiera entrar por dentro de mi culo.
De verdad nunca me había mamado el culo como ese día que Saúl me dio tremendo beso negro.
En eso se para y me pone frente a él me besa, y pude sentir el sabor y olor a culo, era sabroso ese olor, olor a sexo a macho.
Yo le desabrocho el pantalón y hago que quede completamente desnudo, yo pretendo besarle todo su cuerpo, le chupe cada cuadrito de su abdomen, y en con sus manos me guía a su guevo, déjenme decirles algo, aquí hay muchos que exageran con los tamaños, pero Saúl tenía un guevo exquisito, como de cuarta y media, pero más que grande era grueso, yo lo tomo de mi mano y comienzo hacerle lo mismo q el me hizo en el culo, lo comienzo a soplar y en eso se comienza a retorcer, y dijo algo que no se si fue por la excitación o por el alcohol o porque realmente lo sentía me dijo: TE AMO ELVIS NO ME DEJES, yo aproveche para meterme ese enorme pedazo de carne a la boca y comienzo a mamarlo como si mi vida dependiera de ello, lo chupaba así como se chupa un mango, o una chupeta, el me lo metía hasta la garganta hasta hacerme toser, dure mamándole el guevo como 20 minutos y el controlaba la eyaculación para no acabar tan rápido.
Luego me para y me besa, y se sienta en el sofá, allí le llama y toma d la cintura con sus manos, yo pensé que iba a mamar a mí, pero creo que pensó que sería mucho, o lo traiciono la poca heterosexualidad que le quedaba en ese momento.
Hizo que pusiera mis rodillas una de cada lado de su cuerpo y me atrajo hacia el para seguir besándome, estábamos sudadisimos eran chorros y chorros de sudor que caían y resbalaban nuestras pieles.
Yo quede sentado en su guevo, pero sin ser penetrado, y él me hacía cabalgar como si estuviera ensartado, en eso lleva la punta de su guevo a la entrada de mi culo hace que me vaya sentando poco a poco, su cabeza que era bien gorda entro con dificultad pero encajó en el anillo de mi culo, yo contraía mi culo y el gemía del placer, y me decía-.
Así.
Así dale así, y yo más lo apretaba como queriendo estrangularle el guevo.
Debió haber sido tanto placer que le provoque que metió sus brazos por detrás de mis espalda y con sus manos toco mis hombros y de un solo golpe me halo hacia abajo, lo que hizo que perdiera toda la resistencia y cayera ensartado en su guevo enterrándomelo hasta la pata, pudiendo yo sentir sus pelos en mis nalgas, en eso yo doy un pequeño quejido y le dije que me lo sacara, a lo que él me hacía más presión hacia abajo, y besándome como para que me calmara.
Así estuve como 5 minutos, y el dolor fue pasando poco a poco, y comienzo a hacer movimiento circulares lentos.
Iban aumentando de velocidad que cuando me di cuenta estaba ensartándome su guevo de una manera tan dura y fuerte que parecía que quería arrancárselo.
De allí sin sacármelo me pone debajo yo boca arriba y el encima de mí, y comienza un mete y saca que parecía una música con ritmo, me daba lento y fuerte y luego rápido, no sé cómo lo hacía pero yo sentía que me estaba destrozando la próstata, porque eran corrientazos de placer cada vez que me tocaba ese puntico sabroso que tiene uno en el culo y que nos hace viciosos de guevo.
Después de eso me lo saca y me paro, me llevo hasta donde estaban los sacos de cemento y hace que me ponga de perrito más o menos que mi culo quedara a la altura de su guevo bien parao, allí me lo mete sin compasión y me da las mejores metidas que mi culo ha podido saborear en mis 29 años.
Luego me baja de los sacos y se vuelve a sentar en el sofá, y me dice que me lo meta pero dándole la espalda, y así lo hago me lo meto dándole la espalda y comienzo a cabalgar como si estuviera encima de un caballo, allí pongo mis manos en el piso y desde esa vista me daba nalgadas, y no sé cómo fue que yo logre un ritmo de cabalgata que lo hacía muy rápido en eso me paso lo que no había logrado ningún tipo, cuando me estaba ensartando ese majestuoso guevo siento como un hormigueo en mi estómago como si tuviera ganas de ir al baño, me asuste porque pensé que la iba a regar e iba a pasar pena llenándole el guevo con mis desechos, pero no fue así cuando acelero más las metidas siento que me estoy orinando y también me asusto, pero cuando me doy cuenta era la leche que me estaba saliendo, había acabado sin tocarme el guevo, esa vaina no lo había logrado ningún hombre hasta ese momento, siento que el mundo se me fue como por 5 segundos y volví en sí, en eso el me para de golpe y empieza a darme duro, eso sonaba plas plas plas tan rápido, en eso me doy cuenta q estaba acabando, acaba dentro de mí, no les voy a decir que sentí los chorros de leche como algunos dicen pero de que sentí placer con sus temblores se los puedo asegurar.
Luego el me sienta encima de el aun con su guevo adentro y así me quede ensartado y recostado en su pecho.
El guevo se fue saliendo solito poco a poco y él se acostó a lo largo del sofá y me atrajo hacia el para que me recostara en su pecho como un niño, yo cerré los ojos y que quede dormido como 15 minutos o mas no sé, el también descanso un rato.
Siento que me está acariciando y me despierto, cuando subo mi cara para verlo me da un beso súper tierno como piquitos en la boca.
Y me dice la típica pregunta TE GUSTO?
Yo no dije nada solo asentí con mi cabeza.
Y allí me dijo algo que creo que me aturdió o me confundió más de lo que había estado antes de haber tenido la maravillosa sesión de sexo.
Me dijo: Elvis quiero decirte que esta ha sido la experiencia más morbosa y rica que he tenido, lo que yo tenía que decirte es que tú me gustas desde hace mucho tiempo, desde el día que fuimos al rio yo comencé a verte con otros ojos, me pareces muy sexy, sensual,.
No se me calientas nada mas de pensarte, y hace tiempo que quería que fueras mío, PERO (siempre hay un pero) yo soy casado tengo a mi esposa y a mi hijo y creo que esto no está bien, yo creo que esto que vivimos no se puede repetir más, es algo que nos debíamos porque yo sé que yo te gusto así como tú a mí, pero yo no te puedo ofrecer nada a ti, no te voy a mentir diciéndote que vamos a tener una relación como de novios porque no es así, no será así, nunca vamos a tener una relación donde yo tenga que estar pendiente de ti y tu de mí.
(En resumidas cuentas yo pensé este me cogió y ya, era lo que quería).
Yo soy un tipo casado que no le gustan los hombres solo que contigo tuve este DESLISS.
(wao eso si me dolió) es mejor que todo siga como si no nos fuéramos conocido y si llegáramos a tener deseo sexual bueno pasara si el destino lo quiere pero es mejor que por nuestra parte todo acabe aquí.
Después de esa terrible sentencia yo solo dije OK.
Me pare y el me tomo de la mano y me dijo; Perdóname.
Yo por dentro sentía rabia porque me había herido, aunque puse mi cara como siempre soy, de seriedad de malhumorado.
Le dije nuevamente OK.
Me vestí me pare en una esquina de la casa con un pie arrecostado de la pared a esperar que él se vistiera.
Cuando termino se pone en frente de mí se acerca como para querer besarme le pongo la mano en el pecho lo alejo de mí y le dijo: PERDONAME PERO TU Y YO NO SOMOS NADA.
Abro la puerta entro al carro lo espero, y a los 5 minutos entró, no sé qué pensaría el en esos 5 minutos, enciendo el carro y no dijimos ni una sola palabra en el camino.
Cuando llegamos a su casa se baja se agacha para ver por la ventana hacia mi estira la mano y me dice PERDONAME.
Yo arranco el carro y lo dejo con la mano estirada.
Los días pasaron él y yo no cruzamos más palabras sino las necesarias, parecía como si nada fuera pasado, pero si teníamos miradas de vez en cuando.
no le escrb mas, y por dentro sentia un vacio, en realidad me hacia falta hablar con el, verlo, llamarlo etc.
La zafra de mango termino, yo me fui unos días a Acarigua a casa de una tía.
Cuando regreso lo vi en varias oportunidades, pero de verdad me dolía verlo porque más q deseo sexual yo sentía algo emocional por Saúl.
La cosa se me fue pasando poco a poco, comencé a salir con un muchacho, más que salir a conocerlo,
Estando un día en una heladería con mi nuevo amigo, el entra con su esposa y su hijo, me ve pero no me saluda sino que puso cara de sorpresa al verme muy contento con otro chamo.
Yo mientras estuve allí me reía y parecía que estaba disfrutando mucho la estancia allí, y él no me quitaba la mirada de encima.
Yo lo medio veía pero hacia como si su presencia no me importaba.
Nosotros nos fuimos primero que él y yo iba con una sonrisa para ver su reacción, no lo vi pero si sé que él me detallo y a mi amigo también,
En la noche recibo un mensaje que decía VEO QUE ERES MUY FELIZ CON TU NOVIO.
Era el, pero lo que siguió se los contare más adelante, como los celos lo llevaron a volver a mí, lo que paso con su esposa y como después de tiempo sin vernos volvimos a encontrarnos hace poco en los recientes carnavales 2018.
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