Un fin de semana en la playa (3 parte)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Llegó el mediodía y ya me estaba preparando para irme a la playa cuando llegó José y sus dos amigos (William y Miguel), no me quedó otra que quedarme y hablar con ellos, como estaba a punto de salir solo tenia puesto mi diminuto traje de baño, muy parecido a un bikini de esos que se ponen las mujeres, a mi siempre me ha gustado usar ese tipo de traje de baño y mi cuerpo se adapta fácilmente, tengo mi cuerpo bien definido, no tengo barriga, estoy totalmente depiladito, y ahora tengo un bronceado que para mi se ve muy bien, como verán estoy enamorado de mi cuerpo y trato de mantenerlo chevere, pero no es como el de los ficulturistas, solo me gusta tenerlo bien chevere, por eso voy al gym casi todos los días desde las 6am a 8am, menos los fines de semana.
Ellos al verme así me dijeron que tenía cuerpo, piernas y trasero de hembra y que les gusto mucho cuando me vieron desnudo el viernes en la noche cuando estaba en el patio duchándome, hasta creyeron desde lejos que se trataba de una hembra, porque se veía que tenia tetas pequeñas, y realmente es así, tengo algo de tetas por mis ejercicios de pecho en el gym y que también tengo unas tetillas que parecen pezones, son gruesos y larguitos.
José, en vista que yo no decía nada comenzó a desnudarse y sus amigos también, me quedé viéndolos y mi cuerpo se puso como carne de gallina, ya me sentía poseído por esos tres tipos, de José ya les dije como es, pero sus dos amigos no son gran cosa, dos tipos normales y sus miembros son muy parecidos al mio en tamaño y grosor, supongo que entre 16 y 18cm.
Yo al verlos desnudos me les fui acercando y fui acariciando uno por uno hasta hacerlos poner como piedras, comencé a chuparlos de menor a mayor y luego me levante, me rodearon y me quitaron mi diminuto traje de baño que era lo único que tenía puesto, quedamos todos desnuditos en la sala y nos separamos, José conmigo y sus amigos aparte, ellos empezaron a besarse y acariciarse, y a masturbarse uno al otro, yo me quedé viéndolos porque me excito ver lo que hacían, entonces agarré a José y me lo llevé al dormitorio para que me cogiera sin piedad, ya que mi culito lo pedía a gritos, ya en la cama comence a pasarle la luengua por la cabeza del guevo, por todo lo largo de su tronco y por sus bolas bien afeitaditas, allí me quedé chupadoselas porque me lo pido con sus dos manos empujando mi cabeza, ese guevo debe medir como 26 o 27 cm, es enorme y grueso, bueno eso ya se los había dicho en mi relato anterior, es que verlo y tenerlo en mis manos y boca y dentro de mi es una cosa y que lo cuente es otra, ustedes quizás no me lo crean, pero de verdad es enorme y venoso, imagínense que tieso completamente no llega a estar parado por completo, les juro que no quería que se terminara el fin de semana, estaba pasándolo tan bien que quería quedarme por lo menos 15 días, seguía lamiendo como una gatita tomando leche en un plato y el se retorcía de placer y pidiendo mas, mas, mas, me decía mamalo así, bien ricoooo, comete mis bolas, y yo obediente se lo chupaba por todos lados, y poquito a poquito me fui acercando a su culito y comencé a meterle la lengua y se quedó tranquilo, pensé que me iba a quitar pero al contrario, se abrió mas de piernas para que yo trabajara mejor, entonce ya era mas rico, mamaba guebo, bolas y culito, eso me tenía excitadisimo, en eso llegaron los amigos que estaban en la sala y se integraron, uno se puso ayudarme a chuparle el guevo a José y el otro se metió de cabeza dentro de mi culito, allí me mamaba el culito, las bolas y mi guevo, si ustedes lo han hecho sabrán que lo que les estoy contando es extraordinariamente divino, y si no lo han hecho, háganlo porque se están perdiendo uno de los tantos placeres sexuales mas ricos que en una orgía se pueden hacer, no se arrepentirán, yo estoy arrepentido es por no haberme iniciado en esto mucho antes.
Seguimos en ese juego por largo rato, nos cambiamos varias veces para todos hacer de todo y disfrutar, les repito, que vaina mas rica!, por fin me estaba sintiendo como siempre había querido ser, una hembra, ser poseída por un hombre como lo veía en videos y fotos, y hasta como lo soñaba y me lo imaginaba, siempre he querido ser como esas shemales que se ven en internet, que tienen apariencia femenina, que tienen tetas y cuerpos muy sexis, por eso es que me gusta cultivar mi cuerpito en el gym, ademas que allí siempre en las duchas puedes ver a los tipos desnudos, sus penes y sus traseros y pasar desapercibido.
Terminamos el jueguito y José me puso en la cama boca arriba, echó mis piernas hacia atras y mi culito quedó al descubierto y medio abiertico, empezó a pasar su lengua alrededor de mi aureola suavizandola para empezar a meter su enorme guevo, mi cuerpo se estremecía de placer y mi culito palpitaba y pedía ser penetrado, cuando empezó a meter su guevo yo sentía desgarrarme pero a la vez sentia una sensación demasiada divina, me dolía y me gustaba, yo le pedía que lo metiera todito y el me complacía haciéndolo despacito, entraba y salia por completo para que lo sintiera todos, estando dentro pasaba como por un anillo que al rozar me excitaba mas y mas, yo acabé ahí en ese instante, les aseguro que acabé sin masturbarme, esto me había pasado ya con Félix el día anterior y resultó algo riquísimo, el siguió cogiéndome con mucha dulzura, entraba y salía a placer y yo lo disfrutaba también a placer, se detenía un poco para no acabar tan pronto y subía y me besaba, se sacaba el guevo y me metía los dedos y me frotaba por dentro las paredes de mi culito, me tenía loco, luego volvía a meter su enorme guevo y seguía jugando con mi culito, entraba y salia, entraba y salia, hasta que de pronto comenzó a gritar ayyyyy, ayyyyyy que rico, yo también volví acabar y mi culito se llenó de leche, de mucha leche, se me salía solita y mi culito palpitaba de emoción, y pedía mas y mas, como estaba tan excitado, fui al baño, me metí la maguera de la ducha vaginal y me saque toda la leche que tenía dentro, mi culito estaba brotadito y adolorido pero seguía pidiendo guevo, lo que siempre había soñado, se me estaba haciendo realidad, mi culito quedó limpiecito y salí corriendo a la cama, esta vez fue Miguel el que comenzó a penetrarme mientras yo chupaba el guevo de William, luego cambiaron y volvieron a cambiar mientras José solo veía, en esa cambiadera por fin acabó Miguel y luego William, volvieron a llenar de leche mi culito que ya se estaba acostumbrando a las cogidas y a estar lleno de lechita, esta vez no me salió ni una gota, mi culito se la tragó toda, me tumbé en la cama en medio de ellos y los besaba y los acariciaba y les chupaba los guevos a los tres, parecía niña con juguete nuevo, hallaba que hacer, todo era tan excitante que les juro que quería que siguieran cogiéndome, ellos me decían, cálmate perrita ya te vamos a dar otra vez, y yo les decía, si, si, si, por favor, quería recuperar todos esos años perdidos y no me importaba lo que me decían, al contrario me gustaba.
Como a los 15 minutos comenzamos otra vez y me repitieron la misma dosis de carne y leche, y yo cual enferma de fiebre pedía mas y mas antidoto para calmarme y no me calmaba al contrario me excitaba muchísimo mas, me decían esta perra no se cansa.
Nos vestimos y me llevaron a pasear en la lancha por los canales y luego por la playa, junto con otras personas que los contrataron, de verdad que este fin de semana es inolvidable, paseos, playa, bebidas, comidas y mucho sexo, que mas puedo pedir?.
estoy inmensamente feliz por todo lo que paso y mas por haber descubierto que mi vida había cambiado por completo.
De regreso me fui a la playa y me tendí en la arena a terminar de broncearme como una hora ya que desde que llegaron esos tres tipo a la casa, la tirada y el paseo se dieron como las 3:30pm, estando allí llegaron Félix y el sobrino a preguntarme que me había pasado y porque llegaba tan tarde a la playa, les conté con todo lujo de detalles y se quedaron locos, a lo que me dijeron que cuadrara para la noche para darme la despedida entre todos, eso gustó, ya que todavía sentía ganas de que me cogieran, convenimos para las 7pm y así fue, después de estar un rato ahí, fui hasta el puerto de pescadores y esperé que llegaran los muchachos que estaban paseando a otra gente, cuando llegaron los invité y se pusieron mas contentos que muchacho comiendo caramelo y por supuesto me dijeron que estarían allí puntuales, me fuí a la casa arreglar todo y a esperarlos, tenía una ansiedad impresionante y un miedito riquiquito, nervioso pero feliz por lo que se me venia en un rato.
Mientras llegaban me metí al baño y me duché bien rico con una esponjita suave que pasé por todo mi cuerpo, luego me metí la manguerita de la ducha vaginal por el culito y lo lave muy bien, tratando de que no quedara ningún rastro de nada dentro, ya con solo meterme agua por el culito se me comenzó a excitar todo el cuerpo, me sequé y me quedé solo con una toalla por encima así como se las ponen las mujeres hasta arriba y tapando las tetas, se me veía como un vestido mini falda, a mi me fascina ponerme así, siempre lo hago escondido en el baño cuando estoy en casa, me gusta verme como una mujer, y como tengo piernas bien torneadas, pues mas, por eso es que me dicen piernas de geva, bueno, me senté en la salita a esperarlos.
Llegaron tres primero y luego los otros dos, pero como 10 minutos de diferencia, todos en la sala nos veíamos unos a los otros a ver quien comenzaba con algo o decir algo, un silencio dominaba la salita, hasta que Félix comenzó a decirme, estás muy bonita! y los demás también empezaron a decir cosas parecidas, y pidieron que me quitara la toalla y diera vueltas para ellos verme, si pena comencé hacerlo y ellos a desnudarse, a lo que giraba los iba viendo uno por uno y cada uno de sus guevos en mano tratando de pararlos, era un espectáculo lindo, yo giraba y veía a 5 viriles miembros todos apuntando hacia mi, y yo ya con ganas de tenerlos todos dentro de mi.
No sé como decirles que si uno muere de sexo, ese día estuve a punto de morir, mi corazón latía tan fuerte y tan rápido que creí que me daba un infarto, y la fiesta comenzó, mi culito se lo pasaban uno a uno, del mas pequeño al mas grande y yo en esa sala solo iba de un lado a otro apoyándome en los muebles, con las piernas abiertas y agachado de cabeza, en varios casos uno se sentaba en el sofá y mientras se lo mamaba el otro me lo metía por el culito, mi culito era tan feliz como yo, lo estaba disfrutando a plenitud ya que estaba temeroso de no volver a tener una experiencia así?, que fin de semana tan extraordinario Dios mio me has concedido! de aquí en adelante me le insinuaré a todo aquel que me guste y si se da algo me lo comeré sin contemplación, ya estoy pensando en regresar el próximo fin de semana, al cabo que no tengo a quien darle explicaciones de mi vida.
Esa noche experimenté otra cosa también excitante, jamas pensé que mi culito se dilatara tanto, el sobrino de Félix volvió a jugar con mi culito después que me cogieron todos, comenzó a meter sus dedos uno por uno, y luego la mano hasta la muñeca, con la mano dentro la movía hacia dentro y hacia fuera, hacia los lados, cerraba el puño y comenzaba a jalar, haciendo que mi culito se volviera un culote abierto, hasta me asusté en un momento cuando cerró el puño y empezó a jalar sentí que se me estaba desprendiendo el intestino a lo que le pedí que sacara la mano para ver lo que había pasado, afortunadamente lo único era que se había dilatado muchísimo y les aseguro que cabía fácilmente la botella de ron de un litro, y saben porque les digo esto, porque eso fue lo que intentaron hacer, y entro algo, pero me dolió mucho y no deje que lo hicieran mas, entonces llegó lo bueno, nos fuimos al cuarto y José se acostó en la cama boca arriba, yo me senté en su guevo y se me fue completísimo hasta la pata, yo empecé a subir y bajar al compás de una música que se oía fuera de la casa, José decía, así mami, así, y yo me movía mas rico, y mas rico, en eso se me puso de frente Félix y echó mis piernas hacia atrás, se ensalivo el guevo y comenzó a tratar de meterme el guevo justo al lado del de José, jamás pensé que eso se podía hasta que lo metió, por eso les dije al principio que creía que moría? pues fue así, yo decía que me estaba muriendo porque respiraba como si tuviera asma, mi corazón casi se sale de mi pecho, latía a 1000 revoluciones por minuto, era una cogida mas espectacular que las anteriores, aunque todas fueran divinas, esta tenía la particularidad de que me estaban cogiendo los tipo con los guevos mas grande de los cinco y estaban dentro de mi y yo estaba aguantando esa pela y como si fuera poco la estaba disfrutando, cuando ya estaban por acabar se salieron de mi culito mortalmente herido y ya sin ganas para nada mas llenaron mi boca de rica leche caliente, primero la de Félix y luego José, mi boca se lleno por completo y me la tragué.
los otros estaban también cogiéndose entre ellos y cuando iban acabar se fueron masturbándose hasta donde yo estaba acostado y me echaron sus leches también, así como la primera estas también me las trague, no comí mucho el fin de semana, pero como tragué leche, luego nos tomamos unos traguitos de ron, nos fuimos al patio a bañarnos todos y de verdad que no se que decirles, yo en el medio, se los juro, me sentía una perra con sus perros en celo detrás de mi, uno me agarraba, el otro, acariciaba el guevo, el otro mi culito, el otro me besaba, los tipo eran insaciables y para colmo habían despertado en mi a una perra insaciable también, tantos años aguantando estas ganas acumuladas que las quería explotar todas de una vez, bueno, así quise y así fue, un fin de semana en la playa inolvidable.
Mas tarde, después que nos vestimos estuvimos hablando de todos los detalles y aunque no lo crean mi culito me decía que no mas, pero mi mente y mi corazón si querían, me fui a la cocina y le hice una seña a Félix para que me acompañara, estando en la cocina le dije que me gustaba y que lo que me había pedido de ser su hembra el día anterior todavía estaba en pie? inmediatamente me dijo que si, y comenzamos a besarnos apasionadamente, el me decía que siempre había querido tener una pareja gay y justo yo era la persona indicada porque era tal cual la quería, blanca limpiecita, y bonita, justo en ese momento me sentí así, como una hembra, y comprendí que mi vida cambiaría de ser un hombre a una hembra, así fue que comenzó mi nueva vida, salimos, despedimos a los muchachos, el los saludó de manos y yo los besé a todos en la boca y un abrazo, se fueron y Félix y yo nos fuimos a la cama a comenzar mi luna de miel, se quedó a dormir el resto de la noche hasta las 10:00 de la mañana que despertamos, claro no sin antes haber hecho el amor como tres veces, y de verdad fue haciendo el amor, si vale! me enamoré de ese negro lindo.
Ahora nos vemos con frecuencia, hay fines de semana que yo voy a su casa en Rio Chico y otras el viene a mi apartamento aquí en Caracas, somo una pareja bien chevere, el haces sus cosas por su lado y yo con los únicos que le monto cachos es con nuestros amigos de allá.
Por ahí hay algunos que están detrás de mi, sobre todo en el gym, pero no se ha dado nada y estoy seguro que a Félix no le importaría, siempre y cuando el también esté para la fiesta!.
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