Un vergon en los baños de vapor

Los demás en el sauna estaban viendo como nos tocabamos, y ellos hacían lo mismo. Mientras yo se la chupaba, el aprovechaba para meter su mano entre mi toalla. .
Desde que tenía 12 años he sido muy calenturiento, veía porno gay, leía relatos eroticos, entraba a aplicaciones de citas e investigaba sobre lugares de encuentro, aunque nunca llegue a hacer nada. Eso hasta que encontre a un chico en Grindr cuando tenía 18, para mi era difícil encontrar alguien que no conociera en el pueblo, aunque esa es otra historia.

La cosa empieza cuando me tuve que mudar a Guadalajara, porque iba a entrar a la universidad, yo ya sabía que en la ciudad había más ambiente que en otros lugares, por lo que me pasaba mis días usando Grindr y cualquier app, también por primera vez empecé a explorar lugares de encuentro.

El cruising me excitaba mucho, aunque, de entre todos los lugares, había uno me gustaba mas y eran los baños, vapores, saunas. Lugares donde los hombres se iban a bañar entre más machos, envueltos la mayor parte del tiempo por toallas, dónde se daban miradas discretas en las duchas, pero que en ciertos rincones desataban su calentura, se tocaban y cogían a más no poder.

Pues siempre tuve fantasías con los baños de vapor, y ya he estado varias veces en ellos, tengo muchas experiencias. Pero por ahora quiero contar una de ellas de no hace mucho, cuando tenía 21 decidí ir a un vapor famoso de Guadalajara, el Riilax, bastante visitado por chicos de mi edad.

Yo no diría que tengo el mejor físico, pero me defiendo atrayendo a los hombres con mi culo, mido 1.75, piel blanca, solo con un poco de pancita ya que no me ejército como me gustaría.

Llegué al lugar ya preparado, habiéndome hecho un lavado en casa. Había ido temprano en sábado aprovechando que aun no hay mucha gente. El lugar consiste en unos lockers (o en cambio también pueden elegir unos cuartitos privados para dejar cosas y «descansar») tiene un sauna de madera más tradicional y un cuarto de vapor que se divide en tres partes, un jacuzzi y una terraza. Deje mis cosas en mi locker y pase a las duchas, aún no había mucha gente, así que disfrute de las instalaciones, mientras tanto, miraba a los hombres que había.

Ya habiendo pasado 1 hora, ya estando un poco más concurrido el lugar decidí entrar al sauna. Ya había algunos hombres allí, aunque solo estaban sentados, por lo que decidí irme al fondo el sauna. No es muy grande pero la única luz es la de la puerta, haciendo que el lugar este oscuro, por lo que no había visto antes al hombre al lado de donde me senté. Después de que mi vista se adaptara a la oscuridad, con miradas discretas pude notar qué tendría que tener 24 o 28 años, era un hombre guapo, fornido, blanco, sin mucho vello y con el sudor bajando por su cuerpo hacia que mi culo lo deseara.

Me atrapó mirándolo y también me empezó a comer con la mirada, eso me empezó a prender, e hizo señas para que me acercara más a el, y así lo hice. Estire mi mano y saque su verga de la toalla, el procedió a quitársela.

Aún estaba dormida, se sentía muy bien así que la empecé a sobar, cada vez iba creciendo más y más, quedé encantado con aquel monstruo, una buena barra de carne de 20-22 cm, y lo que más me encantaba, es que era super gruesa. Tenía una punta más chica en comparación con el resto, pero el tronco se iba ensanchando yendo hacia la base del pene, como me encanta mamar ese tipo de vergas. La tome y empecé a meterla a mi boca, disfrutaba cada centímetro que entraba, y al parecer el también porque escuchaba los gemidos que salían de su boca.

Los demás en el sauna estaban viendo como nos tocabamos, y ellos hacían lo mismo. Mientras yo se la chupaba, el aprovechaba para meter su mano entre mi toalla. Empezó a jugar con mi culo hasta que metió sus dedos, primero uno y luego dos, hasta meter tres. Movía sus dedos en mi culo hasta dejarlo dilatado.

Mientras sus dedos estaban en mi culo, mi boca disfrutaba de su verga, metía con dificultad ese trozo de carne hasta mi garganta. En mi calentura tuve un momento de lucidez, me dí cuenta que me iba a querer meter todo eso al culo, ahí mismo, lo cual me calentaba y me moría de ganas, pero también me entró miedo. Era una verga muy grande, gruesa, me iba a destrozar y ni siquiera tenía lubricante allí.

Pero no me importo, el me levanto y me pido que me sentará en su verga, usualmente uso condón, pero estaba demasiado caliente, así que obedecí.

El sauna tiene dos escalones de asientos. Estábamos en los de arriba, así que parado llegaba fácilmente al techo, donde me apoye mientras me sentaba en su verga, con miedo y calentura. La empecé a meter poco a poco, y me dolía, mientras bajaba podía sentir como cada centímetro me iba abriendo el culo, ardía, me dolía, pero me gustaba.

Hubo un momento en el que me tuve que detener, me dolía mucho y el entendio. De nuevo, empezó a jugar un poco más con mi culo. Mientras, yo me di cuenta como los demás del cuarto nos estaban viendo, estaban fajando, masturbándose y me estaba gustando que me vieran así.

Ya con mi culo más abierto, el chico volvió a meter su verga, la cual entro más facil y sentí más placer, mientras me la hundía, también me abrazaba y besaba mi espalda, hasta que entró toda, hasta sentir sus huevos.

Tuve un momento de calma, para poder disfrutar la sensación de esa verga dentro mío, con el calor y las miradas de los demás.

Entonces me pido que me empezará a mover, empecé a darle sentones, poco a poco hasta ir más rápido, el también se movía, para ensartarme más esa gran verga, la cual podía sentir como abría mi culo con sus embestidas. Durante todo esto, pude ver cómo empezó a usar poppers, que me ofreció, pero me negué. Después de eso, se puso como toro, sus embestidas se intensificaron. Su verga masajeaba mi prostrata llevándome al cielo.

Estaba haciendo mucho calor, la posición era un poco incómoda, así que nos detuvimos, me dijo que iría a tomarse una ducha. Salió y pensé que sería todo con el, lo cual me había decepcionado pero también tenía calor, así que decidí salir. Al levantarme note como todos me veían, seguramente por el show que les había dado.

Ahora decidí entrar al vapor, como mencioné, está divido en tres partes, en la del medio no pasa mucho, pero los de los lados es donde más acción ocurre y más a la izquierda. No había tanto vapor, así quedecidí ir directamente al cuarto de la izquierda para ver que encontraba.

Durante el tiempo en el que estuve en el sauna, había llegado más gente. Estuve un rato viendo y dejándome me tocar, pero nada me convencía. Hasta que ví a un vato con gorra que media más que yo, 1.80 probablemente, era más delgado, tenía un muy buen físico. Se me quedó viendo, probablemente porque era de los más jóvenes en ese momento.

Se me acercó, y cuando lo tuve enfrente, empecé a tocar su verga, era de buen tamaño, aunque no como la que había tenido dentro hace poco, la cual mi culo extrañaba. Después de un rato el chico con gorra empezó a fajar con otro y solamente me quede viendo, dejándome caliente.

Pero en ese momento llegó el tipo con el que estaba en el sauna, al verme fue inmediatamente conmigo, al parecer me estaba buscando. Al estar enfrente de mi, me puso nuevamente a mamar verga, como me encantaba ese ancho tronco, al parecer los dos no extrañabamos.

Me puso de espaldas a el y me la empezó a meter de nuevo, con más facilidad y más velocidad, me excitaba sentir el choque de su pelvis contra mi culo.

Sus ruidosas embestidas llamaron la atención del chico con gorra, con el que había estado antes, veía al vato que me está destrozado el culo. Lo había empezado a ver desde que le estaba mamando la verga, le gustó, se le acercó y lo empezó tocar, aunque me seguía cogiendo.

Hubo un momento en el que nos detuvimos, a lo que el tipo de gorra aprovecho y tomó su verga. El no lo apartó, parecía que le gustaba la atención de varios. Así que el chico se arrodilló y se la empezó a mamar. Mientras yo solo los veía.

No les voy a mentir, si estaba celoso. Me habian quitado a mi macho pero la situación me calentaba mucho. Así aproveché y empecé a tocar a los dos y besar a mi macho.

En eso, el tipo de gorra se volteo y le dió el culo. El sin pensar se la empezó a meter, aunque le dolió mucho, tal vez más que a mi. Porque tardo más en empezar a embestirlo. No pasó mucho en lo que mi hombre se salió, nomás lo miro y el chico de gorra de se fue.

El aún con la verga parada como un mástil me miró, me dijo que me volteara. La verdad, si, es riesgoso coger sin condón, más con un wey que acaba de coger con otro, pero en este día, este hombre me tenía como su puta.

Me volvió a coger, mientras el seguia usando poppers, la embestidas fueron más fuertes, más en comparación con el otro tipo. Mientras me cogía me decía: «me encanta tu culo», al parecer le estaba gustando mucho poseerme, tanto como a mi su verga.

Al después de otro rato se sobre calento y salimos a descansar. Nuevamente pensé que acabaría allí. Me fui al sauna después de un rato, al entrar estaba lleno.

Estuve sentado descansando, un rato después ví como se abrió la puerta. Allí estaba nuevamente, ese hombre vergon, entrando al sauna. Al verme, me tomo de la mano, me levanto y me jalo, sacándome de ahí.

Me llevo como un niño de nuevo al vapor. Me volvió a coger, rapido, fuerte, mientras me volteaba para besarnos y me escupía. Mi culo ya estaba abierto totalmente, para encajar en su verga.

Así volvió a pasar dos veces mas. Descansabamos, me volvía a buscar, me tomaba de la mano, indicándome el camino hacia el vapor, dónde podía cogerme. Hasta que en la última, con su cuerpo sobre mi espalda y su respiración en mi oreja, termino empujándome toda su verga, sentí un líquido caliente entrando en mi. Me dejo toda su leche dentro, de todas las veces que habíamos cogido, está era la primera en la que se vino y yo también. Fue un gran orgasmo. Me vine un montón y también el, por toda la leche que sentía en mi culo.

Nos despedimos, estábamos agotados. (y mi culo estaba destrozado por su verga) Nos fuimos a las duchas y a descansar. Ya me tuve que ir, así que ya no lo pude ver, pero ojalá haberle pedido su numero, me gustaría sentir su verga otra vez.

Esta, es una de las varias experiencias que me han pasado. Recomiendo mucho ir a estos lugares. La calentura, mezclado con el calor del lugar, hacen un sitio perfecto para el desahogo de los hombres. Eso sí, recomiendo utilizar condón. Puede llegar a ser un lugar idóneo para las ETS, no estén tan pendejos como yo.

Esta es mi primera vez escribiendo un relato, por lo que, probablemente, tenga muchos errores de redacción y ortografía. Espero poder mejorar en esto. Así que díganme si les gustaría que cuente otro.