Tragando leche por primera vez
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Luis195.
Perdí mi virginidad de una manera distinta a lo esperado jeje, me llamo Luis, soy un chamo alto, casi el metro ochenta, moreno, ojos negro y con un cuerpo atlético, hecho a pulso, la verdad es que no soy nada del otro mundo mi cuerpo es más como el de Jean Carlos Canela en la novela “Mas sabe el diablo”, y mi pene mide casi los 16 cm, eso sí, es bastante grueso, soy bisexual, aunque para ser honesto la mayoría de mis experiencias han sido con hombres, comenzando desde mi virginidad, la cual perdí con quien para entonces era mi mejor amigo de la urbanización, vivo en Venezuela, y tengo 23 años, aquí nací jeje y para proteger a quienes han compartido la cama conmigo, voy a cambiar los nombres (mi nombre real tampoco es Luis).
Tenia yo 14 años y mi mejor amigo Manuel como lo vamos a llamar jeje era mayor que yo, pero no por mucho, solo unos meses, él es medio catire (cabello rubio) pero ojos marrones, claros mero marrones al fin, el mide lo mismo que yo, pero no hace ejercicio jeje, todo empezó cuando un día fui a su casa a jugar a la consola, era normal hacerlo, pero ese dia no había nadie en su casa.
Estábamos jugando cuando de pronto se fue la luz (viva chavez jajajajajajaja) eso solemos gritar en Venezuela cuando algo nos hace molestar y es culpa del gobierno jajajajaja, me molesto mucho porque por fin le iba ganando y él siempre me ganaba, entonces nos quedamos esperando y me dice:
Manuel: mis papas me enseñaron a jugar 21, ¿sabes cómo se juega?
Yo: no, explícame.
Manuel: bueno, es un juego de cartas, pero se juega apostando.
Yo: ok, pero haremos retos, porque no tengo dinero.
Entonces Manuel me explico y saco unas cartas, eran pornos, salían mujeres desnudas y como ya lo dije soy bisexual, así que se me puso como dicen en España, morcillozo, y empezamos a juagar, como era de esperar él me gano, entonces me dice, quítate los pantalones y quédate en bóxer, yo lo pensé y luego lo hice, entonces el al verme que lo tenía medio parado me dice, “¿ya se te paro?” y yo le digo que no por completo, entonces él dice “lo tienes chito” yo me pique y seguimos jugando, entonces yo le gane y le digo, tienes que desnudarte, y él se negaba, asi que empezamos a forcejear en broma hasta que lo desnude.
Dios que culo más blanco y su pene igual, blanco y con la cabeza rosada, entonces nos sentamos para seguir jugando y yo con mi amigo allí desnudo y yo en bóxer me excite y allí si se me paro, entonces él me dice que no es justo, que me desnude y yo le digo que no, el insiste y empezamos de nuevo a forcejear, yo no perdía la oportunidad de tocárselo y de recostarle mi pene, hasta que me desnude, él me vio y me dice, Marico, lo tienes muy grueso, pero es más chiquito que el mío y le digo, que no le creo, entonces empezó a masturbarse y se le paro, era cierto, su cabeza era rosada y grandota, se me hizo agua la boca, pero era venoso y más delgado que el mío , entonces yo le pregunto si ya tenía novia y él dice que no, pero que le gustaría que se lo mamaran y besar y yo le digo, hagamos un trato, yo te enseño a besar y tú me lo mamas, él dijo que no y nos sentamos para jugar, y entonces me dice luego de pensarlo, vamos a hacer algo, yo te lo mamo, pero tú me lo mamas a mí también, y yo le digo, dale y allí empezamos, le dije, párate y yo me arrodille, y me lo empecé a meter en la boca, tal como veía en las pornos, su cabeza era salada y sabia un poco a orine, aparte aprovechaba a agarrar su culo entonces allí estuve por unos minutos y le pase la lengua por las olas y por el nie (que no es ni culo ni bola) él soltó un gemido, y mi pene lubricaba a millón igual que el de él, le digo, ahora te toca a ti, pero antes lo bese, él me lo agarro y empezó a mastúrbalo antes de meterlo en su boca, lo lamió completo y yo le agarre la cabeza y se lo metí de golpe, casi vomita el pobre, allí duro un rato y luego le dije que se parara y empezamos a besarnos, mientras nos agarrábamos los culos y nuestros penes estaban uno contra el otro, de pronto de la emoción uno de mis dedos entro en su agujero y él solo se retorció y soltó un pequeño gemido, que vaina más rica estaba calentito y apretadito dentro.
Entonces él me dice que nos movamos al cuarto, y yo saque mi dedo, entonces al llegar al cuarto me dice, allí tengo condones, vamos a hacer un trato, tú me haces y yo te hago, y así fue, yo le dije que se lo quería meter y entonces el acepto, lo puse a cuatro patas y sin previo aviso se lo metí, él se puso rojo, grito, lloro y luego gimió, me detuvo y después de un momento me dijo que podía seguir, estaba caliente, apretado y delicioso, yo sentía como nuestras bolas chocaban mientras él se agarraba de mis nalgas y me empujaba al fondo, gemía como loco, decía que le gustaba, que le diera más duro, yo le rompí ese culo como pude, le di sin compasión y le daba nalgadas, luego le agarre el pene y lo masturbe, mientras lo seguía penetrando, que rico gemía el coño e madre, luego le dije que se pusiera boca arriba, coloco sus piernas en mi cuello y yo lo penetre mientras lo besaba, él se masturbaba, me pedía que no parará y entonces acabamos, el primero y yo después, su gemido fue destrozador, se le llenaron los ojos de lagrima y su leche quedo regada en todo su cuerpo, yo me acosté sobre él y lo seguí besando, saque mi pene de su culo, me quite el condón y luego vi que ya estaba listo, era su turno.
Que miedo tenia, pero pensaba en que el parecía disfrutar mientras yo lo penetraba, entonces él me dijo que boca arriba iba a gozar más y dolería menos, así que eso hice, para ser honestos casi no me dolió, su cabeza entro forzada y yo lagrimee, para ser honestos no me gusto, pero algo dentro de mi pedía mas, lo quería todo dentro, así que lo agarre como pude por sus nalgas y me lo metió hasta el fondo, seguía sin gustarme, pero no quería que parara, era extraño para mi esa sensación, supongo que así se sienten los masoquistas, solo me gustaban sus besos y para que negarlos, como se sintió masturbarme mientras él me penetraba, asi estuvimos un ratito y entonces él me dice, que ya iba a acabar, me pide acabar juntos y yo empecé a masturbarme, para que negarlo, acabar con ese guebo adentro mientras el me besaba fue alucinante, entonces estábamos llenos de leche en nuestros pechos, él la lamió y luego me besos, la leche jugaba en nuestras bocas.
Luego nos limpiamos, botamos los condones y empezamos a hablar de lo ocurrido mientras nos vestíamos, que calor así y sin electricidad, no teníamos ni un ventilador.
Sin saber cómo nos quedamos dormidos y al despertar, éramos consiente de lo ocurrido, entonces volvimos ha pedirnos mutuamente que nadie supiera lo ocurrido, me confeso que le gusto todo, me beso y me dijo que quería que se lo volviera a meter, yo no le dije que no me gusto que me penetrar, yo pensaba que quizás era por la poca experiencia que teníamos o los nervio y por eso no lo había disfrutado tanto como él.
La experiencia se repitió muchas veces más, pero tuvimos que dejar de hacerlo, pues él tiene sus novias jeje mujeriego … y aunque me confeso que a veces quisiera volver a estar conmigo, no quiere que nadie sepa que es bisexual nunca.
Comenten que les pareció mi relato, si les gusta seguiré contándoles de mis otras experiencias.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!