Se derrumba mi heterosexualidad A mis 15 parte 2
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Alexgui18.
Pasaron varias semanas en los que mi amigo Edgar aprovechaba que estaba dormido (según el) para tóquetear mi cuerpo, jugar con mis nalgas, tocar mi pene, juguetear con mis bolas e introducir su dedo en mi culo mientras solo se masturbaba. En una ocasion estaba un amigo menor que yo de 13 años conmigo, estábamos jugando videojuegos, para ponerle emoción al juego ya que se trataba de luchas uno a uno quedamos en que el que perdiera se iría deshaciendo de una prenda, así estuvimos varias horas hasta que los 3 estábamos desnudos, tapando nuestros genitales con el bóxer fuera, Edgar solo se enfocaba en mi cuerpo y eso me excitaba al saber que sus ojos solo se interesaban en mí y no en mi amiguito, total que mi amigo se vistió y se fue ya que su mamá le había gritado desde su casa ya que era tarde, cuando Edgar se hiba a poner su bóxer yo se lo arrebate y comenzamos a jugar luchitas cuerpo a cuerpo desnudos, yo me volteaba y le ofrecía las nalgas para que su pene rosara mis nalgas, hasta que sentí que su verga estaba tiesa obvio mi pene estaba a mil pero como estaba boca abajo el no lo notaba, era excitante sentir la piel de su cuerpo sudado por el forcejeo de nuestros cuerpos, cuando logró quitarme su bóxer de las manos se incorporó y se volteó para ponerse el bóxer mostrando sus nalgas mientras levantaba cada pierna para colocarse el calzón, se vistió de nuevo y yo hice lo mismo también ocultando mi ereccion. Esa noche dormí y pasada la media noche sentí de nuevo como jugaba de nuevo con mi cuerpo, era tanto mi placer de sus caricias que me relajé de más y me quede realmente dormido, estaba a punto de salir el sol cuando me despierta un leve cosquilleo en mi verga que se encontraba como piedra punzando enormemente de placer al sentir la cavidad cálida y humedad de su boca, Edgar me estaba mamando la verga tan suavemente que su labios apenas rosaban la piel de mi glande, sus movimientos eran tan lentos, sus labios engullían hasta el borde de mi cabeza peanal para regresar al final de mi uretra, este leve rose tenía mi verga al tope, pero yo me aguantaba todas esas sensaciones dejando hacer de Edgar lo que sea fingiendo estar dormido. Cuando estaba a punto de eyacular, él se retiró de mi verga y se acodó para seguir durmiendo, justo en el momento en que se retira, puse tenso todo mi cuerpo porque sentía una cantidad de energía que estaba a punto de explotar desde lo más profundo de mi cuerpo, me quede muy quieto sin moverme Queriendo haber terminado fuertemente y que se tragara mis mecos que tanto guardaba para el, de pronto algo comenzaba a surgir desde lo más profundo de mi ser, era una sensación rara, una pequeña energía comenzaba a fugarse desde alguna parte y comenzaba a inundar toda la piel de mi cuerpo erizándola de manera impresionante, como si tuviera una bomba dentro a punto de explotar llenando mi cuerpo de mucho placer, mi cuerpo comenzó a estremecerse muy despacio en repetidas convulsiones que me hicieron saber que estaba teniendo un orgasmo. Edgar me voltio a ver extrañado como preguntándose qué me estaba sucediendo y si estaría bien, lo que no sabía él, era que estaba de lo mejor y había quedado rendido, seguí con mis ojos cerrados hasta que Edgar se recostó de nuevo en su lado de la cama más tranquilo por verme que había quedado muy relajado y me quede dormido. Al despertar ya eran como las 10 de la mañana, Edgar estaba despierto con su celular en la mano, pasaron unas horas en las que mientras platicábamos de tonterías, mi mente solo pensaba en el orgasmo que había tenido en esa mañana, hasta que decidí a aventarme para decirle que lo había sentido todo y que siempre estaba despierto y que me había encantado su mamada. Yo – esta mañana me desperté muy bien Edgar – me da gusto que hallas descansado Yo – muy bien (recalque), pero no me refiria a eso, sino a qué te vi mientras me estabas mamando la verga Edgar – fue solo un momento de calentura (respondió mientras se dirigía al baño) No supe qué responder para retenerlo y decirle como me deleitaba haciéndome el dormido mientras cachoriaba mi cuerpo, estuve pensando como retomaría el tema cuando regresara del baño, al fin salió y cuando regreso a mi habitación me dijo que tenía unos pendientes por hacer y que se tenía que ir porque ya era tarde. Solo afirmé con mi cabeza y nos despedimos con un choque de manos mientras lo veía salir de mi habitación hacia la puerta principal. Edgar se sintió descubierto y no regresó a visitarme en varios días, solo respondía mis mensajes diciendo que andaba ocupado y no podía visitarme, sabía que me estaba evadiendo talvez por la vergüenza de sentirse descubierto, para mi fortuna mi madre y mi hermana salieron de viaje, Arturo se había adelantado unas semanas antes y la casa estaría sola para mi, así que planee todo para que Edgar viniera a visitarme y buscar la oportunidad de que me rompiera el culo, relato que les contaré en el próximo relato
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