todo por un juego
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
En aquel entonces tenía 8 años, estaba en 3er grado, y tenía un compañero de banco muy lindo, que siempre me tocaba mi pene sobre el pantalón y me decía, vamos a jugar a los novios.
Un sábado que no teníamos clase pasó por casa y me dijo,
Vamos al monte a jugar,
Como siempre lo hacíamos con mi hermano mamá no se opuso y nos fuimos los dos corriendo, el monte estaba cerca de casa, unas 6 cuadras, llegamos y nos metimos en la orilla del rio a jugar en el agua.
Jugando el me tocaba mi pene y yo el de él y nos reíamos los dos, en la playa no había nada y nosotros a la sombra de los sauces jugábamos a tocarnos y besarnos, era solo un juego, tan distraídos estábamos en nuestras cosas que no nos dimos cuenta que un hombre nos estaba mirando.
En cierto momento sentimos sus manos en nuestros hombros y nos asustamos mucho, nuestros penecitos se bajaron y quedaron flácidos en un segundo.
Qué están haciendo, sinvergüenzas,
Nada señor,
Yo los conozco a Uds. y conozco a sus padres y nos nombró por nuestros apellidos, ahí el susto era mayor.
Sr. por favor no diga nada a nuestros padres,
Claro que le voy a decir,
No, por favor, yo le dije. Si no dice nada yo le hago todos los mandados todos los días de su vida
El riéndose, me respondió, eso no es pago para callar lo que vi.
Que quiere entonces?
Vengan conmigo, yo estoy acampando en el monte del otro lado del rio,
Nos subimos con él a una canoa y el comenzó a remar, yo soy el enfermero del hospital, que raro que te acuerdes de mí, yo te vacune una vez.
No recuerdo. Pero que quiere que hagamos?
Quiero que hagan lo que estaban haciendo pero en mi carpa, es grande así que tendremos espacio.
Nos miramos con mi compañerito y nos sonreímos, ya estábamos tranquilo, el solo quería vernos hacer cosas con nuestros penes
Al llegar nos metimos en su carpa era una de cuartel según nos dijo
Bueno, tírense y hagan un 69, nos miramos, no sabíamos que era eso.
El nos explicó, y lo comenzamos hacer, era rico, mi amiguito tenía todo mi pitito en su boca y yo el suyo y chupábamos como si fuera un caramelo
El saco de un bolso un pañuelo y lo mojo con algo, lo vi porque estaba frente a mi y yo estaba sobre mi amiguito.
Lo acercó a mi nariz, tenía un olor agradable, respira profundo que luego te va a gustar,
Yo lo hice 2 veces y sentía que flotaba en el aire, me encantó, seguí tomando todo ese aroma hasta que ya no sentí nada.
Cuando volví de ese estado me encontré al señor sentado en una silla, y mi compañerito sobre sus piernas, las piernitas rodeaban la cintura del señor, y estaba como ido, con una sonrisa
Yo sentía que mi culito estaba agrandado, lo sentía enorme como si tuviera algo grande en el.
Me toque y sentí que tenía algo metálico dentro de mi culito. Pero no me dolía.
Te gustó lo que hiciste, a mi sí. Me dijo, mira lo feliz que está tu amiguito,
Lo alzó, y me mostro una verga enorme, que entraba en el culito de mi amigo.
Se la sacó y me dijo ven tu, ya debes estar adaptado para gozar con mi bichito.
Me puso boca abajo sobre sus piernas, destornillo algo y me sacó lo que tenia puesto en mi culito. Me alzó y me sentó sobre su bicho,
No, por favor me duele,
Ya estas como tu amiguito, a ti te preparé con un especulo pero a el se la puse sin adaptar, vamos no seas marica, una cosa es ser marica otra es ser putita, como fue tu amiguito-
El lloró un poco pero luego la gozo mucho.
Ven, le dijo a mi compañero, bésalo como te enseñe, tómalo de la cabeza y no lo sueltes.
Eso hizo, entonces el puso una grasa en mi culito y me la metió de una.
No podía gritar me movía como loco para zafarme de ese martirio, el gozaba
Te mueves hermosos perrita, me vas hacer acabar rápido. Aaaaaaaggggggggg
Yo lloraba desesperado, mi amiguito me soltó la cabeza , se dio vuelta y me mostro su culito, era enorme , luego me volvió a besar.
Y sentí ríos de un líquido caliente dentro de mí. Luego el dolor iba calmando y su bicho salió naturalmente de mi todo flácido
Vamos al rio a limpiar esas colitas que a partir de ahora son solo mías, y estarán para mí cuando yo quiera, sino le contare a sus padres lo que vi.
Nos lavo bien a los dos y luego nos puso un polvo que hizo que nuestros culitos volvieran a la normalidad. Nos pasó para la otra orilla y nos dijo. Bueno, el próximo sábado los quiero aquí de nuevo. Nos dio un beso en la boca a cada uno y se volvió a su carpa.
Me amigo me preguntó
Qué es eso que olimos, a mí me agradó. Quede dormido y cuando desperté estaba con todo su pito adentro, no me dolió, para el próximo sábado pedidle que te haga como a mí, vas a ver que lindo que es.
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