Un desconocido de 58 años

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola me llamo José Jesús, tengo 18 años, soy de Caracas Venezuela, esta es mi historia. Soy un chamo alto de 1,75 cm, delgado pien blanca ojos grices, cabello negro.
Un dia venia de regreso a mi casa de la Universidad, yo vivo por el centro cerca de mi casa queda una pequeña plaza, eran alrededor de la 5:30 pm, ya oscurecia un poco cuando de repente viene un señor de mediana estatura blanco, en su cabeza ya se le notaban canas, era de contextura rellenita, con una cara de morboso que no podia con ella. Al acercarse ami, se llamo mucho la atención su paquete ya que tenia su pantalon un poco mas arriba de la cintura, cosa q permitia q su miembro se le desviara un poco a un lado. De manera q se le notaba descaradamente.

Yo al verlo, mi mirada me traiciono, mientras el se acercaba mas lo veia. Cosa q el noto de inmediato. Yo con un poco de pena desvie mi mirada y el rapidamente se toco el paquete y vio hacia abajo, en fraccines de segundos los dos pasamos por el lado, el siguio y yo segui.

Al cabo de unos segundos, yo volteo a ver y precisamente el también voltea, cosa q enseguida supe q el queria algo mas, el se sento en un banco y yo al volver a voltear me hizo señas llamandome con su mano. Yo sin pensarlo 2veces me devolvi.

—Hola para donde vas—me dice con un tono bajito lleno de morbo—
—Hola para mi casa— digo con la voz en un hilo—
—Te gusta lo que viste, mira como lo tengo— me dice abriendo las piernas y tocandose el bulto.

Yo lo miro, y trato de dicimular, ya que esta pasando mucha gente y podrian sospechar, noto su pene un ya erecto como se le nota entre el pantalon, cosa q me pone a mil en ese momento.

—Si me gusta—le digo con un tono pasivo—
—Que quieres hacer?— me pregunta
—Te lo quiero mamar, todito— se lo digo sin tituviar, el queda con la boca abierta.
—Yo tengo una casita por aqui bajando la vereda, esta sola xq los inquilinos no estan, podemos ir ahi te parece,,— me dice sin pensarlo, luego hace una pausa y me dice:
—Voy primero, tu sigueme, y espera mi seña.— yo abedesco.

El se levanta y se va, yo lo sigo, al cabo de unos pies el llega a una pequeña casa y me hace señas a que espere, acto siguiente el sale y me dice con señas q entre. Entro a un patio con muchis arboles,bel estaba tras uno de ellos tocandose el paquete.

—Que rico estas, que edad tienes?— me pregunta dandome un rico y placentero masaje en las nalgass.
—18 y usted?— le pregunto sin aliento, posando mi mano en aquel enorme bulto.

Al tocar, siento aquella ereccion en mis manos, grande y fuerte. No pareciera de ese hombres mayor q teniaa frente ami. Uau!!! Que rico Se sentia, su rostro emanaba placer por el simple hecho de yo tocarle su erecto pene.

—Yo tengo 58 y me encantan los putitos como tu, me muero de ganas, que me mames el guevo como solo los maricas como tu lo. Saben hacer— me dice con un tono de voz, grave y autoritaria, al mismo tiempo q pone su mano en mi hombro y me obliga a que me agache.

Yo con las manos temblorosas apenas y puedo desabrochar su correa, luego su pantalonn, para luego liberar aquel pene enorme que ya tenia frente a mi. Con algo de vello, largo, grueso, y curbeado a la izquierda. Ufff!!! Me quede impresionado ante semejante ejemplar solo para mi.

—Ves como lo tengo? Quiero que me lo mames. Nada mas, no quiero penetrarte oiste mi miñeca??— me dice y to asiento con mi cabeza.— anda empieza a chupar ya, no te de pena—

Yo empiezo a meterme aquel tremendo PIPE en mi boca, engullendo adentro t afuera una y otra vez, el gime de placer tiranfo la cabeza hacia atras, siento su pene todo en mi garganta, allá hasta adentro, profundo— ahhh!!!! Siiiiiii asi haslo otra vez— me dice apenAs pudiendo decir una palabra. Yo obedezco e introdusco nuevamente el pene hasta mi garganta, me detengo, respiro un poco, luego hago un movimiento suave, para q su glande roze mi garganta, cosa q da una sensación placentera tanto para el como para mi.

— huyyyy que rico, que rico se siente eso, me encanta como lo mamas— me dice extaciado.
— Lo tienes grande y grueso, como me gusta,— le digo con mi boca llega de baba espeza.
— Lo se, por eso uso los pantalones asi, para exibir mi pene, a las mujeres las vuelve locas, y a los maricas como tu mas— dice en un tono varonil y todopoderoso.

Sigo con mi trabajo, saboreandome y disfrutando aquel semejante pene, que ya con tanta friccion de mi boca estaba a tope de total ereccion, sentia el sabor salado del lubricante natural, — Hasme llegar en tu boca, quiero ver toda mi leche en tu cara— me dice lleno de placer y entusiasmo, cosa que me puso a mil.

Empece entonces un rapido pero delicado proceso de sexo oral como solo yo se darlo, pasando mi lengua por la cabeza, de derecha a izquierda y viceversa, mis labios de arriba a abajo del ttronco hasta la punta, luego las bolas, que le colgaban de forma tan sexi q las jalaba con mis labios. Las venas de su pene parecian estallar, — ahh,,!!!! Asi que riiicoooo— exclamaba con tanta satisfacción que sus palabras para mi eran melodia.

—Que rico lo mamas, ahhh!!!¡— ya sin aliento decia.— ya voy a llegar, sigue asi, asi, asiiii.

En mi concentración note q los musculos de sus piernas se contarían, y supe que ya iba a llegar, me detuve y me concentre en la cabeza de su pene, acariciandola de manera sutil con la legua. — -Ahhhhh!!! Siiiiiiiii, — dijo con un sonido sordo, saliendo su caliente semen que recibia en mi boca, luego lo alejo un poco para q la otra parte se posara en mi cara, aquella sensacion de esa leche recien salida en ma cara, ese olor, ufff!!! Demasiado rico.

El, con las manos en la cabeza hacia atras, solo transmitia placer, al momento que to me introduzco nuevamente su pene para extraer hasta el ultimo sorbo de semen de su pene.

— Chamito que ricura de mamada,me has dado hoy, en mi vida me lo habian hecho asi.— me dije con in tono de satisfaccion, y luego concluyo de forma me siento violado.,— y se echo a reir.

Luego de subirse los pantalones, me pidio mi numero de telefono, se despidio y se fue.

FIN….