Sexo con un peruano de miembro descomunal.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Era el año 2013, en el centro de Santiago, esa noche de verano hacía un calor de locos y mis ganas de sexo no me daban tregua.
Me conecté a un chat gay y empecé mi búsqueda, entre las propuestas apareció un hombre maduro de un poco más de 30 años, que estaba solo a cuadras de distancia.
Esa vez fueron tantas mis ansías que tomé un taxi que me dejó a las fueras de la dirección que me dio.
Entramos en una especie de conventillo común donde vivían como pude ver, muchas familias peruanas, me llevó a comer con ellos y luego a su cuarto.
Ahí me desvistió y me dijo que venía del norte, mientras besaba mi cuerpo y mis tetillas, hasta quedar completamente desnudos.
Sus besos recorrieron cada punta de mi cuerpo, pasando por mis labios, orejas abdomen y nalgas, hasta acabar en un intenso beso negro.
Nuestros cuerpos sudados empezaron por experimentar posiciones variadas como el 60 donde yo succionaba sus testículos peludos y su miembro de casi 30 centímetros que me dio un placer anal inigualable, el que soporté en esa posición más de una hora con enculadas que me hicieron acabar en múltiples orgasmos, mientras él agarraba mis nalgas y me daba pequeños golpes que me excitaban aún más.
Me abrazó y dormimos cucharita toda aquella noche, mientras mi boca adquiría un sabor especial y mi cuerpo húmedo de placer se aferraba a sus brazos musculosos mientras su pene colgaba de mi ano y su semen caía desparramado sobre la cama de dos plazas que había sido la compañera de esa noche de intenso sexo interracial.
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