Taxista Semental

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por RicardoMorales.
Al fin se retiraron y cerramos el Restaurant, me despedí de Don Jorge y tomamos caminos diferentes, ya era noche y casi no había gente caminando ni mucho menos los sonidos de los autos.
Me entro un poco de temor, por que era una zona en donde se comentaba que asaltaban mucho, por lo que decidí tomar un taxi hasta mi casa.
Vi que a lo lejos venia un Taxi, por lo que le hize señas con mis brazos, entonces el taxista se detuvo, Así conocí a David un Señor como de 35 años, (se veía muy aficionado al Gym)
ojos oscuros, barba de algunos días, brazos cubiertos de abundante vello oscuro, espalda ancha, piernas fuertes y un muy buen marcado paquete en la entrepierna. Con una camisa blanca de manga corta, entreabierta dejando a la vista su pecho bien velludo, y unos jeans bastante ajustados que resaltaba un bulto digno de un buen semental.

Me atrajo desde el primer momento, simpático y amable, una mirada dulce, voz muy varonil, variados temas de conversación y confianza para hablar de todo. Aborde el taxi y
me dijo conduciendo:
-Taxista: Que pues Joven, porque anda tan noche por estos rumbos, a estas horas ya no encuentro mucha clientela.
-yo: Salí de mi trabajo y pues ya me entro la tarde.
-Taxista: Y de que trabajas Chaval, o acaso trabajas haciendo otras cosas. (Dijo insinuandome otra cosa)
-Yo: No que paso, trabajo en un Restaurant, solo que mi Jefe es muy apegado a las reglas de su Local, por eso salgo tarde, pero fue solo por hoy, otras noches eh salido mas temprano.
-Taxista; Ahh ya veo, entonces para hacer mas corto el camino, te contare una de mis tantas historias, ¿te parece?
-Yo; Adelante, no hay problema.

Comenzó a hablarme de sus aventuras, y fue entonces cuando me hizo una pregunta: Y tu, tienes novia?
Después de unos segundos de silencio, y sin nada que perder, solo le conteste: No, no es precisamente lo que busco…
No le di más explicaciones, al parecer interpretó mal mi respuesta y ahora hizo la segunda pregunta: entonces, tienes novio?

Ese fue como la señal para iniciar una larga conversación cargada de sus numerosas experiencias sexuales con chicas, siempre reafirmando que él es "muy macho" y que nunca se le había ocurrido tener experiencias con hombres. Aunque mostraba mucha curiosidad acerca de cómo es el sexo entre hombres. Yo me sentí tan cómodo con él que en ningún momento dudé en contarle sobre mi vida sexual con lujo de detalles, desde lo que paso con Alfonso, hasta terminar con Don Jorge "Mi Jefe" hasta el punto de hacerle saber que me encantaría mamarle la verga que estaba a punto de estallar dentro de su Pantalón. Pues su bulto había aumentado de tamaño dejando a la vista su excitación. Él solamente sonrió y luego de unos segundos me propuso desviarnos del camino.

Se dirigió en un parque, y se detuvo bajo la sombra de un Arbol y solo los postes de Luz, eran nuestros acompañantes ya que no habían personas, solo un Policía que hacia sus rondas nocturnas y que podíamos ver desde este lugar, pero no le tomamos importancia. Allí continuamos con nuestra charla sin interrupciones. Además de que no perdía oportunidad de lanzarle miradas cargadas de lujuria hacia su abultada bragueta.

Después de tanta charla, yo estaba demasiado caliente, escuchando detalladamente lo que ese pedazo de macho le hace a sus amiguitas.Puse mi mano sobre su pierna, y fui subiendo hasta llegar a su paquete

Estuve masajeándolo encima de su pantalón y comenzó a desabotonar su camisa, desabrochar su cinturón y bajar su bragueta.
Debajo, un boxer blanco ajustado, humedecido por su excitación, era la última barrera para llevar a cabo mi cometido. Tenía una hermosa verga de buen tamaño totalmente dura, curvada hacia la izquierda, con su punta totalmente mojada. Justo lo que esperaba, Lo miré unos instantes y empecé a masturbarlo lentamente ,comenze a lamerle el glande y lamiendo en toda su extensión y llenándola de saliva. Y de ahí una mamada completa.
Tenía un sabor agradable, y un olor delicioso. Llegué a sus testículos y comencé a pasar mi lengua sobre ellos, al escuchar sus gemidos logre saber que lo disfrutaba tanto como yo.
El gemía y empujaba mi cabeza hacia abajo y hacía movimientos de cadera.

Así estuvimos por buen rato, y me dijo que me detuviera, que no se quería correr sin antes romperme el culo.
Nos pasamos a la parte de atrás del taxi, y allí el se desnudo completamente ante mi, tenia un cuerpo hermoso y se le notaba lo duro que trabajaba en el Gimnasio, yo me desnude igual.
Me recosté Boca-abajo y luego el encima de mi, sentía el calor de su pecho velludo en mi espalda y como restregaba su verga contra mi culo

Me dio la vuelta y me levanto las piernas, se puso un condón y decidió penetrarme con su tremenda verga caliente, sentí como su verga se abría paso dentro de mi culo al principio sentí un fuerte dolor. Es que estaba muy excitado y trató de metérmela toda de una. Yo le pedí que lo hiciera más despacio a lo que aceptó. Se detuvo un rato y comenzó su embestida lentamente. Fue ahí que comencé a gozar como loco. Él al darse cuenta de esto me enterró toda su verga hasta los huevos. Trataba de no hacer ruido para que no nos escuchara el policía.

Lo estuve cabalgando como si no hubiera un mañana, disfrutando de su falo ensartado en mi culo gozando como loco de placer, él me agarraba de mis caderas y empujaba una y otra vez hacia el interior de mi cuerpo.
¿Te gusta? ¿Te gusta sentir la Verga de un Macho? me preguntó agitado.
Sí. Dame más. No pares, le respondí.
¿Quieres más? Pues entonces la tendrás, tómala, siéntela …es toda tuya..
Ahhhh, gemía este macho caliente, su gemidos mezclados con los míos eran música para nuestros oídos.

-David: Ya estoy a punto de venirme, quieres recibir mi leche en tu boca. ahhh ahh
-Yo: si dámela la quiero saborear
Rápidamente, sacó toda su verga de mi culo, haciéndome sentir un gran vacío dentro de mi Él me agarró la cabeza, y comenzó a masturbarse para luego correrse en mi boca, grandes chorros de Semen salieron disparados y lo que no pude tragar caía al mi pierna.

Me masturbe y me acabé sobre su verga. Nos limpiamos y nos vestimos, me llevó hasta mi casa. Al despedirnos me dijo que la había pasado genial y que deseaba volver a hacerlo. Me dejó su numero pidiéndome mucha discreción pues él se encuentra casado.
Hasta ahora no lo eh vuelto a llamar, pero espero animarme de nuevo.