Seducido por mi sobrino.

Kevin me cuenta su primera vez..
                            Capitulo 2, recuerdos.

Como ya les conté no mandé a mi sobrino a la escuela ni yo fui a trabajar, de todas maneras era viernes y el sábado descansamos los dos, teníamos una semana completa solos para nosotros, todos los prejuicios se me habían esfumados. En hora de la tarde me llamo Julia para saber como estábamos, le conteste que todo bien como siempre; Kevin al escuchar de que estaba hablando con su tía viene me baja el short y comienza a darme tremenda mamada, trate de separarlo pero no podía ni tampoco insistí mucho, yo que estaba de pie me coge por el pene y me lleva al sofá que me sentó, Julia seguía hablando y yo le contestaba si o no, hasta que me dice:  

-Qué estás haciendo que no me presta atención?

Rápidamente le conteste:

-Estoy jugando con Kevin un video juego y me esta ganando, perdóname.

Me pidió que le pusiera a su sobrino al teléfono, cuando le alcanzo el móvil se quita el short que traía puesto, se escupe en la mano y se riega toda la saliva en su trasero, me muerde el labio inferior suave con una seducción y delicadeza que tal parecía una mujer, frente a mi se sienta en mi palo erecto, metiéndose el glande y poco más, le contestó a su tía mientras que yo me escupía en mi mano, lo levante me eche la saliva en mi pito y lo volví a sentar metiéndole más de la mitad, comencé con unos movimientos suaves pero contante mirándole su rostro que se mordía los labios y sus ojos los mantenía cerrados, parecía que le dolía un poco pero yo no pare hasta que me volvió a pasar con su tía que me despedí de ella, asegurándome de que había colgado correctamente comencé a darle un poco más fuerte metiéndole el resto que le faltaba por entrar, se agarro fuerte de mi cuello y me pidió que lo llevara para la cama sin sacársela, al llegar a la habitación le eche crema en su trasero y en mi pene, le puse los pies en mis hombros y se lo introduje completo hasta sentir sus nalgas chocar con mis testículos, suavemente realice un saca y mete observándole su rostro que lo tenia enrojecido y sus ojos serrados pero sin dejar de gemir, me le acerque a sus labios y comencé a besarlo, baje a sus pezones que me los metía en la boca; como me gustaban y la sensibilidad que tenia al contacto de mi lengua que se volvía loco, comencé con movimientos más fuertes hasta que no pude más y le eche toda mi leche en sus entrañas, cayendo desplomado arriba de Kevin pero sin dejar de besarle el cuello, los labios, y acariciarle todo su cuerpo.  

Después de un pequeño rato en esa posición me acosté boca arriba, ya había perdido mi erección y me fije que él no mantuvo su pene duro en ningún momento, y le pregunte:

-Kevin por qué no se te paro tu pito?

Me contesto sonriente y besandome la boca:

-No lo sé, lo único que si estoy seguro es que nunca he disfrutado el sexo como lo hago contigo, no sabes lo mucho que te quiero y la envidia que le tengo a mi tía que no tiene que esconderse, otra cosa; la soberbia que me da en saber que viene y tú te la va a coger.

Me sonreí le bese los labios y los oídos y le respondí: 

-No le tienes que tenerle envidia ni celos a tu tía, claro que tendré que tener sexo con ella cuando venga pero será solamente viernes, sábado y domingo, el resto de la semana soy para ti solo.

Lo cargue y me lo lleve para el baño para que evacuara todos mis fluidos, me lave yo también volviendo a la cama, estando yo boca arriba y él acostado apoyando su cabeza en mi pecho y haciéndome cosquillas con las puntas de sus dedos sobre mi estomago llegando a mi pelvi, mientras yo le hacia lo mismo en su espalda llegando a sus nalgas, le pregunto:

-Kevin este domingo no el otro es tu cumpleaños; qué te gustaría que te regale?

Levanto la cabeza me miro a los ojos y me respondió: 

-Quiero pasarme todo el día así acostados desnudo en la cama contigo.

Lo tomo por la cabeza le doy un beso de lengua, después le muerdo los labios suave y le contesto:

-Sabes que eso no puede ser porque tu tía va estar aquí, ademas seguramente viene tu abuela y tus primos, y nadie puede saber lo que nosotros hacemos, ni Roberto ni tampoco Fernando; así que pídeme otra cosa.

Se me sentó arriba de mi pene flácido y me comento:

-Si mis primos vienen seguro que van a querer cogerme. Qué hago? 

Lo mire extrañado porque me estaba pidiendo permiso y le respondo:

-Eso va ser imposible porque como te dije la casa va a estar llena, y tú puedes hacer lo que quieras, yo no soy nadie para decirte lo que puedes hacer o no, solo te advierto que ellos no pueden saber lo que hacemos nosotros, otra cosa; por casualidad ellos te están obligando.

Apretó mi pene que aún se mantenía flácido con sus nalga, y me responde:

-No, nunca me han obligado siempre he sido yo el que a empezado; como ya te conté tenia como 7 ó 8 años y mi primo Roberto 10 ó 11, él se iba a bañar cuando vi su pito se lo agarre; me dijo que se lo soltara pero se le puso duro y me lo metí en la boca, no le gusto porque decía que se lo mordía; sentimos la madre de él que venia, rápidamente se metió en la ducha, le pedí a mi tía que yo quería bañarme también, me respondió que me quitara la ropa y nos bañáramos juntos que iba a buscarme una toalla y ropa limpia; tenia que bajar a mi casa y eso nos daba más tiempo, me volví a meter su pito en la boca esta vez trate de no usar los dientes, parece que le gusto porque me decía que me lo metiera completo, pero sentía muchas arqueadas cuando me llegaba a la garganta, y lo más cómico viene ahora; como estábamos lleno de jabón me viro de espalda y me metió el pito por mi colita hasta el fondo, me cogió por la cintura y comenzó a darme fuerte. Dicen que la primera vez duele mucho pero yo no recuerdo que me doliera, desde luego fue por poco tiempo porque sentimos que mi tía regresaba, dejo la toalla y la ropa y nos dijo que no nos demoráramos mucho, mi primo no quizo volverlo hacer ese día, esa fue mi primera vez. 

Estando ya con mi pene algo duro le pregunto: 

-No entiendo que es lo cómico, no le encuentro la gracia.  

Se sonrío me echo crema en mi falo que había despertado, después se echo él en su trasero y se la metió completa, y me contesto:

-Te gusto oír como me cogieron porque se te puso duro tu pito, lo cómico es que después tratamos hacerlo muchas veces más pero no podíamos, solo se pudo cuando nos bañamos juntos por segunda vez, y descubrimos que el jabón era lo que nos permitía que me la pudiera meter. Dime ahora si la ignorancia no es cómica; después nos dimos cuenta que la saliva servia igual y cada vez que estábamos solos lo hacíamos, casi siempre era en su casa porque mis tíos trabajaban y estaba sola, hasta que un día Fernando nos descubrió; estando en la cama de mi primo desnudos, él se escupíos su pito y yo mi culo y me la metió, recuerdo que me tenia sujeto por la cintura y me decía que si me gustaba, le contestaba que me encantaba, que me diera más fuerte, Fernando que estaba escondido detrás de la puerta al escucharme salió con su pito en la mano, Roberto al verlo se asusto al igual que yo y nos separamos, Fernando nos dijo:

-Se la tiene metida completo a esta puta. 

Roberto que había perdido su erección y yo con deseos de llorar le respondió:

-No, estábamos jugando a las lucha no es lo que piensa.

Fernando con una sonrisa grande le responde:

-Los vi desde que se quitaron la ropa así que no traten de engañarme porque se los voy a decir a nuestros padres, sino quiere que se los diga la puta esta tiene que chuparme mi pito. 

Me impresiono el pito de Fernando porque tenia pelos y era mucho más grande y gordo que el de Roberto, rápido me lo metí en la boca, su sabor también era diferente; le ordeno a su hermano que siguiera cogiéndome. Estaba en la gloria tenia un pito en el culo y otro en mis labios, así estuvimos un rato hasta que Fernando comienza hacer unos sonidos extraños, me cogió por la cabeza y me hizo tragar casi todo su pito, sentí algo raro pensé que se había hecho pis en mi garganta, mis lagrimas me corrían y los deseos de vomitar me mataban y le grite; 

-No lo vuelvo hacer contigo cochino, por poco me ahogo y te hiciste pis en mi boca.

Me respondió: 

-Perdóname es que la chupa muy rico y no es pis, es mi leche de hombre es bueno que te la tragues porque tiene mucha proteínas, a mi hermano todavía no le sale pero veras que dentro un año va echar leche igual que yo; déjeme meterte mi pito por tú culo te aseguro que te va  a gustar mucho.  

Le respondí con deseos de meterme ese trozo de carne pero con miedo: 

-Es que lo tienes muy grande y gordo y no me va a caber por mi agujero.

Sonriendo me responde:

-No te preocupes que si te duele paro, ademas lo haré con mucho cuidado para que no te duela.

Roberto no hablaba se veía que aún seguía asustado, Fernando nos pidió que nos quedáramos ahí que iba a buscar algo para que no me doliera, al momento llego con un frasco de crema y me echo en todo mi culo por dentro y fuera con sus dedos, primero utilizo uno y después otro; ahí descubrimos mi primo y yo que aparte del jabón y la saliva había algo mucho mejor. Que rico se sentían sus dedos dentro de mis entrañas, los movía suave en forma circular y en un mete y saca, se echo bastante crema en su pito y fue metiéndomelo suave hasta que lo metió todo, me tomo por la cintura y comenzó con un movimiento fuerte, Roberto había perdido el miedo y me puso su pito en los labios; sabia lo que quería y me lo trague hasta más de la mitad, Fernando me pregunto:

-Te duele, quieres que te lo saque?

Le respondi sacando el pito de Roberto de la boca:

-No, sigue así es muy rico y dame más fuerte.

Siguió con sus envestidas más violentos hasta que sentí que su pito se puso más duro y dando un grito me lleno mi culo de su leche, a partir de ese día lo hacíamos a diario, yo los buscaba desde que venia del colegio, aveces lo hacíamos los 3 y otras veces el primero que llegaba y podía cogerme.

Mientras que Kevin me relataba su historia lo tome por la cintura y con unos movimientos fuertes me corrí dentro de él como si no lo hubiera hecho momentos atrás. Lo mejor de todos aunque no me lo crean faltaba por venir; sin sacarle mi falo tieso de su culo continuo mi sobrino:

Tio te volviste a correr dentro de mi, ahora sé que te gusta saber como me cogen. Como te decía cada vez que teníamos oportunidad que era todos los días y varias veces me cogian; había pasado mucho tiempo y Roberto ya tenia como 12 ó 13 años, le estaban saliendo bellos púbicos y le había crecido mucho su pito, y cada vez que me la metía y estaba un rato la sacaba rápido porque decía que le daba muchas cosquillas en la punta de su pito, su hermano Fernando le decía que eso se llamaba orgasmo, que ya estaba por salirle la leche igual que él: eso me puso eufórico porque la quería probar, ademas me llenaría mi culo de leche que tanto me gustaba. Un día Fernando me estaba dando por detrás y yo chupándole el pito a Roberto que estaba en su cama boca arriba y de pronto me coge por la cabeza y me saca que tenia mucha cosquillas, Fernando me pidió que lo masturbara rápido y cuando lo hice le salieron 2 ó 3 chorros de leche, totalmente diferente a la de su hermano, era trasparente y aunque el sabor se parecía no era igual, eso me desilusiono un poco, Fernando le pregunto que si le había gustado, cuando fue a responderle se abre la puerta y entro Carlos el mejor amigo de Fernando, este casi se muere al ver a su amigo frente de nosotros, y le pregunto tapándose como pudo con las manos:

-Cómo entraste?

Carlos le respondió sonriendo: 

-Llame varias veces pero no me escuchaste, y tu abuela me dijo que entrara por su casa que estaban jugando videos juegos; yo quiero jugar también con ustedes al mismo juego, me dejan.

Desde luego que yo estaba asustado pero nada comparado con Roberto y mucho menos con Fernando que estaba temblando, y le respondió:

-Si Kevin quiere que juegue no hay problema, pero eso de pende de él solamente.

Cuando le vi el pito a Carlos, era más gordo que el de Fernando quizás un poco más pequeño, se lo agarre y me lo metí en la boca, que rico ya tenia otro trozo de carne para mi, le chupe los huevos después seguía desde la base hasta llegar al frenillo, le pasaba la punta de mi lengua como si se me fuera ir la vida en eso, quería que le gustara mucho para que volviera, y todavía faltaba que me la metiera, y le pide a mi primo Fernando que me penetrara, y este le contesto:

-Tiene que esperar que se me vuelva a poner duro, porque con el susto que me diste se me perdió.

Carlos se pego al lado de Fernando y me pidió que se lo chupara, al momento ya lo tenia duro nuevamente y me lo metió por detrás mientras yo seguía enfrascado con el pito de mi nuevo amante, le pidió a Roberto que aún se mantenía en la cama tapado con una manta que le chupara el culo, Roberto le contesto que eso él no lo hacia, se acostó al lado de mi primo y me lo pidió a mi, con una mano lo pajeaba mientras le pasaba la lengua por su trasero, de pronto ciento que comienza a gemir fuerte, me agarra por la cabeza y me mete el pito en la boca echándome toda su leche, era más espesa y resinosa, tenia el mismo sabor pero no era igual, de las 3 la más que me gustaba era la de Fernando, y este se corrió en mi culo unos minutos después más o menos, y le digo a Carlos: 

-Quiero que me la metas ahora.

Me respondió: 

-Tienes que esperar que me recupere, y Fernando porque no me habías dicho esto antes. 

Mi primo le contesto:

-Como debes darte cuenta es un secreto, nadie lo puede saber porque Kevin tiene 9 años.

Siguieron hablando y yo jugando con el pito de Carlos, quería que se le pusiera duro para que me lo metiera, y así fue; seguía acostado boca arriba y me dijo que me sentara arriba de él, aunque estaba bien lubricado cuando fue entrando me dolió un poco, realmente era más gordo que el de mi primo, me tomo por la cintura y comenzó un metí y saca hasta que les pidió a mis primos que me cogieran por debajo de los brazos y me levantaran y bajaran ellos, tal parecía un muñequito, comencé a gemir y le pedí a mis primos que lo hicieran más rápido, Carlos al escucharme parece que lo excite mucho, porque empezó a gemir tomándome fuerte por la cintura y levantando sus caderas me lleno todas mis entrañas de su leche, y le dice a Fernando:

-Me vas a perdonar pero tengo que contárselo a mi hermano, esto que ustedes tienen en secreto mi hermano y yo lo tenemos, y quiero que Kevin lo haga disfrutar como lo ha hecho conmigo.

Fernando abrió los ojos como si se le fueran a salir y le responde:

-No sabia que tú y tu hermano hacían estas cosas, pero Juan tiene 20 años, es un hombre y Kevin es un niño, ademas vive con la novia y como te dije anteriormente eso no depende de mi ni de ti, solo de Kevin.

Yo que veía a Juan como un dios griego incansable para mi, y me lo estaban poniendo en bandeja de plata, era alto, fuerte, lindo de cara, y cuando jugaba futbol se le marcaba todo su paquete, todas las chicas estaban enamorada de él, y sin perder tiempo conteste que yo si quería, Fernando puso como condiciones, primero; que no podía ser en nuestra casa, segundo; que yo tenia que buscar una excusa para salir solo y no con ellos, que Roberto y él me esperarían afuera, tercero; en el momento que yo no quisiera o no estuviera seguro se acababa todo. Estuvieron de acuerdo y por fin llego el día tan esperado por mi, recuerdo que era sábado y mi mamá estaba de guardia en el hospital, y la novia de Juan no estaría en la casa porque según ellos fue a visitar a sus padres sábado y domingo; yo el día antes le había pedido permiso a mi madre delante de mi abuela para ir a casa de unos amiguitos míos a estudiar y después a jugar con los video juegos, me dio el permiso no teniendo problema con mi abuela. Roberto y Fernando me estaban esperando en el parque que quedaba en la esquina, y mi primo mayor me pregunto:

-Estás seguro qué quieres hacer esto?

Le conteste haciéndome el bueno:

Claro que si, no quiero que ustedes tengan problemas ademas ustedes estarán ahí y si digo que no quiero me ayudaran. 

Fernando se sonrío y me removió un poco los cabellos de la cabeza, Roberto no quería que yo fuera porque decía que esos hermanos eran unos depravados. Al llegar al departamento de Juan estaba también Carlos y los dos en ropa interior sentados en el sofá jugando con la play, entramos y nos saludamos, mis primos se sentaron en una butaca cada uno, Carlos me sento en el medio de él y de su hermano, nos ofrecieron algo de tomar y dijimos que no, Juan se levanto y trajo una cerveza para él, yo no le quitaba mis ojos al paquete de Juan, era más grande de lo que me había imaginado.

Mirándole a los ojos a Kevin y con mi falo duro dentro de su culo le pregunto: 

-Cómo es que la tiene Juan? Es más grande que la mía? 

Me respondió sonriendo: 

-No tío ya te dije que como la tuya no habia visto ninguna; era del mismo gordo que la de Carlos y más larga que la de Fernando, creo que le media 19 cm, pensé que no ebria ningun otro pito más grande, pero cállate y déjeme seguir y no me interrumpas más. Como te decía Juan trajo una cerveza se dio un trago y se agarro el paquete, Carlos me sentó arriba de sus piernas y les dijo a mis primos: 

-Pónganse comodos y quitense su ropa como nosotros.

Fernando enseguida se desnudo que tenia su pito más duro que nunca, se acerco a Carlos y a mi y me quito mi pantalón corto y la camisa quedándome solamente en mis calzoncillos, ahora sentía la verga de Carlos apoyada entre mis dos nalgas, Roberto seguía con su pantalón puesto solo se había quitado la camisa y nos miraba desconcertado; sin embargo yo estaba eufórico, tenia para mi solo 4 pollas y no pudiéndome aguantar me lance para arriba de Juan chupándole su pito duro por arriba de sus interiores, él se los quito y me dijo: 

-Tienes hambre chiquillo, aquí la tienes toda para ti.  

Baje entre el culo y sus testículos dandole pequeños mordiscos con mis labios y acariciándoselo con la punta de mi lengua y con mi mano lo masturbaba, él se retorcía del placer gritando que yo era lo máximo, ciento que me estaban echando crema en mi agujero, miro para atrás  ere mi primo Fernando que ya estaba desnudo y Carlos le estaba chupándole el pito, mi primo Roberto aún seguía sentado con el pantalón puesto pero se estaba haciendo una paja, de pronto ciento el pito de mi primo entrando dentro de mi, y Carlos fue donde estaba Roberto y se trago la verga completa de mi primo; yo trate de hacer lo mismo con Juan pero no podía llegar ni a la mitad, veo que iba a correrse empiezo a succionar mas fuerte y con mi mano lo masturbaba dio un grito y me lleno la garganta de leche que casi me ahogo, Fernando siguió dándome más fuerte hasta que se corrió dentro de mi; me pare y fui donde estaba mi primo Roberto y me abrase de su estomago quitando a Carlos y le dije: 

-Él es mío y no me gusta que nadie lo toque.

Todos se sonrieron pero a mi primo fue como inyectarle una inyección de confianza y de placer, y por primera vez y única me dio un beso en la cabeza y me dijo:

-Te quiero Kevin y no te preocupes que cada vez que tú quieras serás el primero.

Se quito el pantalón por completo y me dio su biberón, mientras Carlos me penetraba que sentía su pelvi chocando en mis nalgas, le hice lo mismo que le había hecho a Juan momentos atrás, descubriendo que esa parte del cuerpo se llamaba perineo y era muy sensible porque a mi primo le paso lo mismo que a Juan, gritaba de placer eyaculando al instante que no me dio tiempo casi de tragarme su semen, ere el más que me gustaba, había cambiado en menos de una semana y aunque era más claro y tenia menos consistencia también era el más rico, pero con mi lengua le quite todo el que le quedo en su barriga y pecho, minutos después se corrió Carlos. Juan se levanto y regreso con 2 cervezas un baso y 2 lata de Coca Cola, una para mi y la otra para Roberto, dividiendo una cerveza para su hermano y para mi primo Fernando, desde luego la otra entera era para él, y nos pidió pasar para su cuarto para seguir nuestra faena, después que nos tomamos nuestras bebidas y estando los 5 arriba de la cama que casi no cabíamos, Juan me puso en 4 pata y me la metió suave y no paro hasta sentir mis nalgas en su pelvi, no sé si es porque tenia el culo lleno de leche y se había echado bastante crema pero no me dolió ni un poquito, le pidió a Roberto que se puciera boca arriba debajo de mi para que yo se la chupara, y riéndose continuo:  

-Ya que tú eres de él, y nadie te puede tocar tienes que fastidiarte.

Todos se sonrieron y Roberto más que ninguno, era otra persona desde que llego a como se estaba comportando en esos momentos, yo sabia que mis primos no se tocaban entre ellos, y pensé que y Fernando se cogería a Carlos pero no, yo estaba ensartado por Juan y con el pito de Roberto en mi boca, Juan les pidió a su hermano y a mi primo que se acercara para que yo los masturbaran. Tío puedes imaginarte como yo estaba, una verga en el culo otra en la boca y una en cada mano, viviendo un sueño irrealizable para mi corta edad, de vez en cuando sacaba de mi boca el pito de Roberto y me metía el de Fernando y después el de Carlos regresando al de Roberto, ciento a Juan gemir y dándome frenéticamente y me pregunta:

-Dónde la quieres? En el culo o en la boca. 

Le respondi:

-En la boca.

Me la saco del culo y tirándome bruscamente para un lado me le echo en la boca, en la cara y también en el pecho, Carlos que se corría también porque todos se estaban masturbando me la echo en la cara, detrás mi primo Fernando y por ultimo Roberto. 

Yo imaginando esa escena tomo a mi sobrino nuevamente fuerte por sus cadera y lo aprieto contra mi pelvi, dando un grito de placer y me corro dentro de él por tercera vez, y me dice: 

-Tio me asustaste, ahora te corriste más que las otras veces porque se me esta saliendo.

Lo bese de lengua y le respondí:

-Es que mi niño es toda una puta, y me has deslechado por completo.

Se sonrío siguió contándome que después se lo cogió Carlos y mientras lo hacia Roberto y Fernando se cogieron a Carlos. Cuando termino yo no podía levantarme me temblaba las piernas; fuimos al baño y nos dimos una ducha. Hasta aquí llego con esta historia que se me ha hecho un poco larga, la próxima será el día del cumpleaños, espero que la disfruten tanto como yo.