Siendo homosexual

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
."¿Y si vamos a otro lado?" Me dijo.
Estaba tan ebrio y drogado que no lo pensé, sólo asentí.

Fuimos a su auto y comenzamos el viajo sin saber el destino, el camino fue silencioso, tanto, que comencé a pensar en miles de cosas: "¿Dónde estará mi amiga? Me dejó solo en un bar gay… ¿Qué estoy haciendo? Ojalá me deje metérselo, debe ser como una vagina más apretada jaja"
"¿Qué te pasa que vas tan contento?" Sonrió.
Llegamos a su departamento, era pequeño, pero acogedor, me ofreció otro trago, lo acepté de inmediato, quería estar completamente borracho para lo que venía.

Comenzamos a besarnos y a tocarnos, recuerdo como me tocaba, de manera tan brusca, que me excitaba realmente, sus brazos eran bien tonificados, me acercaba a él con tanta fuerza que me sentía indefenso y me gustaba.
Terminamos en su pieza, comenzamos a desnudarnos, yo le tocaba el trasero con fuerza, para darle a entender que quería penetrarlo y ser el activo, seguíamos tocándonos hasta que quedamos sólo en calzoncillos, me dijo que me esperara, que iría al baño.

Pasaron más de 5 minutos y no salía del baño, me recosté boca abajo y sentí un profundo sueño, comencé a quedarme dormido cuando de repente, siento algo frío en mis manos, despierto algo atontado y le digo: ¿Qué pasa? Miro mis manos y el hombre musculoso me había puesto unas esposas en las manos, pensé que jugaba y le dije que no me gustaba esa idea, me ignoró, me presionaba el cuerpo contra la cama, mientras me quitaba los calzoncillos, me abrió las piernas bruscamente y comenzó a besarme el trasero de una manera, sentía su lengua entrando y saliendo dentro de mi, con fuerza, era muy rico para ser cierto, estaba realmente excitado, cuando comencé a gemir con más fuerzas, se detuvo.

Lo miré de reojo y sonrió, entonces se bajó los calzoncillos también y comenzó a acercar su pene en mi trasero, asustado le dije que nunca había hecho esto, que no quería, que por favor me quitara las esposas, a lo que sólo me respondió con un golpe en el trasero, pude sentir la cabeza de su gran pene presionando mi ano, intenté hacer todo lo posible para que no me penetrara, decidí gritar cuando me introduce fuertemente su pene en todo mi ano, grité de sobremanera, le dije que la sacara por favor, se quedó quieto, como esperando a que yo hiciera todo el trabajo, le supliqué que me quitara el pene, sentía un dolor inmenso, cuando de repente, me tapó la boca y comenzó a penetrarme tan fuerte, sentía como entraba y salía su pene de manera tan brusca mientras me gritaba "¿Te gusta perra, te gusta como te lo meto así?" Fue ahí cuando entre tanto dolor, comencé a sentir un placer extraño, era doloroso y a la vez rico, comencé a gritar con más ganas para que me penetrara más y más fuerte, quería que no se detuviera, sentía la necesidad de que me "partiera".

Gemía y movía mi trasero al ritmo de su penetración, mientras me gritaba que me comiera todo tu pene, que era una perra, comencé a gemir tan fuerte, que más rápido me penetraba, hasta que fue tanta excitación, que sentí que me iba a venir sin ni si quiera haberme tocado, le dije que iba a eyacular, se detuvo, pensando en que había terminado, quitó su pene, esperó unos segundos, me abrió más las piernas y me penetró de una,

Sintiéndome aún más caliente y dominado, terminé corriéndome, cuando se dio cuenta, me quitó la esposa de la mano derecha y me dio vuelta, se puso sobre mi, acercando su pene a mi boca, comencé, sin pensarlo, a besar su miembro, entonces acercó todo su pene a mi boca y comencé a chupárselo hasta atragantarme, sentía que no podía respirar, creía que mis arcadas le excitaban porque más adentro y fuerte me introducía el miembro, me agarró del pelo y se lo chupe y se lo chupe, comenzó a gritarme que me tomara toda su leche, y fue así, terminé tragándome todo su semen, y fue así como se detuvo totalmente, se recostó al lado mío, y quedé tan agotado que me dormí enseguida, al otro día despierto sólo en su habitación, sin las esposas, con un mensaje que decía: "bienvenido al mundo homosexual, nos vemos a la noche."