Seduciendo al repartidor del gas (princesito guarro)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Desde muy chico supe mi preferencia sexual y es notorio debido a que tengo ciertos ademanes femeninos que me delatan. Este relato sucedió cuando tenía 19 años en pleno México D.F. Soy un chavo de tez muy blanca, rasgos finos, 173 cm, delgado pero marcadito, sin embargo lo que siempre ha resltado en mi son mis piernas y sobre todo mi trasero, grandote y paradito ya que desde los 15 años hago ejercicio y me gusta mucho hacer bicicleta. Hasta me han preguntado si me las operé o me he inyectado silicón pero obvio son resultado del ejericio y sana alimentación. Debido a esto mi cuerpo podria pasar un poco por femenino y muy cuidado. Siempre me ha gustadio depilarme todo el cuerpo y también me gusta mucho usar lenceria femenina.

Una vez independiente, viviendo solo en pleno centro de la ciudad de méxico, descubrí las tiendas, super mercados, bares y negocios alrededor de mi departamento. Cierto día tuve la necesidad de comprar mi tanque de gas, ya que las instalaciones del edificio son viejas. En el D.F. siempre pasan por las casas los repartidores de gas gritando "El gaaaaaas" esperando que si alguna persona tiene la necesidad de comprarlo se asome por la ventana o salga a la puerta para pedir su respectivo tanque.
Yo ya me había fijado en esa camioneta sucia y vieja donde transportaban los tanques pero sobretodo observé a los repartidores que eran 4 jóvenes y el chofer un viejo. El chavo que gritaba por mi edificio era moreno, aprox 175 cm, pero tiene esa facha que llamamos "chacal" que son jeans super anchos, playeras igual anchas pero ese aspecto de malo en cara con rasgos fuertes, y un corte de cabello muy característico, en fin, machos en todo el explendor de la palabra.

A mi siempre me gustado provocar a los heterosexuales o "bugas" como les decimos en México, sumado a ésto me llama mucho la atención el exhibirme, que vean mis nalgas, cuando camino frente a machos que realmente valen la pena me contoneo para llamar su atención y me digan obscenidades.
Ese día que necesitaba gas, recién me terminaba de bañar (siemrpre he sido excesivamente higiénico en mi cuerpo) cuando escucho a lo lejos los gritos del gas que daban en los edificios contigüos. Me puse una tanguita color negro con un encaje divino de putita (debido al blanco de mi piel las tangas negras resaltan mas en mis grandes nalgas) y al escuchar ya el grito en mi edificio, me asomo por la ventana para decirle al repartidor que me trajera un tanque.

– Ahorita se lo traigo joven. – respondió.

Esperando su llegada me encreme el cuerpo y me puse una playerita ajustada algo corta que me hace ver una cinturita, en pocas palabras me veía mas jotita y putita que ninguna. Al fin llega y toca el timbre. Cuando abro la puerta lo dejo pasar yo escondiendome tras la puerta para evitar ser visto por los vecinos (algunas familias viven ahi y tampoco soy pervertido). Una vez que pasó con el tanque de gas cargado en el hombro cierro la puerta y me dice:

-Donde se lo pongo jóven?
-Arriba en la azotea- respondí ( los departamentos al ser ya viejos son de dos niveles, techos altos y amplios en su interior y cada uno tenía su propia azotea privada). Pero dejame ir adelante para abrirte la puerta de arriba.

Una vez delante de él yo sentía la mirada de asombro al verme vestido asi en tanguita pero subidos unos cuantos escalones sentía que se transformaba en lujuriosa la mirada. Llegando al la azotea le indiqué donde debía conectarlo mientras yo, recojía un poco la ropa y las pinzas que tenia en el suelo dejandole ver mis nalgas mas abiertas que una putita de calle, me le insinuaba en cada moviento que hacía, hasta hice como que lavaba algo en el lavadero para que viera mis nalgotas blancas lampiñas moviendose, y aunque siempre le di la espalda podía sentir su mirada en mi trasero de mujer nalgona.
Una vez que termina la instalación me dice:

-Listo jóven, páseme si quiere un poco de jabón en polvo con agua para que vea que no hay fuga.(Es un viejo truco para saber si hay fuga debido a que con el jabón se hacen burbujas si es que se sale el gas)
-Toma.
-Mire como no salen burbujas, póngase aqui frente a mi.

No me lo dijo dos veces y ya estaba yo delante de él con mis cachetes del culo embarrondose en su bulto.

-Oye pero seguro que no hay fuga?- respondí haciendome el tonto y sacudiendo un poco las nalgas para estimular su pene.
-Si, seguro revísele bien.
-Ok, cuánto te debo?
-$380 pesos
-Abajo está mi cartera, vamos.

El asunto de exhibirme como putita en celo y moverle las nalgas a ese chacal machote, cada vez me calentaba mas por lo que una vez abajo saque de mi cartera el dinero y él con el tanque vacío en su hombro y las manos ocupadas sosteniendolo, le digo:

-Toma.- y le meto el dinero en la bolsa del pantalón aprovechando para tocar su ya semi erecto pene gordo.
-Heeeey que haces?? Déjame- respondió con cierto desprecio y homofobia.
-Pues veo que estas caliente, porque?- Le pregunto mientras él baja al piso el tanque vació de su hombro
-Jaja, nooo te equivocas.
-Te gusta como me veo o que?
-Pues si pero no soy puto, solo me gustan tus nalgas.
-Tócalas si quieres-Guío una de sus manos a mis pompas.
-Neeeel no mames no soy maricón.
-Ya lo sé, pero esto no te hace ser maricón( típica frase para convencer a un bugarrón)
-Neel mejor ahi le paramos valedor.
-No me digas asi, eso dícelos a los nacos de tus amigos, yo soy diferente- mientras le toco el bulto semierecto y trato de desabotonal el pantalón.
-Jajaja nel ya párale mejor otro día- decía mientras era sometido a mis caricias sobre sus jeans.

Una vez que logré desabotonarle el pantalón puse admirar sus piernas peludas y su bóxer ancho con un bulto colgante que le bambaleaba por la caída del pantalón, un chacal al cien por ciento. Comencé a meter mi mano por una de las piernas del bóxer y toque su vergota, chiquita pero gordota colgando aún pero medio firme, peluda y sudorosa, típico de un macho uffffffff la saqué por la abertura del bóxer y olía riquísimo, a orines y sudor de macho. Comencé a mamar como puta, estaba mega excitado y él empezó a gemir también. Lo había logrado !!!! tenía al chacal a mi disposición, seducido por mis nalgotas de nena y tanga. A los 3 minutos de mamársela me dice:

-Párate joto.- y me levanta de los brazos poniendome de espalda e inclinandome un poco sobre el sofá me agarra la tanga y me la jala hacia arriba metiendose más en mi rajita- Eres una putita con hambre de verga verdad? da gracias a que tienes un culote que con tanga se te ve delicioso, sino te hubiera partido tu madre cuando me tocaste la verga.
Al decirme obscenidades como éstas me excito mas, me encanta sentirme sumiso, que me traten como mujer y me hablen asi de fuerte.
Comenzó a bajarme la tanga y darme nalgadas
-pinches nalgotas, que culote, que perrita tan rica- me decía y al bajarme la tanga comenzó a mamarme el culo.

Primero desconfiado por la higiene supongo, lo hizo despacito pero al ver que estaba mega limpio y hasta perfumado me metio la lengua, yo le movia las nalas en la cara para que se hundiera mas. Él me daba una mamada como desquiciado, hambriento. Yo ya no aguantaba mas y fui por el condón, se lo puse y comenzó a penetrarme.

-Ay jotito que ricooo aprietas, mamita- decía mientras me daba una embestids brutal, me la sacaba y me la metía riquisimo, dandome nalgadas.

Asi estuvo como por 15 minutos hasta que se vino. Se salió de mi culito y al quitarse el condón me dice:

-Orale marica, limpiame la verga rápido porque ya me tengo que ir.

Sin dudar se la mame hasta dejarsela bien limpiesita y se fué como si nada. Como mis orgasmos son mas por el ano que por el pene, me dí por satisfecho por ese día.

Pero después vendrían mas machcos víctimas de mi culo en tangas como repartidor de pizza, albañiles, plomero, fumigador, el del cable, etc..

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