Un amigo de mi padrastro me folló

Continuación de Aprovechado por mi padrastro y sus amigos.
Después de aquella noche con mi padrastro Diego, y sus amigos, José y Alejandro, noche que me lo pasé súper bien, con esos tres machos dándome duro por el culo, me sentí la puta más joven del mundo. Tenía ganas de más, dado que mi madre estaba de vacaciones y me hizo prometer que me portaría bien y obedecería a su novio.

Pues desde entonces, Diego me trata mejor, me da más respeto, más cariño… tanto así, que cada mañana me saluda con beso en la boca, y con lengua. Joder, que cachondo me pongo solo con recordarlo, pues vale, tres días después mi padrastro me dijo:

Diego: – John, esta tarde vendrá un amigo mío, se llama Pablo, yo no estaré pero recíbelo tú hasta que llegue a casa, por lo menos hasta las 20:00 no llegaré.

Yo: – De acuerdo!!!

Diego se fue a trabajar, y yo me hice una lavativa más, me duché, me perfumé un poco y mientras, yo admiraba mi propio cuerpo, limpio, sin vello corporal en ningún sitio, el culo que fue follado por tres guapísimos hombre… pero yo quería el culo más grande y redondo.

Llegó Pablo sobre las 14:00, le abrí y entró en casa, era un moreno de 1’85 cm, ojos azules, sin barba, labios gruesos, cuerpo trabajado de gimnasio, y un paquete de 25cm por lo menos calculando a ojo. Le saludé, y le ofrecí algo para tomar:

Pablo: – No, gracias. ¿Cuándo vendrá Diego?

Yo: – Él me dijo sobre las 20:00, que puedes esperarle si quieres.

Pablo: – ¿Y que hago yo aquí hasta las 20:00?

Yo: – No lo sé… Tienes un buen cuerpo, ¿puedes darme algún consejo para mejorar el mío?

Pablo: – ¿qué quieres mejorar?

Yo: – La forma y tamaño de mi culo.

Pablo se me quedó mirando, me dijo que me diese la vuelta para ver si se puede hacer algo, me tocó un poco el culo para ver si se puede hacer algo:

Pablo: – Espero que no te asustes por esto, en el gimnasio, solemos hacer esto para ver que se puede hacer, además ahí tenemos confianza entre nosotros…

Yo: – Tranquilo, no me molesta, toca lo que quieras.

Se me quedó mirando un poco extrañado, pero notaba que le atraía mi culo. Me bajé el pantalón par que se asegurase de que podía hacer par mejorarlo, y vi por el espejo del pasillo, como se tocaba el paquete, yo me agachaba un poco para darle libertad de mirar y tocar mejor, y en esto le digo:

Yo: – verás, mi padrastro me dijo que vendrías, y que te recibiera bien, y para que no estés aburrido, pues te pido ayuda para esto.

Pablo: – Yaaa… pues sí, se puede hacer algo para hacerlo crecer.

Yo: – Genial, ¿cómo lo hago?

Pablo: – verás, para que un músculo crezca, primero hay que desgarrarlo, hay que romperlo, por lo tanto, si quieres que te crezca el culo, te lo tengo que romper.

Yo: – ¿En serio?

Pablo: – Si, pero para poder romperlo y crezca, primero necesito que me ayudes a mí a qué me crezca la polla, y eso solo se hace metiéndotela en la boca

Entonces me acerqué a él, toqué su cuerpo por encima de su ropa, notaba unos pectorales duros, él se quitó la camisa dejando ver su pecho sin vello corporal, acerqué mi boca a su boca y le besé, él me agarró la cabeza y me besaba sin parar, yo me estaba poniendo cachondo, le quité los pantalones, me arrodillé, y empecé a chuparle la polla, sentía todo su sabor en mi paladar, me llegaba hasta la garganta, le pasaba la lengua por sus huevos mientras le pajeaba, yo disfrutaba de sentir mi boca llena de ese hombre.

Pablo: – oohh síiiii… shshshsh… oooohhhh… uuuhhh… no pares… ooohhh síiii… sigue así… ah ah ah ah ah ah…

Yo disfrutaba escuchandole como se divertía con mi boca, me pedía que sacase la lengua, para darle toques con su polla y frotarse con mi cara, se pajeaba y mientras me besaba en la boca, se levantaba y me la metía de nuevo en la boca, me agarraba de la cabeza empujando su polla para a dentro, apretaba hasta ahogarme un poco, era tal su placer que se ponía de puntillas por la sensación de sentir su polla dentro de mi boca hasta hacer que mis labios tocasen la raíz de su miembro, luego me levantó, me puso en el sofá y me chupó los pezones…

Yo: – Ooohh síiii!!!

Pablo: – ¿sí? Mmmm… ¿te gusta verdad?

Yo: – Oh sí cariño!!!… mmmm… quiero que me rompas el culo ya…

Entonces me puso a cuatro patas, me abrió las piernas y chúpó mi ano, ese ano que fue follado por otros tres hombres tres noches atrás. Pasó su lengua por mi agujero, lo lamia sin parar, me hizo sentir que soy suyo, que en ese momento, él era mi dueño, y su comida era yo y mi ano.

Entonces escupió un poco en su polla, apuntó a mí culo, y de una me la insertó…

Pablo y yo: oohhh…aaahhh…

Me empieza a embestir como una bestia, me la metía y sacaba como macho dominante, nunca con maltrato, pero sí teniendo él el control de todo, me tenía agarradas las muñecas y tiraba de mí para mayor placer.

Pablo: – ¿te gusta?

Yo: – ooohh sí mi amor… aaahh… shshshsh… uuuhhh que rico follas…

Pablo: – oh síiii… aaaahhh… mueve el culo puta… ah ah ah ah ah.. ¿querías que te rompa el culo?… ¿querías mi polla?… pues toma polla

Yo: – ah ah ah ah ah ah…

Sus embestidas eran fuertes e intensas, me encantaban. Quería que ese macho fuese mío durante esas horas solos, joder, como follaba el tío, era increíble, como su polla llenaba mi ano hasta la próstata.

Pablo: – Un buen ejercicio para el culo, son hacer sentadillas.

Yo: – pues enséñame a hacerlas

Entonces el se sentó en el sofá, yo me puse encima mirando para el espejo, me senté en su polla, y ahí cabalgué durante media hora sin parar, me sentía suyo, sintiendo toda su hombría dentro de mí, el cada vez se movía más rápido…

Pablo: – oohhh… oohh… aaaahhh… ooohhh jodeeerrr… estoy a punto de correrme…aaaaahhhh…shshshshsh… aaaahhhh…

Y ahí se corrió dentro de mi culo, preñandome como me hicieron días atrás, entonces yo le dije:

Yo: – Joder que bien follas tío, me has roto el culo de manera increible..

Pablo: – Síiii… pero tengo más leche, y quiero correrme en tu boca.

Entonces me levanté, me arrodillé delante de Pablo, él se hizo una intensa paja delante de mi cara, me agarró del pelo echando mi cabeza hacia atrás, abrí mi boca y soltó chorros de semen por mi cara, y mi boca, chorreando mi cuello y mi pecho con ello también.

Luego nos acostamos juntos para descansar un rato y dormimos unas dos horas, antes de que llegase mi padrastro.