Un día de sexo gay
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por monoapatin.
Aparentemente no tenía llaves y no pudo entrar a su casa, la cual se encontraba, supuse que no lo podía dejar allí, pero como no soy muy amable intenté hacerme al loco y dejarlo pasar, pero nuestras miradas se cruzaron y no pude evitarlo, amablemente le invité a pasar diciendo
Ey! Qué haces ahí? – Me respondió – "Se me olvidaron las llaves y la culona de mi hermana llega tarde!
Me reí del comentario de su hermana, pero tenía razón, aunque lo dijo de forma despectiva, su hermana tenía unas posaderas grasosas y suabecitas, mi verga se paró rapidamente al recordarla. Que culito tenía esa nena, redondito, durito y a la vez suabito, difícil de explicar. De esos que les das a sopapos, y parecen gelatina pero también te los acercas a morder y culear y es durito redondito.
Le dije a su hermano después de esos sucios pensamientos rápidos -ey ven aquí, vas a morir de frío- Aceptó diciendo "mi hermana lelga bastante tarde, espero no te moleste"
Lo que no entendí hasta ese día es porque él me miraba ta raro, siempre, desde la ventana de su casa cada vez que pasaba cerca para llegar a la mía, me ponía algo nervioso tenerlo en casa, pero simplemente no lo podía dejar afuera muriéndose de frío.
Entramos a casa, el totalmente mojado con un pantalón corto, que por lo mojado se le pegaba toditito!, me dio gracia, tenía un culo grande como el de su hermana pero de él era un poquitín más peludo, claro porque el es hombre. Se me quedaba mirando raro mientras entrabamos, le dije que le prestaría alguna ropa para que no esté temblando de frío, lo invité a subir a mi cuarto para que se cambiase, abrí mi ropero y le sugerí que escogiera a gusto. Cogió una polera y un pantalón, y me dijo que esas estaban bien, que me las devolvería lavaditas, que no me preocupara.
Yo amablemente se las dejé, antes de que pudiera decirle donde cambiarse, ya se había quitado ese delgado pantalosillo que llevaba, su ropa interior blanca hizo rezaltar su culo redondito lleno de pelitos muy agradables a la vista, demasiado yo diría. Por alguna razón, no lo pude dejar de ver, tal vez fue porque me recordaba a la bellesa de cachetes de su hermana, cuando me dí cuenta, tampoco llevaba camisa, pero mis ojos no se apartaban de ese culito tan redondito ycon una suabe capa de pelitos. Supuse que no sólo era el recuerdo de su hermana, posiblemente tenía algo que ver el que mirara tanto porno de travestis, no lo sé, pero no me importaba, disfrutaba tranquilamente de la vista.
De pronto, y de forma rápidamente se dio la vuelta y me dijo "qué tanto me ves!, acaso te gusto para que me veas tanto!, rió un poco, a lo que yo muy nervioso no pude responder, sólamente me di la vuelta saliendo cuidadosamente de mi cuarto, cuando el rápidamente cerró la puesta mientras intentaba salir, lo miré algo pasmado. Él tenía una mirada rara y muy fija, y me dijo "no me respondiste!", yo alcancé a decirle que me puse así porque el me puso nervioso, por eso no respondí. Extrañamente se fue acercando de a poco y pude notar que esa ropa interior blanca no sólo hacía resaltar esas nalgas tan sabrosas, una verga incluso más grande que la mía estaba escondida, y muy animada, no me había fijado en el detalle, pero tal vez eran 18 o incluso 21 centímetros de largo, la verdad no la podía ver ya que se encontraba muy cerca, y ese gran pedazote de carne me rosaba el pantalón, yo no sabía que pensar, él anunció de forma muy seca "ey, respóndeme… Tus nervios me están poniendo rarito sabes… Como que me estás calentando con esa mirada nerviosa… como si yo fuera….a…"
Me puse muy nervioso en la pausa que hizo, a lo que agregó "me gustaría hacerte.. cosas morbositas.." con una mirada pícara, la que yo reconocía cada vez que miraba porno.. o incluso me masturbaba pensando en su hermana…. Simplemente se me acercó y me besó… Un hombre, no sabía que hacer!, su inmensa verga me rosaba y me rosaba, de un rápido movimiento me bajó el pantalón mientras me decía "me tienes que disculpar, me calientes mucho, no se por qué lo haces…."
Comenzó a masajear mi verga con sus dos manos, me quedé rendido ante un placer muy morboso, la verdad ese momento no me importó, si él era hombre, el vecino o qué!, pero ese placer inmenso que sentí mientras sus manos recorrían mi pene…
No podía decir nada mientras el me decía "que rico pedazote, no me equivoque contigo papacito, crece y crece cuando lo manoseo… Me antojo" se ensalivó los labios, bajé la cabeza para verlo manosear mi pene, me entró un morbo increible cuando lo vi literalmente babear, realmente estaba hambriendo de mi verga, que comenzaba a tirar jugos, yo también estaba que ardía, exploté.
Se me salió decirle "vamos nene, vamos, tanto me querías?, ahora soy tuyo!" No sé cómo salió eso de mi boca, pero el inmenso placer y el morbo, un morbo extremo me dominaba, me encantaba, lo empujé ligeramente en acto reflejo, se paró, me miró y nos comenzamos a besar como si fueramos dos animales arrechos. Fuimos moviédonos hasta la cama, donde yo le bajé su último trozo de ropa.
VAYA!, que verga tan deliosa ante mis ojas, gigante y tirando mucho jugo "cuanto te mide papasito?" le pregunte, el me respondió "21 cm si haces las cosas bien", solo pude decirle "Quiero que sean 22 papito", me agarró de la cabeza y la llevó bruscamente a su pene, acto reflejo le comencé a chupar, que digo!, a comerme ese manjar chorreante, que cada vez más y más hacía chorrear de mi boca las inmensas cantidades de líquito que tiraba, estabamos como dos animales arrechícimos cumpliendo con nuestros instintos sexuales más alocados y desenfrenados. Lo que chorreaba de lubricante extra lo agarraba con una de sus manos, y lo untaba en mis nalgas, tanto en la raja como en las mismísimas cachetas, desnudas. Ay que delisia, como chorreaba!
Exclamó "Ya basta!, esto esta demasiado bueno, me encanta, pero esta verga dura, se va para la casa", me agarró y de forma brusca y fuerte me tiró en la cama, no sabía que había pasado, tal vez se había molestado y se iba a ir, pero de la nada sentí una húmeda lengua rosar mi ano, y luego adentrarse como un exámen médico. Me lamía el ano con mucho fervor, no me contuve y comencé a gemir de un placer tan morboso, estaba estallando y explotando de placer, después de buen rato gimiendo, sólo lo escuché murmurar de manera muy cruda "Ya está papito, listo!" Agarró su verga y antes de que yo siquiera me diera cuenta de qué pasaba, mela metía duro y parejo, sentía los chorros de jalea masculina en mi ano, y cuando la sacaba chorreaba a mis nalgas y saltaba a mi espalda. Se sentía delisioso y a la vez había algo de dolor por la dureza, se comía mi ano, me lo destrozaba, era un placer indescriptible, me disfrutaba a totalidad y yo también. Inundamos el cuarto con gemidos de placer pero la fuerte lluvia hizo parecer que no ocurría nada.
De otro modo, seguramente todo el barrio se enteraría de lo que pasaba en esa habitación, dos tipos cogiéndo literalmente como dos animales en celo, de como me daba duro con esos 21cm en el ano. Mientras me ponía como perra, uno de esos momentos agarró mi verga y la comenzó a jalar de manera bruta, primero me lastimó, pero después la convinación de PENEtración y esas jaladas descumunales hacían simplemente que yo ardiera de un placer exquisito, y muy, muy morboso.
Era una perra, de cuatro patas siendo perforada y abusada por este tipazo y su vergota, de la nada en el inmenso placer, sacó su verga, me empujó y con el pecho arriba y la cabeza también vi como s edeslechaba de forma descumunal, acabando en todo mi pecho y cara. La exitación llegó a un extremo inmenso, mi verga le roció también pero en la cara y en el cuello, se agachó rápido diciendo "yo te limpio amor", y mientras yo tragaba y relamía la leche de mi rostro, lamía mi cuerpo con su lengua, que era larga y roja, la misma con la que limpió mi ano.
Agarró mi verguita de 18cm y la chupo y chupó, diciendome "yame tome mi leche, quiero más de la tuya" me jalaba de forma dispareja, lastimándome, yo gritaba de dolor y de placer, pero estaba a su mercerd, enr ealidad a la merced de ese placer y morbo descumunal, antes de que yo acabara, que se notó claramente que lo iba a hacer, simplemente agarró se paró y de un sentón metió su ano a mi verga, así es,él metió su ano a mi verga chorreante, fue muy rápido, dos sentones nada más, en las que chillamos de placer, acabé ahí dentro.
Su ano comenzó a chorrear con mi semen, muchísimo semen. Yo ya no podía más, me eché y el muy enojado me dijo "Ey papito, quiero mi leche, la quiero ya!, la sacaré yo mismo", me dio a nalgadas muy bruscas, con lo que mi cansada verga se levantó ligeramente, algo erecta la comenzó a chupar, no lo podía creer, era demasiado placer, orgamos tras orgasmos. Acabé de nuevo, rápidamente en su garganta disparandole hasta la traquea. El seguía y seguía yo no dejaba de gemir como una puta perra en celo, salía mi leche y él la succionaba con demasiado entusiasmo. Yo sólo gritaba y gritaba, cuando al fin se cansó, se echo a mi lado pero no dejaba mi verga tranquila, la siguió jalando, yo sólo cerré mis ojos.
Desperté tan sólo un par de minutos despues, con su verga en mi cara, él se masturbaba delante de mí, esas inmensas bolas balanseándose, no sabía qué ahcer, él gritaba y babeaba por el placer de su paja, saqué mi lengua, y le agarré las nalgas con mucha fuerza, comencé chupando esos huevos, él no se resistió obviamente, y nuevamente mi cara se llenaba de leche calientita, entre los dos nos la tomamos, nos ensuciamos las caras el uno al otro con besos morbosos en los que su semen se mezclaba y bajaba por mi cara.
Fue un sexo lleno de morbo, extremadamente salvaje, poco después lalluvia paró y nuestras vergas comenzaron a caer cansadísimas y satisfechas. Se puso su ropa mojada, por donde todavía podía ver esa delisia de culo y ese pene que brillaba con los jugos secos. Sacó una llave de su bolsillo y me sonrio de manera muy exitante, me dijo "Me voy papito, hay que repetir esta azaña"
Yo casnado me levanté desnudo a despedirme y le dije "hasta luego", nada más salio de mi boca, y el se salía de ahí mientras me miraba de forma sucia y pícara, mi verga estaba totalmente erecta y yo no me había dado cuenta, él paró y volvió rápidamente, a lo que vino rapidamente cerca de mi y me lamió de forma muy sucia mi cara, limpiándome algo de leche que residía allí, jaló mi verga sacando residuos de leche en su mano, y esta vez sí se fue comiéndosela como si fuera un Manjar.
Salió de casa y entró a la suya, yo parado ante la ventana, me senté y recordé lo que ocurrió, yo no era gay, pero me gustó demasiado el salvaje y extremo morbo que àsa,ps esa tarde. me encantó. No resistí, agarré mi verga y llena de varios pelos de su culo, me la comencé a tocar suabemente, y luego de forma salvaje me desleché otra vez con demasiado placer. Caí rendido a la cama, ya era tarde, estaba cansado y sólo alancé a dormirme, en una cama sudada, olor sexo salvaje y con algunos pelitos, y en muchas esquinas, residuos de jalea masculina y leche, bastante leche, me exité, quería hacerlo de nuevo, pero me dormí..
Y así acabó otro día de sexo…. ""
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!