Un señor y mi despertar a los 8 años.
Mi despertar sexual inició a muy temprana edad y fue hermoso. .
Saludos lectores, lo que les voy a contar sucedió cuando tenía solo 8 años, sin embargo les contare un poco sobre mi primera experiencia sexual.
Soy hijo único, mi papá es el típico padre de familia y mi mamá es ama de casa. Vivíamos en una casa en un terreno muy grande, mis 2 tíos y mis abuelos tenían casas justo al lado de la nuestra. Mi abuelo era granjero, tenía ganado, gallinas y sembraba maíz. El terreno era enorme, ocupado mayoritariamente por los campos de maíz. Este crece únicamente durante la época de lluvia y dura varios meses.Esto es importante para el resto de la historia.
Tenía yo 6 años (mis recuerdos de esta parte son un poco borrosos por lo que no voy a entrar en mucho detalles), cuando mi prima (Andrea), que en ese entonces tenía 12 años, me decía que ella tenía un escondite secreto y que me lo quería enseñar. Me llevó a una parte de la granja bastante alejada de las casas donde había un tipo de bodega pequeña con herramientas de la granja. Detrás de esta había unos arbustos grandes y en medio de ellos estaba el escondite.
Cuando llegamos ella me hizo un montón de preguntas sobre mi cuerpo, especialmente sobre mi pene, yo claramente no sabía nada, tampoco sabía que ella no tenía uno. Entonces ella me dijo que me quitara la ropa y que ella haría lo mismo. Yo quedé sorprendido y le pregunté que porqué «la pipí» de ella era tan pequeña, me explicó que era una vagina y que eso era lo que tenían las mujeres. Después recuerdo que me tocó el pene y se me puso duro, no sabía lo que pasaba, bendita inocencia.
Mi prima y yo continuamos con esos encuentros por varias semanas, hacia el final ella me pedía que le lamiera la vagina, jugaba con mi pene y hasta me lo chupaba. Un día, su mamá nos encontró, nos gritó, le pegó, estaba histérica, pero yo no sabía lo que pasaba, estaba muy asustado y confundido. Ella nunca le dijo a nadie pues ni mis padres ni mis abuelos me hablaron del tema. Ahí se terminó mi primera experiencia sexual con mi prima.
Sin embargo ya el daño estaba hecho, ese día me sentí demasiado excitado de que nos encontrara mi tía, no sabía porqué. A las semanas, cuando la cosecha de maíz comenzó a crecer, me iba por las tardes al campo de maíz y me desnudaba por completo, corría entre las plantas con mucho cuidado por si alguien hacía algún recorrido. Esto me fascinaba, no sabía lo que era la masturbación por lo que siempre estaba a mil sin liberar toda esa excitación. Un día, mi abuela, que en ese entonces tenía 50 años, hizo un recorrido y casi me descubre, la adrenalina por las nubes. Ese día ella se detuvo a hablar con el vecino. El tenía una propiedad aún mas grande que la de mi abuelo, tenía ganado y un montón de perros. Él tenía 60 y algo de años.
Todo este tiempo que anduve corriendo desnudo nunca contemplé la posibilidad de que el vecino me viera, ya que hay un tipo de división con alambre de púas y muchas plantas entre ambas propiedades. Cuando tenía 8 años ya era mi pasatiempo desnudarme en los campos de maíz, amaba particularmente los días de lluvia, eso me excitaba aún más. Uno de estos días, mientras me escondía desnudo escuche que mi vecino estaba cerca, me arrimé para ver que hacía y mi sorpresa no pudo ser mayor, el señor estaba completamente desnudo con una mujer mucho menor que él podía tener unos 20-25 años, ambos se estaban vistiendo, por lo que me dejó perplejo fue ver su pene erecto, quedé maravillado. Debo aclarar que soy bisexual pero en aquél entonces yo no sabía la diferencia entre homo, hetero, bi, etc. Para mi solo era excitante y punto.
Todos los días iba hacia donde mi vecino para ver si podía presenciar nuevamente y con mas detalle el espectáculo pero no tuve suerte, bueno, hoy no lo veo de esa forma. Resulta que uno de esos días, mientras espiaba escuché a mi abuela con mi abuelo, estaba acorralado, mi única escapatoria era hacia la propiedad de mi vecino, me escabullí entre los alambres de púas y me escondí entre las plantas. Esperé como 10 minutos hasta que ya no los escuché mas, entonces sentí el mas terrible de los escalofríos, mi vecino estaba justo detrás mío, quedé en shock, no me podía mover, decir nada, solo me quedé ahí petrificado.
El señor me pregunta que si estoy bien, yo no respondo, me pregunta de nuevo y que si me pasó algo. Yo solo pude decir no con la cabeza. Él intentó tranquilizarme, me puso la mano en la cabeza y me dijo que estaba bien, que no pasaba nada. Entonces el señor se percató de que yo estaba completamente erecto y me preguntó si me estaba masturbando, yo no sabía lo que era eso y le dije que no, entonces el dijo algo que me cambió los ánimos por completo. Me dijo: Es que veo que tienes tu hermoso pene completamente erecto, pensé que estabas masturbando como las otras veces. Yo le pregunté que cuáles otras veces? Entonces me dijo que me ha visto desnudo un montón de veces en los campos de maíz, desde hace ya dos años y que pensó que lo hacía para masturbarme. Esto me lo cambió todo, me había estado espiando todo este tiempo, la lujuria se apoderó de mi.
Le dije que no sabía que era la masturbación y que no sabía que me estaba espiando. El señor se rió mucho, me dijo que yo quería el me podía enseñar lo que era la masturbación. En este punto yo estaba harto de la palabra, solo quería saber lo que era de una buena vez. Entonces sacó su pene y comenzó a masturbarse frente a mí, cuando eyaculó un poco cayó en mi brazo, de inmediato me dijo lo que era y para que servía, el muy cabrón hasta me dijo que se podía comer.
Ese día solo fue eso, me dijo que me fuera antes de que me vinieran a buscar pero me dijo que si iba el día siguiente a la mismo hora me podía enseñar mas sobre mi cuerpo. Al día siguiente no sabía si ir o no, la excitación me decía que sí pero la razón me decía que podía estar en peligro, no sabía que hacer. Estando cerca de la hora mi mamá me dice que se tiene que ir porque mi otra abuela estaba muy enferma, me dió la opción de ir con ella o quedarme con mis abuelos, ahí lo decidí, me iba a quedar con mis «abuelos». A eso de las 3 de la tarde llegué donde el señor, llovía un poco, él no aparecía, esperé como 20 minutos, se me hizo una eternidad. Entonces por fin lo vi venir. Traía con él unos paños, me sonrió y me dijo: que dicha que viniste, pensé que no lo harías. Yo nada mas sonreí y le pregunte que para qué eran los paños.
Comenzó a llover mas fuerte entonces nos fuimos hacía un pequeño cobertizo donde él guardaba comida para el ganado entre otras cosas. Ahí me sentó y me dijo, esto nunca se me olvidará, lo recuerdo como si fuera ayer: Mira, lo que vamos a hacer depende 100% de ti, no te voy a obligar a hacer nada, en el momento que te quieras tener me lo dices, vale? Esto me hizo sentir mucho mejor inmediatamente. El se quitó toda la ropa y me dijo que hiciera lo mismo. Comenzó a tocar su pene y me dijo, chúpalo, con mucho cuidado de no usar los dientes. Yo ni lento ni perezoso lo puse en mi boca, no sabía lo que hacía, solo sabía que me gustaba un montón, el señor me iba dando instrucciones, yo solo acataba.
Después me dijo que me acostara sobre una tabla tipo mesa y me comenzó a chupar él a mi, fue glorioso, mil veces mejor de lo que mi prima me hacía, lengua por todas partes y saliva a chorros, nunca olvidaré esa primera mamada. Después comenzó a jugar con mi ano, ahí me notó incomodo entonces paró y me preguntó que estaba bien, le dije que sí pero que no sabía que estaba haciendo con mi culito. Entonces me dijo que teníamos que ir entrenando mi culito, que iba a tardar tiempo pero que me iba a encantar, yo boca arriba con mis piernas recogidas hacia el pecho y el primero me chupaba mi culito y después comenzaba a meterme un dedo, al principio dolió un poco pero después se sintió rico, especialmente al rededor del ano. Al final de la sesión me dijo que se la chupara de nuevo y que esta vez el me iba a tirar su leche en mi boca, así hizo, era demasiado semen, casi me ahogo, tragué un poco pero no todo, lo tenía por todas partes. Entonces me limpió con los paños y nos despedimos.
Este tipo de encuentros continuaron así por varias semanas, siempre me decía que tenía que ser muy cauteloso, que no le podía decir a nadie lo que hacíamos porque a él lo meterían a la cárcel y ya no podríamos jugar más. Yo le conté lo que pasó con mi prima y mi tía, y él me explicó que lo que hacíamos no es bien visto por todos los adultos, que no lo entenderían pero que él no era así, que a él todo eso le parecía hermoso. Al tiempo yo tragaba y chupaba pene como un profesional, al menos así me sentía. Amaba por sobre todas las cosas sentir su glande en mi boca, la textura, el sabor, el tamaño, era todo perfecto.
Entonces un día me dijo, creo que ya estás listo, sacó un condón, me explicó lo que iba a hacer, yo me puse muy nervioso, el me dijo que si me dolía que paraba. Entonces me puso de cuatro patas, cabeza abajo, brazos hacia el frente y el culo arriba. Comenzó lento, metía un poco su glande y lo sacaba como para ir tanteando. No me dolía, sentí un pequeño ardor pero fue leve y rápido, yo sentía como el pene entraba cada vez más y mas y como me recorría mi interior. El señor me acariciaba las nalgas y me preguntaba constantemente que como estaba, yo le contestaba que de maravilla, que siguiera, entonces me dijo, ya entró toda, eres todo un campeón, ahora la voy a sacar y meter nuevamente cada vez más rápido. Yo ya no sentí mas ardor, solo sentía su hermoso pene recorriendo mis entrañas, fue maravilloso. Cuando terminó me preguntó si me había gustado, yo solo le sonreí y lo abracé.
Después de la primera penetración todo fue cambiando rápido, ya no solo teníamos sexo sino que también hacíamos cosas nuevas, él me amarraba las manos, me ponía antifaces y cosas de ese tipo. Entonces un día me dijo, te gustaría hacer todo esto con otra persona más? Yo le pregunté, alguien que no sea usted? se rió y me dijo, no, conmigo y alguien mas, tengo un amigo al que le encantaría unirse a nuestros juegos. Yo no estaba muy seguro pero le dije que sí.
Entonces un día que mis padres no estaban me vi con el señor y su amigo. El amigo era mas viejo, o al menos así se veía pero tenía mucha mejor condición física, tenía los músculos mas definidos y una barba larga y blanca. El señor primero hizo una introducción de su amigo, quién era, que hacía y donde se conocían como para ir entrando mas en confianza. Después de un rato a lo que vinimos, ambos se desnudaron, les seguí yo. El amigo (Rafa) tenía el pene mas largo pero un poco mas delgado y con cierta curvatura hacia un lado, me pareció muy raro al principio.
Primero comencé a chuparse la al señor pero rápidamente Rafa me tomó de la cabeza y me jaló hacia su pena, él hizo algo que el señor nunca hizo, intentó meter todo su pene en mi boca, casi me ahogo pero me gustó sentir su pene en mi garganta. Después de chupar ambos penes por un rato me pusieron de cuatro patas, Rafa en mi culito y el señor en mi boca. Ahí a mis 8, casi 9 años, era la perra sumisa de dos señores de mas de 60 años, fueron los mejores años de mi vida. Con el tiempo serían mas de 2 señores a la vez y no solo serían señores, también terminó involucrada la hija mayor del señor pero esa es una historia para otro día.
Espero les haya gustado, se que no hay forma de que crean que esta fue una historia real, me crean o no, eso nunca cambiará lo que pasó en mi infancia ni borrará esos maravillosos recuerdos, gracias por leer.
Qué bonitos recuerdos. Qué padre que te hayan estrenado con calma, de forma que tú también lo fueras disfrutando.
Gracias, lo disfruté demasiado, el señor fue muy gentil y cauteloso. Después voy a contar mas anécdotas con él y con Rafa.
Espectacular tu relato de inicio amigo.
Muchas gracias, esta semana escribiré mas sobre mis experiencias con el señor y con Rafa.