Una visita inesperada y satisfactoria

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
El lunes había sido feriado en nuestra ciudad por lo que no fui al gimnasio. Por ese motivo, no lo vi a mi macho, Ricky, que trabaja ahí y donde siempre hacemos la "previa de seducción", que termina en un encuentro nocturno de buen sexo. Yo estaba caliente ya que desde el viernes, no lo veía y necesitaba sentirlo, que poseyera mi culo y me diera su hombria. Me coge regularmente y ese feriado, había arruinado mi régimen de su verga…

Ese martes, estaba en casa ansioso porque llegára el día siguiente, que lo vería a mi hombre, el macho que se aprópia de mi agujero de placer y me colma con su poderosa pija. A la mañana, con un mensaje, le había hecho saber de mi deseo y ganas de sexo. Su respuesta fue que tenía un día complicado, ya que a la tarde da varias clases de gimnasia, pero me dijo que él tambien, estaba ansioso por un encuentro y que al día siguiente, nos veríamos y me compensaría…

Pasadas las cuatro, recibo un mensaje de Ricky, me dice que está frente a mi casa, pregunta si estoy desocupado y si puede pasar un momento. Le contesto que estoy desocupado y bajo, rapidamente a recibirlo. Está con su ropa deportiva, que tanto me calienta, irresistible y deseable. Pasamos a casa, cierro la puerta y me encuentro en sus brazos. Me dice que no aguanta más de la calentura que tiene, siente que sus huevos van a estallar de leche y que dispone hasta las seis de la tarde, hora de su proxima clase…

Digo que me sorprende verlo, pero que si quiere puedo ayudarlo con su calentura. Me atrae más hacia él, me hace sentir su pija ya casi erecta, y se apropia de mi boca con un beso demandante y apasionado, al que respondo con deseo. Su lengua explora mi boca, sus manos recorren mi espalda y acarician mi culo, una mano se mete bajo mi ropa y urga mi raja. Su trabajo da resultados, siento el calor de su cuerpo que potencia mi calentura y mi miembro comienza a despertar y humedecerse…

Se separa y me dice, con voz ronca, sensual y cargada de deseo que mi cuerpo es "adictivo", que me necesita, que me desea y que quiere poseerme. Escuchar esas palabras de mi macho, que es reacio a expresar sus sentimientos, me gustan y me hacen entregarme totalmente. Suspiro, haciendolé saber que estoy listo, pero sin confesar mi calentura. Eso lo alienta a seguir. Me desprende la camisa y su boca baja a lamer mis pezones, esa lengua caliente y el roce de su barba incipiente, me electrizan. Lame, chupa, mordisquea y besa magistralmente, erotizándome aún más…

Me desnuda, dejándome solo en boxer, se sienta en el sillon y me atraé, de espalda hacia él. Me coloca entre sus piernas y su boca comienza a trabajar en mi culo, me besa sobre el boxer. Una de sus manos se apropia de mi verga, acariciando y palpando y con su otra mano, baja el boxer, dejando mi culo a su disposición. Sigue besando, su barba me hace cosquillas pero su lengua comienza a ensalibar mi raja. Con sus dos manos abre mis nalgas y su boca busca mi agujero palpitante. Me recuesto para adelante, abriendo más mi culo y poniendoló a merced de esa lengua demandante. Me besa, lame e intenta penetrarme, preparando mi agujero para lo que viene….

Me gira, libera mi pija que salta como impulsada y comienza a saborear mis jugos, se come mi pija, chupa su cabeza, pasa su lengua, todo su trabajo me genéra escalofríos de pasión, y ganas de ser penetrado. Saborea mis jugos con deleite, busca mi boca para compartir, en un beso, el manjar que larga mi miembro, producto del deseo que me produce. Confieza que tenerme "mojado" lo vuelve loco, que mi sabor lo satisface y que quiere poseerme…

Se desnuda, siento su olor a transpiración y hombre, a macho cargado de leche. Estoy dispuesto a hacerlo volcar, a ordeñarlo, a dejarlo satisfecho y con ganas de más. Se vuelve a sentar, dejando a mi vista su magnifico mastil, erecto en todo su esplendor, babeante de jugo presemen. Dice que mi cuerpo lo pone en ese estado, que su hombría está a mi disposición y me mira con brillo en los ojos, como invitándome a actuar. Me lanzo sobre él, lo beso, con una mano agarro su verga, comienzo a pajearla suavemente…

Bajo hasta su pija, comienzo a chuparla y ensalibarla, la quiero lubricada para la inminente penetración. Mi macho suspira con deleite, alentándome a continuar. Siento su dedo indice en mi culo, acaricia mi agujero, lo relaja y logra que se abra para él, comienza a penetrarme lentamente con ese dedo largo, poderoso. Ardo de deseo, necesito sentir ya esa lanza, que tengo en mi boca, en el culo. Paro mi mamada, vuelvo a la boca de mi macho, mientras me siento a orcajadas sobre él. Mi hombre saca su dedo de mi culo y agarrando su pija, comienza a acariciar con ella, la raja de mi culo. Ante mis suspiros, que denotan mi hambre de verga, la posiciona en el centro de mi agujero….

Comienzo a sentarme lentamente sobre esa pija que se me ofrece, mi agujerito se abre lentamente, dandolé paso a esa barra caliente de carne. Va penetrando, abriendose camino en mis entrañas, invadiéndome y generando un dolor placentero. Me gusta sentir ese dolor que precede al gozo y no paro hasta sentir toda su longitud dentro mio. Para que mi esfinter se acostumbre a ella, busco nuevamente la boca de mi amante. Unos cuantos besos, entrecortados por suspiros, potencian nuestro deseo y nos hacen continuar…

Empiezo a moverme y a cabalgar sobre esa herramienta trepanadora, mi amante acomoda sus manos en mi cintura y me acompaña en el movimiento. Entre quejidos y esfuerzos, disfrutamos el momento. Mi amante me deja quieto y comienza a bombearme en un vai-ven frenético. Lo beso y le pido más, quiero más, necesito más. En el torbellino de la pasión, con voz entrecortada le digo que me gusta mucho como me está dando, eso lo alienta a seguir. Se aboca a la tarea de satisfacerme, de cogerme freneticamente. Usando el peso de mi cuerpo, me dejo caer obteniendo penetraciones profundas que me hacen ascender en la escalera, camino al climax…

Siento mi cuerpo temblar, agotado por el esfuerzo, pero no quiero parar. La verga de mi amante se infla en mi interior, sus quejidos me indican que está a punto de acabar. Me dejo caer completamente y al ver tensarse los musculos de mi amante, se que viene su descarga. Su verga, bien metida en mi interior, dispara el primer chorro de leche,abundante y tabia, escucho el quejido de toro, que escapa de la boca de Ricky. Mi conciencia me abandona y comienzo caer en un gran vacio, calido y acogedor, un torbellino recorre mi cuerpo y llega mi orgasmo. Siento salir mi leche disparada hacia el pecho de mi amante…

Este orgasmo simultaneo nos complace exponencialmente y parece interminable.Sintiendomé pleno, me derrumbo sobre el cuerpo de Ricky, quien jadeante me abraza muy fuerte. Mientras esperámos que nuestros cuerpos se recuperen de la experiencia, comienza a besarme y a decirme que fue increible. Su pija abandona mi cuerpo, su leche comienza a escurrirse por mis piernas, mi culo tarda en contraerse despues de semejante cogida. Mi amante recoge, con su mano, la leche de mis piernas y mi leche de su pecho. Lame con su lengua y comparte ese manjar con besos tiernos y sabrosos…

Nos vestimos, entre risas me dice que casi no puede estar parado. Que lo dejé agotado y tiene que seguir trabajando. Me río y le digo que yo no voy a poder caminar de como me dejó abierto. Le comento que no se sí para mañana me voy a recuperar. Se pone serio y pregunta si me hizo daño. Me acerco, lo abrazo, le aclaro que estoy jodiendo y que me dejó muy satisfecho. Me besa y se despide hasta el día siguiente. Pregunta si repetímos y yo le contesto que siempre que él quiera. Se va sonriendo y satisfecho….