Un libro, un colega y un cubiculo. Los placeres de la salud
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola este es mi primer relato que escribo, espero y les agrade.
Este experiencia me paso hace un año, mi nombre es Omar, soy un chico muy agradable y con un buen físico, en esta experiencia se encuentra Luis, un chico muy guapo y como dirían de buen ver. Ambos compartimos la misma profesión somos trabajadores sociales, sin embargo yo soy estudiante y él trabaja en un clínica.
Bien con esta pequeña presentación inicio mi relato.
Fue una tarde que me dirigía hacia una librería a comprar un libro y materiales para la materia de psicología, llegue a la librería realice mis compras y de nueva cuenta retorne a mi casa, sin embargo en ese retorno ha casa un persona, Luis, se cursaría en mi camino, tome el metro, me siento y voy leyendo los materiales que compre.
Dentro de esta lectura que hacia sentía que me observaban, no tome mucha importancia, pero seguía sintiendo esa mira intensa, era Luis quien me miraba, él iba parado al ver su mirada sentí un cosquilleo en mí estomago, no lo podía cree dije dentro de mi:
– Será a mí quien me observa, mm no lo creo.
– Ohh creo que si me observa.
De pronto la persona que se encuentra de mí se levanta para descender del metro, es ahí donde Luis se sienta y accidentalmente mueve mi libro con sus pies:
– Hay perdón, disculpa no fue mi intención- dijo él.
– No te preocupes no pasa nada- le conteste con una vos nerviosa.
– Como no si te interrumpí tu lectura, se nota que te concentras en los libros.
Ya más relajado contesto – Si un poco, pero no te preocupes solo lo vuelvo a retomar el párrafo y listo.
Nos sonreímos, de ahí dejamos pasar dos estaciones de hablar, hasta que Luis comenta:
– Estudias Psicología
– No, estudio Trabajo Social, este libro es para la materia de psicología.
Él se ríe, yo pienso – que dije para que rieras y por lo cual dijo:
– Te ríes de mí, conmigo o por que esas risas- con una voz entre molesta y sorprendida.
– No disculpa, espero no te hallas molestado, me rio por que yo soy también Trabajador Social
– Ah mira que bien, es un gusto conocer a un colega
Y así se dio el inicio de una charla donde intercambiamos nuestros nombres, gustos por la profesión, hobbies, hablamos de todo y claro no podía faltar el intercambio de número telefónicos.
El metro llega a la estación donde bajo:
– Bueno un placer el haberte conocido yo bajo aquí.
– El placer es mio colega Omar, estamos en contacto y cualquier cosa sabes en donde encontrarme- me respondió.
– Gracias y buen día, bye.
Lo podía encontrar en la clina donde él trabaja y yo me atendía, y este me quedaba a unas cuadras de mi casa.
Pasaron dos días y recibo un mensaje en la mañana, era Luis y decía:
– Hola colega, necesito de tu ayuda aquí en el trabajo, me puedes venir a ver aquí a la clínica es urgente.
Respondo:
– Claro, como a las 2 estoy por allá.
Yo me encontraba en una práctica, llego 10 minutos antes de las dos, le envió un mensaje de que estoy afuera dela clínica, me responde que salía por mi.
Lo veo salir:
– Gracias por venir me vas ayudar mucho, vamos a mi cubículo.
– No hay de que, pues tu me dirás hacia donde voy, porque a pesar de que me atiendo aquí, no vengo muy seguido y no lo conozco muy bien solo el área de consulta externa.
– Jajajaja, anda vamos.
Llegamos a su cubículo, cierra la puerta y también una venta que daba hacia un pasillo del exterior del edificio. Es cuando intuyo que algo va ha pasar.
– Gustas algo de tomar agua, café o un refresco
– No gracias, y bueno tu dirás en que te puedo ayudar- lo menciono en tono quizá muy serio.
– Tranquilo relájate, no te estreses el que trabaja soy yo eh, jajajaja.
Se levanta toma un libro de registros que había en la parte de atrás de mí, se voltea y me da a ver el libro, pero él se pone atrás de mí rosando su cuerpo y su pija en mí, lo cual me pone un poco nervioso pero a laves excitante:
– Mira ves estos registros, no se como poderlos categorizarlos para sistematizarlos.
– Mmm ya necesitaría leerlos un poco
Se hace un silencio, leo un poco pero él no se quita y ahí empieza el gran placer:
Me acaricia el oído, me da leves soplidos por mi cuello, mi cuerpo solo responde con risas un poco nerviosas.
– Te gusta verdad
– Mm sss, ssi.
– Desde que te vi me fascinaste, me encantaste y no te puedo olvidar, tu piel, tu risa.
– Ehh estos relatos hay que verlos más detalladamente- dijo yo como para frenar un poco, pero no se pudo.
– Ven deja eso- me levanta de la silla y me planta un beso muy fuerte y duradero.
– No aquí no nos pueden ver o te pueden llamar
– Tranquilo no pasada nada, tu relájate y déjate llevar
Nos seguimos besando has que me despoja poco a poco mi filipina y mi camisa, besa mi cuello, mis labios, la piel hasta llegar a mis tetillas y las besa la succiona como si fuera un bebe que toma leche de su madre, me es tan excitante.
– Ahhhh, mmmmm
– Te gusta bebe
– Si
– Disfrútalo amor
Llega el momento en que yo lo despojo de su ropa e igual beso y sedujo su cuerpo y su piel, hasta llegar a su pija que ya esta semi dura, lo acaricio por encima del pantalón, hasta que desabrocho el mismo y se deja ver una gran pija, media y gruesa.
– Te gusta nene
– Si, se ve que esta rica
– Porque no lo compruebas
Y es así que comienzo acariciándolo primero, después comienzo dando pequeños besos, hasta que logro que se ponga por completamente dura y por fin comienzo a chupar esa pija:
– Wop, wop, wop, mmmm
– Ahh que rico amor, lo haces muy bien, sigue no pares, eres único
– Te gusta- pregunto
– Sii mucho nene
Sigo chupando y escucho gemidos de placer de parte de Luis, hasta que me levanta vuelve a besar y me quita mi pantalón y mi bóxer que traía, ahora si me encontra desnudo.
– Wow, que rico estas, que rica nalguitas traes nene
Me comienza a sobar y de pronto baja a besármelas, a comerlas como si fueran pan. Y de pronto sin decir nada me introduce un dedo en mi ano, después dos.
– Ahhhh que rico, mmmmm
– Si mi amor, te gusta
– Siii
– Disfrútalo, que serás mio, este culito será para mi amor
– Sii
Me saca los dedos y comienza a lubricar con su saliva y su lengua mi hoyito, yo solo sentía calor por mi cuerpo, excitación y a la vez miedo al saber que estábamos en un cubículo donde podían abrir o tocar en cualquier momento, claro Luis puso seguro.
– Bien relájate- me sube a su escritorio- que ahora si vas a sentir mi pija
– Anda ya no puedo más, la quiero ya dentro de mi
– Hay te va
– Despacio que me duela
– Tranquilo relájate, ahhh
– Ahhh mmmmm
Así fue introduciendo su pija hasta meter toda y comienza el mete y saca, primero despacio y poco a poco lo aceleraba.
– Ahhhhh ahhhh
– Ahhhhhh
– Te gusta- me pregunta
– Siiii, me encanta y tu me encantas
– Tu a mí me encantas más, sabia que eras para mi
– Ahhhh
– Ahhh
Así fue pasando el tiempo entre el mete y saca de su pija y los dos gozando del placer carnal, hasta que se viene dentro de mi ano.
– Ahh que rico
– Ahhh
– Ahhh
Terminamos agotados arriba del escritorio, descansamos un poco, nos separamos.
Nos vestimos y limpiamos un poco el desorden que hicimos y aromatizamos un poco por el olor del sudor que se expiro de nuestros poros.
Terminaos, abrió la ventana, de pronto tocan la puerta y yo tome el libro y simule leerlo.
Termina de charlar y cierran la puerta
– Te gusta bebe
– Si, aunque tuve miedo de que llegara alguien
– No pasa nada por aquí nadie pasa
Y así nos despedimos con un beso
Sé que fue un poco largo, pero tenia que contextualizar la mayor parte de la historia. Espero le halla agradado, y si se preguntan que paso después de esta primer encuentro, les respondo que tuvimos otros dos mas pero ahora su oficina estaba enfrente de la sala de espera de consulta externa el riesgo aumento, pero esa es otra historia.
Saludos
Omar
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