Una mega culiada en un baño de la Universidad del Zulia.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por mcbomeetvers.
Ya me he presentado antes, me llamo Miguel tengo 23 años mido 1’70 moreno claro peso unos 67kg mi cabello es negro y largo, mis ojos café, piernas gruesas, cejas pobladas y realmente no me siento feo.
Hoy les contaré lo que me pasó con Javier, un muchacho que no es nada del otro mundo (el mide como 1’67 es muy delgado su cara es cuadrada –creo que es lo más lindo de él- ojos claros, de labios gruesos, cabello castaño, piel blanca sin embargo no es alguien que llame la atención) pero fue una experiencia muy rica.
Todo pasó un martes, había recientemente comenzado el semestre en la Universidad del Zulia donde estudio Idiomas Modernos y los martes tenía solo una clase pero ya habían pasado unas dos semanas y yo aun no asistía a la primera clase, esta semana tenía que hacerlo o realmente me quedaría la materia.
Me fui a la facultad de Humanidades como a la una de la tarde aun cuando la clase era a las 2:10 (quería estar más temprano porque la página web no me decía en que salón era la clase).
Ya estando en la facultad decidí entrar al baño del bloque f (allí siempre hay personas y por lo menos un pene vería que es lo que casi siempre logro) y bueno entré a uno de los cubículos creo que no había nadie así que me quede esperando, pasaron como dos minutos y escuche que entro alguien y decidí salir y Javier estaba en los urinarios (aun no sabía su nombre) lo miré y si estaba orinando pero aun así lo mire jeje.
Pasé a la otra parte donde se deja ver el espejo pero aun se ven los urinarios y note comenzaba a tener una erección y que ya no estaba orinando y seguía con su pene afuera, se veía grueso y era blanco como el resto de su piel, me acerque y su pene creció mucho mas, ahora veía que era realmente grueso, con una cabeza muy grande rosada y mientras más se acercaba a la base iba creciendo en grosor, me puse a su lado, me miro y solo con eso se habló todo.
El salió y espere un poco y salí también, comenzamos a hablar, nos presentamos, el de verdad es muy conversador, me dijo que estudiaba Ciencias Sociales… En fin yo solo miraba su bulto y el claro lo notaba así que me comenzó a contar que era bi pero que realmente ningún hombre se había dejado penetrar por él y que además ningún hombre o mujer se había metido su guebo por completo en la boca y que eso le gustaría, yo le dije que no había probado conmigo, el solo rió y me dijo tu si podrás (ya sabía más o menos que tan grande era aunque se veía que en el baño no llegó a su máximo) yo le dije bueno no te aseguro que pueda pero al menos lo intentaré jejeje ambos seguíamos riendo.
Ya había pasado algo de tiempo y miré la hora.
Ya era hora de mi clase y obviamente le dije coño necesito ir a clase, el respondió está bien pero sé que no quieres ir porque quieres estar conmigo o no es así.
Me molestaba que se sintiera tan importante pero realmente después de ver aquel pene quería llegar más lejos así que le dije que tenía razón.
Entonces me pidió ir al departamento de orientación porque necesitaba preguntar por una profesora, ese departamento queda cerca de un estudio de radio o tv que está en la facultad y hay que subir bastantes escaleras por lo que no mucha gente llega hasta allá.
Vimos que estaba cerrado el departamento y me pidió que esperáramos hasta que abrieran, todo estaba solo y nos sentamos en un lugar que permite “esconderse” un poco.
Cuando estábamos sentados comenzó a tocar ese jugoso bulto x encima del jean, se veía enorme y yo con demasiadas ganas de mamárselo de una vez y el solo se tocaba y me veía pero realmente me daba muchos nervios que alguien nos viera allí.
En eso con su pene que parecía que le reventaría el jean me dijo que acercara mi boca por lo menos sobre el pantalón eso me excito y mire a los lados y comencé a hacerlo, veía donde se marcaba aquella cabezota que había visto ya un rato antes.
Se veía que lo disfrutaba demasiado y yo también pero estaba muy nervioso, en eso él se desabrocha el botón, metió su mano y lucho un poco para poder asomar ese animal que ya estaba muy grande.
Yo solamente le decía que no lo hiciera que alguien podía subir, pudo acomodarlo y podía taparlo con su franela.
Me miraba y me decía yo se que esto es todo lo que tú quieres (no era mentira) luego dijo dala una mamaíta.
Aun mas nervioso me acerqué pude notar que tenía una curva fuerte hacia abajo, lo olí y que oloor tan espectacular, a sudor a sucio a guebo de hombre, me excite mucho, no quería dejar de olerlo, me sentía drogado por ese fuerte olor, casi sin saber abrí mi boca y saboree lo que ya ese olor me había dicho, era fuerte su sabor dios mioo eso realmente me encanta incluso se podía sentir un poco de sucio en esa enorme cabeza.
Seguía yo así y con una erección que no podía contralar cuando sentimos que alguien subía.
Nos movimos rápido, era una profesora del departamento de orientación, gracias a dios no vio nada.
Él le pregunto lo que necesitaba preguntar.
Seguíamos sentados nos dijo que esa profesora tenía tiempo sin venir y que no la encontraría y de una vez entró le dije viste que nos iban a encontrar vámonos de aquí ya!
El me respondió ajam pero no me lo vais a mamar?
Yo sí pero vamos a otro lado, me pregunto que a donde y recordé que hacía poco había entrado a un baño muy solo en la facultad de Ciencias Económicas y Sociales que queda al lado de la nuestra y realmente era un baño grande con muchos cubículos y las paredes permitían mucha privacidad.
Asi que nos fuimos hasta alla, llegamos en tres minutos, pase yo primero y luego el.
Al entrar me di cuenta de que había un muchacho delgado alto moreno, que estaba sentado en lo que hace de baranda.
Entramos y realmente no le di importancia.
Nos colocamos detrás de una pared, el puso su bolso en el suelo y saco su pene que volvía a crecer muy rápidamente, yo empecé a mamar, aun se sentía ese olor y sacaba y metía la cabeza y parte de ese guebo riquísimo para que creciera todo lo que tenía que crecer, por fin pude ver la magnitud del guebo en realidad.
Vergacion de grande como 19cm pero demasiado grueso incluso más que los que me había metido antes (hasta más grueso que el de Mervin de mi anterior relato) ya yo para ese entonces era un adicto come vergas, estaba seguro de que podía ser el primer hombre que le diera el culo y que el se culiara por completo.
Pero por ahora tenia que concentrarme en metérmelo hasta el fondo de mi garganta.
Empecé a tragarme ese delicioso guebo, me atragantaba, quería no hacerle daño con mis dientes pero era demasiado grueso y empujaba fuerte contra mis muelas de atrás, se sentían mis muelas como una barrera aun con la boca bien abierta, su cabeza no pasaba, era frustrante, necesitaba meterme todo su gran mástil dentro de mi boca, no podía ser que en mi culo cabe tanto y no podía con esto por mi boca, lo saque, respire y volví a intentar, pero realmente le hacía daño.
Estaba algo frustrado así que me decidí a que el culo si me lo rompería, le dije al oído que mejor entráramos a un cubículo, el tomo sus cosas y entro a ultimo que estaba bien lejos de la entrada, yo también entre, se lo ensalivé bastante (el estaba como en éxtasis parecía que no lo creía –de verdad alguien le iba a dar el culo-) ya para ese momento yo estaba demasiado cachuo, demasiado excitado quería guebo, quería que me lo rompiera, una vez bien ensalivado me voltee y me baje los pantalones junto con el bóxer, me costó algo porque mis nalgas son grandes y le puse el culo para que lo hiciera suyo.
Me puso la cabeza en la entrada, se sentía inexperto pero me lo fue metiendo, de tan excitado que estaba casi no me dolió pero mientras entro un poco mas comenzó el dolor pero sabía que pasaría pronto, me encantan las vergas grandes y por supuesto las aguanto muuuy bien, el dolor paso en menos de un minuto y me volvió a penetrar, esta vez mas rico y casi de un empujón me lo clavó todo, waooo que sensación, me encantó, toque mi culo y pude sentir que estaba todo adentro.
El daba pequeños suspiros ya que estábamos en un baño que después de todo era un lugar público.
Siguió con su rico mete saca que me tenia fascinado, y me hacia mover como puta.
Estábamos tan concentrados en el placer enorme que estábamos sintiendo que ninguno noto que alguien había entrado, fue cuando sentí un ruido en el cubículo de al lado.
Me dio mucho miedo y le dije en silencio “hay alguien, al lado hay alguien” el se detuvo un segundo sin sacármela pero también estaba muy cachuo y se comenzó a mover lentamente llevándome otra vez a que no me importara nada, volví a moverme de a poco, cuando veo que el muchacho que estaba sentado afuera se asomo por la parte de arriba.
Me dejo en shock, no sabía qué hacer y Javier con su súper guebo dentro de mí! Vimos que el muchacho hacia movimientos como de que se masturbaba mientras nos miraba a ambos a los ojos y nosotros sin saber que hacer, y vuelvo a sentir que Javier me toma de la cintura y me lo vuelve a empujar duro, allí entendí todo, iba a ser observado mientras me culiaban como la perra que soy.
Decidí disfrutar de toda esta situación, me empecé a mover muy duro y rápido para que los dos vieran que me encantaba estar clavado por ese enorme guebo, me moví tanto que se salió.
En eso el comenzó a masturbarse y en un minuto lleno de mucha leche la pared que era parte del cubículo, yo entristecí un poco porque no me seguiría clavando y me masturbe también, el otro muchacho también termino y antes de que nos diéramos cuenta salió.
Los dos nos acomodamos la ropa y salimos, no estaba el muchacho por ningún lado.
Nos fuimos, al final perdí mi materia y no volví a tener sexo son el aunque cada vez que lo veo me dan demasiadas ganas de volver a sentir ese delicioso pene y ser culiado como aquella vez.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!