Un mundo muy pequeño 9 las 8 rebanadas de pizza
y con él somos la pizza entera.
Yo me quedé con la mirada perdida, viendo hacia la persona que me había dado un zapazo en la cara, creo que hasta la lagrimita se me salía de la cara, me puse de pie, y al verlo cómo había crecido, me entró más el sentimiento, esa persona, ahora me llegaba hasta la quijada, ambos reaccionamos y de un segundo para otro, él se lanzó hacia mi dándome un súper abrazo, como él último que le di hace 4 años, él también chorreaba sus lagrimitas, y yo se las sequé, me dijo que cómo estaba, y yo le respondí, bien, muy bien, Elías.
Ambos nos dimos un gran abrazo, como si hubiera sido ayer el último que le di, era todo un caso ese chico, se había puesto más nalgón, tenía su corte de cabello del típico niño adolescente y venía muy guapo vestido con su pantalón y su playera talla más grande para su edad, hablando de ropas, le dije que su ropa interior aun la conservaba en mis cajones, y que cuando no tenía con quien coger, las usaba para sacar el morbo que llevaba adentro, Elías quedó impresionado de que aun practicábamos el acto sexual el equipo y yo, me dijo que en todos estos años no logró conseguir nada y que solo e metía plumones por su culito, bueno creo que comenzamos muy cachondos al comenzar a hablar de cosas calientes, ya fue que para ocultar mi erección decidí preguntarle que donde vivía ahora y sus padres que hacían, donde estudiaba ahora.
El nene y yo nos sentamos en las sillas para proseguir con nuestras charlas, me contaba que ahora vivía como a unas 4 o 5 calles del parque, a veces lo frecuentaba para ofrecer su culo pero nadie aceptaba y terminaba jugando con niños de su edad, luego me dijo que sus padres trabajaban otra vez en la empresa donde laboraban hace 4 años, que solo duraron 3 en la otra ciudad porque la empresa había quebrado, bueno hace un año regresaron y trataron de alquilar en el mismo edificio donde estábamos antes, pero por lo caro que estaba ahora decidieron irse a otro lado, el horario de sus padre era el mismo, día completo como decíamos antes, charlábamos y charlábamos, la erección ya se me había ido, me contaba que salió muy bien en su promedio en la primaria, estaba estudiando en una secundaria igual, por su casa, bueno saliéndome del tema tenía ahora a 3 niños de 12 años, Pepe, Martín y Elías, uno De 13 que era Milán, uno de 14 que era Tony, su primo Gael de 16, a mi Iván de 22 años y por último yo de 27, me comentaba el chisme de que los papás de Elías irían a una fiesta este fin y que lo dejarían solo, no pues que mejor oportunidad para invitarlo a una orgía.
Llegaron el resto del equipo sudados del futbol, y cuando reconocieron que con quien hablaba era el mismísimo Elías, todos fueron a abrazarlo en bolita, fue un momento muy hermoso de recordar, Martín por no poder ver no le hizo nada, a parte que no lo conocía todavía, todos nos sentamos en la mesa, y para terminar la visita, me levanté, fui al puesto de pizza, y que si nos podían llevar una a la mesita del fondo, bueno quedo listo y me fui a sentar con la banda, ya Elías estaba contándoles lo que me contó a mi a la banda, cada quien le hacía su pregunta a Elías y él nos respondía y viceversa, nos trajeron nuestra pizza, y ahora sí nos tocó una a cada uno, significaba que el equipo, ya estaba completo, Elías fue quien primero terminó, al parecer no había comido todavía, con la pizza aguantaría para la cena, pues ya estaba invitado a la orgía, los otros nenes pidieron permiso a sus familias para quedarse a dormir, obvio que aceptaron sin problemas, pero tenían que ir a sus casas por sus ropas porque no tenían cambio para mañana.
Este era el plan, Los primos se irían juntos en el transporte a sus casas, Milán iría con nosotros y pasaría a su casa, y el resto los esperaríamos en mi casa, salimos dispersos todos cada quien tomando su camino, Yo me llevé cargando a Martín junto con Iván para avanzar más rápido, Pepe y Elías se iban secreteando a lo lejos, pues antes eran los mejores amigos esos dos pillos, Milán iba hablándose con Martín y riéndose un poco por la forma en que lo cargábamos Iván y yo, hace 4 años era liviano pero ahora, saz, ya nos cansábamos de cargar a mi hijo Martín pero traíamos prisa, nos subimos al taxi todos, no se como entramos los 6 más el conductor.
Llegamos a la casa, Milán e fue a la suya, y entramos y nos sentamos todos en la sala, pronto, al fin los 8 estaríamos juntos para unirnos en amor, Pepe y Elías se estaban agarrando su penes por encima del pantalón, y se decían ambos lo guapo que se habían puesto uno y el otro, Martín tenía ambas manos tocando las vergas de Iván y mía, estábamos calentando nuestra actividad sexual, aquellos 2 tortolitos se hablaban en voz baja pero aun asi se escuchaba todo lo que decían, vos estos dos ya quieren ser novio, decíamos Iván y yo, jajaja los nenes se reían nada más, llegó Milán con sus cosas y todo dimos un brinco porque penamos que era alguien más, pensándolo mejor lo mandé a poner llave a la puerta y cuando regresó me pidió que si podía estar con Martín, bueno pues Iván ya deducíamos que teníamos una segunda parejita de novios los dobleM, mis niños especiales , y por aparte los mejores amigos que tarde o temprano terminarán siendo novios.
Cada parejita se decía sus secretitos, que ni para disimular eran buenos, Iván y yo escuchábamos perfectamente, ya las dos parejitas se agarraban a besos, muy amorosos ellos, Elías no perdió el toque sexual, seguía siendo el mismo morrito caliente de hace 4 años, se agarraban a buenos besos él y pepe mientras que Milán y Martín se besaban un poco torpe, bueno ellos 2 eran los más novatos del grupo, claro que ya tenían su experiencia pero todavía les faltaba entrenamiento, ya se estaban despojando todos de sus prendas cuando lo primos llamaron a la puerta, ya estábamos todos para nuestro momento, para ese momento recibía mensajes de mi amigo europeo pero lo pue en silencio para no interrumpir nuestro momento, ya cuando todos estábamos completamente desnudos nos pusimos todos en el suelo, y como típica orgía nos agarrábamos entre todos a besos, claro que con cambios, Elías quiso probar todos los labios hasta el de Martín que cuando lo besó pues no lo hizo nada mal, si le caía bien mi nuevo hijo a Elías, en el fondo decía, estos cuñados se van a llevar muy bien, llegó Elías y Pepe y quería que nos lo cogiéramos Iván y yo a lo cual aceptamos sin duda, nos lo llevamos a nuestro privadito que era nuestra cama, y ambos con la pierna abierta estaban dispuesto a ser penetrados, yo deje a lo hermano darse amor y yo me fui con Elías, Elías cambio de posición arrodillándose en la cama para hacerme un rico sexo oral.
Ese niño no había perdido la habilidad de mamar y me excitaba tener su boquita de nuevo succionando mi verga, me agachaba sin que me dejara de chupar y le alcanzaba a decir que ya extrañaba tenerlo solo para mi, a lo que Elías se calentó mucho y se puso en la cama para hacer un misionero, solamente lo penetré y le volví a reabrir ese culito que tenía 4 años sin ser utilizado, yo me sentí en la gloria ese culito era lo que necesitaba para eyacular más de lo normal, escuchaba a los hermano dándose amor pero yo me concentraba más en Elías, aceleraba más las embestidas, y observaba como mi verga entraba y salía por completo de su agujerito anal, pasaron 10 minutos besando a Elías y penetrándolo, gritaba un poco pero me lo debía por el golpazo que me dio, y e tuvo que aguantar un rato pero ya después me pedía que le diera más duro, eyaculé en lo más profundo del culito de Elías y cuando chorreaba el semen parecía interminable, ese morrito me hizo acabar pero bien sabroso, al terminar se fue a la sala con dificultad para caminar, creo que perdió la costumbre de caminar después de ser cogido, algo que solucionaría muy pronto.
Iván igual se vino dentro de su hermano y aun así lo seguía penetrando quería cogérselo más tiempo, Elías y yo dejamos a los hermano disfrutando y salimos a la sala cuando vimos Milán estaba penetrando a Martín, una escena muy rica de ver, solo observábamos como espectadores mientras que ellos dos hacían sus asuntos carnales, ambos se decían lo mucho que se querían, ya habían caido estos dos nene en el amor, pero sus culito siempre serían mios, al cabo de un rato todos terminamos nuestra relación sexual y decidimos que para quitarnos el sudor nos metimos a bañar los 8 juntos, era pura jugadera con el agua, nos divertimos mucho con ella.
En la tarde nos quedamos desnudos distrayéndonos haciendo otras cosas, y también platicábamos de cosas, ya a la supuesta hora de dormir nos agarramos a orgía de nuevo, pero esta vez si todos con todos y nadie con su parejita, esa si fue la mejor noche para mi, ni dormimos por estar en lo nuestro, y digo que no dormimos porque nada más amaneció y nos pusimos a hacer otra cosa, la orgia se lo dejo a su imaginación y ustedes interpretan como fue que ocurrió.
Desde ese momento nos reuníamos más seguido hasta entre semana, y no agarrábamos a sexo entre todos, Elías venía desde su casa hasta la mia, yo le daba para su pasaje para que no gastara nada y pudiera ser parte de la orgía también, esos días fueron los mejores para mi ya que nuestros lazos, se unían cada vez más.
Que gran relato y sobre todo que padre que se reencontraron con Elías
Me encantó!! Por favor relata cuando las dos parejitas se hicieron novios!! Fue muy tierna esa parte.
Saludos.