Tenía 35 cuando folle a un muchacho de 13 años.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Desde pequeño siempre estuve en el campo y todo lo relacionado con el trabajo de esa área, cuando tenía 30 años ingrese a trabajar a la hacienda de don francisco, él era un hombre muy acaudalado y su hacienda muy extensa, cuando pasaron tres años me gane su confianza y me nombro capataz de la hacienda encargado especialmente del cuidado de los caballos.

En el 2012 ya con 35 años manejaba muy bien todo mi trabajo y cada 15 días iba al pueblo y pasaba la noche con una de las muchachas del bar, debo aclarar que siempre me considere heterosexual. Soy un hombre de cabello corto, bien rasurado, de contextura muy gruesa ya que desde niño trabajo, soy velludo en mis pectorales.

En la hacienda debido al calor trabajo con unos jeans, las botas, y una camisa sin mangas y sin abotonar lo que deja mi pecho al descubierto, en fin un día de abril del 2012 terminando las labores diarias y dando parte a don francisco de lo que había sucedido durante el día me comento que su hijo junto con su familia se quedarían unas semanas con él y llagarían mañana así que me envió a la casa junto con otros empleados a preparar 3 habitaciones.

Al día siguiente como a las 9:00 de la mañana llego una camioneta a la hacienda era don francisco con su hijo, su esposa, su hija y su hijo, don francisco me presento con su familia y me dijo que llevara las maletas a las habitaciones de ellos, el mismo día ya en la tarde estaba trabajando en el pajar y don francisco se acercó allí junto con su nieto: un chico de 13 años, delgado, cabello corto, piel blanca y aparentaba menos edad, don francisco me dijo que lo llevara a dar una vuelta por la hacienda con unos caballos para que la conociera, fui prepare dos caballos y emprendimos el viaje, la hacienda era muy inmensa y llegamos hasta un lugar donde ya no había nadie, yo trataba de conversar con el muchacho pero este casi no hablaba era muy tímido, y no pude evitar notar que mientras veía hacia otro lado el me observaba muy detalladamente cuando llegamos a la hacienda fui a la casa y la familia se había ido al pueblo así que el muchacho se quedó conmigo mientras yo trabajaba en el pajar.

Mientras trabajaba el muchacho estaba sentado en un bloque de paja y me observaba muy detenidamente y cada vez que volteaba a verlo el bajaba la cabeza y miraba hacia otro lado de forma tímida, en mi mente se me paso la idea que este muchacho era putito, le pregunte su nombre y me dijo que era Felipe, pero casi no me respondía, pensé en sacarle provecho a este muchacho ya que hacía 2 meses que no estaba con una muchacha por el trabajo en la hacienda y don francisco no nos dejaba salir.

Estaba haciendo un calor del demonio y pensé ‘’voy a sacar de este muchacho así sea una mamada’’ me quite la camisa y la deje colgada y seguí trabajando y el muchacho parecía bobo viéndome, le dije que iba a salir y pasados unos minutos llegue al pajar estaba el muchacho oliendo mi camisa llegue y cerré la puerta del pajar.

Él se sorprendió y arrojo la camiseta al suelo y le dije:

‘’te gusta el olor verdad, ese es el olor de un hombre’’

El muchacho tenía una cara muy asustada y agarre mi verga sobre mis pantalones y le dije:

‘’te gusta cierto, he notado que lo vez con mucha intensidad’’

Me acerque y puse mi mano en su hombro y lo arrodille ante mí el me veía y yo empecé a desabrochar el cinturón, desabroche el botón, baje el cierre y baje mis pantalones mostrando mi verga.

Mi verga es peluda, flácida mide 17 cm y parada mide 22 cm, mis muslos son velludos y mis testículos con grandes y estaban súper caídos por el calor tan impresionante.

Mi entrepierna sudaba, mi espalda y el sudor corría por mi frente.

Mi verga creció dejando su cabeza rosada al descubierto y le dije al muchacho que la chupara el tomo mi verga y empezó a chuparla, abría su boca y no cabía toda pero yo estaba muy caliente así que lo tome de la cabeza con mis dos manos y lo folle por la boca y mis testículos golpeaban su barbilla, saque mi verga y lleve su boca y su cara hacia mi entrepierna y le dije que lamiera el sudor su lengua pasaba por mi entrepierna y comenzó a chupar mis bolas yo aprisionaba su cara hacia mis genitales, estaba tan caliente que el plan era solamente que me lo mamara pero ya no podía detenerme así que lo levante le quite la camiseta, la bermudas, los boxers y las sandalias y bruscamente lo arroje en un bloque de paja, el muchacho cayo boca arriba y solo me veía.

Yo me termine de quitar los pantalones y las botas y me acosté sobre el poniendo mi verga sobre la de él, su verga estaba parada y su cabeza estaba tapada y media solo 14 cm comparada con la mía que era enorme, así que empecé a moverme restregando mi verga con la de él y le decía:

‘’te gusta’’

El solo asentó que si con su cabeza y gemía mientras yo me movía sobre su pequeña verga para solo verlo correrse del placer, una vez se corrió me levante y lo puse en 4 sobre el bloque de paja, abrí sus nalgas y escupí en su agujero metí dos dedos en su ano penetrándolo bruscamente, al sacar mis dedos estaban cubiertos de suciedad pero estaba tan caliente que no me aguante y escupí mi verga, mi mano y sobe mi verga hasta que quedo bien lubricada di un último escupitajo a su ano, puse la cabeza de mi verga en la entrada de su ano y metí centímetro a centímetro mi verga hasta el fondo.

Ya con mi verga en el interior del ano del muchacho empecé a follarlo de forma brusca mientras le decía:

‘’aquí esta papi’’ ‘’papi te está dando de comer y ya llegara la leche’’

No podía creer que este muchacho se estuviera tragando 22 cm de verga caliente, se notaba que era bien putito, yo mientras tanto lo penetraba como un perro agarrando sus pequeñas caderas y empujando mi verga hacia el fondo, yo agarraba esas pequeñas nalgas, le pegaba unas cuantas palmadas y seguía con mi embestida brutal.

Después saque mi verga del ano del muchacho y lo cambie de posición poniéndolo boca arriba sobre el bloque de paja, yo me posicione en medio de sus piernas las abrí, las coloque sobre mis hombros y volví a meter mi verga en ese ano tan apretado.

Yo cogí al muchacho de la cintura y empujaba bien fuerte, yo veía al muchacho y no decía nada solo gemía y me veía el cuerpo y sus manos eran puestas en mi pecho acariciándolo.

Yo continuaba con mis embestidas y el pene del muchacho estaba a reventar y se movía solo mientras lo penetraba, cuando vi que se corrió, el muchacho estaba tan excitado que se corrió sin que se tocara su pene, cuando vi esa escena me excite más y sentí una sensación que no había tenido cuando lo hacía con alguna mujer.

Después de 15 minutos más o menos seguía cogiendo salvajemente a ese muchacho y su pecho estaba mojado de mi sudor que caía de mi cabeza, ya estaba a mil cuando empecé a empujar fuerte hacia el fondo de ese año y expulse tomo mi semen en su interior, di unos tres empujones profundos y me detuve un momento admirando lo que había hecho.

Cuando saque mi pene del ano del muchacho la cabeza de mi verga estaba cubierta de suciedad y semen, me retire a un rincón del pajar, agarre mi cantimplora y me lave el pene quitando mi suciedad, me puse mis pantalones, mis botas y el muchacho seguía acostado sobre el bloque de paja, yo me acerque y le dije:

‘’cierra tu culito y no riegues mi leche, déjala adentro que ahora estas bien preñado’’

El muchacho solo acento un si con su cabeza y se levantó se vistió y se fue.

Al otro día don francisco se me acerco y me dijo que llevara a su nieto a dar un paseo por la hacienda, yo cogí dos caballos y nos fuimos a lo más alejado de la hacienda, una vez allí paramos los caballos en la orilla de un rio y el muchacho sin decir una palabra se desnudó y por primera vez hablo y me dijo:

‘’otra vez, desnúdate y embarázame’’

Yo me desnude, pero le dije al muchacho:

‘’te voy a dejar bien preñado otra vez, pero primero hay que lavar ese culito’’

Puse al muchacho en 4 en el rio y le arroje agua en el ano mientras introducía mis dedos, luego tome agua en mi boca, puse mis labios en la entrada del ano del muchacho e introduje a presión el agua dentro del ano del muchacho y le decía que pujara, para que saliera y así se pudiera limpiar ese culito.

Después de un rato limpiando ese culo, me posicione y hay mismo le metí mi verga en su ano fallándolo brutalmente una y otra vez, recuerdo haber eyaculado dentro del muchacho como unas 5 veces y así estuvimos toda la mañana, cuando mire el ano del muchacho estaba muy abierto tanto que podía meter mi mano sin problema.

Luego nos vestimos y nos fuimos caminando a la hacienda ya que el pobre muchacho no podía estar sentado en el caballo porque le dolía, y así estuve follándome ese muchacho las veces que quise durante las semanas que estuvo de vacaciones en la hacienda, llenándole el culito de leche una y otra vez.