Secretos en la granja I

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por mena55.
Parte I

Marco era hijo de granjeros, tenía nueve años.
Tenía dos hermanos más, Alberto de 11 y Javi de 12.
Sus padres dedicaban todo su esfuerzo y trabajo a la granja y al campo.
Era verano, no había clases, Vivian en un pequeño pueblo de León, más que pueblo aldea y muy rural.
Mas desayunar marcho, se había levantado el último.
Marcho hacia la granja, donde seguro estaría su hermano Alberto ayudando a su padre.
Se metió, sin hacer ruido.
Oyó las voces de ellos dos, al final.
En la nave tenían cerdos, vacas.
Se agacho, dispuesto para darles un susto.
Pero el susto se lo dio el, cuando llego al final, una cuadra de cemento, donde su padre guardaba la paja, comida de los animales.
Junto a esa cuadra, su padre tenía a un cerdo, el macho, el que se dedicaba a preñar a las cerdas.
Estaba en la jaula, junto a él, su padre y hermano.
Por algunos agujeros de la pared pudo ver lo que estaban haciendo y diciendo.

-Alberto- papa, hoy el cerdo tiene el culo caliente ¡ehhh!
-Roberto- tú lo dices… mira como le meto la zanahoria por el culo…
-Alberto- ¿se la vas a meter por el culo? eh papa
-Roberto- sí, claro… los dos… ¿oh no?
-Alberto- también ¿te la chupo, papa?
-Roberto- sí, sácala y hazme una mamada, la tengo ya a tope… ¿le sacamos el pito, al marrano?
-Alberto- sí, se lo quiero chupar y que me lo meta por el culo
-Roberto- yo creo que iré probando a metértela por el culo, Javi tu hermano no tiene ya problemas
-Alberto- sí, ya lo sé, bien que le gusta ser jodido… ¡como a mama!
Marco miraba, con sorpresa aquello y sin entender nada el porqué de aquello.
Alberto se arrodillaba para sacar del mono que su padre llevaba el duro miembro, que jamás había visto semejante cosa, para él, aquellos casi 16, le pareció un monstruo.
No se explicaba el porqué su hermano se lo chupaba, lo lamia, de rodillas le comía la cola a papa que le oía suspirar y gemir.

-Roberto- sí, chupa, chupa… lo haces muy rico hijo, espera, se la voy a meter al marrano por el culo, coge el bote que está allí… anda tráelo
-Alberto- le gusta al marrano que le den por el culo… luego se la meteré yo
-Roberto- lo que tú quieras… tenemos también a las cerdas… esas piden también rabo
-Alberto- ahora estamos con este… ¿le saco el pito, eh papa? quiero hacerle una chupada
-Roberto- no, ahora no… ¡metele tú la zanahoria por el culo!
-Alberto- vale, tiene el culo bien abierto el muy cerdo… -se puso de pie y le enchufo de nuevo la zanahoria por el culo- eso es, marrano, cerdo… como te gusta que de por el culo… luego tendras la de papa, para que te llene…
-Roberto- eso es hijo, ábrele el culo que ahora le voy a llenar el culo
-Alberto- joder como le gusta, al puerco… como al Toby –era el perro, mastín- a ese también le gusta que le den por el culo y al tío también le gusta joderse el culo de Toby… y a mama le encanta estar enganchada al perro…
Marco no había entendido mucho el final, mama, el tío… pero tampoco comprendía lo que su hermano había querido decir.
Solo miraba como su padre le metía la cola por el culo del cerdo, y porque se hacía aquello.
También se tocó en la suya, chica pero la tenía súper dura.

-Roberto- joder, que gustito me está dando el marrano… aaaaa, que rico
-Alberto- estaba caliente, deseaba tener rabo en el culo… yo quiero que me la meta…
-Roberto- vete echándote cremita en el culo… yo estoy para reventar
-Alberto- como le entra y sale… ¿te gusta guarro?
El cerdo empujaba hacia fuera de su jaula, le gustaba ser jodido por Roberto y por los dos hermanos, que le metían cosas por el culo.
Marco no entendía nada, ni de lo que decían y veía… y menos aun, porque a el no le dejaban participar en aquellos juegos…
-Roberto- yo me corro, me corro en el culo del marrano
-Alberto- luego déjame que te la meta, eh… ¿me dejaras?
-Roberto- pues claro… que gusto me quede… -decía sacándola del culo- mira que culito más abierto se le ha quedado… ahora tu… ven hijo
Se arrodillo y con la mano masturbo al cerdo que este pronto sacaba su miembro, largo, rojo.
Ya el niño se bajaba sus ropas para poner el culo al cerco, que este ya sabía qué hacer, porque se había cogido a toda la familia menos a Marco que miraba.

-Alberto- aaaaaaa –grito al ser follado por el cerdo- aaaaa, joder, joder
-Roberto- si joder, pero bien quieto que te quedas, so guarro… sabes, tenemos que ir entrenando a otro cerdo… tengo ya puesto el ojo en uno… sabes…
-Alberto- si, siiiiiiii… aaaaaaaa, papaaaaaa ¡coñoooooo!
-Roberto- joder al marrano como le gusta el culito de mi hijo, marrano, marrano…
-Alberto- aaaaaa, se corre, el cerdo me echa su leche en el culoooooo
-Roberto- joder, como te gusta que te joda el culo… ¿no deseas que yo ya te coja?
-Alberto- si, sabes que si papa, pero ostia, tu rabo es gordo y mi culo chico, te pones para que tenga yo el gusto
Marco decidió salir de allí, no quería que le pillaran, sin hacer ruido salió de la granja y echo a correr hacia el rio.
Mientras Roberto se bajaba sus ropas y ponía su culo a su hijo, que este con su cola dura se la dirigía al ojete de su padre.

-Roberto- mete, mete…
-Alberto- joder como me gusta tu culo papa, me encanta… y el de mama
-Roberto- si ya lo sé, puerco…
-Alberto- ya, me viene, me viene el gustito papa… aaaaaa, rico, rico
Con gusto y placer el niño se dio su gusto.
Los dos se vistieron y salieron fuera para continuar su trabajo.

-Alberto- oye papa, con Javi lo hemos comentado ¿para cuándo Marco?
-Roberto- sí, habremos de irle enseñando… contigo fue con ocho años… ya tu madre y yo lo hemos hablado, creo que sería como lo hicimos contigo, que fueras tú, como Javi contigo que te inicio…
-Alberto- ya Javi me ha dicho que le tiene ganas y yo también… esta rico el jodido… menudo culo que gasta mi hermanito…
-Roberto- y yo y tu madre… y el primo, el tío… todos… debemos de irle iniciando
-Alberto- ¿va a venir el primo y tío?
-Roberto- sí, vendrán… creo que deberías de iniciar a Marco ya, iros al rio y allá vas jugando con él, pero espera unos días, vale… creo que será muy fácil
-Alberto- tranquilo papa, ya me acuerdo del tato cuando jugaba conmigo… entonces tengo via libre con él ¿no?
-Roberto- sí, tienes vía libre…
Marco durante el camino que le llevaba al rio, solo tenía en mente lo que había visto.
Llego al rio, se quitó toda la ropa y se metió echándose largo y que el agua le recorriera su cuerpo.
Pesaba en muchas cosas, el porqué de aquello, y porque a él no le habían enseñado ese juego tan rico.

Después de la comida, su padre y Alberto se marcharon hacer cosas por los campos.
El decidió marcharse al rio.
Cuando se hubo cansado regreso hacia la casa.
Tenía hambre.
Paso por el granero, donde allí tenían gallinas, conejos.
Entro dentro, la cual tenía varios cuartos con dos pisos.
En uno de ellos oyó voces, su madre y hermano mayor.
Fue hacia él, intento que no le vieran y menos que supieran que él estaba por ahí.
En el cuarto donde ellos estaban, la pared tenía agujeros y en uno de ellos se puso a mirar.
Vio a su madre que él comía la cola a su hermano mayor de doce años, junto a ellos estaba Toby el perro.

-Javi- aaaa, mama, chupa, chupa… que rico lo haces… ¿te conto Alberto?
-Marta- sí, esta mañana cogieron con el marrano… me puse cachonda perdida…
-Javi- y yo… creo que el Toby te quiere coger, mama… te huele el chocho
-Marta- si, deja que me meta la lengua por ahí… lo hace rico…
-Javi- primero te follo yo a ti… esta noche me cogeré al tato, le daré bien por el culo
-Marta- ya papa quiere metérsela…
-Javi- él también lo desea, ya le he dicho yo que al principio duele, pero luego se quita y da gustito, mañana me iré yo con papa, necesito que me joda el culo…
-Marta- uy que gustito me da el perro con la lengua en el coño… vamos a sacársela…
Marco miraba con mucha sorpresa todo aquello.
su madre haciendo cosas con su hermano, su padre también, allí pensó porque a él no le dejaban jugar a esas cosas.
Por momentos tuvo celos de ellos.
Madre e hijo se ponían cada uno a un lado del perro que se dejaba hacer, ya la mujer masturbando al perro para sacarle el rabo y su hijo abriendo la boca para chupárselo.

-Marta- chupa, chupa ¿joder como le gusta al puto perro?
-Javi- tu dirás mama… ¿te gusta mi perrito? ¿quieres que te la meta por el culo?
-Marta- seguro, menudas enculadas le pega tu padre al pobre… pero no le queda otra
-Javi- y a este bien que le gusta que le den por el culo, como a ti mama… se queda quieto y sacando la lengua…
-Marta- ¡como a ti también! mira este… ¿porque no me follas el coño?
El niño dejo de chupar al perro, su madre en cuatro y chupando el rabo del perro.
Se puso detrás de ella, con la picha toda dura se la llevó al coño.

-Javi- sí, toda dentro, mama, toda dentro… que rico, que rico joder
-Marta- siiiiiii, dame, dame tu cola por mi coño
-Javi- joder, estas hoy bien diluida, tienes el coño chorreando de todo… tu necesitas que el perro te folle bien… que se te queda pegado media hora
-Marta- cabron, como tú con tu cola, que andas siempre con ella dura… solo buscas meter y que te la metan…
-Javi- tengo doce años y soy super caliente… creo que el perro quiere tu coño… ¿por qué no te dejas que te la meta por el culo? a papa se la mete, sabes
-Marta- si, ya lo sé, a mí también me la mete, pasa que no tengo crema y ya sabes, duele… aaaaaa, que meta por el coño… dios que rico es esto… prefiero que me llene el coño, ese me da mucha guerra…
-Javi- coño, coño que bueno, que bueno… esta noche Alberto y yo iremos con el poni…
-Marta- pero después de la cena, vale… tengan cuidado con Marco…
-Javi- tranquila, solemos ir hasta el rio… me viene el gustito… aaaaa, que rico, me gusta tanto tu coño… como el culo de papa, me gusta todo
-Marta- sí, el follar es muy rico, muy rico hijo… a ver si viene los tíos y yo me como un coño
-Javi- ¿cuándo vienen? tengo ganas ya de joder a mi primo
-Marta- al mes que viene… aaaaaa, dios, dios…
-Javi- ¿y los abuelos? quiero coger el chocho de la abuela…
Allí Alberto no daba crédito a lo que oía, todos jugaban aquel juego, a él no le decían nada, no entendía el porqué.
Ya el niño dejaba el sitio al perro, que con ganas y deseo se subía al cuerpo de la mujer dispuesto a follarsela.

-Marta- aaaaaa, dios, diossssssss
-Javi- joder como te ha cogido el perro… eso es, follala, dale gustito
-Marta- sí, ya me lo da, dios mi coño, mi coño –Marcos desaparecía- aaaaa, dios, dios
El perro estuvo un rato follandose a la mujer, hasta que el perro explotaba en el interior de la mujer.

-Javi- se corrió, el perrito se corrió
-Marta- sí, se ha corrido el cabron, como yo… dios he echado varios orgasmos… dios como arrea el puto perro… dios de mi vida –el perro se soltaba de ella- ¿te ha comentado algo papa de Marco?
-Javi- sí, después de la comida me comento, ya Alberto lo hablo con el… ha dicho que lo fuéramos iniciando nosotros a nuestra manera… tu tranquila mama, para la orgia familiar ya estará disponible…
-Marta- sí, sería interesante que antes de que vengan los tíos y los abuelos ya sepa y participe
-Javi- había pensado que pasado mañana que no están, pues podríamos enseñarle, ir al rio, como allá nos vallamos en bolas…

Después de la cena, marco marcho hacia el rio, donde se tardaba menos de diez minutos.
Allá se escondió, quería ver a sus dos hermanos jugar aquel juego que a él no le dejaban participar, los dos hermanos iban con su poni.

-Alberto- bueno ya Marcos cae… ¿no le tienes ganas?
-Javi- si, muchas, menudo culito que tiene el cabron… creo pasado mañana no lo podríamos llevar al rio y allá lo iniciamos entre los dos… ¡no sabes las ganas que tengo de metérsela por el culo!
-Alberto- papa me dijo que esperemos unos días más
-Javi- pero mama ha dicho que mejor cuanto antes, los tíos y abuelos vienen, el domingo están los abuelos y creo que es mejor que ya sepa lo que hacemos
-Alberto- ¿tú crees que sabrá algo?
-Javi- ese no sabe nada de nada, además todavía su mente no piensa en esas cosas… pasa que él ya va tardío, contigo fue con ocho años y yo con seis… -llegaron al rio- por fin, llegamos al rio… que bien se está aquí ¿verdad?
-Alberto- si, de maravilla… que, se la sacamos ya
-Javi- para eso lo hemos traído
Los dos niños se pusieron a lomos junto al caballo.
Llevaron la mano a las partes del poni, sobando le fueron empalmado, sacándole sus casi 18 de rabo tieso, que fueron abriendo bocas para chupar.

-Alberto- joder, joder… chupa, chupa
-Javi- eso hago… a este le gusta mucho metérsela a mama por el coño, como es normalita, le entra que se caga de gusto…
-Alberto- si, ya lo sé… se la mete hasta el fondo…
Escondido Marco miraba, pero apenas podía oír nada.
Los hermanos se comían el rabo del poni, hasta que le hicieron acabar, soltando mucha leche.

-Javi- se corrió… joder hoy la que ha echado… eh
-Alberto- a ver, ¿nos la chupamos?
-Javi- si, luego se la metemos por el culo… primero entre nosotros… acerca tu boca y lame mi cola
Marco miraba como Alberto chupaba la cola de su hermano, veía que aquello era algo rico.
Deseaba ir con ellos, jugar a ese juego que a él no le habían enseñado aun, y se preguntaba ¿por qué no?, se moría de la envidia.

-Javi- aaaaaa, que rico chupas hoy mi cola… joder, tengo unas ganas de que vengan todos… menuda orgia que vamos hacer…
-Alberto- y yo… sobre todo al con el primo
-Javi- si… pon el culo que te la meto
-Alberto- y una mierda, ahora me chupas un poco la cola, que me gusta
Se bajó sus bermudas que como su hermano no llevaba nada debajo.
Salto su cola dura, donde Javi se dispuso a chupársela.
Marco miraba, con envidia y rabia, porque él no podía participar.

-Javi- ya te la meto, ponte anda… me gusta mucho tu culo
-Alberto- joder, un poco más… lo haces bien rico –hasta que se puso en cuatro- escupe un poco anda… para que se meta bien…
-Javi- ¡fuattttt! –escupió- creo que pronto papa te le meterá, anda ya con ganas
-Alberto- pues ando con algo de miedo, no creas… ¿a ti te dolió cuando te la metió?
-Javi- tú dirás, pero luego con la crema y como papa sabe hacer, da gusto… te lo digo yo, que mi culo es casi igual al tuyo… papa jamás te hará daño
-Alberto- querer quiero, si ya cuando papa te coge y te veo, ando con ganas, pero luego cuando se la veo, pues me corta, si ya sabes que me gusta… esta mañana el cerdo me dio un gusto…
-Javi- sí, lo hace bien rico, con esa picha que tiene… a mí me gusta un montón y a mama, no veas… esta tarde la cogió el Toby, joder como disfrutaba la guarra… tres veces que la tuvo que montar y ahora estará papa dándole bien por el coño…
-Alberto- ¿y tú también, jodido? mira este
-Javi- ¿yo, tú dirás? como tú con papa esta mañana con el gorrino… yo, sabes, se la metí a la yegua por el chocho, joder como lo tiene la jodida… mientras mama era follada por el perro
-Alberto- jajaaa –mete ya- aaaa, si, mete, mete tato
-Javi- si, joder, me gusta tu culo que no veas, chico, pequeñito de mi tamaño, tu agujerito es para mí cola… que rico joder, me aprieta
-Alberto- si, a mí me gusta mucho que me la metas… aaaa, dale, dale…
-Javi- ahora yo… yo quiero meter
-Alberto- si, no te preocupes, no me voy a correr, se la tenemos que meter al poni
Hubo cambio, Javi se ponía en cuatro, detrás su hermano.
Los dos hermanos, de pelo moreno, pelo corto, en cambio Marco tenía el pelo rubio, largo de tres meses.

-Alberto- ahora yo, por tu culo…
-Javi- dale, mañana papa me cogerá por la tarde… ya hemos quedado en eso
-Alberto- mañana, me voy con mama al dentista… ¡joder como te entra! ¿te dejas de Toby?
-Javi- papa no me deja, dice que es un poco peligroso, por la bola… solo del cerdo, además me gusta más ¡bueno que te voy a decir yo que tu no sepas!
-Alberto- si, el cerdo te da un gustito en el culo, papa ha dicho que va a entrenar a otro… ¿a que esta rico meterla por el chocho de una cerda?
-Javi- sí, me gusta más que a la yegua… salte y vamos a follar al caballo que a ti te viene el gusto en nada…
Los dos hermanos fueron hacia el caballo, desnudos totalmente, lo llevaron hacia una roca, donde Alberto lo sujetaba para que no se moviera, mientras que su hermano se ponía detrás del caballo, dispuesto a meterle toda su cola dura.

-Javi- pues que le va toda por el culo… el otro día papa le dio bien por el ojete
-Alberto- y para eso no le gusta que le den por el culo… si en la granja no hay culo que no sea virgen…
-Javi- sí, yo le suelo meter un pepino por el culo, se queda quietito… como ahora, sabe que se la voy a meter, pasa que la mía es chica y le sabe a poco
-Alberto- dirás, mejor la de papa… esa es gordota y rica… y la del abuelo y el tío
-Javi- tú lo dices… sabes, ya me vino el gustito… te toca a ti.
tiene buen culo para follar
-Alberto- prefiero tu culo, me da más gustito
-Javi- ya no, métesela al poni, ya me corrí y ya no me gusta
Alberto volvió a excitar al caballo sacándole su duro miembro para luego el metérselo entre las piernas y así darse un gustito que como su hermano muchas veces hacían.

-Alberto- que gustito da esto así… aaaaaa, jope, jope
-Javi- sí, eso así si queda gustito… papa se lo hace con la del caballo
-Alberto- sí, ya lo sé… pasa que como esta es más chica, bueno chica, tiene buen rabo el cabron, pues da gustito… te conto papa, que quiere que el caballo se la meta al poni por el culo
-Javi- ya lo probamos y no le entra por el culo… ya, apúrate coño que se va hacer de noche… haz que se corra y tú también
-Alberto- toma el rabo tú y yo se la meto por el culo
Javi cogió el rabo del poni y se la chupo, mientras que su hermano se ponía sobre la roca para meterle la cola por el culo.
Marcos miraba, estaba todo excitado, todo duro, se tocaba su durita cola, deseaba ir con ellos, pero tenía miedo a que le regañaran.

-Alberto- ya me vino el gustito, aaaaa, que rico
-Javi- pes este está ya para que el salga, mira como mueve el culo
-Alberto- sí, ya le sale… joder, joder –decía al ver la leche del poni soltarla- se corrió
-Javi- sí, este se corrió y me ha puesto perdido
-Alberto- ves al rio a lavarte, estará ahora algo fría… yo voy a cagar
-Javi- pues ves a cagar, que yo también voy con ganas… somos unos cagones
-Alberto- siiiiiiii, voy un poco para allá… que chico, hoy dos corridas que te has pegado –le decía al poni- rico, rico tu culo…
Marco tuvo que esperar un rato a que sus hermanos estuvieran bien lejos para poder volver a casa, donde también ya empezaba a oscurecer.

Al día siguiente, Marco ayudo a su madre hacer tareas en la granja, coger huevos, limpiar.
El la miraba de otra forma, recordaba lo que le había visto hacer con su hermano y solo se preguntaba por qué a él no se lo hacia ese juego tan rico.

Javi junto con su hermano y padre andaban trabajando en los cerdos.
Limpiaban y les echaban de comer.

-Javi- papa, ya mañana iniciamos a Marco… así para el domingo que vienen los abuelos pues ya sepa todo lo que hacemos
-Roberto- sí, ya ayer mama me conto, me parece bien… mañana no estaremos, tenemos médico, tú te quedas al frente de todo… si fuera todo bien mañana, por la noche nos lo meteremos en la cama, saben, vuestra madre quiere preñarse otra vez
-Alberto- pues a ver si tenemos una hermanita
-Javi- eso, eso… una nena… apunta bien papa…
-Roberto- a mí me da igual… venir, os quiero enseñar al marrano que ya estoy domando…
Fueron a donde Roberto tenía al cerdo que él estaba entrenando para sus juegos.
Apenas un año, el animal estaba metido en una jaula.
Era súper dócil, donde ya los tres se metían dentro.

-Alberto- marrano, ¿ya te dejas que te den por el culo?
-Roberto- bueno, aun lo tiene algo chico para mi rabo… pero creo que ustedes dos podrían, al menos le gusta que le meta cosas por el culo
-Javi- ¡y la picha como la tiene ya!
-Roberto- pues algo más corta que el otro, pero aún no consigo que monte… ahora probaremos
-Javi- ya sabes que a mí me gusta que el cerdo me la inque
-Alberto- ¡y a mí! ¡papa sácasela! pongo el culo
-Javi- ¡y un mierda, yo primero!
-Roberto- a ver si él quiere… acércame la zanahoria esa de ahí, se la vamos a meter por el culo
-Alberto- ¿me dejas a mí? le meto mi picha, que ese culo se ve rico ¿verdad Javi?
-Javi- sí, se ve muy excitante… saben, me gusta más los cerdos para follar que otros animales
-Roberto- me pasa como a ti, como los coños de las cerdas… son muy ricos
-Javi- pues sí, a la yegua no me va mucho, pero al poni nos encanta darle por el culo
-Roberto- ya, la yegua pasa que tiene el coño grande y vuestras pichas se pierden… y la dejan a dos velas y más caliente aun…
Roberto con la zanahoria se la fue metiendo al marrano por el culo, el animal muy quieto se dejaba hacer, ante la mirada de los dos hermanos.
Hasta que Roberto le dijo a uno que fue Javi que le metiera la cola por el culo.

-Javi- yo, se la voy a meter por el culo… esta tarde papa ¿qué haremos tu y yo?
-Roberto- recuerda que esta Marco, guapo…
-Javi- bueno, ese se suele perder… o ¿por qué no me coges ahora un poco?
-Roberto- mejor no, ese está en el granero con mama y puede venir, hay que estar ojo de que entre… por eso ya es bueno que el participe y no nos tengamos que estar escondiendo
-Alberto- si ya papa, le tenemos unas ganas y de metérsela por el culo
-Roberto- sí, ese tiene un trasero muy rico… y una buena colita, creo que será el mejor dotado de todos
-Javi- ¿tú crees? porque el tío no tiene gran cosa –el hermano de Roberto- ¿y tú eso como lo sabes?
-Roberto- le dejo de crecer a los trece años… pobre mi hermano, pero bueno, la tiene bien y el primo también… y a Marco lo sé, porque lo poco que yo se la he visto, la tiene algo más gordita que ustedes a su edad, ese sí que nos llenara el culo a todos y a mama el coño
-Javi- pues el primo para tener mi edad, la tiene un pelín más chica.
pero bravo por mi hermanito, que ganas tengo ya de catarle ¿se la podemos meter?
-Roberto- sí, si él quiere y lo desea, se lo cogen… pero denle placer y no sean brutos con el… ¡venga, métesela ya al marrano!
Javi con su dura cola y su padre sujetando al gorrino, metió su dura cola por el ojete del animal, que este se quedaba muy quieto, parecía que lo que le hacían los humanos le gustaba.

-Roberto- creo que ya tenemos a uno, le gusta… ¿qué tal el culo?
-Javi- muy chico y da gustito
-Alberto- luego yo pongo el culo… quiero que me la meta
-Roberto- veremos si él quiere… ves a coger el lubricante anda
-Javi- yo también quiero un poco
-Roberto- primero él y luego tu…
-Alberto- ya estoy aquí… que hermano, me dejas que meta un poco por ese culo
-Javi- si, toma… ¿tu papa no quieres? te dejo mi culo
-Roberto- no, Marco esta por ahí suelto… hay que vigilar un poco… venga, deja a tu hermano y tu Alberto para el viernes voy a follarte el culo ya… así que vete haciéndote a la idea…
-Alberto- si ya sabes que lo deseo papa, pero es que tengo miedo a que me duela
-Roberto- el abuelo me lo hizo con once años y mira y al tío lo mismo… y al primo pues tenía los once, así que tú ya no te escapas…
-Javi- veras que rico es… venga cógete el culo al marrano, ¿te la chupo papa? seguro que la tienes muy gorda allí dentro
-Roberto- tú dirás… claro que estoy duro… luego ya me cojo alguna cerda por el coñito… tengo miedo a Marco, mira si esta tarde podemos, te doy por el culo…
-Javi- siiiiiii, creo que Marco se va mucho por ahí, ya sabes… le decimos que estamos currando en la granja y ese no aparece… le gusta poco o nada trabajar
Ya Alberto se estaba cogiendo el al gorrino por el culo, del placer que le daba se vino, con algo de rabia, pero también con placer.

-Alberto- no pude, me vino el gustito… en el culo del gorrino… ¡que buenos jamones tiene!
-Roberto- pues si… que, pones el culo… échate un poco y le saco la picha
El niño se echó crema en el ojete, mientras que el padre y el hermano mayor le sacaron la picha al cerdo, donde Javi acerco la boca para chupársela, el animal la tenía algo más corta que el otro cerdo de tres años, pero casi igual de grosor.

-Roberto- vamos a ver si la quiere meter, ya la guardo el condenado, Javi échame una mano
Pusieron al animal sobre el cuerpo del niño, los más de cien kilos, posaban ahora sobre el cuerpo del niño.
Roberto mando al chico que le sacara el pene y lo guiara, cosa que hizo y también el cerdo dio diana al ojete del niño que la recibió con gusto y dolor.

-Alberto- aaaaaaaa, joder, joder, me la ha clavado toda, toda en mi culo
-Roberto- si, has desvirgado tú al marrano, este no va a probar ninguna cerdita, ya tiene a vuestra madre, abuela y tía… de coños
-Javi- yo también quiero… joder que gustito te debe de estar dando el marrano…
-Roberto- ya lo creo, mira como mueve la pichota en el culo
-Alberto- ahora veras Javi, vete preparando el ojete… dios que rico, que rico… como me gusta que un cerdo me coja el culo
-Roberto- pues para el jueves va la mía, nos iremos algún sitio los dos… vale…
-Javi- yo quiero ir con ustedes dos
-Roberto- el jueves te la dedicas a Marco, creo que hay que enseñarle muchas cosas
-Javi- ¿qué le coja el cerdo?
-Roberto- no, eso no… tengo que estar yo y el culito de Marco, aun que entrenarle un poco, por ahora solo sus pichas y la del primo… con eso va que de sobra, solo tiene nueve años
-Alberto- se corrió, me ha llenado el culo de leche… ostia leche
-Roberto- si, pues ahora cambiar…
De lejos oyeron voces, de Marco y la madre.
Los tres muy rápidos se vistieron y vieron que Marco entraba buscándoles, pero sin ella.

-Roberto- ¿no estabas ayudando a mama?
-Marco- sí, ya termine… ahora quiero estar con ustedes… ¿qué hacen?
-Roberto- estábamos con este gorrino… Alberto anda, vete con él a jugar, creo que con Javi ya tengo suficiente…
-Marco- también venia porque mama me ha dicho que Alberto se tiene que bañar, para ir al dentista y que Javi tenía que ir hacer un recado a la tienda
-Javi- ¿por qué no vas tú? mira este
-Marco- porque mama no me deja… yo me voy, adiós, veo que nos hago falta… ¡papa! mama me ha dado permiso para ir después de comer al rio a bañarme ¿vienes Javi?
-Javi- tengo que ayudar a papa, vete tú solo, puede que luego valla ¡adios! –el chico salía- pues nada papa, cuando este en el rio follamos…
-Roberto- creo que es mejor que paremos, este está dando muchas vueltas y tu Alberto vete a casa a bañarte, que ya son casi las doce y tú ves hacer lo que mama te ha pedido… ¡esta rico el nene!
-Javi- muy rico papa! puede que esta tarde, podría hacer algo
-Alberto- ¡y una mierda! te esperas a mañana, los dos…

Continuara