Una noche inolvidable en la Isla de San Carlos
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Como ya lo había mencionado, soy nuevo acá y cualquier error ortográfico, desvío del tema, etc, hagamenlo saber.
Bueno, primero que nada, me presento, me llamo José tengo 18 años, vivo en la Ciudad de Maracaibo, Venezuela, soy delgado, moreno de cabello castaño oscuro lacio, no tengo un buen físico pero me dicen que soy sexy (Yo también pienso lo mismo), soy gay, discreto y reservado. El relato que contaré me sucedió hace poco, con un chico de 20 años, Willian, él es blanco, no es delgado ni gordo, sino de contextura normal, se le marcan los músculos un povo, es muy lindo, su sonrisa es hermosa, me encanta verlo sonreír, es bisexual, pero dice que cuando está con una persona, la respeta y solo está con él/ella y ya. Él y yo tenemos un par de meses saliendo y los que les contaré a continuación fue algo que no estaba planeado que sucediera esa noche, pero sucedió.
Luego de llevar meses de conocernos, salir a C. Comerciales, a Cines, pasar tardes en vereda y caminar largos ratos, un día le dije que quería pasar un día con él en la playa y él ni corto ni perezozo, aceptó.
Estabamos en la vereda (Es una especie de parque, lugar para ir a compartir y hacer picnik y cosas así jeje), habíamos ido desde la mañana, era un Viernes y ambos teníamos el día libre
Me preguntó:
– A dónde quieres ir bebé?
Le respondí:
– Es un sitio que no conozco y que quiero conocer contigo, me han dicho que la playa es muy bonita y quisiera conocerla.
Preguntó de nuevo:
¿Qué sitio es amor?
Respondí:
Es a la Isla de San Carlos.
Me dijo:
– Pero sabes que queda lejos de acá de Maracaibo, el carro podría dejarlo en un estacionamiento en el Mojan (lugar donde está la terminal lacustre, luego agarrar un Ferry hasta la Isla), me preocupa es que le dirás a tus padres.
A lo que respondí:
– Tranquilo, ya eso lo tengo bajo control, en la noche me llamas y cuadramos la hora en que pasarás por mí mañana..
Él simplemente sonrió y me besó, me llevó hasta la esquina de mi casa ya que mis papás no saben que soy gay, eran las 5pm de la tarde, el sol aún estaba un poco intenso, porque acá en Maracaibo el clima no es nada fácil.
Entré a la casa, le pedí la bendición a mi mamá y entré a mi cuarto, me quité la ropa y me metí al baño, duré aproximadamente como 1 hora y 30 minutos en el baño, el agua estaba buena y con el calor que había pasado durante todo el día, fue un merecido baño jeje…
Me dispuse a ver un rato la TV y luego de una hora le escribí a Willian:
– Hola amor, buenas noches, qué haces?
Respondió:
– Hola bebé, buenas noches, estoy en el depa, acabo de llegar, luego de dejarte a ti me puse a hacer unas diligencias que iba a hacer mañana, pero como vamos a la playa, las quise hacer hoy y tener todo el día disponible para Ti.
Le dije:
– Perfecto amor, entonces mañana pasas por mí a las 9am, le diré a mamá que iré a casa de unos amigos de la univ que hay una piscinada, no habrá problemas en eso.
Me dijo:
– Claro chiquito, me parece bien, estoy algo cansado, voy a ducharme y luego me acostaré, de verdad estoy muy cansado. Nos vemos mañana bebé, feliz noche.
Le dije:
Feliz noche y nos vemos mañana amor, te vas lindo como siempre. Besos.
Luego de eso, apagué la TV, puse la alarma en el celular a las 8am y me acosté a dormir.
Al amanecer, me levanté y le dije a mi mamá que saldría, que no se fuera a preocupar por hacerme comida porque no estaría en la casa y que iría a una piscinada en la casa de una amiga de la univ.
Ella aceptó sin decirme nada, solo que tuviera cuidado y que no fuera a llegar tarde y que si no iría a llegar en la noche, que le avisara para que no se preocupara.
Entré al baño, me bañé rapidito, busque ropa, la guardé en el bolso playero, me vestí y ya eran las 8:45 am.
Le escribí a Willian:
– Amor, ya sabes, a las 9am me recoges en la esquina de mi casa.
Él me respondió:
– Perfecto bebé, estoy comprando desayuno y otras cosas que necesitaremos en la playa, estoy allá en 10 minutos.
A las 8:55am salí de la casa y me senté en una banca en la esquin de mi casa, él no tardó ni 5 minutos en llegar, me subí al carro y se dispuso a conducir.
El viaje hasta el mojan era de 1 hora aproximadamente, luego tomabamos el ferri y se tardaba como 25 minutos en llegar a la isla de San Carlos.
Llegamos al Mojan a las 10am, buscó donde dejar el carro y pagó para que se lo cuidaran, por si acaso.
Esperamos el ferri que no tardó 5 minutos en llegar, nos subimos y nos informaron que el ferri solo llegaba hasta una isla que estaba a 5 minutos de la isla a la que ibamos y luego allí teníamos que tomar una lancha que nos dejaría en San Carlos.
Así fue, llegamos a las 10 y 40 am a San Carlos, sus playas eran bonitas, pero la gente que la habitaba no la sabía cuidar, no le presté mucha atención a eso, sino a que pasaría ese día con Willian allí y ya con eso me parecía especial.
Buscamos un sitio donde alquilaban Carpas, la instalamos, fuimos a caminar un rato, luego nos cambiamos y nos metimos a la playa, como 2 amigos, para nos darle a entender a la gente lo que eramos, ambos cuidamos nuestra imagen como hombres. Salimos de la playa como a eso de las 2 pm, nos secamos, nos pusimos otra ropa y fuimos a Almorzar.
Al regresar me dice que quiere llevarme a un Castillo que está en la Isla, me cambié, me coloqué un short corto playero y una franelilla, y el se vistió de igual manera.
Al llegar al castillo se veía interesante, pequeño pero interesante, entramos y al llegar a la cima, me besa, fue un beso muy intenso, me tocaba, me apretaba, recorría toda mi espalda con sus manos y eso me excitaba mucho, después de un rato de estarnos besando allí le dije que pararamos porque podría entrar y vernos, me dice que tengo razón y empezamos a salir, noté que tenía una excitación muy grande, se le marcaba mucho su gran miembro y eso provocaba en mí un morbo muy picaro, pero luego de seguir caminando, se me pasó, continúamos paseando por la playa un rato y ya cuando nos dimos cuenta eran las 4:30 de la tarde, entonces el me dijo:
– Amor, mira la hora que es ya… ¿Vamos a quedarnos o nos vamos? Yo acepto la decisión que tú tomes, pero si nos vamos ahorita, llegaremos tarde a Maracaibo y además tampoco sabemos si estén funcionando las lanchas a esta hora…
Entonces le dije:
– Pero si nos quedamos, ¿Dónde dormiremos? ¿En la carpa?
Me respondió:
– Jajajajaja, claro tontico, para eso la pusimos en la orrilla de la playa, para pasar el día allí y bueno, la noche también si tú decides quedarte.
Entonces acepté quedarme, el hecho de saber que pasaría la noche con él, me pasaban 1000 y un pensamientos por la mente, pero a la vez no sabía que pensaba él, ignoré esos pensamientos y le escribí a mí mamá que me quedaría"en casa de mi amiga de la univ" jajajajajajaja….
Llegaron a ser las 7pm, me dice que si quería ir a cenar en un restaurante, a lo que respondí que si.
Salimos, fuimos a cenar y regresamos a la carpa como a eso de las 9:30 de la noche.
Entramos y hablamos un ratico, me pregunta que como la he pasado y que si me ha gustado ese día, le respondí que bien y muy lindo todo, me besa, este fue un beso despacio, intenso con una mezcla de romántico y así, me encantó y me prendió un poco eso, luego noté que a él también, cuando se levantó a buscar algo en la cava de hielo…
Me dice:
Amor, mira lo que traje, nos las había sacado antes porque no habíamos estado mucho rato acá en la carpa, cuando volteo eran unas Smirnoff (es una bebida que contiene alcohol, pero su sabor no es a alcohol, sino como a Chinnoto) me levanté y miré que habían como 8 o 9 de ellas.
Pensé y dije:
– Si me tomo 5, me hago mierda y después ni recuerdo que hago.
Entonces le dije que no tomaría mucho y él no me dijo nada, solo empezó a tomar…
Al ratico de estar tomando, ya él llevaba como 3 smirnoff y se estaba poniendo como cariñosito, yo aún llevaba la primera jajajajaja…. Pasó un ratico y no tomó más (él sabía que si continuaba tomando, se emborracharía y ya llevaba 3 y estaba un poquito mareado, pero si sabía lo que hacía.
Empieza a besarme nuevamente, de una manera muy romántica y especial, besaba mis labios, pasaba al cuello, luego regresaba a mis labios y luego llegó a mi parte debíl que el la oreja, cuando introdujo su lengua allí, no pude evitar salir un gemido, lo cual hizo que él se excitara más de lo que estaba…
Empieza a decirme cosas al oído:
Bebé estás muy lindo, muy tierno, me encantas, tu cuerpo delgado me prende demasiado, estás hermoso así y me pone mal, me he imaginado estar así contigo mientras duermo en mi casa y hoy se está haciendo realidad, aquí te tengo, siento tu cuerpo, tu respiración y los latidos de tu corazón, aquí solo pasará lo que tú quieres que pase, no voy a obligarte a nada, estoy un poquito tomado pero sé lo que hago, estoy muy excitado, bueno, tú me tienes así, pero si tú no quieres que pase nada, igual lo aceptaré, nuevamente volvió a besarme….
Eso me hizo sentir muy bien, especial y que le importaba lo que pensara, pero estaba allí, con él, podía aceptar que pasara lo que tuviese que pasar y todo era si yo quería. Entonces me llené de valor y dije:
– Que pase lo que tenga que pasar…
Me dispuse a quitarle la franelilla que tenía, se veía hermoso, le quedaba ajustada a su cuerpo, empecé a besarlo yo a él, sus labios, su cuello, su pecho, cuando bajé hasta sus tetillas, empecé a darle unos pequeños chupones, eso lo hacía enloquecer un poco, me decía que hoy le hiciera lo que quisiera, que esa era nuestra noche, daba unos pequeños gemidos mientras yo le seguía haciendo esos chuponsitos en sus tetillas.
Luego de eso, alza mi cabeza y me dice que hoy quiere hacerme sentir en las entrellas, a lo cual respondí que lo haría, luego de que yo lo hiciera llegar a las estrellas a él… Simplemente sonrió y me dijo:
– Está bien…
Llegué hasta su oído y le pregunté:
– ¿Qué quieres que te haga?
Respondió:
– Bebé, lo que tú quieras, hoy soy todo tuyo.
Le pregunté:
– ¿Pero que es lo que más te gusta que te hagan?
Respondió:
– Un rico sexo oral, con tu boquita, me haría llegar al cielo y ver lastrellas.
Yo pensé y dije:
Es lo que me encanta hacer…
Me dispuse a quitar su short playero, lo quité y quedó un boxers, su pene se marcaba completico, empecé a besarlo por encima del boxers, era super hacer eso, pero luego despacito empecé a quitarle el boxer con mi boca, eso lo prendía él. Al quitarlo, quedó al aire un hermoso pene, blanco, era perfecto, debía medir unos 19 u 20 cm aprox. Empecé a besar su abdomen, mientran bajaba despacito hasta su miembro, con la punta de mi lengua empecé a subir y bajar todo su espectacular miembro, mientras él gemía, luego empiezo a pasar la lengua por encima de su cabeza, era rosadita, esa escena era mágica, mientras lo hacía, él acariciaba mi cabeza y mi cabello y continuaba gimiendo, lo que le hacía lo ponía a mil, luego empiezo a introducirlo en mi boca, eso fue magico, sentía que todo era perfecto en ese momento, sentir su miembro, dentro de mi boca, era espectacular, empencé a darle una mamada muy despacio, eso lo enloquecía, solo gemía y me decía que no parara, luego de un rato de estar así, me levanta y me dice:
– Bebé, es mi turno de hacerte sentir en la estrellas a ti.
Me pregunta:
– ¿Qué te gusta que te hagan?
Le susurré al oido:
– Me encanta que me hagan sexo anal.
Sin pensarlo dos veces, me quitó la franelilla, el short playero que tenía y me dejó en boxers.
Me dijo:
– Acuestate bebé.
Lo hice y se colocó encima de mí, pero besando mi espalda, recoriendo cada cm de mi espalda, cuando llega hasta mi boxer, empieza a deslizarlo lentamente, mientras continúa besandome, lo quita por completo y empieza a darle pequeños mordicos a mis nalgas, eso me encantaba, luego, con sus manos, abre mis nalgas y empieza a introducir su lengua en mi ano, eso me hizo sentir en la gloria, queria detener el tiempo allí, era espectacular sentir su lengua humeda en mi oyito, me hacia cositas con su lengua en mi ano, apretaba mis nalgas, las acariciaba y así, era lo maximo eso. Así duró unos 8 minutos, haciendo eso, ya me tenía el ano dilatado y me lo admiraba, se mordia sus labios como anhelando hacerme suyo….
Se acerca a mi odio y me dice:
– Bebe, quiero hacerte mío, te deseo, me muero por sentirme dentro de ti y hacerte llegar al espacia y que toques las estrellas.
Eso me encantó y como ya me tenía en el cielo le dije:
– Hazme lo que quieras amor, esta noche soy todo tuyo.
Sin pensarlo se levantó y fue hasta su bolso por un preservativo y una crema….
Se echó crema en su pene, le puse el condon con mi boca y eso lo hizo gemir y me dijo:
– Hoy te haré pasar una noche inolvidable bebé. Y me preguntó, que posición te gusta?
A la que respondí:
– Me ecanta la que es que tu estés semi acostado u acostado y yo colocarme en frente de ti, y así colocarme encima de tu miembro y cabalgarte.
Me dijo:
– Uffffff, esa me encanta a mí también.
Se puso semi acostado y con su miembro en todo su esplendor, me puse en frente a él y dejé que él poco a poco me fuese penetrando, mientra iba entrando sentía un dolor horrible en mi ano, sentía que me desgarraban por dentro y él me decía:
– Tranquilo chiquito, el dolor ahorita se te pasa y llega el placer.
Así fue, luego de unos minutos de estar así, él empieza a moverse despacito, luego yo no sentía casi dolor y era mi momento de hacerlo sentir en la nubes a él, empencé con un sube y baja despacio, solo sentía como el pene entraba y salía de mi ano y escuchar sus gemidos era espectacular, luego de estar como 5 minutos así, iba aumentando el ritmo, ya el dolor había desaparecido, él coloca sus manos sobre mi cintura y él me va indicando el ritmo que le gusta, mientras escucho sus gemidos y decirme que me siente en la gloria, yo cabalgaba encima de ese pene delicioso, hacía movimientos circulares y rapidos, eso lo hacia soltar gemidos inesperados y me decía:
– Si baby, hazlo, así así, no pares, tienes ese culito apretadito y super delicioso, sabía que sería así de rico tenerte todito para mí, Dios que rico estás mi bebé, sigue sigue, hazlo mas rapido…
Mientras él continuaba gimiendo, yo también disfrutaba esa escena porque me encantaba tenerlo así, luego de estar así como 20 minutos me pide que cambiemos de posición, que ahora quiere él penetrarme y ser el que maneje la penetración, porque en la anterior, yo llevaba el ritmo…
Me dice que me coloque en 4, conduce su pene a la punta de mi ano y nuevamente empieza a introducirlo, esta vez con su: Ahhhh, Ohhhh, que rico culito apretadito y humedo tienes chiquito mío, esta es la gloria, es él ahora quien lleva el ritmo, un ritmo rapido, pero no mucho, era como una mezcla de salvaje y delicadeza que me prendía y me llevaba a pedirle mas y mas, sentirlo todo dentro de mí en ocasiones me hacía dar unos gemidos fuertes que no podía controlar, luego puso su cuerpo sobre mi espalda y continuaba penetrandome, ya llevaba unos 10 minutos así, se acerca a mi oido y me pregunta:
– ¿Dónde quieres que termine bebé?
Le respondí:
– Donde tú quieras amor…
Entonces empezó a penetrarme mas fuerte y rapido, tomó mi pene y empezó a masturbarme así, vamos a venirnos los 2 bebé, sentir que me penetraba y a la vez me masturbaba era una sensación brillante, al ratito de estar así me dice:
– Avisame cuando vayas a venirte:
Entonces le dije:
– Ya ahorita me vengo
Después de unos segundos de haberle dicho eso, siento que me penetra mas y mas rapido hasta que siento que su pene se incha un poquito y me dice:
– Ahhh, Ahhh, me vengo bebé, me vengo, aquí tienes toda este semen es producto de lo que causas en mí, ahh, ahh, que rico bebé…
Al momento él me sigue masturbando y empiezo a decirle yo:
Ahh, me vengo yo ahora amor, ahhh, ahhh, que rico me haces sentir, sabroso todo amor, tienes mi lechita también de lo que me haces sentir….
Nos derrumbamos en el colchon y nos dormimos todos llenos de semén y sudor….
Bueno, esta es mi historia, espero y les haya gustado, de verdad. Cualquier consejo, diganmelo y prometo cambiarlo. Besitos a todos.
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