un baño de verano en un río

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
En sí no existía tál playa como nudista, pero quien quería bañarse sin ropa se fué a un sitio definido en un cañon del rio Maggia: familias enteras y en especial hombres gay. Venían desde todo el cantón y hasta de la región de Milano ya que no era muy común bañarse desnudo y era un sitio de ligue para la región.

primero todos se calentaban sobre las rocas de granito bajo el sol veranal y se untaban abundante aceite bronceador. Después de unas semanas casi todos tenían un tono de piel provocador bronceado y quienes no se cuidaban lo suficiente parecian camarones a la plancha…..

Quienes buscaban más acción se atrevían entrar en el cañon que solo se podía con poco caudal. Era peligroso por las repentinas crecientes del río ya que no había salida segura, sinó sobre las propias huellas de entrada. Entre las rocas imensas había huecos suficientes para una rápida acción de sexo ya que el sol puso a 100 las hormonas y con todos esos Adonis a la vista.

Así me metí cuantas vezes para disfrutar de mi energía y encontré a un amigo Brasilero: cabello zambo, hojos para enamorarme, piel de mulato bronceado y comunicación entre portugués, italiano y español…. Me estaba esperando ya que me invitaba con sus miradas y le seguía resbalando sobre los moles de granito hasta un lugar fresco y escondido de las miradas curiosas.

Después de un primer beso apasionado me puse a recorrer su cuerpo saladito con mi lengua hasta llegar a su paquete. Su sable estaba desenfundada y lista para jugar. Le dí una primera mamada y se comenzaba a retorcer contra la roca fresca. Sobre su piel resbalaban gotas del sudor saladito por el clima caliente y la exitación del momento. Nos podría ver alguien en cualquier momento…… No me dejaba de desviar mi atención de su sable y antes de que acabe mi amigo en mi boca le dí la vuelta para darle un beso negro. Su anillo ya estaba bien mojadito de la exitación y con facilidad me dejaba entrar mi lengua por su orto.

Después de unos minutos le metí mi poronga que estaba ya listo desde hace fú…. Con cuidado le metí la cabeza y como no mostró señal de dolor sino de exitación, le dejé resbalar de una hasta el fondo. Que rico caliente estaba ese culo y me daba gusto de entregarme al vayven abrazándole con cariño. El de vez en cuando daba la vuelta a su cabeza para darnos un rico beso y acariciarnos con cariño. Parecíamos aislados del mundo y no nos dejábamos de molestar por unos mirones que siempre daban las vueltas y nunca conseguían nada…..

Yo también estaba bien sudado y nuestros cuerpos estaban pegados y bañados en sudor. Que rico se sentía a la sombra de una roca gigantesca y las hormonas a mil y a punto de acabarme. Con un lagro aaaahhhhhhhh me corrí en su ano inundando con mi escencia su ser y fundirnos en un largo beso. Como mi amigo no se había corrido todavía nos dimos la vuelta y me acomodé mi espalda contra su vientre para que me pueda gozar recostado contra la piedra. El no se dejaba de rogar y me penetró con cariño. Yo llevaba recién una experiencia gay y no muy agradable, así que estaba un poco con miedo del dolor que me vaya producir. Pero nada: como el primero ya me había roto sin cariño el culo, quedaba bien abierto la puerta y no me provocó mucho dolor. Ese en seguida se paso por el placer del masaje en mi próstata y le acompañaba en el movimiento de mete y saque ya que no le quedaba mucho espacio por la pared de granito a su espalda. No demoró ni mucho de lo exitado que estaba y al par que me acababa haciendo otra paja, el me inundaba mi culo con su rica leche Brasilera.

A ese encuentro en la naturaleza seguían muchos más: en el mismo sitio de la "playa nudista" y en mi departamento cerca de la playa. A mi me provoca mucho morbo tener sexo al aire libre aún con el riesgo de que nos espían. Se me hace que me fundo con el universo teniendo el cielo como techo y abrigo con el astro rey que nos caliente.

con un abrazo les saludo a todos los que se atreven de compartir sus experiencias.

Jorge