un día como sumiso 1

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Desde lis diecinueve años que me follaron el culo, me gusta sentir de vez en cuando una a polla entrando y saliendo de mi ano. Como un hombre me utiliza sin que yo ponga pegas.
Bien, mi historia empezó un Domingo de hace ya tres años. Deseaba algo de acción, era casi finales de verano y el calor me hizo tener un inmenso calentón y desee enormementre un tío en mi interior. Me enganche a la red y tras hablar con varios su con un tío que se hacia llamar Casado 55.
Nos presentamos y hablamos del tiempo y del calor en Madrid.

-Me gusta mucho tu edad, me encantaría conocerte pero como ves por mi único estoy casado
– Para mi, no es problema. Podemos vernos en un hotel o algo así. Me gustaría ser la amante temporal de un hombre casado. Quedar con él y darle lo que su mujer no le da- fui sincero en lo que le dije
me gusta lo que dices porque yo busco lo mismo, una zorra que sepa darme placer.- respondió el – ¿Te han follado mucho?_
– No. Pero siempre estoy deseoso. No soy hay pero de vez en cuando me gusta ser utilizado, no tener ningún tipo de iniciativa y ser un objeto sexual de un tío
– Me gusta por donde vas.. Tienes pinta de ser una buena putita… Me apetece conocerte y darte algo de tralla. Iba a comparte hasta reventar te. No siempre encuentro gente asi.-

Me empalmes al ser hablado de esa forma. Había follado con tíos duros, chulos, de terminar de follarte y mandarte a casa a masturbarte. Pero nunca me habían llamado puta
-Voy a comparte a pelo y te marcar e de mi propiedad corriendo me en tu boca y después Meare sobre ti para que seas mio. Recurriré a ti cuando mi mujer no este y te follare hasta que me harte, te emputecere y ceder e a mi antojo. Tu solo follaras cuando quiera y donde quiera

Empecé a masturbarme, este hombre estaba haciéndome sentir una perra en celo. Me abrí de piernas. Me masturbe pensando en el follando me a cuatro patas. Su polla destrozando me el culo mientras entraba y salía de mi con una brutalidad impropia. Me imagine, gimiendo como una perra, deseosa de su macho. Desee su corrida en mi culo y limpiar después esa polla a la queme iba a esclavizar con mi boca.
-Tardas en responder ¿Te masturbas, perra?
-Si, Señor- respondí con dificultad. Solo de pensar en lo que me estas diciendo… me siento como una perra en sus manos
-Y eso seras… corre te y lame tu propio semen-
No tarde en correr me como una puta. Mi semen se derramó por todos los sitios. Nervioso chupe mi mano, la mesa del ordenador y todos aquellos sitios donde mi esperma cayo
-y bien, puta, ¿cuando quedamos?